Capítulo 44
¿Te atreves?
Traducido por Odogaxi
Corregido por DaniR
Editado por Tars
Corregido por DaniR
Editado por Tars
Los estudiantes de las tres razas, que habían estado vitoreando a cada miembro del Consejo Estudiantil, callaron cuando Tess entró. El auditorio quedó en silencio, solo se escuchaba el eco de sus majestuosos pasos, que hacían que su plateado cabello se balanceara. Su mera presencia cambió la atmosfera del interior del edificio.
Mientras se inclinaba y recogía su pelo detrás de la oreja, un estruendo de aplausos inundó el salón al tiempo que estudiantes de ambos sexos la aclamaban de admiración. Pensaba que los vítores no iban a durar mucho pero, tan pronto como Tess empezó a hablar, parecía que todos los estudiantes se habían tapado la boca para poder escuchar lo que tenía que decir.
“Me llamo Tessia Eralith y me honra estar aquí como Presidenta del Consejo Estudiantil de la Academia.”
Los murmullos comenzaron de nuevo tras otra tanda de vítores para nuestra hermosa presidenta. Cerca de mí había un chico humano flacucho que hablaba con el amigo que estaba a su lado.
“ESA es la Princesa Eralith de la que te hablaba. Mi hermano mayor, que estudia aquí, me ha dicho que se ha convertido en discípula directa de la Directora, que ha estado en el campus desde el año pasado y que empezará a asistir a clases este año con nosotros.” – estaba reclinado hacia su amigo para que solo él lo pudiera escuchar, pero el volumen con el que hablaba lo había traicionado.
“Eso quiere decir que ha sido la primera no-humana en poner un pie en este campus. Espera… ¿Solo está en su primer año y ya es la Presidenta del Consejo Estudiantil? ¿Es eso posible?” – su amigo, al que en realidad no podía ver, iba subiendo el tono con cada una de sus palabras, y también pudieron escucharle otros estudiantes cercanos.
“Sí, ¡también he escuchado hablar sobre ella! Se supone que es una súper genio de algún tipo, ¿no?”
“¿Por qué será tan jodidamente hermosa y además con talento? Ni siquiera es justo…”
“Me pregunto qué es lo que tendría que darle para que me mire, aunque sea una vez.”
La audiencia rebosaba de conversaciones sobre Tessia; las de los chicos giraban alrededor de lo inalcanzable que era esa estrella, mientras que las de ellas eran una mezcla de admiración y odio. Sylv, que estaba encima de mi cabeza, empezó a volverse loca cuando reconoció a Tess en el escenario que tenía debajo.
“¡Kyuu~! ¡Papá! ¡Esa es Mamá! ¡Está ahí abajo! ¡Vamos a saludarla!” – Sylv saltaba arriba y abajo como una loca, así que la cogí y la rodeé con mis brazos.
‘¿¡Que es tu madre!?’
No pude hacer más que suspirar ante la derrota al ver su excitación. Tess se había convertido en una persona muy cercana para Sylv justo después de haber nacido, por lo que entendía que le tuviera cariño… Pero, ¿Mamá?
“Guau…”
Elijah, al que había dejado de prestarle atención, me agarró del brazo con sus dos manos como si necesitara ayuda para no desmayarse.
“Guau…” – repitió Elijah. Con lo listo que parece, actúa como un idiota en situaciones como esta.
“¿Estas bien, Elijah?” – empujaba levemente su cabeza, pero ésta volvía a caer, como la de un juguete de esos que mueven su cabeza de un lado a otro.
“Art… Creo que estoy enamorado…” – sus manos sujetaban firmemente mi brazo, y de repente cruzó su brazo con el mío imaginando que yo era Tessia.
Vale, esto se está yendo de la manos. Le dije a Sylvie que atacara y en seguida enganchó sus mandíbulas en la parte superior de la cabeza de Elijah. Empezó a gritar más por la sorpresa que por el dolor.
“Oh, perdona…”
Con Sylv todavía colgando de su cabeza, Elijah liberó mi brazo y comenzó a centrarse en el escenario que teníamos abajo. Al calmarse el gentío lo suficiente para que Tessia empezara hablar otra vez, la Directora Goodsky desapareció silenciosamente.
Tessia hablaba con la suficiente elocuencia como para sorprenderme hasta a mí. Solo tenía 13 años, pero aun así contaba con la habilidad de retener la atención completa del público con sus escuetas palabras llenas de madurez. Narró los principios de la Academia, de cómo este era un lugar sagrado donde los estudiantes deberían sentirse seguros y pasear libremente. Tessia puso especial énfasis en las medidas disciplinarias que habría que afrontar si alguien dañaba a otro estudiante, a menos de que estuviesen en un duelo consentido.
