Survival Capítulo 54

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1ª parte: Juego de Supervivencia

Capítulo 54

Mutante – David y Goliat V

Traducido por Tars
Corregido por Lord
Editado por Tars

- Cinco granadas cada uno. Las tiramos al mismo tiempo. Tan pronto como explote la quinta, echamos a correr. Cuando nos veas, danos fuego de cobertura. “Entendido. Lanzando a la de tres. ¡Uno, dos, TRES!” Las granadas dejaron sus manos simultáneamente, desplegándose en un semicírculo mientras caían. Tan pronto como tocaron el suelo, explotaron con un fuerte estampido. El humo y el polvo llenaron el aire mientras esquirlas y fragmentos de granadas se dispersaron al azar. Barrendero silbó y gritó con entusiasmo, señalando que estaban a punto de lanzar la siguiente ronda de explosivos. “¡Es como uno de esos juegos en los que reúnes a los monstruos y los destruyes de un solo golpe! ¿Listos? Dos, ¡TRES!” Una segunda ola de granadas explotó. Barrendero sintió una oleada de emoción. Era como estar en uno de esos cafés de pesca de interior o tambalearse sobre una enorme red en un tanque lleno de peces. Mientras tanto, Yohan y los demás se estaban armando y preparando para luchar por sus vidas. Si bien las granadas crearon una abertura en la horda, aún tenían que tener cuidado. Yohan se cubrió la cara con una máscara. A continuación, se arrancó una tira de ropa y se acercó a Saeri para cubrirle la nariz y los labios. Observándolo, algunos de los otros miembros hicieron lo mismo. Los miembros más nuevos simplemente se quedaron allí, dándoles una mirada atónita. “Pequeñas piezas de carne de zombi podrían estar volando por el aire debido a las explosiones.” – explicó Yohan. Con eso, los nuevos miembros también encontraron rápidamente una manera de cubrirse la nariz y la boca. – “Es difícil apuntar y disparar mientras te mueves. Solo confía en tus sentidos.” Yohan instruyó mientras se paraba frente al grupo. Todos se reunieron a su alrededor en una formación de ala de grulla. “Tres.” La tercera ola de granadas explotó. Parecía que el grupo de Barrendero estaba realmente cerca esta vez, ya que la puerta del almacén se sacudió con violencia. La cuarta y quinta explosión siguieron poco después, con tan solo unos pocos segundos de diferencia. Tan pronto como explotó la quinta oleada, Yohan abrió la puerta de un puntapié y salió corriendo. Fueron recibidos con humo polvoriento y partes de cuerpos de zombis esparcidas por todas partes. El área frente al almacén estaba cubierta de un color carmesí sangriento. Con cada paso que daban, la carne y los intestinos se pegaban a sus zapatos. Yohan se metió de cabeza entre el humo y se dirigió hacia la carretilla que contenía las armas. A medida que avanzaban, los disparos y los aullidos de zombis llenaron el aire. En la niebla de la guerra, los zombis saltaban constantemente sobre ellos, pero los miembros del equipo de reconocimiento aún lograron defenderse con relativa calma. Si bien Yohan pensaba que era importante conservar las balas, sabía que no era tiempo para hacerlo. Estaba agradecido de saber que apuntaron antes de disparar. “Saeri. Jung Eun. Tirad del carro.” – ordenó Yohan, tan pronto como llegaron hasta la carretilla. Los dos que nombró no tenían experiencia en disparar rifles, así que fueron elegidas para tirar de la carreta. Los hombres restantes formaron un círculo alrededor de ellas, ofreciendo cobertura mientras avanzaban. Pasaron unos minutos y el polvo disminuyó, lo que les permitió ver claramente a su alrededor. El grupo de Barrendero estaba en una posición defensiva a solo 50 metros de distancia. El trío disparaba con cuidado a los zombis que perseguían al grupo de Yohan. Su potencia de fuego era increíblemente efectiva y la distancia entre el grupo de Yohan y el zombi más cercano, se incrementó considerablemente. ‘Ya hemos pasado la peor parte. Todos entendieron y ejecutaron bien el plan. No nos falta potencia de fuego ni mano de obra.’ Otra arma disparó y cayeron más zombis, lo que tranquilizó a Yohan. Esto fue diferente a las batallas anteriores. Estaba rodeado de camaradas armados capaces. A pesar de que los zombis estaban influenciados por la oleada zombi y eran más violentos, todos tenían rifles de asalto, por lo que no constituían una gran amenaza. Incluso el cabo Ong, que luchó en combate cuerpo a cuerpo, era un hombre diferente con una pistola en la mano. Mostró todo el poder de un soldado en activo, matando tranquilamente a todos los zombis que se acercaban. Sintió que la puntería del cabo podría ser incluso mejor que la suya. Yohan se preguntó si el teniente Ahn lo asignó al equipo de reconocimiento porque era el luchador más hábil de su grupo. La oleada zombi ya no era una preocupación. Si podían llegar hasta el almacén de municiones, podrían mantenerlos fuera. Incluso una horda de mil zombis tenía su límite y cuando Yohan recordaba la cantidad de munición que había visto en el almacén, sabía que era suficiente para sobrevivir a tres oleadas zombi de ese tamaño. ‘El único problema es el mutante. Es de vital importancia averiguar qué mutante lidera esta oleada. No importa la variante, todos los mutantes son difíciles de tratar. Sin embargo, mientras sepamos cómo lidiar con eso, podremos vencer a esta oleada sin sufrir bajas.’ – pensó Yohan. Estaba siendo positivo. – “¡Si ya han revisado todos sus cargadores, tomen otra arma y sigan disparando! Barrendero, tírame algunos cargadores.” Barrendero arrojó los cargadores adicionales que había sacado del almacén de municiones. Yohan cambió el cargador con una mano y siguió disparando. Había matado a la mayoría de los zombis de todo el grupo y usó la menor cantidad de munición. Simplemente daba un paso cada vez, asegurándose de que su puntería fuera tranquila y precisa. De repente, hubo un ruido sordo y Myung Jin, que se encontraba en la parte trasera izquierda del grupo, cayó al suelo gritando. “¿Myung Jin?” La gente gritó su nombre, sin darse cuenta de lo que había sucedido. “¡Barrendero! ¡Bajad!” – gritó Yohan. Barrendero se dejó caer de inmediato mientras un objeto pesado volaba sobre él y se estrellaba contra la plataforma que quedaba a su espalda. La plataforma de acero se sacudió violentamente y el estruendo hizo que todos se dieran cuenta de que algo iba mal. “¡Myung Jin!” Hyuk rápidamente corrió hacia su amigo y lo abrazó. La nariz de Myung Jin estaba rota de tal manera que parecía que su cara se había derrumbado. Tanto su nariz como sus labios estaban cubiertos de sangre. Pero Myung Jin no se