sábado, 8 de febrero de 2020

G4L Capítulo 55

Arco 8 Capítulo 55
La dama es una excavadora
Traducido por Tars
Corregido por Lord y DaniR
Editado por Tars

Aproximadamente seis horas después. Mientras la luz del sol le llegaba desde una posición inclinada, Kazura adoptó una pose desalentadora frente a la enorme montaña de abono. A su lado había otra gran cantidad de sacos con cal, mientras que un refrigerador y un generador eléctrico portátil estaban cerca de la puerta de entrada a la casa, junto al ordenador portátil y una gran cantidad de comestibles. El automóvil estaba lleno de víveres, medicinas, joyas y accesorios para convertir en dinero en Isteria. También tenía artículos de primera necesidad, como despertadores y jabones. Por supuesto, había comprado alimentos y verduras congelados que había colocado en un gran cajón aislante repleto de hielo seco. Ahora tenía que llevar todo eso al otro mundo. Para ser sinceros, incluso ahora Kazura sentía bastante aprensión por esa situación. Sin embargo, a diferencia de la última vez, había un compañero fuerte a su lado. “Bueno, mini-exca. ¡Puedo luchar si estás a mi lado!” Frente a la montaña de abono había una mini excavadora. La había comprado con dinero en efectivo en una tienda que había encontrado de vuelta a la empresa de ingeniería y vendía maquinaria de construcción. Además, a su lado había un tractor con una capacidad de carga de 500 kilos y una función de descarga hidráulica en la parte trasera. Era la mejor combinación. En una esquina del patio, el carro que había estado trabajando de forma incansable hasta ese momento, los estaba vigilando. En ese momento, Kazura sintió que no iba a perder contra nadie. Había estado tan ocupado que llegó a dolerle la cabeza, pero ahora no le importaba. No sabía por qué, pero estaba emocionado. Cuando subió a la mini excavadora y arrancó el motor, accionó la palanca mientras leía las instrucciones del concesionario. Siguiendo las órdenes de Kazura, el brazo de la mini excavadora se movió con un gruñido. Con cuidado, lo metió en la montaña y lo retiró cargado de abono. Luego, manteniendo el brazo nivelado, giró el cuerpo y dejó caer el abono en la sección de carga del tractor. Perfecto. Hubo momentos en los que parte del abono se caía de la pala y otros en los que recogía poco abono, pero aunque le sucedían esas cosas, se alegraba. Podría transportarlo todo sin sobrecargar su cuerpo. Al darse cuenta de la realidad, Kazura empezó a temblar de emoción. Hasta hoy, nunca había apreciado tanto el poder de la ciencia. Sus ojos brillaban con fuerza. De esa manera, Kazura trabajó duro para manipular la mini excavadora por primera vez y transportar las cincuenta toneladas de abono a la aldea de Grisea. Cuando se dio cuenta ya eran más de las 4 de la tarde. Aunque sabía que le sería imposible llevar todas las mercancías antes de la caída de la noche, no había nadie que pudiera ayudarlo, ni aunque se echara a llorar. No tenía más remedio que seguir trabajando con los ojos en blanco y la boca entreabierta, mientras gruñía su resentimiento y soltaba maldiciones a medida que se iba agotando. Como el tractor no tenía una función de medición de peso, simplemente cargaba el abono hasta lo que imaginaba que era lo correcto. Pensaba que si intentaba cargar demasiado, terminaría derramándose durante el transporte. Cuando juzgó que había cargado una cantidad razonable, se bajó de la mini excavadora y se subió al tractor.
¡Bien! ¡A la aldea de Grisea! ¡No debo pensar en cuántos viajes me quedan!’ Kazura puso en marcha el motor y lo condujo hacia la residencia. Mientras el tractor hacía un fuerte estruendo, ascendió con suavidad por la pendiente. Había colocado una estera de hierro de la mansión como rampa. Debido a que el tractor de transporte era un modelo de oruga, el tractor avanzaba de forma constante sobre las planchas de hierro esparcidas por el suelo. No sabía quién o por qué motivo habían colocado las planchas de hierro por todo el suelo de la casa, pero estaba resultando extremadamente útil. Condujo el tractor y cruzó con éxito el umbral que llevaba hacia el otro mundo, apareciendo en el pasaje de piedra. Poco después, pasó al lado de la tumba y se dirigió a la arboleda. Después de conducir el ruidoso tractor dentro de la arboleda, el paisaje familiar de la aldea de Grisea le llamó la atención. Todos los aldeanos se habían reunido en la entrada a la arboleda; parecía que habían sido atraídos por el ruidoso motor del tractor. “¡Hola a todos! Hoy hace demasiado calor.” “Ka… ¡Kazura! ¿Qué es eso?” Los aldeanos estaban sorprendidos por la visión de Kazura levantando una mano saludándolos mientras operaba el tractor con la otra. Era una reacción natural. Hasta ahora, Kazura había transportado la mercancía mientras tiraba un carrito, pero hoy aparecía con un vehículo enorme que producía un estruendo poderoso. No era una exageración decir que los aldeanos estaban sorprendidos. “Ah, ¿esto? Es un vehículo fabricado y utilizado en el reino de Dios para transportar una gran cantidad de mercancías. Es realmente útil ya que puede cargar con muchas cosas al mismo tiempo. Voy a descargarlo, ¿podéis alejaros un poco?” Después de que los aldeanos se alejaran del tractor, Kazura inclinó la plataforma de carga desde el panel de mando y dejó caer el fertilizante al suelo. “Bueno, con esta cantidad de fertilizante, necesitaré hacer esto cien veces más. Ya que lo dejaré aquí, ¿puedo pediros que algunas personas se queden en este lugar y me ayuden?” “En… ¡Entendido!” “¡Kazura!” Justo cuando Kazura puso su mano en el volante para regresar a la mansión, Valetta llegó corriendo desde la aldea. Al igual que el resto de aldeanos, mostró una expresión de sorpresa cuando vio el tractor. Aunque había aprendido sobre la existencia de los automóviles de un libro que Kazura había traído de Japón, el impacto causado por ver una versión real, en vez de una fotografía, era enorme. “Señorita Valetta…” Al verla corriendo, la emoción que mostraba hasta ese momento se atenuó. Después de la situación que había vivido hacía dos días, no tenía ni idea sobre cómo reaccionar. Sin embargo, la expresión sombría que Valetta tenía en su rostro el día anterior por la mañana había desaparecido y volvía a su estado habitual. Detrás de Valetta estaba la chica a la que había pedido ayuda ayer. Cuando sus ojos se encontraron, la niña puso una sonrisa mientras asentía. No sabía cómo habían ido las conversaciones, pero parecía que había sido efectivo. “Kazura, eso es… ¿Fertilizante?” “Sí, vamos a llevarlo todo a Isteria. Creo que podremos restaurar la región devastada y volver a producir cereales. Por ahora he preparado cincuenta toneladas, así que debería funcionar.” “¿Cincuenta toneladas? Es mucho… Pero creo que hará falta mucha agua, ¿también vas a traer muchas norias?” “No. En este momento las norias se están produciendo en masa en Isteria. Después de dividir las partes en varios grupos diferentes, le ordené a un artesano de la ciudad que las hiciera.” Hacía unos días, cuando Kazura emitió una multitud de órdenes al grupo de Narson, también le pidió a Zirconia que hiciera los preparativos para fabricar todas las piezas necesarias. Si hacía lo que le había pedido, en este momento deberían estar comenzando a fabricar todas las piezas necesarias para la noria. “Producción en masa… Bueno, si movilizas a todos los artesanos de la ciudad, puedes hacer muchos molinos a la vez.” “Sí. Reutilicé los planos que usamos para crear la noria de la aldea, me ahorró muchos problemas.” Los dibujos que había entregado a Zirconia eran los planos de la ‘noria número dos’ que ya habían construido en la aldea de Grisea. Sabía que todos los materiales necesarios para fabricarla estaban disponibles en este mundo. Aunque nunca había planeado que esto sucediera de esta manera, estaba realmente contento de haber hecho una nueva noria para la aldea. “¿Qué pasa por el lado de Valetta? Parece que ya has comenzado el trabajo de construcción.” – dijo Kazura mientras volvía su mirada hacia el pueblo. No podía verlo bien por la distancia, pero había madera apilada en varias zonas de la aldea y ya se estaba comenzando a construir la empalizada y las torres de vigilancia. “Sí, con la ayuda de todo el pueblo hemos comenzado la construcción de lo que hablamos hace dos días. Primero planeamos construir una empalizada que rodeará todo el pueblo; luego levantaremos la torre de vigilancia.” “Ya veo. Hmm… Ah, también he preparado un poco de lima. La traeré después. Creo que será suficiente porque son unas dos toneladas…” “¡Muchas gracias! Si la tenemos, ¡creo que estará bien!” Kazura se sintió aliviado dentro de su corazón cuando vio que volvía a su actitud animada habitual. Había quedado bastante preocupado al descubrir que Valetta estaba deprimida todo el tiempo. Peor aún, pensaba que podía haberla lastimado por culpa de sus acciones. Aunque, de hecho, hacía dos días, Kazura no había hecho nada para lastimar sus sentimientos. “Por favor, dime si necesitas algo más… Volveré para transportar el resto de mercancías.” – dijo mientras le daba una sonrisa a Valetta. A continuación, regresó a la mansión de Japón.
* * *
Mientras Kazura transportaba los fertilizantes desde Japón, un gran grupo de carruajes y carretas llegó a la entrada de la aldea de Grisea. Así era la formación del ejército popular en este mundo. Una fuerza compuesta completamente de caballería como la que había acompañado a Kazura el día anterior era una vista inusual. El grupo iba encabezado por Zirconia y estaba compuesto por casi doscientos guardias. La mayoría se trataba de infantería pesada y el resto eran tropas montadas que usaban para explorar. Esta era la composición regular de un ejército en este mundo. La composición del regimiento que había acompañado a Kazura hacía unos días era extremadamente rara. Zirconia no llevaba la ropa suelta que usaba cuando estaba en la mansión, sino que estaba vestida con una armadura de bronce y llevaba un escudo redondo a la espalda. Además iba armada con una espada corta y una espada larga en la cintura, al igual que el resto de soldados. En contraste con la impresión gentil que solía tener, ahora tenía una apariencia mucho más digna. “Bienvenida, señora Zirconia. Debe estar cansada por la marcha. Aquí tiene el símbolo de mando.” “Gracias por su arduo trabajo… Hmm, ¿qué es ese sonido?” – preguntó Zirconia dirigiendo sus ojos hacia la aldea de Grisea mientras recibía el símbolo de mando de Isaac. Había algún tipo de sonido extraño que llegaba desde la aldea. Era el estruendo creado por el motor del tractor de Kazura. “Empezó a sonar hace un rato… Pero no sabía si debía entrar a la aldea sin el permiso de Kazura, por lo que me quedé observando la situación.” “Ah, sí. Pero, ¿hay algún problema por entrar al pueblo? Se nos dijo que podíamos continuar gobernando el pueblo. Sin embargo, creo que será mejor que cualquiera que no sepa sobre ‘ese asunto’ tenga prohibido ingresar a la aldea.” “Yo… Ya veo. Entendido, iré al pueblo y volveré después de preguntar sobre ese asunto.” – dijo Isaac tras pensar qué hacer por un momento, mientras asentía. Parecía que Isaac era similar a Kazura en su tendencia de prestar demasiada atención a las cosas. Por cierto, ‘ese asunto’ que mencionaba Zirconia era el hecho de que ‘Kazura era Greisior’. “Te lo encargo. Además, he traído los sacos que Kazura ordenó preparar. Están en ese carro, llévalo contigo.” “Sí, señora.” – contestó Isaac haciendo una pequeña reverencia. Luego corrió hacia el carro que Zirconia le había señalado. Después de confirmar que Isaac se había llevado el carro, ordenó a sus tropas que preparasen el campamento. Tras recibir la orden, los soldados y sus seguidores comenzaron a hacerlo a toda velocidad. Los soldados que ya estaban acampados ante la aldea de Grisea también se apresuraron a acercarse al grupo que acababa de llegar y comenzaron a ayudarlos con los preparativos. “Otis.” “¡Señora!” – contestó. Se trataba de uno de los guardias que hacía de escolta y corrió hacia Zirconia cuando escuchó su nombre. “¿Puedes llevarme a donde fueron enterrados los cadáveres de los bandidos?” “El lugar donde fueron enterrados… ¿Señora?” – respondió Otis al escuchar esa orden. Estaba cuestionando de forma inconsciente a Zirconia. Otis se encontraba con los aldeanos cuando enterraron los cadáveres de los bandidos después de escuchar el informe de Varin, por lo que conocía su ubicación. Sin embargo, no comprendía lo que Zirconia quería hacer en ese lugar. “Sí. ¿Conoces su ubicación?” “Lo sé, señora. Pero ir a un lugar así… No puede ser.” Otis tragó saliva involuntariamente. Se acababa de imaginar una escena horrible en su mente. “¿No está claro? Vamos a desenterrar los cuerpos.” – añadió Zirconia mirándolo, confirmando la peor expectativa del soldado.

