Volumen 56 Capítulo 6 - parte 2

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Volumen 56 Capítulo 6 - parte 2

La conspiración de Weed

Traducido por Tars
Corregido por Noe
Editado por Tars

Con una invitación oficial, Weed entró en la fortaleza de Lahonya. Los pasillos estaban decorados de manera extravagante con adornos y antigüedades, como si confirmasen las historias que decían que toda la riqueza del Reino de Haven se encontraba en la fortaleza de Lahonya. Los objetivos de Kaybern, con la excepción del Castillo Aren, se centraban en las capitales de cada región y en la Confederación Britten, pero también había muchas ciudades razonablemente prósperas en la región de Haven. El núcleo de gremio Hermes. Weed habló frente a Rafael y otros 10 miembros de élite. “Tengo tanta hambre… ¿Podemos hablar después de comer?” “Por supuesto. Aunque hemos preparado el banquete con prisa, puede comer todo lo que quiera. Sírvase usted mismo.” “¿Qué quieres decir? La mesa parece estar a punto de romperse. Los huevos fritos no se pueden comparar con estos platos.” El gremio Hermes cocinó los mejores ingredientes de su despensa y preparó una variedad de delicias de la montaña y el mar. Aunque Weed era su enemigo, se merecía un tratamiento y acogida de acuerdo con su título. ‘¿Por qué? ¿Por qué vino?’ Era la primera vez que Rafael veía a Weed de cerca y agradecía el poder observarlo mientras comía. ‘Pedir comida debe ser una manera de intimidar a la gente antes de tratar el asunto. Para mostrar su compostura…’ Ñam, ñam, ñam…’ “Esto está realmente delicioso… Guau. El gremio Hermes tiene muy buenos cocineros. Los ingredientes también son increíbles.” Weed solo estaba centrado en comer. No se podía decir lo mismo de sus anfitriones: los miembros del gremio Hermes no tocaron la comida y simplemente lo observaron. Pero a Weed no parecía importarle. Había vivido una vida de privacidades, pero ahora podía disfrutar tranquilamente de los sabrosos platos de otras personas. “¿Esta es la seta de pino de grado especial de la aldea Malen? Aumenta permanentemente los puntos de salud en veinte puntos.” Boemong observó el estado de ánimo de Rafael. “Así es. ¿Conoces la aldea de Malen del reino de Haven?” – contestó con cautela. “Cuando empecé Royal Road, dudaba entre elegir el Castillo de Serabourg en el Reino de Rosenheim y la aldea de Malen en Haven. El pueblo está repleto de hierbas medicinales, así que pensé que los ingresos adicionales que obtendría cada vez que iba de caza valdrían la pena.” “Mm…” “También consideré el Castillo de Aren. Era la mejor de las ciudades principales. Bueno, ahora ha sido destruida por Kaybern.” Rafael y los miembros del gremio Hermes estaban preocupados por cómo tratar a Weed, al verlo tan relajado. Ambos eran figuras demasiado importantes para guardar rencor como lo niños. Por supuesto, sería mentira si dijeran que no se sentían tristes y arrepentidos por perder justo antes de apoderarse del Continente, pero sabían muy bien que eran sentimientos mezquinos desde el punto de vista del perdedor. “La comida es realmente deliciosa.” Weed ofrecía cumplidos de vez en cuando mientras probaba platos diferentes. Rafael lo consideró palabras de cortesía y reaccionó de manera similar. “Estamos muy agradecidos de que estés disfrutando de la comida.” “Es la primera vez que como cosas tan deliciosas.” Arkhim, el miembro del gremio a cargo de la inteligencia, se unió a la conversación. “Sé que también eres cocinero…” “Nivel avanzado 2.” “Uh… Tu nivel de cocina es muy alto.” “Solo he cocinado con ingredientes del mercado baratos o con lo que encontraba en las mazmorras. Pero algún día la dominaré.” “Dicen que los ingredientes importan tanto como la cocina. ¿Tú interés por la cocina no disminuyó?” “Sí. Estoy pensando en tomarme algo de tiempo para vender mis platos en la plaza.” Rafael analizó cada palabra de Weed y sus posibles matices, pero no encontró ningún mensaje oculto. Realmente decía en serio sus cumplidos sobre la comida mientras hablaba de cosas sin importancia. ‘¿Por qué? ¿A qué quiere llegar…?’ A medida que pasaba el tiempo, sentía que no tenía sentido tratar de descubrir algo. Aunque estaban dentro de la inexpugnable fortaleza militar de Lahonya, que Weed llegara solo al corazón del territorio enemigo era inquietante. “¿Puedo llevarme las sobras?” “¿Perdón?” “Sería un desperdicio tirarlo…” “Haz lo que quieras.” Weed metió mucha comida en su mochila. Cuando terminó, se retiró la mesa del comedor y se estableció una atmósfera para una discusión seria. ‘Por fin sabremos a que ha venido.’ Rafael y los miembros del gremio estaban nerviosos. “Ayúdame a luchar contra Kaybern.” – dijo Weed al instante. Era como si hubiera lanzado una bomba. “¿Qué?” “No les estoy pidiendo que se responsabilicen de sus acciones. Hicimos lo que hicimos por nuestra propia supervivencia. Entonces, permítanme hacerles una oferta. Si luchas conmigo, me aseguraré de que el gremio Hermes prospere.” * * * Después de que Weed se fue, los líderes del gremio Hermes se reunieron en la fortaleza de Lahonya. Pero aquellos que eran más belicosos como Calkus se enfurecieron por perderse la oportunidad de matar a Weed. “Así que… ¿Nos pidió que formáramos una alianza para derrotar al Dragón Negro?” “Esa es la propuesta.” “Y una mierda. Deberías haberlo rechazado en el acto. ¿Por qué lucharíamos por él? Weed, el conquistador del Continente Central, debería ocuparse de ello.” La opinión de Calkus era perfectamente razonable. Los miembros del gremio que estaban presentes cuando Weed hizo su oferta pensaron de manera similar. ‘¿En que nos beneficia luchar?’ ‘Nuestras pérdidas serían enormes.’ Dado que la reunión iba a ser transmitida por televisión, la clave era cómo rechazarlo sin causar indignación entre los espectadores. Arkhim frunció el ceño. “Dijo que nosotros seríamos reconocidos como miembros del Continente si luchábamos junto a él.” – explicó. “¿Reconocidos?” “Se reconocerá el gobierno independiente del territorio de Haven y no se producirán actos de conquista. No se restringirá el comercio ni las relaciones diplomáticas con el Continente Central ni con el Norte. Sin embargo, según el acuerdo, Haven acepta que está bajo el control del Imperio de Arpen y será parte de su territorio. Tampoco tendremos que pagar impuestos. Además, hay muchas tierras sin señor por todo el Continente. Se les dará a 1.000 miembros del gremio el privilegio de gobernar dichas regiones.” La cabeza de Calkus comenzó a procesar lo que acababa de escuchar. “Aceptará nuestra independencia, cesará cualquier ataque contra nosotros… ¿y mil de nuestros miembros serán nombrados señores? Entonces… pretende poner fin a la guerra. ¿No son esas condiciones muy favorables para nosotros?” Fue una propuesta innovadora que dejó sin palabras a los miembros más hostiles del gremio. El gremio Hermes estaba menguando lentamente, debido a los miembros que se iban y la oposición de los jugadores hacia el gremio. No se atrevían a soñar con reinar sobre el Continente Central de nuevo. En comparación, el Imperio de Arpen se estaba volviendo aún más poderoso y su gobierno era reconocido por la gente. ‘De ahora en adelante si luchamos contra el Imperio de Arpen… no ganaremos.’ Las cosas serían diferentes de la táctica de oleada humana mostrada en las Llanuras de Garnav. El progreso del escuadrón de asalto se transmitía todos los días por televisión. El gremio Hermes estaba orgulloso de ser la fuerza más poderosa de Royal Road, pero el grupo de asalto que iba a luchar contra Kaybern se estaba acercando rápidamente. Además, también escucharon sobre el descubrimiento del Brasero del Sacrificio. El gremio Hermes había pasado su mejor momento. Estaba perdiendo fuerza y si los jugadores usaban el brasero para enfrentarse a ellos se produciría otra escena horrible como la de las Llanuras de Garnav. Si perdían la guerra, les podrían quitar la región de Haven. Así fue como cayeron el resto de gremios después de todo. Sin embargo, si el gremio Hermes perdía su poder, tendría que enfrentarse a la ira de todos los jugadores del Continente. Debido a las malas acciones que habían cometido hasta ahora, todos los miembros del gremio Hermes serían perseguidos por los jugadores en busca de venganza. Aunque nadie lo dijo en voz alta, lo sabían muy bien. En el momento en que el gremio se derrumbara, tendrían que huir de todos los jugadores. “Aunque es una formalidad, el Continente de Versalles estaría completamente unido bajo el Imperio de Arpen si aceptamos la oferta.” “Tienes razón. Con nuestra situación, tendremos que renunciar al logro de Emperador de la Unificación. El sur y el este permanecerán sin conquistar por el momento.” “Ya no hay ninguna posibilidad de que nuestro gremio conquiste el Continente. ¿No es como que lo vayamos a perder?” “Supongo que sí. Podríamos gobernar la región de Haven de manera estable y obtener otros mil puestos de señor. El territorio bajo nuestro control se duplicaría.” Entre los jugadores que escucharon la propuesta de Weed, la opinión mayoritaria era que no era una mala propuesta. Arkhim dejó escapar un largo suspiro. “Hay una trampa en esta oferta.” “¿Qué trampa?” “Nosotros, el gremio Hermes, debemos usar el Brasero del Sacrificio para luchar contra Kaybern. Al menos diez mil de nosotros.” “¡Eso…!” Calkus y el resto de jugadores estaban asombrados. A través de lo que vieron por televisión, el uso del brasero era lo peor que un jugador de alto nivel podía imaginar. “¿Eso no es absurdo?” “No es una propuesta fácil.” “¡No podemos aceptar!” “Tampoco es una demanda escandalosa. Weed también usará el brasero. También lo harán los enanos, sus conocidos más cercanos y muchos jugadores del escuadrón de asalto.” “¡Ah…!” “Si todos luchan bajo los efectos del brasero y nosotros estamos en estado normal, tampoco seremos de mucha ayuda contra Kaybern.” “De hecho es un problema.” No querían usar el brasero, pero la brecha en el nivel de combate a la hora de luchar contra un dragón era demasiado grande. “Además, dijo que los mil señores serán designados en función de su contribución en la batalla contra Kaybern.” “¿Contribución en la batalla?” “Sí. Es un sistema de recompensa que supuestamente fomentará la participación…” “Supongo que también tiene sentido. Bajo esas condiciones será mucho más sencillo convencer a los miembros de nuestro gremio.” Como los miembros del gremio iban a ser nombrados señores, consideraron que esa parte de la oferta era aceptable. En su opinión, era natural que los jugadores que luchaban mejor tuvieran las mayores recompensas. “Luchar contra Kaybern o no…” “Al principio no me convencía, pero no parece ser tan malo si reconoce nuestro gobierno sobre Haven a cambio de nuestra ayuda.” “Perderíamos niveles, pero se pueden recuperar. Nuestro territorio permanecerá como está…” “Si tenemos éxito cazando al dragón, obtendremos un logro de combate increíble. Solo con eso… ¿no deberíamos poder recuperar diez o veinte niveles?” “Todo eso es bajo el supuesto de que tengamos éxito.” “Si unimos nuestras fuerzas. Y Weed también está ahí… ¿Cuán favorable será nuestra tasa de éxito? Si rechazamos su oferta, ¿no perdemos mucho más que unos pocos niveles?” Los líderes del gremio se dieron cuenta de que, cuanto más discutían, menos razones tenían para rechazar la oferta. Si el Imperio de Arpen marchaba contra ellos, ellos mismos, al ser grandes señores, serían los que más sufrirían. Dinero, poder y