movió en absoluto, había perdido el conocimiento. Lo que lo golpeó fue un trozo de metal del tamaño de un puño. Parecía extraño, como si una placa de hierro fuera aplastada hasta tener forma de bola. Yohan trazó la trayectoria del trozo de metal. Al final, vio al mutante. Era la única cosa que quería evitar encontrarse en este momento. El mutante estaba sobre el techo de un edificio, observándolos. Tenía un cuerpo pequeño, de menos de un metro de altura, y su piel era una mezcla de gris oscuro y rojo. Parecía un mono con brazos anormalmente largos. El nombre de esta variante era David. De todas las posibles opciones, era el peor mutante que podía aparecer ante ellos. “Mierda…” – murmuró. – ‘Solo tenía que aparecer ahora. Si hubiéramos completado esta misión, podríamos haber aumentado realmente la potencia de fuego de nuestro campamento, con armas y municiones casi infinitas. Si fuera cualquier otro mutante, probablemente podría eliminarlo. ¿Pero por qué ahora? Nadie pidió que apareciera el peor mutante posible. ¿Cómo es que siempre me pasa esto?’ Había hecho todo lo posible por mantenerse a salvo, pero, a pesar de sus desesperados esfuerzos, se había producido el peor escenario posible. Pero Yohan no tenía tiempo para sentirse frustrado. El mutante movió la mandíbula y escupió un trozo de metal. Lo sostuvo en la mano y comenzó a estrujarlo para lanzarlo. “¡Proteged sus cabezas!” Yohan no se atrevió a esperar que alguien pudiera esquivar el ataque. Blindar la cabeza y evitar la muerte instantánea era lo mejor que podían hacer. Los miembros del equipo de reconocimiento respondieron a sus gritos desesperados envolviendo sus brazos alrededor de sus cabezas. El viento arremetió cuando el mutante hizo el lanzamiento. La bola de metal se dirigió directamente hacia Barrendero, que logró esquivar el ataque por muy poco. Podría haber sido peor. Yohan dejó escapar un suspiro de alivio y luego se volvió hacia Hyuk, que estaba tratando de ayudar a Myung Jin. “No lo ayudes a levantarse. Podría estar infectado. Vamos a ponerlo en la plataforma y movernos.” Los miembros del equipo de reconocimiento se apresuraron, colocando a Myung Jin encima de las armas en la plataforma rodante y avanzaron hacia el almacén de municiones, que ahora no estaba demasiado lejos. Sin embargo, todavía tenían que protegerse de las bolas de metal que llegaban volando. Ahora este lugar era el coto de caza del mutante. “¡Vayan al almacén de municiones!” – gritó Yohan, mientras apuntaba con su rifle a David y disparaba una ráfaga rápida. Tres disparos impactaron casi al mismo tiempo, pero el mutante no se movió. Sin embargo, los disparos lograron atraer la atención de David hacia Yohan. “¡Barrendero hay zombis detrás! Te avisaré cuándo esa cosa ataca, así que rueda tan pronto como me escuches. Todos los demás, ¡vayan rápido al almacén de municiones!” Yohan sintió que solo él y Barrendero podían evitar el ataque del mutante, por lo que quería que los dos atrajeran su atención para evitar más bajas. Envió a Barrendero a encargarse de los zombis para quedarse más cerca del mutante. Mientras tanto, continuó disparando, no porque intentara acabar con él, sino para llamar su atención. Barrendero asintió y David se movió como Yohan deseaba. El mutante lanzó su próximo ataque contra Yohan mientras recargaba y disparaba contra él. La bola de metal se movió rápido, pero no era tan rápido como una bala o una flecha. Yohan esquivó dos ataques y disparó a ciegas. Sus balas emitieron un sonido sordo al rebotar contra el cuerpo del mutante. ‘Esto debería ser suficiente…’ – pensó. – “¡Barrendero! ¡Vamos a retirarnos ahora!” Yohan se aseguró de que todos se encontraran a salvo antes de llamar a Barrendero. En ese momento, el mutante estaba trabajando con su mandíbula una vez más. Hubo un ligero retraso entre masticar el metal y tirarlo. Este era el patrón de ataque único del mutante. Yohan y Barrendero corrieron tan rápido como pudieron antes de que el mutante volviera a atacar. Tan pronto como entraron en el almacén de municiones, las puertas se cerraron detrás de ellos. Dentro del oscuro almacén, todos estaban recuperando el aliento. Hyuk le estaba dando primeros auxilios a Myung Jin. Su estado parecía grave. Era como si una maza de hierro lo hubiera golpeado en la cara. Ya casi no era reconocible. “¿Qué demonios es eso?” – gritó Saeri. “Eso es un mutante. Se llama David.” “Qué clase de monstruo…” Yohan levantó la mano para hacerla callar. Probablemente todos tenían muchas preguntas y, aunque quería tomarse su tiempo y explicar las cosas correctamente, no podían permitirse ese lujo. “Buf, como no tenemos tiempo, lo explicaré rápidamente. Se llama David. De todos los mutantes que he visto, David es el único que puede atacar desde lejos. Arroja un trozo de metal. La superficie de este bulto es afilada, así que trata de evitarlo lo mejor que puedas. Puede ser difícil al principio, pero si te mueves en el momento adecuado, puedes esquivarlo. De todos modos, si no lo derribamos, entonces esta ola de zombis no terminará.” – Yohan hizo una pausa para respirar antes de continuar. – “Además, David puede controlar a otros mutantes. Siempre que David esté cerca, seguramente habrá otro mutante llamado Goliat. Es simple y tonto, pero tiene dos metros de altura y puede atravesar alambres de espinas y barras de hierro. Esto significa que no tenemos tiempo. Si nos retrasamos, esa puerta será aplastada y tendremos que luchar contra todos los zombis de la base.” Mientras Yohan continuaba, podía ver las caras de todos ponerse sombrías. Se enfrentaban a una criatura extraña que simplemente no podían entender. La existencia de los zombis ya era lo suficientemente difícil de aceptar. Un monstruo tan horrendo era una locura. Sin embargo, la explicación de Yohan no se detuvo allí. “Además, ese monstruo es inmune a las balas.” “¿Qué…?” “Come hierro. Su piel es tan dura como el hierro.” “Maldita sea… Claramente está OP…” Aunque solo Barrendero expresaba sus quejas, todos pensaban lo mismo. ‘¿Cómo luchamos contra algo así?’ “Pero lo bueno es que Yohan probablemente tenga experiencia en tratar con eso. Entonces, ¿cuál es su debilidad y cómo la matamos?” – dijo Ha Jin con una voz firme. Él y Barrendero estaban sorprendentemente tranquilos, ya habían luchado contra un mutante antes. “¿Matarlo?” Si es posible, Yohan quería darles esperanza. Sin embargo, no tuvo más remedio que responder esta pregunta con honestidad. “No sé su debilidad. Cada campamento que luchó contra él fue aniquilado.”