jueves, 6 de febrero de 2020

TBATE Capítulo 47

Capítulo 47
Atención
Traducido por Ricard2H20
Corregido por DaniR
Editado por Tars

No podía ayudarlo, pero le di una palmadita a Elijah en el hombro; parecía como si su alma estuviera a punto de escapar de su boca. Había oscuridad debajo de sus ojos sin vida y sus mejillas hundidas lo hacían parecer como un esqueleto vacío. “Ahh, ahh...” Elijah suspiraba. Hasta Sylvie se compadecía de él mientras saltaba de mi cabeza y aterrizaba sobre la suya, mordiéndole la coronilla de la cabeza para volverlo a despertar. Sus ojos cadavéricos se clavaron en mí mientras giraba su cabeza. “No es justo…” – murmuró. “¿Qué?” Me tuve que inclinar aún más cerca de él para escuchar lo que casi estaba susurrando. A su vez, él se inclinó, acercándose, y sus labios casi tocaban mis oídos. “¡NO ES JUSTO, MALDITA SEA!” “¡AHH!” Salté sorprendido mientras mis oídos empezaban resonar. “¿¡Qué demonios!? ¡No grites en mi oído!” Moví el meñique en mi canal auditivo para limpiar la saliva perdida que había sido lanzada dentro por mi amargado amigo. “Apariencia, talento... ¡Hasta suerte con las chicas! ¿Por qué lo tienes todo?” Puso ambas manos en mi brazo y empezó a concentrarse. Confundido por su acción aparentemente aleatoria, le pregunté: “¿Qué estás haciendo?” “Tratando de ver si puedo absorber algo de tu Arthuridad.” – murmuró mientras seguía concentrándose. “¿Eres tonto?” Moví la cabeza mientras apartaba sus manos fuera de mí.
* * *
Íbamos de camino al comedor, que se encontraba un poco más abajo de los dormitorios. Le expliqué brevemente a Elijah sobre cómo había conocido a Tess (realmente odia que la llame así) dentro del Bosque Elshire. Todo el tiempo que estuve contándole la historia, ya fuera cuando vivía dentro del castillo del Reino de Elenoir con Tess o aprendiendo manipulación de mana de su abuelo, casi podía ver mis palabras atravesarlo mientras su vida se le iba drenando. “¿Sabes lo atractivas que son las enanas, Art?” – dijo Elijah mientras se inclinaba un poco acercándose, buscando consuelo mientras los dos seguimos caminando. “C… ¿Cuánto?” Despegué de nuevo mi cabeza de la de mi compañero demasiado emocional. “ESO-NO-ES-TODO.” – dice con naturalidad. – “El sentido de la belleza que tienen los enanos es todo lo contrario al de los humanos, ¡Art! Puede que haya sido criado en su reino, pero nunca podría llegar el día en que pueda empatizar con su definición de ‘atractivo’.” Me río de esto porque casi puedo imaginar cómo se vería una mujer atractiva para los enanos, pero le pregunto de todas formas: “¡Ja, ja! Explícame lo devastadora que ha sido tu vida.” “Cuando tenía ocho años, mi abuelo, el anciano que me cuidó, me presentó a quién él esperaba podría ser mi futura esposa. Toda la semana anterior, él decía y decía sobre cuán hermosa y elegante era ella. Cuando apareció, juro que pensé que estaba viendo a un hombre, Art.” Su cuerpo temblaba con la idea de recordar su pesadilla anterior. “Su nombre era Helgarth y juro que me hizo temer por mi castidad. Su mandíbula cuadrada, sus extremidades venosas al igual que un tronco, su nariz larga y gruesa… Tenía b-bigote en su labio superior, Art. ¡Tenía bello facial a la edad de nueve años, Art!” Elijah estaba sacudiéndome en este punto, y yo no podía parar de reírme. “¡Está bien, está bien, lo entiendo! Eras un niño muy deprimido que comenzó a pasar por la pubertad demasiado pronto para su edad.” Me encogí de hombros mientras trataba de calmar mi ataque de risa. “Has pasado la infancia rodeado de mujeres masculinas que iban presumiendo de sus abultados brazos y mira ahora cómo te giras cuando ves chicas normales.” Elijah sacudió la cabeza y recuperó su gesto taciturno. “Bueno… Estás en la escuela más prestigiosa estudiando para Mago de Batalla, y lo más probable es que te encuentras al menos una etapa completa por delante de cualquiera de nuestra clase, así que limítate a demostrar tus habilidades. Estás obligado a derribar a alguien, de algún modo.” – le digo con optimismo. “Tu compasión me está lastimando.” Agarró exageradamente su pecho, haciéndonos reír a los dos. “Personalmente, me gusta más tu nuevo uniforme.” – menciona Elijah mientras me estudia. – “Te hace parecer más fuerte e inaccesible, de algún modo.” Asiente de acuerdo con su propia declaración. El nuevo uniforme que había recibido de la Directora Cynthia no era muy diferente en términos de apariencia de mi uniforme de mago escolar. Estaba compuesto por una camisa de vestir blanca, con una simple franja negra en medio del brazo, arriba de los codos, y un chaleco gris claro. Los dos, el chaleco nuevo y los pantalones de color gris oscuro, habían sido fabricados en diferentes materiales, aunque llevaban grabados especiales en el interior; eso me hacía sospechar que tenían atributos de protección. En vez del reloj de bolsillo, en la parte del pecho contaba con una correa que me cruzaba el torso y se ajustaba alrededor de mi hombro, sosteniendo un cuchillo plateado que quedaba enfundado sobre mi corazón. Miré hacia abajo y dejé salir un suspiro. Tenía que admitir que el uniforme se veía bien, pero no me gustaban las ropas llamativas como esta. También había una prenda de abrigo que suponía que recibiría más tarde, cuando estuviera lista para mí. “Entonces, ¿qué vas a hacer respecto al Comité Disciplinario?” – me preguntó Elijah con un tono un poco más serio. Incliné la cabeza, sin saber lo que estaba insinuando. “¿Qué quieres decir?” Encogiéndose de hombros, miró hacia adelante, dándose cuenta que ya estábamos en el comedor. “Quiero decir, ya sé que ya eres parte de este nuevo comité y todo, pero, ¿en realidad lo tomarás seriamente y esas cosas? Tiene la pinta de suponer mucho trabajo.” Cierto. La Directora quería que fuera parte de este nuevo Comité, pero realmente no había especificado qué tenía que hacer exactamente. “Intentaré dar lo mejor de mí. También podría darlo todo, ya que he decidido continuar adelante con esto, ¿verdad? Además, Ellie asistirá a esta academia en algunos años. Necesito hacer lo mejor que pueda para allanarle un camino. Cuando venga, le será más fácil.” Abrí la puerta y fuimos recibidos por las indistinguibles conversaciones de los estudiantes y el aroma de lo que se estaba sirviendo esa noche en el comedor. Cuando entramos el salón quedó en silencio. Podía sentir las miradas fijas de los estudiantes mientras nos estudiaban. Ignorando las miradas asesinas y las ocasionales miradas curiosas, nos dirigimos hasta la fila y conseguimos nuestra comida, ubicándonos en una de las esquinas del comedor. “Parece que ya eres popular, Art.” Elijah sonreía de satisfacción mientras cogía un trozo de carne asada con su tenedor. “¿Qué puedo decir?” Arrogante, le doy una sacudida de cabello y los dos comenzamos a reír. “¡Ah! ¡No olvides que mañana es el día en el que se presentan los clubes!” Dejé escapar un suspiro por eso. “Oh, sí… Mañana tengo que ir al auditorio bastante temprano. El Comité Disciplinario se anunciará oficialmente antes de que comiencen las presentaciones de clubes.” Jugué un poco con mis verduras antes de tratar de dárselas a Sylvie, que inmediatamente las rechazó. La Directora Cynthia me había dejado una nota con un par de instrucciones junto con el nuevo uniforme. “¡Eso significa que te encontrarás con el resto del Comité Disciplinario! Qué interesante. Despiértame antes de irte entonces.” “Lo haré.” Tomé un trozo de carne asada para mí, pero Sylvie me la robó antes de que llegara a mi boca. Conversamos sobre a qué club debería unirse Elijah y qué clases teníamos. El Comité Disciplinario se reunía todas las mañanas, lo que me molestaba. Al parecer, finalmente tendré que romper mis pésimos hábitos de sueño. Además de eso, mi horario de clases diario consistía en: ‘Fundamentos de la Teoría del Maná’, ‘Manipulación Práctica del Maná’ y ‘Conceptos Básicos de Artificialización’. Después del almuerzo era cuando mis clases de división superior comenzaban. Esas clases eran ‘Teoría de la Desviación Mágica I’, ‘Mecánica de Lucha en Equipo I’, y ‘Formaciones de hechizo I’. Durante el semestre de otoño había muchas más clases de división superior para los estudiantes a Mago de Batalla, mientras que durante el semestre de primavera, las clases consistían en una variedad más amplia para los estudiantes a Mago Académico. La mayoría de los estudiantes solamente asistían a unas tres o cuatro clases en un semestre, pero esencialmente estaba con una carga doble de clases. Mi última clase terminaba a las siete de la noche, no me dejaba nada de tiempo para los clubes. En cuanto a Elijah, solamente teníamos ‘Fundamentos de la Teoría de Maná’ juntos; sus otras clases estaban compuestas por ‘Lanzamientos Encadenados’ y ‘Utilización de Maná I’. Los clubes orientados a estudiantes de la división superior se reunían antes de almuerzo, ya que todas sus clases eran por la noche, y viceversa para los estudiantes de primer año. “Tal vez debería unirme a un club de pelea cuerpo a cuerpo. He escuchado que cada vez más conjuradores están intentando convertirse en por lo menos un poco versados en lucha a corta distancia, por si acaso.” – reflexionó mientras metía otro pedazo de carne en su boca. “Mmm, sí, he oído hablar de eso a mi padre. Él ha sido quien me ha dicho que hay algunos conjuradores que quieren ser reclutados para aprender a pelear a corto alcance, aunque no sé exactamente cómo funcionaría eso.” Me preguntaba por qué no me sentía lleno aunque mi plato estaba vacío, pero luego me di cuenta de que casi no había comido nada de la carne gracias a Sylvie, que lanzó un ‘Kyu~’ de satisfacción en lo más alto de mi cabeza. Durante nuestra comida, los dos pudimos darnos cuenta que la gente estaba conversando sobre nosotros, parecía como si personas al azar nos dispararan de vez en cuando. Sin embargo, en realidad, hasta ahora ninguno de ellos se nos había acercado. Un grupo de estudiantes, todos con uniformes de Magos de Batalla, se acercaron a nuestra mesa. Actuaban como si yo no existiera por completo. El líder del grupo, un hombre alto con cabello ondulado castaño que llevaba partido por la mitad, le tendió la mano a Elijah. “Mi nombre es Charles Ravenpor, el segundo en nacer de la famosa familia Ravenpor. Estoy seguro de que has oído hablar de ella, ¿verdad? No he podido evitar notar que pasas tiempo con alguien por debajo de ti, como ese estudiante a Mago Académico. Estoy siendo especialmente cortés hoy al permitirte entrar en nuestro grupo.” Su barbilla sobresalía, convencido de que Elijah tomaría su mano. “Deberías sentirte honrado de ser parte del grupo Ravenpor.” – repitió uno de los seguidores de la parte de atrás. “¿La familia Ravenpopó, qué? Nunca he escuchado de una familia que se llame así; me recuerda a la cagada de un pájaro.” Elijah me lanzó una mirada desorientada, haciéndome reír por la nariz y continuó hablando. “No, pero me sentiría muy avergonzado de pertenecer a una familia como la Ravenpopó, aunque supiera de ellos.” Intenté disimular mi sonrisa mientras seguía el juego de este intercambio inmaduro. Algunos de los estudiantes cercanos que estaban escuchando nuestra conversación comenzaron a reírse. “T-tú… ¿Cómo te atreves a burlarte de una prestigiosa familia como la casa Raven-POR?” Charles golpeó su puño en nuestra mesa, enfatizando en el nombre de su casa, lo cual los hizo reír aún más. “¡Soy un estudiante de segundo año al que deberías mostrar respeto! Me he acercado a ti, un novato, porque no quería que un estudiante de Mago de Batalla se rebajara estando con un Mago Académico. ¿Y tú a cambio me escupes en la cara de esta manera?” Su mano ya estaba moviéndose para alcanzar la varita que llevaba colgada de la pierna derecha. Elijah lo miró fijamente a los ojos y refutó: “Antes que nada, es un estudiante de la ESCUELA DE MAGIA. Arthur es tan mago como cualquier estudiante a Mago de Batalla. Segundo, ¿por qué debería irme con alguien que descaradamente mira por encima del hombro a mi mejor amigo y compañero de cuarto? Tercero, es obvio que no estás aquí por amabilidad hacia mí, sino que estás debido a tu enemistad hacia Arthur, así que deja tu espectáculo infantil y lárgate.” Tengo que admitir que cuando mi amigo ponía esa expresión seria, junto con sus rasgos afilados, se ve bastante aterrador. Realizar un duelo mágico dentro de una instalación no destinada para las batallas estaba prohibido, por lo que usar magia dentro del comedor podría terminar en un gran castigo, pero esto no parecía detener al señor Ravenpor en ese momento. El viento se estaba reuniendo a su alrededor mientras luchaba por mantener su ira bajo control. “¡Jack!” – berreó mientras el viento se establecía a su alrededor, llamando a uno de sus secuaces. Un niño que tenía una cara cercana a los trece, pero un cuerpo que parecía demasiado grande para su edad, caminó al frente desde atrás. “Muéstrale a esos mocosos cómo hacemos las cosas por aquí.” – ladró dando un paso hacia atrás. Jack parecía un poco indeciso, pero Charles rugió diciendo que sería compensado adecuadamente. Esto hizo que Jack revelara una sonrisa maliciosa mientras se ajustaba un guante con garras sobre sus puños. “¡Qué pena por ti!” Simplemente sonrió, crujiendo su cuello antes de partir la mesa por la mitad. El comedor se revolucionó y todos los estudiantes se reunieron alrededor, algunos subidos sobre las mesas para tener una mejor vista. Elijah protegió su cara por la sorpresa mientras la mesa se partía en pedazos, pero yo permanecí imperturbable, con mis piernas cruzadas al tiempo que tomaba un sorbo de la taza con agua que sostenía mientras Sylvie todavía estaba durmiendo. “¡Estás loco! ¡Esta es una instalación del comedor!” – gritó Elijah mientras se ponía de pie para enfrentarse con Jack, quien chasqueaba sus puños con garras. “No importa. El jefe se encargará de todos modos. Ahora mantén apretados tus dientes.” Sonreía mientras su puño derecho brillaba de maná sin atributo. Se trataba de un estudiante de segundo año, como se podía observar por las dos franjas de su corbata negra, pero incluso sin un atributo, su núcleo ya estaba en naranja oscuro que, para su edad, era endemoniadamente bueno. La mano derecha de Elijah brillaba, y sus dos anillos resplandecieron con un amarillo tenue mientras el preparaba un hechizo, pero ya me había dado cuenta que la lamentable intención de matar de Jack iba dirigida hacia mí, no hacia mi amigo. Ni siquiera levanté la vista y me preparé para resolver esto rápidamente, pero una vez más, antes de tener la oportunidad de hacer algo, unas enredaderas salieron disparadas del suelo y se envolvieron firmemente alrededor de Jack.