territorio. Era más importantes que los niveles. ¿Qué pasaría si se derrumba el gremio Hermes? Eventos como las órdenes de exterminio o la llegada de Cletta, el rey de los demonios, no podían ser aceptados por la clase dirigente. Los líderes del gremio Hermes votó por aceptar la oferta de Weed y pidieron el consejo de BardRay, que se encontraba lejos. Si este se oponía, no podrían aprobarla. Sin embargo, aunque BardRay tardó un poco en contestar, al final aceptó la absorción con el Imperio de Arpen y la batalla contra Kaybern. * * * Rafael organizó los objetos en su oficina de Lahonya. La mayoría de las antigüedades, tesoros y equipo que escondió como segundo al mando se perdieron cuando desapareció el Castillo de Aren. Los objetos que le quedaron solo eran suficientes como para llenar una mochila. ‘Vaya… Es menos de lo que esperaba.’ Después de recoger sus cosas, Rafael contempló la vista desde la fortaleza de Lahonya por la ventana. Había ampliado esta fortaleza en preparación para una emergencia cuando mantenía su poder sobre el Continente Central. Se usaría para defenderse de las amenazas más poderosas. Una fortaleza inexpugnable que podría resistir a los ejércitos más grandes, pero ahora había perdido todo su significado. ‘Los sabios dicen que construir un castillo conducirá al fracaso, pero si forjas caminos llegarás al éxito… No es la analogía más apropiada… pero al final parece que tenían razón.’ En su manera de pensar se podía sentir el inmenso alivio de dejar todo atrás. Cuando cargó su mochila y salió al pasillo, Arkhim lo estaba esperando. “¿Te vas para siempre?” Arkhim percibió una sensación extraña en la reunión. Rafael rara vez hablaba, un cambio dramático de su manera de ser habitual. E incluso cuando se decidió pelear contra Kaybern, al final simplemente asintió. “Parece que no me queda nada por hacer por aquí.” “No lo entiendo. Tu título y papel seguirán siendo los mismos en el futuro. En mi opinión, espero que te quedes por el bien del resurgimiento del gremio Hermes.” Dado que Rafael se encargaba de preparar estrategias a gran escala, estaba algo libre de la responsabilidad por la derrota contra el Imperio de Arpen. Weed luchó mejor de lo que esperaban y el poder de los jugadores fue mucho mayor de lo que imaginaban. Los miembros del gremio Hermes sabían que Rafael era el que más contribuía al gremio. “Es como dije. Me voy porque simplemente no tengo nada que hacer.” “Pero…” “Ahora es la era de Weed y el gremio Hermes no tiene el poder para derrotarlo.” “¿Perdón?” Arkhim no pudo entender lo que quería decir, así que caminó junto a Rafael para interrogarlo. “¿Qué quieres decir con eso?” “Es…” – pero cuando Rafael estaba a punto de explicarse, en su lugar dio un suspiro. – “Será mejor que no lo sepas. ¿Estás seguro de que quieres que hable?” “No parece que estés insinuando que a pesar de que el Imperio de Arpen sea más fuerte, el gremio Hermes tenga que seguir incondicionalmente sus deseos.” “Esta propuesta es una manzana envenenada.” “¿Una manzana envenenada?” “Jamás imaginé que Weed tuviera una habilidad tan increíble para la política. Es realmente… hábil a la hora de aprovecharse de una situación. Es un hombre que puede derribar a nuestro gremio con solo unas pocas palabras.” Rafael sintió la necesidad de decirle a Arkhim algunas cosas antes de abandonar el gremio. Aunque lo sabía, no podía lidiar con ello. Pero sintió algún tipo de responsabilidad hacia sus compañeros que no tenían ni idea de lo que estaba pasando. “La oferta parece ser un simple intercambio a simple vista. Usamos el brasero y luchamos contra Kaybern. Entonces la ira y el rencor de otros jugadores contra el gremio Hermes disminuirá un poco… y podremos mantener nuestro control sobre la región de Haven.” “¿No es eso bueno para nosotros?” “La propuesta de Weed