Survival Capítulo 53

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1ª parte: Juego de Supervivencia

Capítulo 53

Mutante – David y Goliat IV

Traducido por Tars
Corregido por Lord
Editado por Tars

Fue una sorpresa inesperada. Normalmente, no quedarían supervivientes después de que una base cayera por una oleada zombi. Según su experiencia, nunca había visto a un solo superviviente después de que un campamento fuese incapaz de repeler una oleada zombi. Los hombres vestían uniformes militares que no les quedaban bien. Estaban sucios y con manchas de sangre seca por todo el cuerpo y la ropa. Debían haber quedado atrapados en este oscuro edificio durante mucho tiempo, porque sus ojos estaban hundidos como peces podridos. Latas y bolsas vacías estaban tiradas por todas partes mientras el piso era sospechosamente negro. “E… Eres… ¿Un grupo de rescate?” Los tres supervivientes tartamudearon, mirando al grupo de Yohan con una expresión nerviosa. “No somos un grupo de rescate.” – respondió Yohan sin rodeos. Hizo una señal al grupo que estaba a su espalda y tiraron de la puerta. Esta, hizo un ruido seco contra el suelo mientras se cerraba. Pasaron unos minutos y todos se quitaron las manos de la nariz cuando se acostumbraron al hedor. Hubo un aire de confrontación entre el grupo de Yohan y los tres supervivientes. Estos parecían extrañamente ansiosos y desafiantes, lo que empeoró la situación. “¿Cuánto tiempo han estado aquí?” – preguntó Yohan, rompiendo el silencio. Pero las tres personas no respondieron. O no lo sabían o estaban evitando la pregunta. – “¿Estaban asignado aquí?” Los tres asintieron. Yohan frunció el ceño. El resto de su grupo comenzó a andar por las ventanas debido a la atmósfera sofocante. Yohan los ignoró y miró alrededor del almacén. Quedaban algunas bebidas, pero la mayoría de la comida había desaparecido. Se detuvo frente a otra puerta dentro del almacén. “¿A dónde lleva esta puerta?” “¡No lo abras!” – gritó uno de los supervivientes, enloqueciendo. Pero rápidamente recuperó la compostura. – “Es el bañó… Sería mejor si no lo abrieras…” Yohan asintió, pero aun así extendió la mano para agarrar la manilla de la puerta. Uno de los supervivientes gritó y corrió hacia Yohan. En un abrir y cerrar de ojos, Yohan sacó su glock y señaló al superviviente. “¡Yohan!” – gritó Hyuk. Sin embargo, este lo ignoró y disparó de inmediato. Se dispararon dos tiros y dos de los supervivientes cayeron al suelo al mismo tiempo. La persona restante no sabía qué hacer y levantó las manos para rendirse. Yohan casualmente apuntó su pistola hacia él, pero Hyuk saltó para detenerlo. “¿Qué estás haciendo?” “Yohan, ¡eso es lo que debería preguntarte!” “Muévete, no tenemos tiempo para esto. Tenemos que lidiar con esto rápidamente y salir de aquí.” “Yohan, ¿realmente vas a ser así? Sé que los acabamos de conocer, pero haciendo cosas como esta...” Yohan no respondió y en su lugar abrió la puerta que había a su espalda. La habitación que los supervivientes intentaban esconder lanzó un hedor desagradable. Dentro había montones de suciedad y un cadáver humano que apenas era reconocible. Todo lo que quedaba era la cabeza. La cara de Hyuk se congeló con la mandíbula colgando. Ya no sabía lo que estaba pasando. “Esos bastardos cometieron canibalismo. Si lo entiendes ahora, muévete.” – explicó Yohan al confundido y aturdido Hyuk. “¡No! ¡No lo hicimos!” – gritó desesperado el superviviente restante. El grito devolvió a Hyuk a sus sentidos y se situó frente a Yohan con los brazos abiertos. “Espera, dijo que no lo hicieron. Vamos a escucharlo…” “Muévete.” “No…” Yohan no pudo esperar más. Empujó a Hyuk y disparó, y el tembloroso superviviente cayó al suelo. La sangre seca en su rostro y en la ropa estaba ahora cubierta de sangre fresca. “Al menos debería limpiarse la sangre que estaba alrededor de la boca antes de mentirnos. ¿Pensó que era estúpido? E incluso si él no participó, no importa. Consentirlo es tan bueno como el asesinato. Deben haber sobrevivido tanto tiempo a través del canibalismo.” “Aun así… No puedo aceptar hacer las cosas de esta manera…” “¿Aceptar?” – dijo Yohan, mirando a Hyuk con una expresión seria. – “Las acciones contra personas externas se considerarán en defensa propia ya que las amenazas no se pueden confirmar. ¿Olvidaste las reglas de nuestro campamento?” “……” “Las reglas están ahí para la seguridad de todos. Si no puedes aceptarlas, entonces vete. Vamos. No te detendré.” “……” “Usa tu criterio, Hyuk. Sé por qué arriesgas tu vida para salvar a la gente. Sé cuál es la carga que llevas sobre tus hombros. Sin embargo, no pretendo poner a otros en peligro solo por ser amable.” Yohan dijo lo que tenía que decir y se alejó. No quedaba nada por hacer aquí. “Levántate, volvemos.” - Hermano, ¿te falta mucho para terminar? Justo entonces, Barrendero llamó por radio. “Queda poco, ¿hay algo mal?” - Los zombis se mueven de manera extraña. No nos están siguiendo. ‘Maldita sea.’ Era una señal de advertencia. Yohan tenía una mala sensación de Déjà vu. Pero cuando se dio cuenta, escuchó el sonido de los zombis aullando afuera. Era una oleada zombi. Este era un desarrollo inesperado. Incluso si agregó los tres sobrevivientes y al equipo de reconocimiento, había menos de 20 personas aquí. Además, cuando llegaron, Yohan estaba seguro de que la ola de zombis ya había terminado. ‘¿Qué pasó?’ Según su experiencia, cuando llega una oleada zombi, no terminaría hasta que todos los supervivientes hubieran muerto. Si los tres supervivientes que acababan de encontrar ya estaban aquí cuando llegó la oleada, entonces los zombis deberían seguir atacando hasta que fueran devorados. Sin embargo, Yohan no sabía qué pasaría si de alguna manera fuera imposible para los zombis atacar a los supervivientes y ese punto muerto se extendía durante mucho tiempo. En el mejor de los casos, solo podía tratar de adivinarlo, ya que era algo que nunca había experimentado antes. Una oleada zombi podría ir al limbo, sin terminar ni continuar. Podría dar vueltas cerca y observar la situación. A Yohan se le ocurrió esta teoría cuando abrió un poco la puerta. Una horda se acercaba al almacén. Cientos, no, tal vez incluso más de mil zombis se dirigían hacia ellos. Los miembros del equipo de reconocimiento también miraron a la horda a través de la rendija y se sorprendieron. “Tenemos que irnos ahora.” – dijo Yohan mientras salía corriendo y mataba al zombi más cercano. Sin embargo, otro no muerto tomó su lugar. Bajo la influencia de la oleada zombi, eran rápidos y persistentes. El equipo de reconocimiento se unió rápidamente a él, pero los zombis se estrellaron contra ellos como las olas del océano y el impulso los empujó hacia atrás. “¡Ack!” Uno de los miembros del equipo de Hyuk resbaló y cayó. Hyuk rompió la formación para cubrirla y el resto de su grupo retrocedió. Si continuaban de esta manera, definitivamente sufrirían bajas. Ni siquiera pensar en romper la horda, solo pensar en sobrevivir sería complicado. “¡Fuera de aquí! ¡Al almacén!” Yohan empujó a los zombis lejos de él y cerró la puerta del almacén. Los zombis empujaron sus manos contra la puerta antes de que se cerrera. Más miembros del equipo de reconocimiento intervinieron para ayudar a cerrar la puerta. Cuando terminó de ayudar al miembro de su grupo que se había resbalado, Hyuk comenzó a cortar las manos de los zombis. “Cómo…” Alguien susurró con desesperación. Todos tenían expresiones sombrías en sus rostros. El sonido de los zombis golpeando contra la puerta del almacén se hizo más fuerte. “¿Que hacemos ahora?” – preguntó Saeri. Estaba tratando de ser valiente, pero había un toque de miedo en su voz. Pero confiaba en que, de alguna manera, Yohan tendría un plan. Yohan miró su expresión esperanzada y supo que no podía entrar en pánico. “Barrendero, soy yo.” – dijo Yohan, tras organizar rápidamente sus pensamientos. - Si, ¿está todo bien por ahí? “No, es una emergencia. ¿Cómo estás?” - No quedan zombis, ni siquiera una hormiga. Creo que todos volvieron a la base. Yohan suspiró en voz baja. La oleada zombi se limitaba al interior de la base. Todos los que estaban afuera estarían a salvo. Podría haber sido peor. Al menos podría utilizar a la gente de afuera para buscar una salida. No había forma de que pudieran escapar por su cuenta. Mientras fueran los únicos supervivientes en el área, abandonar el almacén no era una opción. Lo único que podían hacer era matar la fuente de la ola. Una confrontación con un mutante era inevitable. Este era el tipo de situación terrible que siempre intentaba evitar. Además, era un mutante que deambulaba a plena luz del día. Todos los mutantes que hacían eso tenían algo en común: Eran realmente difíciles de tratar. ‘Llegar hasta el almacén de municiones y usar la potencia de fuego que hay allí para luchar sería lo mejor.’ Yohan sabía que no podía mostrar signos de debilidad. Se calmó y comenzó a desenredar la situación en su mente para formular un plan. ‘Tenemos potencia de fuego más que suficiente. Hay una salida.’ – pensó, para luego comenzar a hablar. – “Tengo una idea. No os preocupéis y esperad hasta que más zombis se reúnan aquí.” Al instante, todos parecieron aliviados. No importa la situación, Yohan sabía que primero necesitaba calmarlos a todos. Necesitaban salir de este edificio aislado y luego llegar al almacén de municiones, donde tendrían la oportunidad de cambiar la situación. Yohan sacó su radio una vez más. Necesitaría que Barrendero y los demás les abrieran un camino. Sabía que eso estaba dentro de sus capacidades. “Escucha atentamente. De ahora en adelante, ustedes son nuestro salvavidas.” - Oh, ¿en serio? “¿Dónde te encuentras?” - Jefecito, somos su salvavidas, pero todavía estás hablando como… ‘No puedo creer que este bastardo esté bromeando en un momento como este.’ – pensó por un momento, antes de volver a hablar con voz serie. – “¿Cuál es tu ubicación?” - A las nueve en punto de la base. Veo un edificio con el techo azul. “Excelente. En este momento, la entrada principal está bloqueada y los zombis probablemente deambulan sin saber qué hacer. Dong Seok, ¿tienes la caja de herramientas?” - Sí. Tiene de todo, excepto los alicates y la palanca que se llevaron. “Solo necesitas un cortador y algo de alambre de acero. Primero, corte la verja de alambre y entra a la base. No te olvides de atar la valla detrás de ti.” - Entendido. ¿Y luego? “En este momento, los zombis están reunidos en el exterior del almacén de suministros. Tan pronto como entres, dirígete directamente hacia el almacén de municiones. Si te encuentras con un mutante en el camino, avísame.” Yohan continuó explicando su plan rápidamente, pero con calma. Fuera de la base, Barrendero miró a las otras dos personas que estaban con él. “¿Lo han entendido? Vamos, caballeros.” El plan de Yohan fue bastante temerario, pero también muy emocionante. Barrendero definitivamente parecía emocionado cuando comenzó a cortar la verja. El simple hecho de pasar a través del alambre de espinas era estresante, ya que la presión y la responsabilidad de su misión pesaba sobre ellos. Después de entrar, los tres corrieron directamente al almacén de municiones y cargaron con la munición y el resto de objetos clave que Yohan quería. Luego, se trasladaron a la siguiente ubicación del plan. ‘Muévete lo más sigilosamente posible para que los zombis no te noten. Durante una oleada zombi, si te acercas un poco, te atacarán, así que mantente oculto.’ La mayoría de los zombis estaban en la parte norte de la base y el resto se encontraba frente al almacén de suministros. Por lo tanto, el camino desde el almacén de municiones hasta donde estaban atrapados fue bastante tranquilo. “Veamos, el puesto de guardia al lado del almacén está… Por allá.” – dijo Barrendero, señalando el puesto de guardia. Tenía una antena y una ametralladora preparada para disparar. Él, Ha Jin y Dong Seok se movieron a hurtadillas hasta la cima de la torre de guardia. “¿Listo?” - Sí. Comienza. “Guau, está realmente lleno.” El plan de Yohan era bastante simple. El trío tenía que lanzar granadas a los zombis que se encontraban alrededor del almacén de suministros para crear un camino para los que estaban atrapados dentro. Aunque había cierta distancia desde el puesto de guardia hasta el almacén, la torre era bastante alta, lo que permitía golpear a sus objetivos con las granadas. Además, aunque fallaran, le sonido de la explosión atraería a los zombis lejos del almacén y aún ayudaría a despejar un camino.

Survival Capítulo 52

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1ª parte: Juego de Supervivencia