Survival Capítulo 42

1ª parte: Juego de Supervivencia
Capítulo 42
Enfrentamiento II
Traducido por Tars
Corregido por Lord
Editado por Tars

Yohan les contó sobre los actos de brutalidad de los moteros y las amenazas que habían hecho. Les dijo que su grupo tenía alrededor de 40 personas. Seo Jun y el anciano Park estaban conmocionados. Habían tenido la impresión de que su estilo de vida estaba mejorando. Sin embargo, el enemigo tenía más personas que sus dos campamentos juntos. Si solo contaban a las personas que realmente podrían pelear, ni siquiera tendrían la mitad de sus números. “No estoy seguro de dónde son, pero esos bastardos han estado conduciendo alrededor del centro comercial y matando a cualquiera que encuentren.” “¿Por qué harían tal cosa?” “No sé cuáles son sus objetivos, pero… Creo que solo quieren matar y cometer actos de violencia en lugar de reunir suministros e intentar sobrevivir.” “De ninguna manera…” Yohan no pensó que los moteros al principio andaban matando gente. Era posible que en algún momento fueran supervivientes comunes que solo pensaban en seguir viviendo. Algo tuvo que desencadenar su conducta y llevarlos por un camino de violencia. Sin el gobierno o el ejército para detenerlos, era fácil perder de vista a la humanidad después de probar la violencia. Si ese grupo no era suprimido desde el principio, continuarían haciendo cosas aún peores. La emoción de la violencia convertida en una adicción. “Yohan, ¿qué debemos hacer? Estoy seguro de que tienes una razón para llamarnos a esta reunión.” – preguntó el anciano Park con calma. Estaba más compuesto que Seo Jun, quien estaba claramente conmocionado por la noticia. “En realidad estamos bastante bien armados. Podemos soportar las amenazas ordinarias. También tenemos suficientes suministros para esperar y no tener que actuar por nuestra cuenta. Pero…” – Yohan respiró hondo. – “No tenemos experiencia matando a otras personas. Aunque hemos matado a muchos zombis, el homicidio es un asunto completamente diferente. Solo podemos luchar contra el enemigo si tenemos la determinación de matarlo. Los enemigos son humanos, pero, al mismo tiempo, no son humanos. En el momento en que dudemos en matarlos, nos matarán con sus cuchillos.” Se hizo el silencio en la sala. “La razón por la que solicité esta reunión fue para pedirles a todos que se prepararan para la próxima batalla.” El silencio se sintió más pesado que la misma gravedad. “Por favor, prepárense para matar. Esto va incluso para aquellos que no están en esta sala en este momento.” Probablemente, el equipo de reconocimiento ya se había preparado mentalmente para eso, ya había visto y experimentado la situación anterior. Sin embargo, era diferente para las personas que se habían quedado dentro de los límites del campamento. Los únicos enemigos que tenían eran los zombis, el hambre y la supervivencia. Pedirles que mataran gente era demasiado. Yohan necesitaba el apoyo y la cooperación de los encargados. Mientras el equipo de reconocimiento se aventuraba al exterior, los encargados se habían ganado la confianza de los supervivientes que había dentro del campamento. Como Yohan no podía obligar a todos a estar de su lado ante cualquier situación, tenía que confiar en los cargos intermedios y en su capacidad para convencer a los demás. “Si vamos a tratar de convencer a la gente, probablemente debería comenzar a usar de nuevo un arma. Ni siquiera recuerdo cuánto tiempo ha pasado desde que serví en la defensa civil.” – dijo el anciano Park entre dientes. “Me preguntaba por qué estabas entregando armas. Así que este era tu plan.” – añadió Seo Jun. No era la respuesta que Yohan esperaba. Había pensado que sugerirían hablar primero con los moteros o se opondrían directamente a la idea de matar a otras personas. Antes de que Yohan pudiera decir algo, Seo Jun hizo otro comentario. “Ei Yohan, relájate. ¿Por qué tienes una expresión tan seria?” “¿Eh?” “No es que vayamos a ir a cazarlos y matarlos. Estamos defendiendo nuestro campamento contra invasores. ¿Pensaste que nos opondríamos a esto? ¿Creías que nos rendiríamos sin pelear?” – dijo Seo arrancando una hoja del cuaderno que siempre llevaba consigo. – “Sabemos que nuestras vidas son preciosas. Es cierto que durante un tiempo vivimos una vida lamentable, pero hemos cambiado. Lo que intento decir es…” Seo Jun le entregó el trozo de papel y Yohan lo miró. Era una lista.