es lo suficientemente razonable para ser aceptada tal y como está. Las cosas procederán como aparece en la superficie. En lugar de luchar hasta el final, aceptamos su oferta. A partir de ahí solo nos espera la disolución.” “¿Disolución?” “Ese es el destino del gremio Hermes tras encontrarse en un callejón sin salida.” Rafael dijo que el resultado de la batalla contra el dragón tenía poca importancia. “Se gane o pierda. Sea cual sea el resultado, la relación con el Imperio de Arpen no cambiará. Lo importante es lo que viene después… En primer lugar, los miembros del gremio Hermes harán todo lo posible en el combate y convertirse en uno de los mil señores.” “Es una suposición lógica.” “Mil jugadores principales con excelentes habilidades de combate abandonarán el gremio.” “¿Por qué iban a abandonar el gremio? Weed dijo que no le importaba.” “Ellos… Lo más probable es que se vayan por su cuenta.” Los miembros del gremio Hermes serán nombrados nuevos señores de Arpen. Para decirlo sin rodeos, no obtendrían ningún beneficio por asociarse con el gremio Hermes. En cambio, será un obstáculo para gobernar a los jugadores del Continente Central o del Norte, por lo que su eventual deserción sería inevitable. “El gremio Hermes no es más que una valla que se irá debilitando con el tiempo. Los jugadores vivirán una nueva vida como señores, e incluso si hay un conflicto con Weed, no se pondrán del lado del gremio Hermes.” “Nuestra fuerza no es tan pequeña como para caer por la deserción de mil jugadores.” “No somos una facción pequeña. Pero, incluso la muralla del castillo más poderoso puede derrumbarse al instante si se hace un agujero. Lo que había unido a los miembros desaparecerá.” El gremio Hermes buscó la hegemonía y había distribuido enormes ganancias entre sus miembros. Pero ahora, cuando el mundo cambiase, todos se darían cuenta. Era mucho mejor trabajar como señor del Imperio de Arpen que permanecer en el gremio. Aventureros, guerreros, señores… Aquellos que deseaban una vida diferente, seguirían su propio camino de libertad. “Los mil que abandonarán el gremio Hermes después de convertirse en señores serán la clave. Aunque pueden seguir residiendo en Haven, la mayoría de ellos ya no pensarán en compartir el mismo destino que el gremio”. “¿Las cosas llegarían tan lejos?” “Poco a poco, el vínculo se debilitará. Aquellos que se fueron incluso podrían convertirse en nuestros enemigos y luchar junto a Weed cuando comience a destruir al gremio Hermes.” La propuesta de Weed estaba diseñada para debilitar al gremio con el tiempo. Debido a que actuaría lentamente en nombre de una nueva ola o tendencia, sus efectos graduales serían mucho más complicados de superar. “¿Entonces habríamos estado mejor si hubiéramos rechazado su oferta y defendido Haven hasta el final?” Arkhim estaba completamente dedicado al gremio Hermes. No deseaba la caída del gremio ni siquiera en circunstancias desfavorables. “No. Esta vez no teníamos opción.” Las negociaciones entre Weed y el gremio Hermes fueron emitidas en directo. Naturalmente, los miembros ordinarios del gremio recibieron esta oferta con agrado. Aunque ya no gozarían de la hegemonía de la que presumían en el pasado, eran pocos los jugadores que deseaban vivir confinados en el área de Haven. Además, la mayoría de los líderes del gremio que eran señores, valoraron positivamente esta propuesta. Después de todo, podrían mantener su autoridad. “Es una oferta tan buena que no podemos rechazarla. Incluso si sabes que es mortal desde la perspectiva de cada persona.” “Que astucia…” “Si miras hacia el futuro, Weed tiene mucho más que ganar. Puede usar a los jugadores del gremio Hermes para enfrentarse a los señores de Arpen y mantenerlos bajo control… También puede reducir sus pérdidas por ir a la guerra.” “Para que pueda considerar todo eso…” “Weed arrancó las raíces de nuestro gremio con una simple oferta.” “No puedo creer que todo vaya a terminar así. Yo… permaneceré en el gremio hasta el final.” Arkhim no siguió caminando más allá de las puertas de la fortaleza de Lahonya. Rafael salió por ellas con la sensación de que la mochila con la que cargaba se hacía más ligera. Era como si se hubiera librado de sus últimos arrepentimientos. ‘El gremio Hermes fracasó y ahora el mundo pertenecía a Weed. Perdí por completo, tanto en fuerza como en estrategia. En realidad, me siento aliviado.’ Para él, Royal Road aún no había terminado. El tiempo en el que más se había divertido era cuando se fue de aventuras con Da´in y sus otros amigos durante sus días como principiante. * * * Al día siguiente, Weed hizo una visita oficial a la fortaleza de Lahonya. Los jugadores estaban de pie en las calles y en los tejados de los edificios. El camino que se extendía desde la puerta del castillo estaba cubierto con una alfombra roja. “Estamos en presencia del Emperador.” “¡Viva el Imperio de Arpen!” Mientras Weed caminaba sobre la alfombra, los ciudadanos y los jugadores le arrojaban pétalos de flores. Hasta los miembros del gremio Hermes lo aplaudieron. “El Dios de la guerra, Weed. Nuestro gremio se rindió ante ese hombre.” “Es bastante impresionante. Aunque fue a través de negociaciones, no esperaba que cedieran ante Arpen tan rápido.” “Las condiciones que ofrecen son buenas. Es beneficioso para nosotros. Con la guerra pueden desaparecer los errores que hemos cometido.” “¿Realmente puedo moverme libremente?” “Weed hizo una promesa. La promesa del Emperador de Arpen debe cumplirse.” Los miembros del gremio Hermes se sintieron en conflicto. Había muchos con sentimientos hostiles hacia Weed y el Imperio, pero, en verdad, sus sentimientos no tenían una justificación. Deberían estar agradecidos por que los salvasen de tener que luchar contra todo un Continente. “Me siento honrado de conocerte Weed.” “Por aquí. Le damos la bienvenida.” Con Arkhim a la cabeza, los líderes del gremio Hermes lo saludaron cortésmente. Jugadores famosos como Steer, Boemong, Gaushu, Heiler, Gros y Crevolta inclinaron la cabeza. Pero lo más inesperado fue la actitud del asesino Calkus. Hasta ahora, siempre gritaba por una oportunidad de matar a Weed cada vez que se celebraba una reunión del gremio. Y cada vez que fallaba, juraba matar a Weed en la próxima oportunidad. Sin embargo, esta vez saludó a Weed mientras hacía una reverencia de 90 grados y hasta extendió su mano para darle un apretón de manos. “Es un honor. Debido a que estábamos en bandos diferentes, no tuve más remedio que levantar mi espada contra ti, pero siempre te he apoyado. Weed, de ahora en adelante, cualquier molestia o problema que pueda surgir, házmelo saber. Me ocuparé de ello de inmediato.” ¡Un ejemplo clásico de habilidades sociales! Con una sonrisa, Weed tomó la mano de Calkus y le dio una palmada en la espalda. Responder cálidamente al primer adulador haría que el resto se acercasen a él sin dudarlo. “Calkus el asesino. Te veo a menudo por televisión. También he visto muchos de tus videos de combate.” “Uh… ¿En serio?” “Sí. Iremos a cazar y pasar el rato juntos cuando tengamos una oportunidad.” “Gracias. Es realmente un honor.” Los líderes del gremio Hermes que vieron esta escena se dieron cuenta quien sería el futuro gobernante. Hasta ahora siguieron al incomparable poder de BardRay. Pero ahora, que Weed dominaría por completo el Continente Norte y Central, pronto se alzaría como el Emperador de un Continente unificado. A partir de ese momento, el gremio Hermes se dio cuenta de que habían perdido tanto en poder como en espíritu. Había muchos jugadores que deseaban el resurgir del gremio Hermes, pero esa realidad parecía ahora un sueño. * * *