Capítulo 52

Mutante – David y Goliat III

Traducido por Tars
Corregido por Lord
Editado por Tars

A pesar de la calma de Yohan, la detallada explicación, hizo que los miembros del equipo de reconocimiento parecieran ansiosos. Aunque Yohan podía entenderlo, porque sentía lo mismo. Si la oleada zombi todavía estaba activa y buscando supervivientes, entrar a la base sería similar al suicidio. Sin embargo, no parecía que esos zombis estuvieran bajo la influencia de una oleada. Pero la gran cantidad de zombis, hizo que Yohan se preocupara. Esta era una misión importante y, aunque fuera peligroso, no podían retirarse. Yohan sacó un pedazo de papel que había traído consigo y comenzó a dibujar un plano de la base mientras explicaba su plan. “Estoy basando esto en lo que me dijo el teniente Ahn sobre el interior de las bases y lo que podemos ver desde el exterior en este momento. Que todos copien este boceto en sus cuadernos. La munición se guarda al lado del puesto de guardia central, por lo que probablemente esté por aquí. Hay tres lugares que debemos verificar. Almacenamiento de municiones, almacén de suministros y los barracones.” “¿Los barracones?” – preguntó Saeri. “Si. Por cierto, Saeri, pensé que solo tenías mala letra, pero… ¿qué es esto? ¿Un mapa del infierno?” – respondió Yohan en broma. “¡Limítate a contestarme! ¿Qué demonios hay en los barracones?” “Es donde duermen los soldados. Las armas que usan también deberían guardarse allí. Usa los cortadores de alambre y agarra tantas como puedas. Nos dividiremos en tres grupos para atraer a los zombis, conseguir municiones y asegurar las armas.” “Guau, ¿un cebo vivo? ¡Solo oír eso me pone la piel de gallina!” – dijo Barrendero, fingiendo temblar. “Barrendero liderará el grupo de señuelos. Ha Jin y Dong Seok lo cubrirán.” – respondió Yohan, mirándolo. “Por dios jefe. Parece que te gusta asignarme todas las tareas peligrosas. Dime que lo estoy pensando demasiado.” “Lo estás pensando demasiado. El cabo Ong y Saeri irán conmigo a buscar munición. Hyuk y los demás buscarán las armas y luego revisarán los barracones y la sala de control del primer piso en busca de radios. Si hay un mapa de la base, cógelo también.” Todos asintieron. “Primero, el grupo que hace de señuelo hará ruido mientras camina alrededor de la cerca. Atraerán a los zombis del interior de la base en el sentido de las agujas del reloj hacia esta zona.” – dijo Yohan, dibujando un rectángulo en el mapa y señalando una esquina de la base. – “Dispárales por un momento y luego escapa hacia el bosque. No te excedas. Si se vuelve demasiado peligroso, dividíos y regresar al refugio por vuestra cuenta.” “Entendido.” “Los dormitorios y el lugar donde se guardan las municiones están en lados opuestos de la base. Tan pronto como entremos, nos tendremos que separar. Hyuk, coge tantas armas como puedas y reúnete con nosotros en el almacén de suministros en la parte norte de la base. Intenta no hacer ruidos fuertes y solo muévete después de matar a los zombis cercanos. Es posible que no podamos mover todas las armas de una vez.” En el caso probable de que tuvieran que dejar atrás armas o municiones, sería bueno tener zombis para protegerlos. Yohan quería asegurarse de que solo él pudiera adquirir todos los suministros de la base. Tan pronto como comenzó la misión, el grupo de Barrendero comenzó a dar vueltas alrededor de la base, pero como parecían tener dificultades para atraer la atención de los zombis, al final, hicieron un disparo. Esto atrajo la atención de los no muertos, tanto de dentro como de fuera de la base, que comenzaron a caminar hacia un solo lugar como las hormigas. “Barrendero, los zombis que se encuentran fuera de la base también se acercan. ¿Cómo va todo?” - Es duro. Me pregunto si tomé la decisión correcta en la vida para seguirte. “Parece que lo estás haciendo bien.” - Acabo de decirte que es difícil… Yohan apagó la radio. No se estaban moviendo hacia un callejón sin salida y como los zombis no iban a aparecer por sorpresa, no corrían ningún peligro real. Solo necesitaban concentrarse en escapar. Había elegido intencionalmente a aquellos con los mejores instintos de supervivencia para estar en el grupo que iba a atraer a los no muertos. Creía en ellos. “Vamos.” Once personas se movieron hacia la puerta de la base, que estaba abierta de par en par. Cuando entraron, los zombis en el puesto de guardia comenzaron a moverse hacia ellos. “Tú, el de la parte de atrás, cierra la puerta.” – ordenó Yohan. Los amigos de la universidad de Hyuk, Jae Hee y Myung Jin, cerraron la puerta de acero. Mientras lo hacían, el resto de supervivientes eliminaron a los zombis que intentaban entrar. Poco después, los dos grupos se separaron. Tenían un total de cinco plataformas rodantes entre ellos. El grupo de Hyuk tomó dos, uno para las armas y otro para los suministros. Los tres restantes se fueron con el grupo de Yohan para cargar munición. Las ruedas de las plataformas repiquetearon contra el suelo mientras rodaban hacia adelante, proporcionando el único sonido que se podía escuchar dentro de la base. Los zombis restantes asomaron la cabeza y cada uno tuvo que lidiar con ellos con una mano mientras con la otra continuaba tirando de la carretilla. Afortunadamente, el grupo de Barrendero había hecho un gran trabajo atrayendo a los zombis y no había muchos en su camino. Cada vez que el inexperto cabo Ong luchaba, el machete de Saeri bailaba en el aire. Había recogido su nueva arma en el refugio de Yohan, mientras hablaba del destino y de enamorarse a primera vista. En unos momentos, el grupo de Yohan había llegado al almacén de municiones. La cerradura estaba sellada con plomo. Esto indicaba que, tal como Yohan sospechaba, la base había colapsado desde el principio. La infección debía haberse extendido por dentro de la base antes de que alguien pudiera tocar la munición. Las bases militares coreanas tenían un protocolo estricto en torno a la distribución de municiones. Por lo tanto, si no reaccionaron con suficiente rapidez al comienzo de una crisis, era probable que esto sucediera. Después, la gente común probablemente trató de saquear la base, pero como la cerradura estaba sellada, también fallaron. ‘Al infierno.’ A menos que tuvieras algún conocimiento sobre el comportamiento de los no muertos, era difícil sobrevivir a una oleada zombi. Intentar luchar contra ella era similar al suicidio. Yohan rompió la cerradura de acero del almacén de municiones y la dejó caer al suelo generando un potente sonido. El almacén estaba completamente repleto de varios tipos de municiones y pólvora. Habían sido almacenados en cajas de hierro que se ubicaban sobre pallet de madera en el suelo. Yohan desenganchó la tapa de la caja más cercana y, con un clic, reveló una caja repleta de municiones. También había un compartimento secreto en la parte interior. “Guau, ¿cuántas hay?” – exclamó Saeri, mirando todas las cajas del almacén. “Este es el campo de tiro del décimo regimiento de la ciudad de Bucheon.” – explicó Yohan, uniéndose a su entusiasmo. “Parece que hemos ganado el premio gordo.” Era justo como dijo. Con tanta potencia de fuego, podrían enfrentarse a toda la Unión de Supervivientes de Seúl y mucho más. También podrían resistir contra la mayoría de las oleadas de zombis. “Cabo, ¿suele haber granadas en el almacén de municiones?” “Cada almacén tiene una lista de verificación para todas las necesidades básicas. Tienen el K400 aquí, pero últimamente se usa más el K413.” “No entendí ni una palabra de lo que acabas de decir. De todos modos, ¿no es irónico cómo la base cayó en manos de los zombis a pesar de tener toda esta munición?” “Tienes razón…” Si una pequeña base lograba sobrevivir al caos del principio, tendían a persistir. En la línea de tiempo anterior, hubo bases situadas en el campo que recuperaron áreas pequeñas. El octavo campamento al que se había unido era así. Esa base resistió tres oleadas zombis. “Solo necesitamos llevarnos las granadas, las minas antipersonas y las municiones de 5,56 mm. Son pesados, así que levántalos con ambas piernas, no hagas fuerza con la espalda.” “¿Son tan pesados?” – preguntó Saeri, chasqueando la lengua, mientras miraba al cabo Ong. Estaba sudando mientras se tomaba un descanso. Así, hizo que el cabo Ong hiciera guardia mientras ella comenzaba a mover las cajas de municiones. Al principio todo salió bien, pero después de tan solo 20 minutos, ella se agarró la espalda y cayó al suelo quejándose. Al final, volvió a hacer guardia mientras Yohan y el cabo Ong se concentraban en mover la munición. “Señor, ¿tenemos que tomar solo las cajas de 5 mm? Hay muchas cajas de 20 mm que nos estamos perdiendo.” “Hay un límite a lo que podemos llevar, por lo que es mejor tomar las cosas más genéricas.” “Oh.” “Tomemos un descanso.” “Vale. A decir verdad, pensé que nunca tendría que volver a mover cajas de municiones…” Yohan sonrió ante el comentario autocrítico del cabo. Podía identificarse con él. Cuando estaba en el ejército, tuvo que hacer lo mismo. “Ya terminé mi servicio, pero aquí estoy haciendo esto una vez más.” “Je, je. Señor, ¿en qué base sirvió?” “Fuerza Aérea. Regimiento de artillería antiaérea.” “Guau, solo las personas inteligentes van a la fuerza aérea. Supongo que eras bueno estudiando.” “No, estaba por debajo del promedio.” – contestó Yohan, lentamente, mientras se sentaba encima de una caja para recuperar el aliento. Había querido ser parte de la división militar acorazada. Justo entonces, Hyuk llamó por la radio. - Yohan, aquí Hyuk. Lo tenemos todo lleno de armas. “Gran trabajo. Creo que vamos a estar un tiempo aquí, así que ven a ayudar. Vamos a mover las municiones juntos, pero primero, reunámonos en el almacén de suministros.” - Entendido. “Tendremos que terminar esto con los demás. Vamos al almacén de suministros.” – le dijo Yohan al cabo Ong, volviendo a poner la radio en la correa del hombro izquierdo. “Sí señor.” Yohan abrió algunas de las cajas de municiones y cogió algunos cargadores como reserva. Además, le dio cinco a Saeri y otros cinco al cabo Ong. El cabo Ong empuñaba su arma como si fuera una extensión natural de su cuerpo. Por el contrario, Saeri estaba usando un arma que habían adquirido de un soldado zombi que habían matado antes. Se quejó de que el rifle era más pesado que su pistola, pero Yohan la obligó a aprender a recargar, apuntar y disparar. Era un conocimiento esencial. Cuando estaban a punto de irse, Hyuk volvió a llamar por radio. - Yohan, estoy frente al almacén de suministros. Será mejor que vengas rápido. El grupo de Yohan se movió con rapidez y vio un gran grupo de zombis frente al almacén. Parecían hormigas moviéndose afanosamente. Según una estimación aproximada, había alrededor de 300 no muertos. El área alrededor del almacén poseía un desnivel ligeramente más bajo. No era empinado, pero tendrías que doblar la espalda para entrar o salir. Yohan no estaba seguro de cómo abordar ese problema. “Oh, Yohan.” – dijo Hyuk, saludándolos nada más verlos llegar. Su grupo se escondía detrás de un edificio que estaba frente al almacén de suministros. Uno de los carros estaba lleno de fusiles de asalto Daewoo K2. “Este lado tiene muchos zombis. ¿Deberíamos retirarnos? ¿O recogemos más munición y les disparamos a todos?” Pero Yohan sacudió la cabeza. No le gustaba ninguna sugerencia. Las raciones del ejército no caducaban durante mucho tiempo y eran muy nutritivas. Dado el estado actual del mundo, no podían permitirse el lujo de abandonarlas. Sin embargo, usar armas era aún peor. No estaba preocupado por desperdiciar municiones, era el sonido lo que era problemático. Si comenzaban a disparar, desharían todo el trabajo que realizó el grupo de señuelos. “Menos mal que lo traje conmigo. Dejemos un carro aquí y tomemos los que están vacíos.” “¿Vamos a entrar? ¿Cómo?” – preguntó Hyuk. Había asumido que Yohan iba a volver a dividir los grupos, pero luego notó que había sacado tres objetos de color azul. Iban a practicar con granadas. “Esto debería ser suficiente para llamar su atención.” Yohan ordenó a todos que esperaran mientras lanzaba una granada al lado opuesto del almacén. La granada aterrizó a unos 30 metros de distancia con un ruido sordo y comenzó a dejar salir un poco de humo amarillo. El sonido que hizo era perfecto para atraer que los zombis cercanos volvieran la cabeza y miraran en esa dirección. A continuación, arrojó las otras dos granadas aún más lejos, haciendo que los zombis comenzaran a correr hacia el sonido. Luego hizo una señal a los grupos y todos se movieron con rapidez. Usaron una palanca que habían traído para esta misión y abrieron la puerta. Cuando entraron, se encontraron con un olor desagradable que hizo que todos se taparan la nariz al mismo tiempo. “¿Qué es este olor…?” El hedor hizo girar sus cabezas. Olía a comida podrida y olor corporal. Sin embargo, lo que más sorprendió a Yohan fueron los tres jóvenes escondidos dentro del almacén de suministros. ‘¿Hay supervivientes?’