Reglas del campamento.
1. Los supervivientes infectados deberán ser asesinados.
2. La violación, la violencia, el asesinato o cualquier otro acto de violencia hacia un compañero superviviente están prohibidos.
3. Las acciones para protegerse se considerarán defensa propia.
4. Las acciones contra personas externas se considerarán en defensa propia, ya que su amenaza no se puede confirmar.
5. Cualquier extraño que pueda causar problemas al campamento en el futuro deberá ser asesinado.
6. Los suministros esenciales se gestionarán como un grupo.
7. Aquellos que no contribuyan no recibirán suministros.
8. Aquellos con mejores habilidades o actuaciones excelentes obtendrán raciones más grandes.
“Esto es…” Eran las reglas que Yohan ideó e impuso a todo el grupo cuando establecieron el campamento en el centro comercial. “¿Por qué tienes esto?” “Le entrego esto a todas las personas en el campamento. Les dije que lo mantuvieran siempre a su lado.” – dijo Seo Jun con una sonrisa. A continuación, tomó el trozo de papel de la mano de Yohan y se lo metió en el bolsillo. – “Recuérdalo bien.” Yohan se tambaleó. Había estado menospreciando al grupo, pensando que eran incompetentes. A pesar de reconocer el hecho de que estaban creciendo, todavía no les estaba dando suficiente crédito. “Jung Hwan, diles a todos que entren.” – solicitó Seo Jun. Jung abrió la puerta de la sala de reuniones y, al otro lado, vieron a gente escuchando a escondidas. Se sorprendieron al ver que la puerta que se abría de golpe y se dispersaron rápidamente. “Todos por favor entren.” Los seis miembros del campamento que aún no estaban en la sala entraron tímidamente. “Honestamente, ya conocíamos la situación. Jung Hwan nos lo contó.” “¿Es así?” “Sí. Así que deja de tratarnos como niños y guíanos, líder.” – dijo Seo Jun en voz baja, actuando como el representante de todos los miembros del campamento. – “Porque confiamos en ti.” Los sentimientos de Yohan eran complicados cuando vio que los miembros del campamento lo miraban con expectativa.
* * *
Después de la larga reunión, Yohan estaba estudiando los mapas del centro comercial y de la ciudad en su habitación. Repasó varios posibles escenarios varias veces, tratando de predecir su comportamiento y las posibles variables. A medida que pasaba por los peores escenarios, le venían a la mente resultados complicados e inesperados. A pesar de experimentar un dolor de cabeza que le hizo sentir que su cerebro iba a explotar, Yohan se obligó a seguir haciendo planes. Pudo sobrevivir durante tanto tiempo debido a ese esfuerzo implacable, considerando todas las variables y escenarios posibles una y otra vez. Tenía más experiencia que otros, así como un sentido de intuición que venía con el conocimiento que había adquirido en la línea de tiempo anterior. Si bien estaba por encima del promedio en atletismo y poseía un tiro decente, no era como el protagonista de una película con superpoderes o una inteligencia extrema. Sin embargo, su impulso por sobrevivir era mayor que el de otros y mantenía su cuerpo en movimiento incluso en circunstancias extremas. A menudo se consolaba diciéndose que era la única opción que tenía para seguir vivo. Yohan dejó escapar un profundo suspiro. La información incompleta y las variables desconocidas estaban arruinando sus pensamientos, creando un caos en su cabeza. ‘¿Atacarán esos bastardos el campamento? Si es así, ¿cuándo? ¿De qué manera? ¿Qué tan peligroso será?’ Aunque el campamento estaba bien preparado y tenía una ventaja en cuanto al armamento, Yohan se sintió ansioso. Intentaba ver si había algo que se había perdido. No pudo evitar sentir que algo estaba fuera de lugar, pero no pudo precisar qué era. ‘¿Por qué andan por ahí matando gente?’ - Es su idea de diversión. ‘¿Cómo trasladan a la gente?’ - Buscan supervivientes por adelantado y, después de explorar alrededor del campamento y obtener información, los derriban de un solo golpe. ‘¿Por qué recopilan información primero y no atacan de inmediato?’ - Si lo vemos desde su punto de vista, lo más probable es que necesiten prepararse. Sin embargo, también podría ser que quieran verificar primero los alrededores. ‘¿Por qué esos bastardos no se establecen en un lugar y siguen moviéndose?’ Yohan hizo una pausa. Por mucho que lo pensara, no podía responder a esa pregunta. Intento pensar en algo, pero sus acciones no tenían sentido. ‘¿Se movían para intentar encontrar gente? No. Incluso entonces, crear un campamento y luego ir a matar gente sería más seguro, especialmente con sus números. Pero si acamparan, no habrían sobrevivido a una oleada zombi. Espera un minuto… No puede ser…’ El tren de pensamiento de Yohan llego a una nueva hipótesis. Sabían sobre las olas de zombis. Inmediatamente, sacudió la cabeza. ‘Solo han pasado seis meses. No tiene sentido. Incluso solo descubrí las reglas de oro para sobrevivir a las oleadas de zombis después de un año y medio y tras perder muchos campamentos. No había forma de que pudieran haberlo resuelto tras solo seis meses.’ Se le puso la piel de gallina, pero no sabía por qué. “¡Yohan!” “¡Ah! Me asustaste.” Todavía estaba concentrado en sus pensamientos, tratando de calmarse, cuando Saeri irrumpió en su habitación. “Nunca te había visto tan descompuesto como ahora.” “¿Qué pasa?” “Ji Hye hizo una merienda. Dijo que vinieras a comer.” “Estoy bien.” “Por dios, no seas así. Ven a comer. Si no lo haces, Ji Hye estará decepcionada.” Yohan intentó sacudirla como una mosca molesta. Saeri acercó una silla y se sentó a su lado. Ella no iba a rendirse con tanta facilidad. “Yohan, ¿Sabes qué tipo de persona eres?” Yohan no respondió. “Todo lo que haces es trabajar. Eres un adicto al trabajo. Nunca te he visto tomar un descanso.” “Te lo dije, estoy bien.” “Debes descansar tanto como entrenas. Eso es lo que dijiste.” ‘Siempre elige los peores momentos para tener razón.’ Yohan dejó escapar un profundo suspiro. “¿Qué tipo de merienda?” “¡Tortitas de patata!” “No me gustan las patatas. Saben mal.” “……” “Descansaré, ¿puedes irte?” Saeri hinchó las mejillas. Con una expresión juguetona, se acercó a Yohan y apoyó la cabeza sobre sus manos. “¿Qué hay de mí?” La forma en que trató de ser coqueta y movió sus pestañas la hizo parecer ridícula. “Me niego. Solo haces eso cuando estoy descansando. Sé honesto, no quieres que descanse.” “Dios, eso es duro.” “Y deja de hacer insinuaciones sexuales.” “¿Por qué? ¿No te gusta?” – preguntó Saeri abriendo los ojos y parpadeando. Yohan percibió un perfume afrutado y frunció el ceño. Él la empujó lejos. “Dios, cometí un error por no darte una lección el primer día.” “Es tu culpa por darme falsas esperanzas.” No tenía sentido repetirlo. “Vamos. Vamos a conseguir algunas tortitas de patata.” “¿Pensé que habías dicho que no te gustaban las patatas?” “¿De qué estás hablando? Las patatas son deliciosas. No es bueno ser quisquilloso.” La silla de Yohan chirrió cuando la empujó hacia atrás para ponerse de pie. Al verlo irse, Saeri se burló y sacó la lengua. Yohan tenía unas tortitas de patatas en un cuenco y las estaba masticando mientras se dirigía hacia la azotea. Una vez que llegó allí, pudo ver la ciudad de color gris y sentir la brisa del verano. Al principio, el área estaba vacía y sombría. Pero a medida que quemaban más cadáveres de zombis, la cantidad de cenizas y polvo en la zona aumentó, haciendo que el aire fuera turbio. Yohan miró a su alrededor con unos prismáticos. Después de una hora, los moteros que estaba siguiendo desaparecieron repentinamente. Habían desaparecido en un lugar que estaba a unos veinte minutos del centro comercial. Continuaron apareciendo y desapareciendo esporádicamente. Definitivamente estaban dando vueltas alrededor de su campamento. Yohan continuó observando hasta que el sol comenzó a ponerse detrás de unas nubes. El cielo gris se volvió rojizo. Y luego, cuando el cielo pasó a un color naranja, Yohan perdió todos los signos de los moteros. Ni siquiera cuando ya estaba todo oscuro fue capaz de verlos. El último lugar que miró fue la Escuela Primaria Gyenam, que estaba a unos diez minutos del centro comercial y el campamento del hospital. El instinto de Yohan le decía que la batalla estaba a punto de suceder. ‘Será esta noche.



Survival Capítulo 41

1ª parte: Juego de Supervivencia
Capítulo 41
Enfrentamiento I
Traducido por Tars
Corregido por Lord
Editado por Tars