“Aunque sea mi primer año, como lo es para todos vosotros, al concederme el privilegio de estar en la Academia desde el año pasado, me ha quedado bien claro que hay una discriminación muy enraizada contra los estudiantes de mago académico por parte de los estudiantes a mago de batalla. En primer lugar, no toleraré ningún tipo agresión o acoso por el hecho de que uno sea estudiante a mago académico.” – la voz de Tessia no llegó a temblar mientras estaba tras del podio.
La muchedumbre empezó a alborotarse tras escuchar sus declaraciones, ya que todos los presentes sabían muy bien las dificultades que se podían afrontar si uno era un estudiante a mago académico.
“A partir de este año, aunque los uniformes de las clases más pudientes puede que sean diferentes, durante los dos primeros años de educación general se mezclará a las dos clases, tanto a los magos de batalla como a los magos académicos. Esto será obligatorio con el fin de conseguir una mejor integración entre los dos tipos de estudiantes. Al acabar los dos años se podrá cambiar de especialización mediante un examen, aunque será bastante difícil.”
Esta última declaración provocó varias quejas entre la muchedumbre de estudiantes. Pese a que ni Elijah ni yo habíamos tenido que examinarnos gracias a la conexión especial que tengo con la Directora Goodsky, todos los estudiantes habían tenido que pasar un examen que no tenía en cuenta su procedencia para conseguir una plaza, bien de mago académico o bien de mago de batalla.
Para ser aceptado como mago académico, un novato solo necesita tener un fundamento básico de la magia, que se reduce en reunir maná. Pese a que es necesario realizar un examen de agudeza mental, la parte práctica es mucho más simple. Por otro lado, los aspirantes a mago de batalla tienen un examen mucho más estricto, en el que realizan conjuros o técnicas básicas, dependiendo de si son aumentadores o conjuradores. Puede parecer pan comido para gente como Elijah, Tess o para mí, pero tengo que admitir que para una persona que acaba de despertar puede ser un reto bastante difícil.
El tipo alto de mirada adusta dio un paso adelante, silenciando a la multitud con un movimiento de su mano.
“Mi nombre es Clive Graves y soy el Vicepresidente Estudiantil. Continuando con lo que ha dicho la Presidenta, este año habrá varios cambios. Junto con la integración y la libertad para cambiar entre los dos tipos de estudiantes, no existirá ningún tipo de limitación temporal para asistir a la Academia. Mientras que en el pasado los profesores empujaban a los estudiantes a graduarse después de cuatro años, se ve cada vez más claro que la habilidad mágica de muchos graduados es, cuanto menos, insatisfactoria. Así pues, la Directora ha decidido que en vez de un límite de tiempo para graduarse, los estudiantes con objetivo de graduarse en la Academia Xyrus tendrán que cumplir unos requerimientos y aprobar el examen correspondiente. Aunque las condiciones para graduarse se han endurecido significativamente, el tiempo límite ha sido aumentado a diez años. Tenemos la ferviente esperanza de que en ese tiempo podamos producir magos de primera en ambos campos, tanto en lo teórico como en lo del combate.” – Clive hizo una reverencia que el resto del Consejo Estudiantil imitó.
La última parte de su discurso no fue exactamente una sorpresa para ninguno de nosotros. Había sido algo anunciado recientemente, lo que me hacía pensar que tenía algo que ver con el nuevo continente. ¿Estarían usando a la Academia Xyrus para producir magos de mejor calidad por si en el futuro se tuviese que luchar contra el nuevo continente?
“¡Es el primogénito de la famosa familia Graves! Aseguraos de llevaros bien con él.” – susurró otra vez el chico cercano en un volumen inútilmente alto.
Después de acabar la ceremonia, todos los estudiantes fueron despachados a sus dormitorios. Saliendo del auditorio, mis ojos buscaron a Tess inconscientemente, pero no la pude encontrar. Fuera, los árboles se arqueaban sobre los marmolados senderos, produciendo pequeñas duchas de hojas de colores otoñales. Todos los estudiantes charlaban con sus colegas, conociendo nueva gente. Adentrándonos en el campus de camino a donde estaban los dormitorios vi a una estudiante, que al pasar ante mí y Elijah, nos miró dos veces y se fue, riéndose nerviosamente con sus amigas.
“¡Aish…! Siento que me convierto en una persona mucho más guapa cuando estoy cerca de ti.”
Elijah encorvó los hombros mientras caminábamos uno junto al otro; sintiendo su pesar, Sylv le dio una palmada en su cabeza desde la mía.
“Bueno, aunque la mayoría vengan por mí, de vez en cuando alguna chica se conformará contigo, ¿no, amigo?” – le estaba provocando con un guiño juguetón.