Los territorios del Imperio se han expandido.

Los señores de la región de Haven han izado la bandera del Imperio de Arpen. Su reputación nacional se extiende por todo el Continente. La influencia política está a punto de dominar todo el Continente. Los ciudadanos adinerados de la región de Haven desean productos especiales, arte y cultura. Satisfacer sus necesidades promoverá el desarrollo del comercio.

¡Así comenzó la anexión por sorpresa de la región de Haven! El Imperio de Arpen ahora controlaba prácticamente la mayoría del Continente de Versalles. El desierto del Sur, los reinos del este y las tierras de los orcos. Se necesitaría un poco más de tiempo para unificar por completo el Continente, pero la situación en la que el Imperio de Arpen se hiciera con el mundo estaba a la vuelta de la esquina. Weed hizo una declaración desde la fortaleza de Lahonya: “¡Uniremos nuestras fuerzas para matar a Kaybern en Morata!” “¡Larga vida a Weed!” “¡Viva el Imperio de Arpen!” “¡Cacemos a Kaybern!” Ver a los miembros del gremio Hermes aplaudiendo las palabras de Weed causó un gran impacto a los espectadores.

Nunca pensé que escucharía al gremio Hermes gritar Larga vida a Weed en mi vida.

Guau. Estoy sin palabras. Esto es una locura.

Cuando escuché que Weed fue ayer a Lahonya a comer, pensé que alguien se había vuelto loco. Pero regresó con el estómago lleno y encima conquistó la región de Haven.

No entiendo nada. Tengo miedo.

Se tragó a todo el gremio Hermes con unas pocas palabras. Dios…

Weed el conquistador…

Y encima los movilizó para luchar contra Kaybern.

¿Por qué está tan contento el gremio Hermes?

Estarán agradecidos de que Weed haya decidido perdonarlos a pesar de todos sus pecados.

Como todos sabemos, Kaybern apareció por culpa del gremio Hermes.

A pesar de que el gremio Hermes había anunciado su participación en la caza de Kaybern, todavía no pudo evitar las críticas públicas. Por otro lado, el hecho de que protegieran Morata de todos los lugares posibles hizo que la respuesta de los jugadores del norte fuera positiva.

¡Proteged Morata!

Siempre confié en que Weed no abandonaría Morata.

Todo empieza y termina en Morata.

Morata es una fortaleza inexpugnable. Será la tumba del dragón.

Weed da un paso al frente. El gremio Hermes une fuerzas.

Vayamos a Morata.

Invito a la gente a mi casa. Está ubicada en el barrio de chabolas número 6.

Mi casa también está abierta a quien la necesite. El techo se derrumbó un poco la última vez, pero lo arreglarán mañana.