Barrendero escuchó voces detrás de una puerta y se inclinó para escuchar. “¿Qué pasó?” “Hace unos días, algunas personas aterradoras en motocicletas… Entraron y… Comenzaron a matar… A los maestros y los soldados…” “¿De repente? ¿Sin ningún propósito?” “No lo sé. Ellos… cuando el capitán Dong les dijo que eran intrusos y los bloquearon sacaron cuchillos de repente y…” La chica que estaba hablando se detuvo y comenzó a llorar. Sus sollozos eran contagiosos y poco después el resto de niños la acompañaban. “La gente empezó a correr. Comenzaron a matar gente y a arrancar la ropa a las chicas…” Los niños habían presenciado y experimentado cosas que no deberían pasar con su edad. Pero ahora vivían en un mundo cruel. Era desagradable. “Sniff, cuando todas las personas en la carpa murieron, intentaron entrar en el aula, así que nos escondimos, pero… Estábamos tan asustados…” Mientras los estudiantes continuaban hablando, Barrendero lentamente salió del aula y encendió un cigarrillo. Hace solo unos meses, estos niños se dedicaban exclusivamente a hacer recuerdos. Sin embargo, ahora esos preciosos momentos fueron contaminados por este mundo feo y horrible. No podía imaginar las cosas que habían experimentado hasta este momento y lo que experimentarían en el futuro. “Ah, qué manera de arruinar mi buen humor.” Barrendero se apoyó en la pared y fumó cinco cigarrillos de forma consecutiva. Un zombi notó el humo y corrió hacia él. Barrendero apuñaló furiosamente la cabeza del zombi. Al final, presionó el botón de su radio para llamar a Yohan. “Jefe, soy yo.” Después de un momento de silencio, llegó una respuesta. - Te escucho. “¿Lo has comprobado?” - Si. Esos bastardos también marcaron nuestro muro. “Malditos bastardos. ¿Hay algún lugar que no hayan marcado?” - ¿Cómo están las cosas por ahí? “Es un refugio temporal que los soldados están vigilando.” – Barrendero hizo una pausa por un momento, ya que hubo algunos ruidos de estática. Era complicado explicarlo todo en detalle, por lo que solo compartió la información más importante. – “Los soldados protegen a los estudiantes. No son una amenaza.” - Ya veo. La respuesta de Yohan fue corta. Era incómodo tener una larga conversación por radio, pero parecía que ya lo había comprendido. “Creo que fueron atacados. Esos bastardos también vinieron aquí.” - “……” “¿Qué debemos hacer?” - ¿Qué sugieres? “Bueno, por mí, haré lo que el jefe decida.” - La persona que ha presenciado la escena debería tomar las decisiones. Barrendero guardó silencio durante un largo momento, por lo que Yohan continuó hablando. - Tú decides. Puedes volver solo, matarlos o traerlos. “Entendido.” Al final, Barrendero decidió vigilarlos un poco más y volvió a entrar. De todos modos, ya era demasiado tarde como para hacer algo. Comió algunas de las raciones que trajo consigo y se dirigió al tejado. Quería estar atento para ver si los moteros todavía estaban cerca. Mientras se ponía el sol, contempló el paisaje muerto de la ciudad. Después de terminar su cigarrillo, se dirigió hacia abajo para encontrar un lugar donde dormir por la noche. Había colillas de cigarrillos por toda la zona en la que había estaba sentado. Se movió sigilosamente por la escuela y encontró un aula que no estaba demasiado lejos, ni demasiado cerca, de donde se encontraban los estudiantes y los soldados. Barrendero se colocó dentro de un armario de acero que se utilizaba para almacenar productos de limpieza. Puso algunas sábanas adentro, para convertirla en una cama. Cuando andaba solo, solía hacer camas como esa. Con la puerta del armario cerrada, estaba completamente oscuro. No sabía cuánto tiempo había pasado, pero fue despertado por la luz del sol que brillaba a través de los agujeros del armario. Parecía que era por la mañana. Barrendero se frotó los ojos y, lentamente, abrió un poco la puerta del armario. Sin embargo, cuando se movió, hizo un sonido más fuerte de lo esperado. El ruido lo hizo estremecerse. Justo entonces, escuchó algunos susurros cercanos y se giró para mirar de dónde provenía el sonido. Justo delante, había dos alumnas, mirándolo con los ojos muy abiertos. Estaban en medio de cambiarse de ropa y se encontraban medio desnudas. Barrendero parpadeó. “Guau, esta es de verdad una buena vista.” – dijo sin darse cuenta. Había expresado sus pensamientos en voz alta. Las estudiantes parecían que iban a gritar en cualquier momento y Barrendero les dio una sonrisa respetuosa e intentó pedirles un favor a las chicas. “Lo siento señoritas. Me iré en silencio, así que si pudieran no…” “¡Ahhhhh!” Las estudiantes gritaron en voz alta. “Maldición…” Eran demasiado ruidosas. De inmediato Barrendero se levantó y las chicas se cayeron al retroceder. Las cosas se volvieron más caóticas cuando las mesas y las sillas cayeron, creando un barullo enorme. No mucho después, se pudo escuchar a la gente gritar fuera. “¿Que está pasando?” “¿Quién está ahí?” “Mierda… Me disculpo, señoritas. No quiero hacerles daño.” – dijo Barrendero guiñándoles un ojo a las chicas. A continuación, abrió la puerta y salió corriendo. La gente apuntó con sus dedos a Barrendero y lo persiguió. Barrendero salió por la otra puerta y corrió por el pasillo lo más rápido que pudo. Los hombres que vestían uniformes militares le gritaron que se detuviera y se unieron a la persecución. Era como una escena de una película de acción de tercera categoría. Un estudiante masculino intentó bloquear su camino. Tenía una cara joven que no coincidía con su alta estatura y abrió los brazos para tratar de agarrar a Barrendero. “¡Uh!” Barrendero se inclinó hacia atrás, como si estuviera jugando al limbo, y lo esquivó pasando bajo los brazos del chico. Él siguió corriendo. ‘Espera.’ De repente, un pensamiento lo golpeó. ¿Por qué estaba huyendo de nuevo? Pensando en ello, no había razón para echar a correr. Se habían visto antes e incluso habían conversado. Además, los soldados crearon este campamento para proteger a los estudiantes, por lo que no parecían malas personas. Si fueran tan benevolentes como él, entonces debería ser fácil hablar las cosas. Después de llegar a esta conclusión, Barrendero se dio la vuelta y levantó los brazos. Los hombres que lo perseguían se detuvieron frente a él. “Hola hermano, puede parecer extraño, pero acabo de pasar la noche aquí. ¿Podríamos hablar?” “Eres…” “Teniente, esta no es la primera vez que nos vemos.” – dijo Barrendero con una brillante sonrisa. Al reconocerlo, el teniente tenía una expresión complicada en su rostro. “Cómo… ¿nos estabas siguiendo? ¿Cuál es tu plan? ¿Cooperaste para encontrar dónde está nuestro campamento...?” “Eso es parcialmente correcto, pero también parcialmente incorrecto.” – respondió Barrendero incómodo. – “Los seguí hasta aquí, pero no quiero hacerles daño. Nunca tuve la intención de tomar el control de tu campamento. Solo tenía que verificar si erais una amenaza o si iban a vengarse de nosotros. ¿Podemos buscar un lugar cómodo para hablar? Agradecería un poco de té.” El comentario de Barrendero se encontró con ceños fruncidos y confusión. No podían decir lo que estaba pensando. Sin embargo, mientras seguía sonriendo, los soldados terminaron por bajar sus armas. “Por favor, entregue sus armas.” – dijo el teniente, con un tono agrio. “No puedo hacer eso. De todos modos, me superan en número. Además, no se desarmaron en nuestro campamento.” Hubo otro silencio incómodo mientras los soldados miraban a su teniente. Al final, el oficial asintió. “Por favor, por aquí.” Barrendero fue llevado a la zona de ciencias, el lugar donde se alojaban los supervivientes. Eran tres laboratorios con puertas de acero. Probablemente decidieron residir aquí porque eran las únicas habitaciones con esas medidas de seguridad. ‘Hay algunos elementos útiles.’ – pensó Barrendero mientras miraba los diversos equipamientos de ciencias. “De todos modos, siento que seguirnos fue algo muy grosero. Sé que ustedes nos dieron suministros, pero…” Barrendero juntó las manos para hacer un gesto de disculpa. “Oh, lo siento por eso. Me disculpo. Originalmente iba a escuchar e irme, pero terminé quedándome dormido. No pensé que me atraparían.” “……” “Pero gracias a eso, vi algo… ¡Ah! De todos modos, ¿puedo hacerte algunas preguntas?” “Responde a mis preguntas primero.” “Podemos tomar turnos. Puedes empezar.” “Hace unos días nos encontramos con algunos asaltantes en motocicletas. ¿Estás con ellos o sabes quiénes son?” – preguntó el teniente después de pensar por un momento. “No y sí.” “¿Perdón?” “No estamos con ellos, pero sí sé de ellos. Probablemente son enemigos. Mi turno. Los tipos que atacaron aquí, ¿Cuántos eran?” El teniente se volvió para mirar a los estudiantes. Uno de los estudiantes respondió vacilante. “Había alrededor de cuarenta…” – respondió uno de los estudiantes con vacilación. “Eso es mucho.” “Mi turno. ¿Quiénes son todos ustedes?” “Esa es una pregunta difícil. No ha pasado tanto tiempo desde que me uní a este campamento. En mi opinión… Es solo un campamento donde los supervivientes se han reunido. El líder es inteligente y experimentado. Ahora es mi turno de nuevo. ¿Qué armas tenían esos tipos?” Una vez más, el teniente no respondió y se volvió hacia el estudiante. ‘’Incluso si es el teniente de una fuerza de reserva, sigue siendo un soldado. No puedo creer que no hayas recibido información sobre los números y las armas de los enemigos.” “No estoy seguro.” – respondió un estudiante. “¿Tenían armas?” “No…” “¿Arcos?” “¡Un arco! ¡Había uno sosteniendo un arco!” “¿Qué tipo de arco? ¿Del tipo que usa un arquero?” “No, era una ballesta.” ‘Una ballesta. Ese grupo puede atacar a distancia.’ Tampoco se atrevió a descartar la idea de que tuvieran armas de fuego. “Siguiente. ¿Alguna otra pregunta?” – preguntó Barrendero al teniente. El oficial dudó, pero no se le ocurrió nada más. “Cuando se te ocurra algo, pregunta. Mi turno. ¿Quieren unirse a nuestra organización?”
* * *
Era la segunda vez que Yohan distribuía armas a los supervivientes. Le dio el M16 a los miembros del equipo de reconocimiento Ha Jin y Dong Seok. Las mujeres recibieron revólveres y los hombres las escopetas Maxus. Esto era diferente a la distribución anterior, donde los guardias tenían que intercambiarse el arma cada vez que cambiaban de turnos. De ahora en adelante, cada persona tenía un arma. Al menos ese era el plan. Aunque quería distribuir armas a todos, no había suficientes armas y municiones. Por ello, Yohan priorizó a los veteranos y luego a los hombres, tanto jóvenes como viejos. También dio prioridad al campamento del centro comercial. Cuando se quedó sin armas, repartió tirachinas a todos los demás y les enseñó cómo usarlas. ‘Debería pasar por una base militar pronto.’ Sin embargo, Yohan no podía abandonar el campamento con facilidad. Una vez que se hubiera hecho cargo de los moteros, planeaba visitar los lugares de almacenamiento de municiones que el teniente había marcado en el mapa. “Yohan, ¿cuánto tiempo más tengo que aguantar esto? Me duele el brazo.” – se quejó Saeri. A un lado del aparcamiento, los supervivientes estaban practicando con las armas que acaban de recibir. Estaban colocados en una fila y apuntando a los zombis que había calle abajo. Como no había mucha munición, no podían disparar el arma. En cambio, practicaron como apuntar, cargar, disparar y cambiar el cargador. Los revólveres y la escopeta Maxus necesitaban un entrenamiento especial, ya que recargarlos era una molestia. Si no practicaran, podría resultar fatal en un combate real. “Practica los movimientos y luego apunta de nuevo. No hay necesidad de quedarse quieto.” “Deberías habérmelo dicho antes.” “Entonces te diré algo ahora mismo. Es mejor que prestes atención. Si alguno dispara accidentalmente su arma, les golpearé la cabeza contra el piso del aparcamiento. Y si atrapo a alguien apuntando con su arma a otra persona, lo desnudaré y lo arrojaré al primer piso.” “Guau, que violento.” - Jefe. Barrendero llamó por la radio. “Barrendero, un segundo. Deja de jugar y práctica.” Yohan fue al lado opuesto del aparcamiento y subió el volumen de la radio una vez que estuvo en un lugar tranquilo. “Sí, soy yo.” - Me puse en contacto con el campamento militar. Tengo información sobre esos bastardos en moto. “Adelante. Te escucho.” - Hay alrededor de 40. Tienen una ballesta. La mayoría portan armas contundentes. No estoy seguro de si tienen armas de fuego. “Ya veo.” - Esos bastardos… No apuntan a suministros o personas. Yohan frunció el ceño. - Simplemente matan gente. Era tal y como había esperado. “Llevaré a esas personas conmigo.” “¿Cuántos?” - Ocho soldados y cinco niños. “¿No nos guardan rencor? Dejamos que uno muriera.” - El teniente culpa a sus propias decisiones. No te preocupes. “Ya veo. Vale.” - Hay muchas cosas que llevar, así que saldremos por la tarde o mañana por la mañana. “Recibido. Buen trabajo.” Cuando terminó la conversación, Yohan levantó la vista y vio que todos estaban sudando y sin aliento. Echó un vistazo al reloj analógico y notó que habían estado practicando durante dos horas. Justo en ese momento, Ji Hye Sohn apareció por la puerta de la salida de emergencia y Yohan les indicó a los supervivientes que podían descansar. Uno por uno, se tumbaron en el suelo. “Yohan, ¿terminó el entrenamiento?” – preguntó Saeri. “Casi.” “Señor. ¡Kim dijo que había terminado de instalar las lámparas!” – informó Ji Hye. “Oh, entonces deberíamos ir a verlo.” Casi se habían quedado sin velas, así que esa noticia hizo feliz a Yohan. El Señor Kim, solía trabajar en una ferretería y utilizó un generador portátil para distribuir electricidad al primer piso y a la planta B1F. A medida que llegaron más personas, el Señor Kim comenzó a dar una explicación grandiosa que claramente había preparado de antemano. Comenzó a hablar sobre el generador, el rectificador y el inversor. Sin embargo, Saeri lo interrumpió de inmediato, diciendo que no lo iba a entender y puso nervioso al anciano. Al final lo convenció de encender las luces. Las bombillas emitían una luz brillante, provocando jadeos de placer entre la multitud. Curiosamente, y a pesar del cableado desorganizado que tenían delante, los supervivientes se sintieron sentimentales al ver que un pequeño fragmento de tecnología moderna había regresado. Sin embargo, Yohan no se sentía sentimental. Estaba decepcionado por el ruido que hacía el generador. Era más fuerte de lo esperado y usaba gasolina en lugar de energía solar. Por supuesto, hasta ahora había podido adquirir gasolina sin ningún problema, pero era un recurso escaso. Sin embargo, ya no tenían que esperar a oscuras, de la noche al amanecer. El campamento había acabado de recuperar su energía y las bombillas lo hacían aún más brillante. “En unos días lo instalaré en todas las habitaciones.” – dijo Kim. La expresión de la multitud se animó aún más. Hace poco, los miembros del campamento habían recibido sus propias habitaciones. Después de limpiar los artículos de las tiendas, crearon suficiente espacio para 10 habitaciones. Cuando terminaron de colocar las camas, parecía un dormitorio. Aunque tenían que compartirla entre dos personas, mejoró la moral. Dormir en el suelo como refugiados sin hogar comenzaba a volverlos locos. “Oh, anciano Park.” – dijo Yohan. Hacía mucho tiempo que Park no bajaba a los pisos del sótano. Parecía que estaba disfrutando de su vida cuidando el huerto de la azotea. “Ah Yohan. ¿Está todo bien?” “En realidad, tengo algunas cosas que necesito discutir contigo.” – dijo Yohan. A continuación, se volvió hacia Seo Jun. – “¿Puedes dedicarme algo de tiempo?” “Claro.” – contestó Seo, asintiendo. “Que Jung y el equipo de reconocimiento también vengan.” Yohan llamó a todos los encargados. Quería tener una seria discusión sobre su próxima batalla con los moteros. “La razón por la que los llamé a todos aquí es porque habrá una batalla en el futuro. Nosotros…” Hasta ahora, solo habían estado matando zombis. Cada vez había que eliminar personas, Yohan prefería moverse por su cuenta. Sin embargo, no podían esconderse y hacer que Yohan los protegiera para siempre. Esto era lo que quería discutir. Tenía que decirles a los supervivientes que, para mantener la paz que estaban disfrutando, a veces tenían que ir en contra de esa paz. No era diferente a un médico que recomendaba una cirugía a pesar de conocer los riesgos que involucraba. Para vivir, tenían que matar a algunas personas. “¿Qué pasa? ¿Por qué tienes una expresión tan seria?” – preguntó Seo Jung. Había tres miembros del equipo de reconocimiento y tres encargados en la sala de reuniones. Todos notaron que, si bien siempre tenía una expresión severa en su rostro, la expresión que tenía hoy era especialmente sombría. Yohan organizó sus pensamientos y continuó hablando. “Estoy seguro de que algunos ya lo saben… Estamos siendo amenazados por un grupo desconocido.” “Amenazado como en…” Con calma, Yohan comenzó a explicar, en detalle, la historia que escuchó en el hospital. Luego, les contó sobre los cadáveres que encontraron en el centro de rehabilitación y la información que le había dado Barrendero.