Retro Capitulo 83

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Volumen 3 Capítulo 83

Su decisión V

Traducido por Tars
Corregido por Zura
Editado por Tars

Un mago de la Academia Hebrion levanta su espada contra el enemigo.

5 de agosto a las 14:00, Capital Deltaheim del Reino de Prilecha. La época en que la Competencia del Océano Dorado estaba en su máximo esplendor.

5 de agosto, los forasteros llevan a cabo un ataque terrorista en Deltaheim, la capital del Reino de Prilecha, durante la Competencia del Océano Dorado y en plena conferencia de la Alianza de los Reinos Occidentales. A juzgar por la coordinación de sus movimientos, se especula que los ataques fueron premeditados y planificados durante un largo período de tiempo. El daño fue severo, pero la Guardia de la Ciudad logró imponerse con la llegada del ejército de Avalon. Esto fue suficiente para poner fin al ataque terrorista. Sin embargo, los Forasteros no se rindieron y terminaron por convocar a un demonio de la antigüedad a través de un artefacto que se cree que fue una recompensa de un mundo de las sombras de tercer nivel que atacaron en secreto. Este demonio trató de exterminar toda la vida humana en y cerca de Deltaheim. El Señor Jane Austen, un conocido historiador, testificó que era una criatura mítica conocida como Desastre. Hay registros históricos que indican que apareció en la oscuridad. La situación era tan desesperada que todos los habitantes de Deltaheim no dudaron de su muerte, pero no todos estaban preocupados por eso. Porque un niño detuvo al demonio. Ese niño, Desir Arman, es un solo un estudiante de primer año que asiste a la Academia Hebrion…

Después de leer el artículo, Romántica dobló el periódico y lo dejó a un lado, sobre otro montón de periódicos. El contenido de sus portadas era esencialmente el mismo.

El grupo dirigido por Desir Arman ayuda a los refugiados.

¿Quién es Desir Arman?

¿Otro mago del séptimo círculo en la Academia Hebrion?

Consultor técnico de la Torre de la Magia, el centro del milagro de Hebrion.

Romántica respiró hondo antes de dar un profundo suspiro. Después de que Desir derrotó a Desastre habían pasado demasiadas cosas. En primer lugar, Desir se convirtió en un héroe. En cierto modo, esto puede ser algo natural ya que Desir salvó a los habitantes de la Alianza de los Reinos Occidentales a expensas de su ‘Cuerpo’ y de ser un ciudadano del Imperio Hebrion. Sería bastante extraño que no fuera el centro de atención. Pero ese no era el único problema, sino que el resto de los miembros de su equipo: Ajest, Pram y Romántica, también atrajeron la atención del público. Era imposible saber cuántos periodistas acudieron hacia los integrantes del equipo con la esperanza de obtener algún tipo de primicia. Algunos periodistas incluso asaltaron el hospital. Romántica no pudo evitar estremecerse al recordar esa conmoción. Por supuesto, ser famoso era algo agradable y, si hubiera sido en cualquier otro momento, habría disfrutado con arrogancia de su meteórico ascenso a la fama. Si tan solo todo hubiera sido como siempre. Ella miró a su lado con una mirada apagada. Allí estaba el protagonista mencionado por todos los medios de comunicación: Desir Arman. Había estado inconsciente durante dos semanas. “De verdad, hasta el final…” Desir, quien derrocó a Desastre, se desmayó en el acto y la Alianza de los Reinos Occidentales lo acogieron como invitado de honor del estado y lo transportó a uno de los principales hospitales del continente. El reino de Adenia, uno de los países con las técnicas médicas más avanzadas. Además, cada año, este reino producía los cuatro mejores médicos de todo el continente. No era exagerado decir que la mayoría de los hospitales se fundaron con el apoyo de estos médicos. Dado que estaba siendo atendido en el Hospital Real de Adenia, el mejor de todo el reino, era evidente el tipo de tratamiento que estaba recibiendo. Pero sus síntomas en el momento de su ingreso, eran terribles. La mayoría de sus órganos estaban completamente destruidos o dejaron de funcionar y los círculos de maná eran inestables. Estaba en un estado tan precario que parecía que, en cualquier momento, iba a dejar de respirar. Afortunadamente, gracias al apoyo de la Alianza de Reinos Occidentales, pudieron trasladarlo rápidamente al portal de transferencia espacial que solo estaba disponible para la gente más importante. Su rápida acción logró evitar una crisis y pudo recibir tratamiento de urgencia en el Hospital Real de Adenia, donde el mejor personal médico estaba siempre disponible. Además, la santa Priscilla lanzaba sus hechizos de curación sobre el cuerpo de Desir cada vez que recuperaba un poco de su fuerza, a pesar de que su propio estado era un desastre. Sin embargo, a pesar de tales esfuerzos, la condición de Desir no mejoró. La condición de su cuerpo parecía normal, pero no podían entender qué le impedía despertarse y volver a la normalidad. Solo podían suponer que era un efecto secundario mágico creado por el hechizo que había invocado. “Cuando despiertes, nunca te dejaré ir…” – murmuró Romántica con tristeza, mientras lo agarraba del pecho. Su primer encuentro no había sido el mejor posible. Tal como lo recordaba, habían empezado con el pie equivocado. En ese momento, Romántica era un mago de segundo círculo y Desir tan solo era un mago de primer círculo. Lo había juzgado por lo que veía y terminó despreciándolo, aunque en realidad, no sabía nada de él. Por supuesto, cualquiera en su posición hubiera hecho lo mismo. Sin embargo, Desir la venció con sus habilidades. Si ella hubiera derrotado al hombre que la despreciaba y se burlaba de ella, se habría pavoneado, pero él no lo hizo. ‘Me estaba intimidando.’ Por supuesto, no fue porque la despreciaba. Después del examen de ingreso, Romántica fue chantajeada por Desir y terminó siendo obligada a unirse a su grupo. Hasta entonces, realmente no le gustaba nada. Con esa actitud sonriente, con esa extraña compresión que tenía de ella y su capacidad para reaccionar de la forma más adecuada ante cualquier situación. Era incapaz de ganarle en nada. Sin embargo, a pesar de tales quejas, Romántica no abandonó el grupo al que se vio obligada a unirse. Porque también le gustaba la preocupación y consideración que le mostraba. ‘No lo sé.’ Nunca lo sabría, peor de lo único que estaba convencida es de que siempre era sincero. Desir realmente hizo lo mejor que pudo por Romántica. Si lo pensaba bien, había sido así desde el examen de ingreso. Tomó la actitud de enseñarle en cualquier circunstancia, incluso en las pruebas híper competitivas de la academia. “Bobo.” Hasta rechazó la oferta para unirse al grupo de la Luna Azul y se quedó con Desir. Hizo todo lo que pudo para convertirse en un rango único. Aprendió mucho y experimentó una gran cantidad de cosas. Pero se dio cuenta de que Desir la estaba cubriendo en todo momento y le ayudaba a compensar sus deficiencias. Siempre hacía todo lo posible por ella. Sabía que confiaba en él. Romántica sintió un sentimiento especial en su corazón. Cada vez que estaba distraída, se sorprendía al darse cuenta de que estaba pensando en él. Su mirada volvió a caer sobre el rostro de Desir. * Zzzzzz * El sonido de su respiración era regular, pero todavía no había señales de que fuera a despertar. “Yo… No te entiendo.” – murmuró en voz alta, mientras lo miraba. No le estaba hablando a nadie en particular. Aunque era una mentira. En realidad, comprendía sus intenciones. Quería salvar a la gente, a sus compañeros y a ella, aunque fuera a expensas de su propio cuerpo. No, esto no está bien. No podía tolerarlo más. “¿Por qué lo has hecho…?” Su voz se quebró cuando se cubrió la cara con las manos. No quería que la viera llorar. Se sentía miserable. “Por qué no piensas en los sentimientos de los que dejas atrás… por que no piensas… en mis sentimientos…” *Silencio* No había nadie que pudiera responder. Romántica recordó la promesa que hizo con Desir junto al mar dorado: Si le decía que huya, huiría. Y ella había cumplido su promesa. Cumplió la promesa porque conocía muy bien a Desir. Es porque ella entendió que él no quería que muriera. “¿Pensaste que sería feliz por hacer esto? Tienes una idea equivocada. Porque por mucho que pienses en mí, yo también pienso en ti. ¡No quiero que mueras...!” – dijo elevando el tono de voz. Sintió como una oleada de emoción aumentaba en su interior. Era ira. Pero no estaba dirigida a Desir, sino a sí misma. Romántica sabía que había tomado esta acción porque no era lo suficientemente fuerte como para estar con él. Se sentía tan patética por ni siquiera ser un poco útil para él. “Voy a entrenar más duro.” – se comprometió Romántica. – “No me quejaré. Haré lo que quieras. Si me dices que muera, moriré.” Romántica inclinó la cabeza, casi como si se derrumbara. “Me esforzaré y seré una compañera de la que no tengas que avergonzarte. Seré tu fortaleza. Entonces…” Las lágrimas cayeron sobre las sábanas. “Así que no vuelvas a hacer esto.” Los sollozos de Romántica llenaron la tranquila habitación. Fuuuuus Sintiendo una sensación de calor en su cabello, Romántica levantó la mirada y, a través de sus ojos borrosos, vio a Desir mirándola. “Te lo prometo, Romántica.” Desir apartó con suavidad el cabello de Romántica y continúo acariciándola en silencio, hasta que dejó de llorar. * * * 27 de septiembre. El reloj acababa de dar el mediodía. Menos de un minuto después de que Romántica informara a Pram y Ajest, mediante su pulsera de comunicación, de que Desir se había despertado, una conmoción resonó en el pasillo y la puerta se abrió violentamente. “¡Me alegra que estés a salvo!” Pram corrió y saltó a la cama para abrazar a Desir con fuerza. Enterró su rostro en el pecho de Desir y no tenía la intención de soltarlo. Era como un cachorro que acababa de ver a su dueño herido. Parecía estar bastante preocupado. Desir acarició suavemente la espalda de Pram en un intento de calmarlo. La puerta se abrió de nuevo. “Has hecho más de lo que creía posible, Desir.” – dijo una voz tranquila. De repente, Pram y Romántica miraron a Ajest al unísono y comenzaron a gritarle. Fue porque simpatizaba con sus acciones y había terminado ayudándole a engañarlos. Fue por eso que Desir la defendió de forma desesperada, diciendo que era inocente y que solo cumplió sus órdenes. El barullo continuó durante bastante tiempo, pero, al final, lo aceptaron y pudieron comprender por qué Desir hizo lo que hizo. Pero solo pudieron asentir y aceptarlo, después de dar a conocer su disgusto. “Ustedes están bien.” “Estoy bien. Bueno, después de todo, fue Pram quien se agotó cuidando a Desir toda la noche.” “¡Romántica! ¡Te dije que no menciones eso!” Aunque ruidoso, era un ambiente muy agradable. Fue en este tipo de atmósfera que pudieron hablar con calma. Desir acababa de despertarse, asó que estaba contento de poder disfrutar de este momento. “Lamento interrumpir está feliz reunión.” – dijo Zod, el maestro de la Torre de la Magia. Estaba vestido con un traje. – “Tengo algo que discutir con Desir, ¿podéis disculparme por un momento?”