“¡Que te jodan!” – me pegó en el estómago mientras ambos nos reíamos
*BOOM*
La sonora explosión nos sorprendió a los dos, además de a todos los estudiantes que andaban alrededor. Corrimos hacia el escándalo ocurrido al final del camino marmolado.
“No veo cómo un enano pichacorta como tú tiene la esperanza de convertirse en un aumentador con fundamento. ¿Por qué no te dedicas a forjar armas para guerreros de verdad, como yo?”
“¿Pero quién cojonesh dice eso? ¿Quién te creesh que eresh?”
Dejé de correr al darme cuenta de lo que pasaba a una buena distancia de allí, agitando mi cabeza. Era una estúpida pelea a punto de empezar entre dos estudiantes. La explosión la había creado el humano al pegar un puñetazo al árbol cercano con su maná.
“¿Esto no puede convertirse en algo peligroso?”
Elijah miró a su alrededor, donde algunos de los estudiantes se habían acercado a propósito por si empezaban una pelea. Habíamos sido de los últimos en abandonar el auditorio, así que la mayoría de los estudiantes se había adentrado mucho en el campus o estaban ya en sus cuartos, por lo que no quedábamos muchos en los alrededores; pero si empezaban a pelear, algunos estudiantes cercanos se verían involucrados en el lío.
“No se atreverán a pelear así, el primer día, ¿no? Vayámonos.”
Intenté darle un empujoncito para dar un rodeo que esquivara a los dos estudiantes que discutían.
“¡Venga! De todos modos no tenemos nada que hacer excepto deshacer las maletas. Veamos lo buenos que son. Mira, el humano parece un aumentador de segundo curso.” – dijo apuntando al fornido humano.
Al mirarlos, tanto el enano como el humano llevaban uniformes de mago de batalla, pero el humano tenía dos franjas en su corbata, mientras que el enano llevaba solo una.
“¡Mi nombre es Nicolas Dreyl! ¡Declara el duelo, pichacorta, así podremos empezar! ¿O eres un perro ladrador poco mordedor? – el humano sonrió con satisfacción llevándose su mano derecha a la placa que portaba en su pectoral izquierdo.
“¡Tsk! Te arrepentirásh de eshto.” – el enano, que parecía incómodo con su corpulento metro y medio dentro de su uniforme, miró alrededor. La facilidad con la que blandía el hacha me decía que era mucho más de lo que la singular franja de la corbata sugería.
Las medallas de ambos, humano y enano, brillaron cuando el enano comenzó el cántico tras colocar su mano sobre ella.
“¡Declaro un duelo entre Nicolash Drey y yo, Broznean Boor!”
“¡Acepto el duelo!”
Las dos placas brillaron con diferentes colores hasta que se sincronizaron, produciendo un audible sonido de ‘ping’.
La placa del uniforme del mago de batalla y el reloj de bolsillo del mago académico eran unos artefactos creados para el sistema de duelos. Creaban una barrera alrededor del usuario para que así se pudiera recibir cierta cantidad de daño. Al romperse la barrera, el duelo se consideraba acabado, dando por ganador a la otra parte. Este artefacto necesitaba veinticuatro horas para recargarse y poder crear otra barrera. En ese tiempo no estaba permitido mantener ningún tipo de duelo. A los magos de mayor nivel no se les permitía establecer un duelo con magos de menor rango y ese era el motivo por el que el humano había provocado al enano para empezar el duelo.
El mago humano sacó unas espadas gemelas de su anillo dimensional y se situó en posición al tiempo que la gente se echaba para atrás para que no los pillaran en medio de la batalla.
“¡Vamos, enano!”
Elijah se posicionó a favor de Broznean, recibiendo miradas desagradables por ello.
Estudié a los dos aumentadores y me di cuenta de que el humano de segundo curso estaba en la etapa roja, al contrario que el enano, que estaba en una más oscura. Esto iba a ser interesante.
“¡JAAP!” – gritó el estudiante humano cuando sus dos mandobles emitieron un tenue destello amarillo al tiempo que la tierra que le rodeaba comenzaba a temblar.
“¡YAJ!” – el enano brincó y se impulsó hacia delante desde un árbol, cargando con su hacha de batalla impregnada también de maná con atributo de tierra.
“¡Ooh! ¡Art, ambos son aumentadores de atributo tierra!” – exclamó Elijah excitándose aún más y acercándose a la pelea. Mientras tanto, Sylv seguía dormida en mi cabeza.
“¡Temblor destructivo!” – gritó el enano al tiempo que colocaba su mano izquierda en la cabeza del hacha, condensando un resplandor opaco.