Survival Capítulo 40

1ª parte: Juego de Supervivencia
Capítulo 40
Expansión del campamento XI
Traducido por Tars
Corregido por Lord
Editado por Tars

Una pareja estaba intimando en el jardín de la azotea. Yohan no necesitaba verlos para saber lo que estaban haciendo. Había pasado bastante tiempo desde que se sintió tan nervioso y se quedó vacilando con la mano agarrando el pomo de la puerta. Era una necesidad humana básica y no quería interrumpirlos. Además, tampoco estaba en condiciones de decir nada. Quería verificar la fuente del sonido en este momento, pero no era como si pudiera abrir la puerta y decir: ‘Perdón por interrumpir el momento de pasión, pero necesito verificar la ubicación de unos moteros’. Pero mientras Yohan estaba quieto, pensando en qué hacer, escuchó una voz familiar a su espalda. “¿Yohan?” – dijo Jung Hwan. Estaba mirándolo con una expresión extraña. – “¿Qué haces aquí?” “¿Uh?” “Eh, ¿qué es ese ruido?” “¡Aaaaah!” En ese momento, los dos pudieron escuchar un gemido débil y sensual que provenía del otro lado de la puerta. La expresión de Jung Hwan se torció en una mirada extraña que fue difícil de describir. “Yohan…” “¿Deberíamos ir al aparcamiento?” – añadió Yohan, asumiendo que Jung había subido hasta la azotea con el mismo propósito que él, pero sus siguientes palabras lo sorprendieron. “¿Tienes ese tipo de fetiche?” “¿Qué…?” “No quiero avergonzar a nadie, pero no pensé que fueras un mirón…” “……” “Está bien. Te entiendo.” Por un instante, Yohan lo miró con los ojos en blanco. A continuación, se rio, como si hubiera perdido la razón. “Jung.” “¿Si?” “Deja de decir tonterías. Bajemos.” Sin embargo, incluso mientras estaban bajando las escaleras, Jung seguía hablando sobre el fetiche de Yohan. Al final, lo golpeó y lo arrastró hasta un lugar donde podían ver las motocicletas. “Mira hacia allá.” “¿Son ellos?” – preguntó Jung. Estaban en el cuarto piso del aparcamiento. Yohan miró a través de los prismáticos. El lugar estaba lejos, por lo que era complicado ver las cosas con claridad, pero podía distinguir unos faros moviéndose en la oscuridad. Podía ver sus siluetas. Era complicado saber cuántos había, pero no era un número pequeño. Yohan siguió lentamente las luces hasta que desaparecieron. “Esos bastardos pasaron por el hospital. También irán a la estación de Sang-Dong mientras avanzan hacia Yakdae-Dong.” “¿Tienes una idea de dónde está su campamento?” ‘No habrían podido sobrevivir durante tanto tiempo si acampan con tanta gente. Lo más probable…’ – pensó Yohan, mientras sacudía con la cabeza. – “¿Esos bastardos no tienen un campamento permanente?” “¿Qué?” “Creo que simplemente se mueven cuando lo desean.” Lo más seguro era que no llevaran mucho tiempo en Bucheon. Yohan había monitorizado el progreso del apocalipsis durante seis meses desde su campamento principal y nunca vio un grupo que se destacara tanto. Había una buena posibilidad de que vinieran de otra región. Eran depredadores que se movían de ciudad en ciudad. Probablemente por eso lograron mantenerse a salvo de los zombis mutantes y de la oleada zombi. Yohan calculó aproximadamente sus movimientos en función de su ubicación actual. Esos descarados bastardos daban vueltas alrededor del centro comercial. Eran como una manada de hienas dando vueltas alrededor de una presa valiosa. Definitivamente estaban al tanto de Yohan y de su campamento. Al final, en algún momento, los dos grupos chocarían. Yohan volvió a su habitación en el primer piso y pensó en lo que debía hacer. ‘¿Debo atacar primero o preparar un contrataque para cuando vengan? Ambas opciones tienen ventajas e inconvenientes, pero ambas son peligrosas.’ Contempló las opciones disponibles con profundidad.
* * *
A la mañana siguiente, Yohan despertó temprano al equipo de reconocimiento. Si quería que el combate se desarrollara sin problemas necesitaban reabastecerse con algo importante. Así, el equipo de reconocimiento se dirigió hacia el Ayuntamiento de Bucheon. Era un gran edificio que estaba devastado, de manera similar al del resto de edificios de la zona. La única diferencia era que los coches estaban completamente rodeados de basura, para bloquear el camino. Ese edificio fue una de las primeras ubicaciones en las que Yohan quería buscar, pero siempre terminaba posponiendo la tarea. El ayuntamiento les permitiría reabastecerse de radios. Asegurar esos aparatos era esencial para la seguridad de una organización, así como para permitir que el equipo de reconocimiento trabajara de manera independiente. Por el contrario, Yohan no esperaba encontrar muchas armas. Hace unos años, había escuchado que los centros de servicio comunitario y los ayuntamientos almacenaban armas, pero cuando revisó las ubicaciones en la línea de tiempo anterior, no encontró ninguna. En su línea anterior solo pudo encontrar armas y municiones en las bases militares. En cualquier caso, más que armas, ahora necesitaban con urgencia equipos de comunicación. Siguiendo el ejemplo de Yohan, el equipo de reconocimiento buscó en el Centro de Control de CCTV, la Sala de Situación y la Sala de Operaciones del ayuntamiento. En total, obtuvieron nueve radios. De los nueve, siete seguían funcionando. Después de terminar de buscar en el ayuntamiento, se dirigieron hacia la estación de policía de Jung-Dong. Otros supervivientes probablemente ya habían saqueado las armas y los suministros que había dentro del almacén del distrito, pero, por casualidad, pudieron adquirir un revólver, y otra radio, de un oficial de policía que se había convertido en zombi. Yohan estableció la frecuencia para hablar por las radios y se los entregó a los guardias del centro comercial y del campamento en el hospital. Además, Gap Soo, Jung Hwan y el resto de miembros del equipo de reconocimiento tenían uno. Quedaban tres. “Nos detendremos aquí por hoy. Regresar y descansar. Distribuiremos las armas por la tarde. Ha Jin, estás al mando.” “¿A dónde vas?” “A conseguir armas.” “¿Por qué no vamos juntos?” – preguntó Ha Jin, pero Yohan sacudió la cabeza. La estación de Kkachiul estaba demasiado lejos para ir caminando y tenía la intención de usar la motocicleta que había dejado en el aparcamiento del centro comercial. “Ha Jin, te lo dejo todo a ti.” “Entendido.” Yohan dejó al grupo e inmediatamente regresó a su primer refugio. Todavía estaba dudando sobre si distribuir las armas. Sin embargo, este era el momento adecuado. Los supervivientes del campamento estaban entrenados física y mentalmente y, con Jung Hwan a la cabeza, estaban llenos de confianza. Después de la oleada zombi, nadie volvió a atacarlo. A pesar de que carecían de habilidades, hicieron todo lo posible para seguir su ejemplo. Si tenía que ser honesto, no quería perder a ninguno de los miembros que tenía. Tenía que distribuirlas. Si seguía dudando y se volvía indeciso, podría provocar más daños. Después de decidirse, guardó algunas armas y municiones en la bolsa de lona. La mayoría eran escopetas: Browning Maxus. Aunque no eran efectivas durante una gran pelea contra zombis, era más que suficiente contra otras personas. Se aseguró la pesada bolsa de lona a la espada y encendió su motocicleta.