SYN Capítulo 73

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Volumen 8 Capítulo 1

Caza de humanos

Traducido por Tars
Corregido por Lord
Editado por Tars

Los orcos eran cazadores naturales. Aunque su inteligencia era inferior a la de los humanos, los superaban con facilidad cuando se trataba de rastreo o de cazar objetos más débiles que ellos. Y ahora que la puerta había sido destrozada, la ‘pared’ que bloqueaba el acceso a la mazmorra al resto del mundo, había desaparecido, y estos cazadores comenzaron a salir por ella. “Grooaaargh” “Jiji.” Los Orcos empujaron de forma cruel los cuerpos de los chicos y examinaron los alrededores. “Snif.” “Crick” Estos cazadores habían estado atrapados dentro de la oscura mazmorra durante toda una semana, esperando en silencio este día. Era bastante obvio que se emocionaron con todo ese olor a sangre y carne que tenían a su alrededor. Sin embargo, este grupo era simplemente exploradores avanzados. Aunque su sangre estaba hirviendo, no iban a actuar como locos. Docenas de sus hermanos estaban esperando con impaciencia sus noticias justo más allá de la puerta ovalada. A su alrededor, vieron paredes rectas con una puerta y muchas ventanas. El Orco que estaba a cargo del equipo de exploradores se dio cuenta rápidamente de que se encontraban dentro de un edificio complejo, como el de un castillo. “Grooaaargh.” Sus fosas nasales se torcieron. Tenía dos opciones. Matar todo lo que se encontrara en su camino mientras buscaban la forma de salir. O bien, matar a todos los humanos del castillo y convertirlo en una fortaleza. A continuación, comenzar la caza en el exterior. No había necesidad de considerar cuál era la opción más segura. “Convoca a nuestros hermanos.” – dijo el líder Orco a su subordinado. A continuación, levantó la cabeza para mirar el techo. Sus orejas se crisparon y atraparon sonidos que llegaban desde los pisos superiores. Había sonidos por encima y muchos más llegaban desde lugares aún más altos. Esa estructura estaba llena de presas. Y, en su cabeza, se repetía una voz, una y otra vez, que le decía que matara a todas esas criaturas. “Vale.” Las fauces del monstruo se separaron y sus colmillos amarillentos se revelaron al mundo. “Vamos a limpiar este lugar por completo.” * * * Había una gran cantidad de personas reunidas en la costa de Gwang-Anri. A pesar de que el clima estaba nublado, hubo una cosa que hizo que todas estas personas aparecieran aquí con una fascinación insana. Y eso era la puerta gigantesca que flotaba sobre la playa. Los miembros de la policía local, cuya asistencia había sido solicitada, y los empleados de la sucursal de Busan de la Asociación de Cazadores, habían acordonado la zona y prohibido estrictamente a los civiles acercarse. Pero, por alguna razón, la cantidad de personas reunidas no había disminuido en absoluto. “Mayor.” – dijo una empleada novata, con una expresión llorosa, que estaba siendo golpeada por la multitud de personas. – “¿Vamos a tener que hacer esto cada vez que aparezca una puerta?” El encargado también se sentía nervioso con todo este asunto. Era la primera vez que veía una conmoción como esta alrededor de una puerta. “Bueno, supongo que no se puede evitar, ya que es la puerta más grande que se ha abierto en Busan.” – dijo mientras miraba hacia atrás. Había un descomunal agujero flotando silenciosamente en el aire y, aunque trataba de ignorarlo, no podía evitar tener la sensación de que iba a ser absorbido en su interior. ‘Sé que esa cosa no puede dañar a las personas a menos que ocurra una rotura, pero…’ Sin embargo, no le gustaba esa puerta. Tenía el mismo sentimiento que las personas que temían al universo o a las aguas profundas sin ninguna razón. Por eso, no podía dejar de rezar en su mente para que los cazadores se ocuparan con rapidez de ese ominoso agujero. En cierto modo, por lo menos había algo que le hacía sentir mucho más tranquilo acerca de esta incursión. “¡Oh! Mayor, ¿lo escuchaste?” – dijo la novata, como si hubiera recordado también esa razón. “¿El qué?” “¿No viene un cazador de clase S desde Seúl?” No había nadie que no se hubiera enterado. Probablemente la mitad de todos los que estaban presentes venían únicamente para poder ver al cazador de rango S con sus propios ojos, mientras que la otra mitad venía por la puerta. “¿El cazador Sung Jinwoo?” “¡Sí! ¡Ese!” “¿Por qué estás tan feliz? ¿Te gusta?” “N… No.” – contestó la novata, sacudiendo las manos y comenzando a retorcerse con una expresión exagerada en su rostro. – “En realidad, será la primera vez que vea a un cazador de rango S…” “El cazador Sung es un novato y, también eres un novato, ¿Cómo podéis ser tan diferentes?” – dijo el encargado con una expresión decepcionada. “¡Mayor!” “Si todavía tienes tanta energía, ¿Por qué no vas allí y ayudas?” “Me estoy tomando un descanso, ¡he estado horas allí y me duelen las piernas!” El encargado hizo una mueca infeliz. Al verla entrecerrar los ojos enojada de esa manera, debió sentir que estaba siendo injusto con ella, pero no estaba comprando su actitud. Podía entender de dónde venían los sentimientos de la nueva recluta. “También tengo un poco de curiosidad. Todos han estado hablando sobre él últimamente.” “Mayor, ¿usted también?” “Es un cazador que acabó con el jefe de una puerta S por sí solo.” Al principio, el verdadero jefe de la puerta de rango S en la isla de Jeju era la Reina. Sin embargo, debido al intenso impacto generado por esa hormiga mutada al ver la emisión, mucha gente pensaba que era el jefe. Solo matando al jefe de la mazmorra haría que la puerta se cerrara. Y ese joven cazador había sido capaz de cerrar una puerta de rango S solo. Por ello, existían rumores que el cazador Sung Jinwoo estaba cerca de ser una potencia con ‘rango de autoridad especial’ y estaba ganando toda la atención del público. “¡Un cazador de rango S! ¿No te preguntas cómo será ver uno?” El encargado miró los brillantes ojos de la novata y una idea aterradora entró en su mente. ‘Esta tipa, no solicitó el empleo en la Asociación por el trabajo, ¿sino porque anhela ver cazadores?’ Fuera lo que fuese, a la novata no le importaba la mirada de su superior. Sus ojos continuaron brillando intensamente y su voz permaneció emocionada por la anticipación. “Mayor, mayor.” “¿Ahora qué?” “Escuché que a los cazadores realmente poderosos no se les puede mirar a los ojos, ¿Es cierto? ¿Te has encontrado con alguno?” El encargado recordó un viaje a Gwangju el año pasado. “Lo he hecho…” “Gua…” De repente, el encargado sintió como se enderezaban sus hombros después de ver a la novata mostrar su admiración de esa manera. “¿Cómo fue? ¿Estabas realmente asustado?” “Oye, oye. No seas ridícula. El año pasado, por una tarea en la Asociación tuve la oportunidad de conocer al cazador Ma Dong-Wok del gremio de los Elegidos...” “Disculpe, me deja pasar.” “Ah, claro.” Los dos miembros de la Asociación se hicieron rápidamente a un lado para crear un camino para un joven que intentaba pasar entre ellos, y luego se volvieron a juntar. “¿Uh?” El encargado se dio la vuelta para mirar al hombre encapuchado que acaba de pasar. “Mayor, ¿qué pasa?” “No, bueno, pensé que me parecía familiar.” “¿Uh? ¿De verdad? Qué raro, a mí me pasó lo mismo.” “¿Será un miembro de la Asociación?” “Mmm…” “Espera, ¿de qué estaba hablando?” “Eso… Ah, ¡del cazador Ma Dong-Wok de los Elegidos!” “Oh, cierto. Tuve la oportunidad de conocer al cazador Ma en persona. Era un tipo tan grande que la distancia de sus hombros es como esto…” “Gua…” Al parecer, estos dos empleados se llevaban fabulosamente bien. * * * “¡Cazador Sung!” – gritó Park, dando la bienvenida a Jinwoo con una voz llorosa que no era apropiada para alguien que estaba en sus treinta y tantos. Se podía notar cuantas cosas estaban en juego con esta incursión. Viendo su intensa reacción, Jinwoo comprobó silenciosamente la hora. Los números de la pantalla LCD del teléfono móvil acaban de cambiar de las 10:59 a las 11:00. ‘Perfecto.’ Jinwoo puso una sonrisa. Para evitar problemas, permaneció con la habilidad de Sigilo activada y se alejó un poco, antes de regresar. Pero, aun así, logró llegar a tiempo. Siempre se sentía feliz antes de empezar una nueva incursión. ‘Sí que parece más grande…’ – pensó tras levantar la mirada. La puerta que se encontraba ante él parecía mucho más grande que la que había visto en el video. Además, como había informado la Asociación a la Orden de los Caballeros, la cantidad de energía que se escapaba por la puerta era inusual. ‘¿Qué tipo de monstruo será?’ Sin darse cuenta, una sonrisa apareció en sus labios. Sin embargo, además de esa puerta enormemente absurda, todo lo demás parecía igual. Al igual que con las incursiones de otros gremios, había dos grupos de cazadores de bajo rango cerca. ‘Ese debe ser el equipo de recolección y ese el de minería.’ Había un viejo dicho que decía que ‘verías tanto como sabías’. Podía distinguir con facilidad sus papeles a través del atuendo y su equipo. De hecho, fue gracias a esa ‘participación’ con el gremio Cazadores en el pasado que lo sabía. ‘Aquella vez y ahora, los empleados de la Asociación siempre están corriendo por todas partes, ocupados.’ No sabía qué era, pero a diferencia de aquella vez cuando no sabía nada, ahora estaba más relajado. De hecho, la experiencia resulta ser una buena maestra. “¿Uh?” “¡Está aquí!” “¿Sung Jinwoo?” Los cazadores de élite comenzaron a reunirse tras el grito de Park y pusieron una expresión brillante tras reconocer a Jinwoo. Este, les dio un breve saludo y observó a todos los presentes. Eran 30 cazadores de alto rango. Según las palabras del propio Park Jong-Soo, el número y la calidad de los cazadores de nivel A y nivel B de su gremio no eran inferiores al del gremio Cazadores. ‘Como esperaba…’ Es lo que se podía esperar de un gremio capaz de representar a toda una región. Además, todos estaban completamente equipados con armaduras de metal o con armaduras mágicas, por lo que el nombre de ‘Caballeros’ les quedaba muy bien. Pensar que tal gremio sería subestimado por el simple hecho de carecer de un cazador de rango S era algo lamentable. Ahora podía entender los sentimientos de Park Jong-Soo y su pregunta de si estaba interesado en unirse a la Orden de los Caballeros. Mientras estaba inmerso en estos y otros pensamientos, los cazadores no tardaron en reunirse a su alrededor. “Perdón…” “Hmm.” Se miraron los unos a los otros, antes de participar en una especie de competencia por ver quién podía comenzar a hablar primero. “Cazador, ¡la incursión en la isla de Jeju fue realmente increíble!” “¿Cómo convocas a esos soldados negros? No, ¿Son convocaciones?” “¿Hoy tomarás la vanguardia?” Justo cuando Jinwoo se encontraba abrumado por el torrente de preguntas… “Argh, ¡paren! ¡deteneos de una vez!” – dijo la sanadora Jung Ye-Ring, responsable de la idea de traer a Jinwoo, empujando al resto de cazadores. – “¿Por qué están tratando de molestar al cazador Sung? Sois unos campesinos incultos.” Sus ojos miraron a sus compañeros como si fueran un par de cuchillas. Una sanadora de alto rango era comparable a una madre. Ella era el responsable del bienestar general del equipo de incursión. Por ello, los cazadores tuvieron que tragarse su insatisfacción y mantener la boca cerrada, como si su propia madre los estuviera regañando. ‘Uf.’ Jung sonrió y, dándose la vuelta, se acercó a Jinwoo. “Soy la sanadora principal del equipo de asalto de la Orden de los Caballeros, Jung Ye-Rim.” – dijo extendiendo la mano para darle un apretón de manos con una suave sonrisa. – “No sé qué piensan los demás, pero viendo que estás a punto de liderar el equipo y como soy la sanadora principal, deberíamos conocernos antes de empezar.” Jinwoo miró a Park Jong-Soo, evitando los ojos brillantes de Jung. “¿No se lo has explicado?” “Oh, eso es…” – dijo Park, rascándose la parte posterior de la cabeza, como si estuviera avergonzado por algo. – “Mi horario estaba demasiado completo y estuve tan ocupado con todos los trámites y convocando a la gente que me olvidé por completo. Lo siento.” Sonrió tímidamente y deslizó su mirada sobre el resto de cazadores. Todos los miembros del equipo estaban reunidos en un solo lugar, por lo que no tendría que volver a repetirse en el futuro. “El líder de la incursión de hoy seré yo, Park Jong-Soo.” Al oírlo, los miembros del equipo comenzaron a murmurar para sí mismos. “¿El jefe otra vez?” “Pero tenemos al cazador Sung aquí…” “¿Está bien hacer eso?” Park Jong-Soo era un tanque que se encontraba en el margen superior del rango A, por lo que no debería ser extraño que liderara un equipo. De hecho, la mayoría de las incursiones estaban lideradas por él, excepto cuando estaba en malas condiciones. Sin embargo, ¿no tenían un cazador de rango S en esta incursión? El cazador más fuerte siempre asumía el liderazgo, esta era algo de sentido común durante una incursión. “El cazador Sung asumirá el papel de proteger la retaguardia y garantizará nuestra seguridad durante la incursión.” – explicó Park con rapidez, a los confusos miembros de su equipo. Estaría observando al equipo de asalto desde atrás y asegurándose de que todo el mundo estuviera a salvo. Era una de las solicitudes de Park Jong-Soo. Era algo necesario para asegurar a todo el equipo y el honor del gremio. Era cierto que los cazadores con mayor poder de combate se colocaban en primera línea y que, en la parte posterior, se situaban los cazadores de tipo mago, sanadores o de apoyo que eran vulnerables a las sorpresas y los cazadores mal equipados para hacer frente a emboscadas. En la actualidad, la Orden de los Caballeros estaba teniendo dificultades para reclutar sangre nueva por lo que tasa de supervivencia de sus cazadores era esencial para el destino del gremio. Esa era la razón para colocar al cazador Jung allí. Ahora, el grupo de asalto podía avanzar sin preocuparse por lo que pasaba a sus espaldas. Si los enemigos aparecían por la retaguardia, incluso sería motivo de celebración. Allí estaría el cazador que había sido capaz de exterminar miles de monstruos de rango S sin pestañear. Si los enemigos decidían aparecer todo el tiempo por detrás del equipo hasta podrían terminar antes e irse a casa. Esa era la primera razón, pero la segunda razón era mucho más importante… Glup Park Jong-Soo miró a la multitud de reporteros reunidos más allá de la línea policial y tragó la saliva por su seca garganta con esfuerzo. Era evidente que muchas personas estaban interesadas en esta incursión. Si no tenía cuidado, toda esta gente podría terminar pensando que el gremio de la Orden de los Caballeros solo podía dejar todo en manos del cazador Sung. ‘Bueno… Eso puede ser cierto.’ En cualquier caso, no podía permitir que la gente viera la situación de esa manera. Para el gremio de la Orden de los Caballeros, el verdadero objetivo de esta incursión era dejar que el mundo supiera que estaban en perfecto estado. Por eso Park Jong-Soo suplicó desesperadamente a Jinwoo. “Ya discutí el asunto con el cazador Sung y aceptó hacer la incursión de esta manera. Si alguno tiene alguna queja que la guarde para cuando acabemos.” – dijo Park, que por fin había podido contarle al resto del equipo el resultado de sus negociaciones. “Espera un minuto. Hay algo que no entiendo.” – dijo un cazador de rango A, dando un paso adelante. Era un novato que no llevaba mucho tiempo trabajando para la Orden de los Caballeros. – “¿Desde cuándo somos tan débiles que necesitamos la protección de otra persona?” Esa frase hizo que la tez del resto de cazadores se pusiera completamente pálida. “¡Ah…!” “No… ¡Novato para!” La cara del joven cazador, que tenía una edad similar a la de Jinwoo, estaba repleta de confianza. “¿No están de acuerdo conmigo? ¿Hermanos? ¿Hermanas?” Al igual que Kim Cheol, este novato era una de las mejores promesas del año y había recibido una gran cantidad de atención. De hecho, había una buena razón para su confianza. Desafortunadamente, el problema era quién era su oponente. “Señor Jinwoo, ¿las élites de nuestra Orden de los Caballeros se ven tan débiles a sus ojos?” “……” Jinwoo reprimió la intensa sensación de poner una sonrisa lo mejor que pudo y miró en silencio a este novato de rango A. Era tarea del resto de cazadores ponerlo en su sitio, no de él. ‘Joder, de dónde sacará la confianza este idiota…’ ‘Este imbécil… Sabía que era un patán, ¿será que nunca vio un cazador de rango S en acción?’ ‘¡Que alguien detenga a este tipo!’ ‘Solo descubres que alguien puede decir mierdas en momentos como este…’ Al ver que todos sus mayores estaban sin palabras y que Jinwoo se quedaba callado, la confianza del novato aumentó todavía más. “Además, ¡presidente fuiste demasiado lejos!” “¿Yo?” – dijo Park, señalándose a sí mismo, estupefacto. – ‘¿Por qué me mete a mí?’ “No importa cuánto valor le des a un cazador de rango S, ¿Cómo puedes aceptar con tanta facilidad que un profesional independiente se lleve tanto como nuestro gremio?” “……” Llegados a ese punto, Park Jong-Soo envió una rápida mirada a Jinwoo, un fuerte dolor de cabeza estaba comenzando a desarrollarse en cuerpo. ‘Cazador Sung… Dejo a nuestro novato en sus manos.’ Jinwoo asintió brevemente. “De todos modos, no puede entender este contrato sin sentido…” Y, de repente, Ygritte fue convocado frente a la nariz de ese recién llegado. “¡Ah!” El novato de rango A se estremeció por la fuerte energía mágica que emanaba del caballero negro y dio un paso atrás. Sin embargo, se topó con algo duro presionando contra su espalda, impidiendo que pudiera dar un segundo paso. Aturdido, se dio la vuelta solo para encontrarse con otro caballero, varias cabezas más alto que el anterior, mirándolo. Era Hierro. “¡AH!” - el gemido que intentó ocultar, salió de su garganta por sí solo. Pero algo le tocó el hombro y el novato, se volvió lentamente, con el rostro empapado de sudor, para encontrarse con una figura vestida con una túnica negra. “U… ¡Uh!” El novato perdió toda la fuerza de sus piernas por la ominosa energía mágica que brotaba de Colmillo y se cayó sobre su trasero. ‘Ya parece demasiado lamentable, supongo que no hace falta convocar a Beru.’ Jinwoo movió su mano y los tres soldados de grado caballero que rodeaban al novato, regresaron a su sombra. “¿Todavía no lo puedes entender?” – dijo Jinwoo, acercándose hasta el novato de cara pálida y extendiendo la mano. El novato de rango A le tomó la mano y se puso de pie tambaleándose, antes de asentir con la cabeza a la velocidad de la luz. Después de terminar con este pequeño suceso, Jinwoo se movió hasta la puerta con el resto de miembros del gremio de la Orden de los Caballeros. “Por favor, espera un minuto.” – dijo el presidente, antes de entrar. Rápidamente, junto a su lugarteniente Yun-Tae, comenzaron a revisar el equipo y las condiciones de los cazadores por última vez. Tal vez porque se encontraban ante la entrada, el estado de ánimo alegre que había hasta hace tan solo un momento había desaparecido y fue reemplazado por un pesado silencio. “……” No sabía cuándo comenzó, pero a Jinwoo realmente le gustaba esa tensión que sentía antes de entrar en una mazmorra. Era como si su cabeza estuviera más tranquila. Era algo completamente diferente del pasado, cuando evitaba contestar a las llamadas telefónicas por si era alguien de la Asociación. “Hermano, no hay problema.” “Vale.” – contestó Park, asintiendo con la cabeza. A continuación, se volvió hacia Jinwoo que se encontraba a parte del resto del equipo. Los ojos de Jinwoo también se volvieron hacia él. “¿Cazador Sung?” “¿Sí?” – respondió Jinwoo descruzando los brazos y mirando directamente a los ojos a Park, que inclinó la cabeza. “Estaremos bajo su cuidado de ahora en adelante.” Aunque fueron pocas palabras, contenían muchos de los sentimientos y preocupaciones de Park Jong-Soo. “Yo también estaré a su cargo.” – contestó Jinwoo, usando palabras similares. Park Jong-Soo y Jung Yoon-Tae entraron primero por la puerta y, a continuación, el resto de los cazadores entraron uno tras otro. Tras asegurarse de que no quedaba nadie más, Jinwoo cruzó lentamente el umbral. * * *