*BOOM*
El poder del brillo proveniente del enano forzó al humano a deslizarse hacia atrás, aun cuando lo bloqueaba con ambas manos. Pude ver sus dos brazos temblando mientras hacía una mueca.
El humano bajó sus dos espadas y se abalanzó contra el enano, que ya estaba en una posición defensiva. Las espadas gemelas se abrieron paso por el suelo al tiempo que él entraba en su rango; un rastro de tierra lo seguía, creando una línea de tierra tras su filo.
No estaba mal. Aunque no me sorprendía que un enano usara el atributo elemental de tierra, sí que me impresionó que un humano en la etapa roja pudiera aumentar su atributo de tierra hasta ese nivel. Tenía talento para eso.
“¡Destrozar!” – el cuerpo del enano brilló con un resplandor amarillo y pisó fuerte el suelo con su pie derecho, originando una onda alrededor suyo y rompiendo en trocitos el filo de tierra que se abalanzaba sobre él.
“¡Pilar de tierra!”
Con un golpe hacia arriba, el humano lanzó un fuerte pisotón con su pie derecho creando una columna de piedra que se veía ligeramente frágil desde el suelo, golpeando directamente en el estómago del enano.
“¡Uf!”
El cuerpo del enano se levantó por la fuerza del golpe y su escudo se rompió con un estruendo devastador, señalando que el duelo había terminado. Los vítores llegaron de parte los humanos que se habían reunido, mientras que los enanos gimieron avergonzados.
Elijah simplemente suspiró y comenzó a irse, pero antes de que yo lo siguiera, vi una pequeña sonrisita en la cara del humano, que imbuía de nuevo maná en sus dos hojas. Ese idiota no planeaba dejar las cosas así. Quería el golpe final.
Usar una técnica de largo alcance crearía incluso más problemas, pero si me metía para interferir directamente, todo el mundo se daría cuenta de lo que pasaba. ¡Ah! ¿Por qué Elijah no podía ver que el humano iba a lanzar otra técnica? Que Elijah interfiriese con un conjuro sería más natural, puesto que es un conjurador.
También se puede hacer de otra manera. Tess, perdóname.
“¿LA QUE VEO ACERCARSE NO ES LA PRESIDENTA DEL CONSEJO ESTUDIANTIL?” – grité con tono deliberadamente alto para que el chico humano que había ganado el duelo se sobresaltara.
Precisamente como había anticipado, chasqueó la lengua y devolvió sus espadas a su anillo dimensional, buscando a la Presidenta con la mirada. La muchedumbre, que estaba hablando con sus amigos analizando el duelo, comenzó a buscar a Tessia.
“¿Dónde está la Presidenta Estudiantil?” – Elijah estiró su cuello para buscarla.
“¡Ups! ¡Me habré confundido!” – me limité a encogerme de hombros y me di la vuelta con la intención de salir de allí cuando una mano me agarró firmemente del hombro.
“¿Estás buscando pelea o algo así conmigo, mocoso?” – era el humano que acaba de luchar, Nick o Nicole, lo que sea.
“¡Sí! ¡Qué te pasa, tío! ¡Nos has alborotado para nada!” – vi a muchos humanos insatisfechos por no ser capaces de ver a su ídolo en persona.
“Pensaba que la había visto. Pido perdón, es mi culpa.” – usé mi mano para quitar la suya de mi hombro, guiñándole un ojo.
“Sí, tu culpa.”
Apartó su mano antes de escupir en el suelo en frente de mis pies.
“Sabes, te daré un buen consejo si quieres graduarte… No creo que matar al chico enano te hubiese hecho ningún bien.”
Me quedé quieto mientras Sylv escupía en la parte posterior de su cuello. Al instante se giró, empuñando otra vez sus dos espadas. Casi pude ver su vena hinchada en la frente, como si fuese un dibujo animado.
“Pfff.”
Ups, no debería reírme en esta situación. Eché un vistazo y vi a Elijah, que simplemente agitaba su cabeza a sabiendas de que era demasiado tarde.
“¡¿CÓMO TE ATREVES?!”
El chico de trece años con espadas demasiado grandes para su cuerpo inmaduro corrió hacia mí de una manera que me pareció torpe, preparándose para cortarme transversalmente con sus dos espadas, con la cara roja de rabia.
Enarqué una ceja como si subiera una mano para parar el golpe. ¿Por qué he de ser yo el que quede como un idiota? Cuando me estaba preparando para destrozar sus dos espadas, una voz lo paró de manera fulminante. Era la voz que todos los nuevos estudiantes habían escuchado hacía poco y la misma voz que probablemente podía enamorar a todos los varones. También era la voz de mi amiga de la infancia.
“¿Cómo te atreves, TÚ?”