‘Genial. Si mantenemos este ambiente… ¡más personas se ofrecerán voluntarias para usar el brasero!’ Weed estaba más satisfecho con arrastrar al gremio Hermes a la batalla que con la respuesta del público. Mapan le envió un susurro. – Tus habilidades políticas son excepcionales. Con solo unas pocas palabras, has puesto de rodillas al gremio Hermes. “Bueno, renuncié a lo que podía permitirme dar y tomé lo que necesitaba, pero no puedo morir solo.” No había forma de que se sacrificase por Versalles como un tonto. Iba en contra de la filosofía de Weed de comer y vivir bien. En las películas, el héroe que salvaba al mundo tenía muchas probabilidades de morir después de una vida de dificultades. Y encima la carga sobre los miembros de la familia era la guinda del pastel. Pero en esta época, para convertirse en un verdadero héroe debías ser práctico y cuidar de ti mismo. ‘Moriremos juntos y viviremos juntos…’ Weed tenía que utilizar el poco tiempo que le quedaba de la manera más efectiva. “Morata se convertirá en un campo de batalla en el que se jugará el destino de Arpen.” – Sí. Ya he emitido una orden para movilizar a todos los comerciantes. Todos los comerciantes del Continente Norte y Central están esperando tus órdenes. Los comerciantes tenían que impresionar a Weed, el Emperador del Imperio de Arpen. Para cazar a un dragón se necesitaba estar más preparado que para una guerra, no era como luchar contra un monstruo jefe ordinario. “Lo primero es que el plan de evacuación está completamente cancelado. Necesitamos alistar a jugadores de más de nivel 400 que estén dispuestos a unirse a la batalla y construir defensas.” – Entendido. Centraremos todos nuestros esfuerzos en Morata. Weed también le envió un susurro a Seoyoon. “Morata se convertirá en el campo de batalla que decidirá el destino del Continente. La gente vendrá en masa, así que distribuye las tareas y prepárate para luchar contra el dragón.” – Déjamelo a mí. Yo protegeré Morata. Weed no se olvidó de enviarle un mensaje a los arquitectos. “Pavo. Esta batalla también dependerá del trabajo de los arquitectos. Si luchamos contra el dragón, el daño a Morata será inmenso.” – ¡El trabajo no tiene fin! Pero, lo afrontaré con el espíritu alto. Me di cuenta de muchas cosas después de ver a Kaybern destruir el Castillo de Barwell. Aunque no puedo asegurar que sea completamente inexpugnable haré que Morata sea lo más resistente posible. Para aumentar las probabilidades contra el dragón, necesitaban luchar en un buen terreno y lo más descansados posibles. “Estaría bien que cooperaras con los cazadores. No sé si hay algún tipo de trampa que pueda funcionar.” – Tomo nota. Todos los arquitectos del norte, incluido el gremio de Arquitectos del Martillo de Piedra, están de camino a Morata. “¿Qué pasa con los arquitectos del Continente Central?” – Nada más escuchar la noticia, empezaron a viajar a lomos de los avianos. También me contactó el gremio Hermes… Me ofrecieron ayuda con los preparativos. ¿Debería aceptarla? “Por ahora, acepta toda la ayuda que puedas conseguir. Cosas como trampas mágicas pueden no ser muy útiles contra un dragón… Pero tienen mucha experiencia cazando monstruos de nivel jefe, por lo que deben saber algo que pueda ayudar.” – Haré lo mejor que pueda. “Siempre estoy en deuda contigo.” – Debería estar agradecido por tu reconocimiento y por confiarme tales tareas. Si no fuera por ti, los arquitectos nunca habrían sido respetados. Desde que Weed tomó la decisión de luchar en Morata, todos en el Continente Norte y Central se pusieron en movimiento. Tal vez hubiera sido mejor si hubieran comenzado a prepararse con más tiempo, pero era inevitable… ¡ya que se estaba improvisando sobre la marcha! ‘Esto es lo mejor que se puede hacer por ahora. La reconciliación con el gremio Hermes…’ Tenía una larga historia de malas relaciones con el gremio Hermes. Decidieron doblar la rodilla porque estaban en desventaja, pero seguramente eso no significaba que se fueran hacer todos amigos. Por otra parte, no podía garantizar que todos los señores de Arpen fueran buenas personas. Si la popularidad de Weed disminuía, los señores podrían ser los primeros en desenvainar sus espadas contra él. De hecho, podrían muy bien estar reuniendo fuerzas para cuando pudiera llegar ese momento. ‘Ninguna es de fiar. El único en que puedo confiar es en mí mismo.’ Podría ser apuñalado por la espalda en cualquier momento si bajaba la guardia. Pero por ahora, lo mejor era centrarse únicamente en defender Morata.