Has entrado en una mazmorra.

Como siempre, apareció un mensaje del sistema que nadie más podía ver, dándole la bienvenida. “¿Mm?” Jinwoo negó con la cabeza. La mazmorra tenía unos pasadizos lo suficientemente grandes, como para permitir el paso de un gigante. No había entrado en muchas mazmorras de alto rango, pero tuvo la suerte de ver una parecida. Por eso, Jinwoo no se preocupó por el tamaño de la mazmorra. En cambio, el aire que le llegaba de la mazmorra le causaba una extraña sensación. ‘¿Qué…?’ Se sentía realmente cómodo aquí dentro. Había sentido innumerables sensaciones de las mazmorras, pero era la primera vez que notaba algo como esto. “¡Ogro!” A diferencia del sentimiento de Jinwoo, el equipo de asalto estaba teniendo dificultades en la entrada. “¡Es un Ogro de dos cabezas!” “¡Tened cuidado!” Un monstruo que solía aparecer como jefe en las mazmorras de bajo rango apareció con los ojos inyectados en sangre, justo en la entrada de la mazmorra. Estaba mirando a los cazadores. “¡Grooaaaaaaaaaaaaaaar!” Los ogros de dos cabezas poseían el doble de tamaño que los ogros comunes y su fuerza era complicada de cuantificar. Si la incursión hubiera sido llevada a cabo por cualquier equipo de asalto ‘regular’ y tuviera que enfrentarse a un orco de dos cabezas en una mazmorra se habrían asustado por completo y hubieran tratado de huir de inmediato. “¡Vamos!” – gritó Park, mientras levantaba el escudo y corría hacia el Ogro. Los cazadores de élite de la Orden de los Caballeros eran una historia diferente. Al descubrir que el humano se acercaba, el monstruo levantó un enorme garrote por encima de sus dos cabezas, Parecía que había arrancado un árbol del suelo, con raíces y todo. ¡Blaaaaaaaaam! ¡La fuerza de impacto sacudió el interior de la mazmorra! Sin embargo, Park Jong-Soo activó su habilidad a tiempo. Había aumentado su masa muscular y logró resistir la increíble fuerza física del Ogro de dos cabezas sin caer de rodillas. “¡Hermano!” “¡Estoy bien!” “¡Yo también voy!” – gritó el tanque secundario, Yoon-Tae, que estaba a su lado. “¡Atacad!” – gritó en voz alta Park, con las venas de su cuello hinchadas, una vez que había tenido éxito en atraer la atención del Ogro sobre si mismo. Con eso, la ofensiva de la Orden de los Caballeros comenzó. Flechas, hechizos, espadas y lanzas llovieron sobre el ogro de dos cabezas. ¡Grooaaaar! El Ogro de dos cabezas comenzó a volverse loco. Sin embargo, Park Jong-Soo no le dio la oportunidad de desviar su atención a otra parte. Mientras tanto, Jung Yoon-Tae corrió a toda velocidad y resistió el golpe del Ogro. ¡Baaaaam! Después de defenderse de la patada del ogro, fue empujado hacia atrás, haciendo que quedasen grabadas dos líneas en el suelo por sus pies. Sin embargo, gracias a él, el resto de cazadores no sufrieron ningún daño. Grooar, ¡GROOOOOOAAAAR! En el cuerpo del ogro fueron apareciendo gradualmente cortes debido a los ataques combinados. ¡Fue un trabajo en equipo espectacular! Solo por este espectáculo, Jinwoo podía entender por qué el gremio de la Orden de los Caballeros logró mantener la posición de número uno en la región de Yeong-Nam durante tanto tiempo. ¡Groooooaaar! El ogro cayó hacia atrás, con espuma saliendo por la boca. ¡Baaaaaaam! Un monstruo de nivel jefe cayó sin llegar a herir a una sola persona. Una victoria perfecta. “¡Lo hicimos!” – gritó el líder de equipo Park, apretando con fuerza ambos puños. No sabía si era porque tenían un invitado, pero no solo él, Yoon-Tae y el resto de compañeros de equipo también estaban mucho más motivados de lo habitual. Parecía que todos querían brillar ante los ojos de Jinwoo. ‘Estoy impresionado con su trabajo en equipo y decidí unirme a vuestro gremio…’ – pensó en las palabras que le diría Jinwoo mientras le echaba una mirada de soslayo. Sus ojos se encontraron. Sintiendo que sus pensamientos habían quedado al descubierto, Jong-Soo se sintió avergonzado y comenzó a preguntarse qué debía hacer. Al final, se acercó a Jinwoo con una sonrisa. “Nos quedaremos aquí un poco más para comprobar el equipo antes de avanzar.” “Ah bien. Por favor, hazlo.” – respondió Jinwoo asintiendo con la cabeza. Si bien solo necesitaba beber pociones para recargar su energía mágica o su resistencia, el resto de cazadores sufrían por sus limitaciones físicas, ya fuera por la fatiga o por la baja reserva de energía mágica. Era imprescindible tomar un descanso, aunque fuera corto, después de luchar contra un monstruo poderoso. “Esto va a ser un problema.” – dijo Park con una mirada incomoda en su rostro, tras observar el cadáver del ogro. Estaba al lado de Jinwoo. “¿……?” Jinwoo movió su mirada hacia Park, pidiéndole que continuará. “Parece que esta incursión no va a ser sencilla. Nunca pensé que terminaríamos encontrándonos un ogro de dos cabezas desde el principio.” – dijo con una sonrisa, mientras se rascaba la barbilla. – “¿Conoces el apodo de los Ogros de dos cabezas?” Jinwoo sacudió la cabeza. “Guardián de tumbas.” – respondió, como si ya hubiera esperado su reacción. Por un instante, pensó que había recibido ese nombre por la gran cantidad de muertes que creaba. Sin embargo, la explicación de Park fue diferente de sus expectativas. “La cosa es…” – comenzó, mientras miraba a lo más profundo de la caverna. Era como si a sus ojos llegase un aura ominosa desde el otro lado de la oscuridad. – “Cuando lo encuentras como jefe de una mazmorra no pasa nada, pero si te lo encuentras justo al principio, entonces, verás que esta mazmorra…” Park Jong-Soo parecía preocupado cuando terminó su oración. “…Esta mazmorra está llena de no muertos.” *.*.* Una llamada urgente llegó al centro de emergencias de la Asociación de Cazadores. Parecía ser la voz de una chica adolescente. - Bu… Buuu… ¡Buuuuuuu! Nada más contestar la llamada, lo único que pudo escuchar el empleado era el sonido de un llanto que le llegaba desde el otro lado del auricular. “Aquí la Asociación. Por favor, habla.” - Es… Estoy… Buua…. A… Adentro…. Buuaa…. Mi…. Mi escuela…. Hay…. Sniiif… Monstruos… Buuaaa… Afuera. “¿Afuera? ¿Desde dónde estás llamando?” - Me… Me estoy… Buua… escondiendo, sniiif. Es… Estaba… Bua con una… Buuua… Amiga…. Sniiiif… Baño, pero…. Buaaa. Era complicado entender lo que estaba diciendo porque sus palabras se entrecortaban constantemente por sus sollozos. Sin embargo, el empleado del centro de emergencias tenía suficiente experiencia para juntar las palabras que sonaban entre su tartamudeo y descubrir lo que esta chica estaba tratando de decir. Inmediatamente, envió un mensaje urgente al edificio principal de la Asociación.