Retro Capitulo 79

Volumen 3 Capítulo 79
Su decisión I
Traducido por Tars
Corregido por Zura
Editado por Tars

El puerto de Deltaheim estaba tan abarrotado que era imposible moverse entre la multitud de personas. Los forasteros habían destruido el ferrocarril para bloquear todas las conexiones al exterior y ahora, la única forma de entrar y salir era en barco. Como todo había sucedido durante el Torneo del Océano Dorado había mucho más visitantes de lo habitual. Numerosos buques mercantes estaban atracados uno al lado de otros, mientras que la fila de refugiados que se dirigía hacia ellos era excepcionalmente larga. Hubo un poco de lucha para ser los primeros en subir a bordo, pero era un hecho inmutable que la clase alta abordó primero. Por lo tanto, los plebeyos solo podrían embarcar después de todas las familias reales y los nobles. En tiempo de caos, las naves escaparon una tras otra. Intensas explosiones golpearon el mar causando enormes olas, que hicieron que la gente que se quedaba sobre la cubierta perdieran el equilibrio y cayeran al suelo. Todas las personas levantaron la mirada, cuando el oscuro cielo volvió a brillar como a la luz del día. Una gran cantidad de rocas en llamas llovían del cielo. “Qu… Qué es…” – dijo alguien entre la multitud. El desastre había llegado hasta la ciudad del comercio y la abundancia, Deltaheim. * Booooom * El puerto estaba siendo atacado. “¡Oh no!” “¡Ayudadme!” Algo barrió a los refugiados. Los buques mercantes sufrieron daños o simplemente se hundieron por el impacto de las rocas que caían del cielo. “Oh, Dios mío, Dios mío, Dios mío.” Algunos pasajeros decidieron saltar al mar. Otros, murieron al instante y los más desafortunados terminaron atrapados mientras eran quemados por las llamas. El puerto se había convertido en un pandemonio. “¡Mamá!” Una roca ardiente voló hacia una madre y su hijo. No lo podían esquivar. Antes de darse cuenta, la madre abrazó a su hijo. * Braaaaam * Sin embargo, la roca fue derribada por balas de viento que llegaron desde algún lugar, antes de que fueran golpeados. Los escombros oscuros fueron esparcidos sobre el mar.
“[Corona de hielo]”
Al mismo tiempo, el agua se elevó del mar para crear una corona de hielo. Protegía a las personas de los restos de la roca destruida. Era el grupo de Desir. Después de que el hombre de la máscara de cuervo huyó, el grupo corrió hasta el puerto. Era la zona donde había una mayor cantidad de refugiados e intentaban reducir sus posibles bajas. Ajest invocó el conjuro para cubrir a los refugiados, mientras que Romántica interceptaba las rocas desde un punto elevado que le permitía ver todo el puerto. “¡Subid a bordo!” Pram ayudó a los soldados con la evacuación de los refugiados. Con la llegada del grupo la situación se estabilizó con rapidez. Con la sensación de que el peligro inminente se desvanecía, los refugiados comenzaron a sentirse un poco más aliviados. La madre que abrazaba a su hijo lo volvió a sostener por las manos y lo instó a subir al bote. “A este ritmo no podremos terminar la evacuación.” Era la evaluación de Desir después de ver el terrible panorama. Estaba trabajando en la magia para bloquear las rocas que se le escapaban a Ajest. “Si… También lo creo.” – respondió Romántica mientras seguía lanzando hechizos de francotirador. No solo el puerto, toda la ciudad estaba devastada. Un mirador construido para ver el mar se había partido en dos y los escombros golpearon el centro comercial. La parte superior del estadio, donde había tenido lugar el Concurso del Océano Dorado, estaba arrasado y aplastado. Ninguno de los edificios que habían sido golpeados por la lluvia de rocas había mantenido su forma. Además, no parecía que la lluvia de meteoritos fuera a terminar. Todos los edificios se derrumbaban a su alrededor. Había gritos y explosiones y, en medio de todo este estruendo, se podía escuchar el débil sonido de las olas rompiendo contra la arena teñida de gris. Desastre era una autentica calamidad. Como el hombre de la máscara de cuervo había dicho, Zod no podría lidiar con Desastre sin haberse preparado de antemano. En el pasado, las expediciones que se habían aventurado en el Laberinto de las Sombras, solo habían logrado causar graves daño a ese tipo de demonios. Era imposible detenerlos. La fase de erupción era solo el comienzo. Era el fenómeno que presagiaba el comienzo de las actividades de Desastre. Aunque lo que estaba ocurriendo ya era una pesadilla, si Desastre fuera a aparecer con su cuerpo original, Deltaheim ardería hasta desaparecer del mapa. Mucha gente ya había muerto. “Romántica, vámonos.” – dijo Desir, volviéndose hacia Romántica, cuando decidió el mejor curso de acción. La evacuación casi había terminado. “Es una buena idea. Si nos quedamos vamos a arder hasta la muerte. Mi poder ya ha alcanzado mi límite.” – contestó, apartando los ojos de su rifle. Después de realizar disparos de forma continuada, a Romántica ya solo le quedaba poder para hacer uno o dos disparos con un conjuro del segundo círculo. Lo mismo le estaba pasando a Ajest, mientras protegía a los refugiados con sus hechizos defensivos. La batalla contra el hombre de la máscara y los sucesivos combates contra los forasteros habían hecho que llegasen a su límite. No era extraño que estuvieran exhaustos. Desir contactó a Ajest y Pram. - Todos hicieron un buen trabajo. Es hora de evacuar. Que todos se unan a la fila para subir a bordo. Ajest dejó de usar su magia y las estructuras hechas de hielo se derrumbaron. Hasta ahora se habían mantenido bien. Mucha gente pudo subir a los barcos mientras bloqueaban las rocas. Todavía quedaban unas 2000 personas en el puerto. Aunque su número no era pequeño, era mucho mejor que antes. Ajest y Pram, que ayudaron a la evacuación de los refugiados desde cerca de los barcos, se unieron a la fila mucho antes que Romántica y Desir, que estaban en la retaguardia. Reunieron todo el poder que les quedaba y rompieron las rocas que poseían una trayectoria que dañaría a los refugiados que se encontraban en los barcos. Era lo mejor que podían hacer. Unos cinco minutos después de unirse a la parte final de la cola de evacuación, de repente, Desir levantó la cabeza para intentar encontrar a Pram y Ajest. Fue incapaz de verlos. “Hay tanta gente tratando de subir a los botes que nos vamos a perder. Me adelantaré a buscar a Pram y Ajest. Si tardo demasiado, no me esperes y sube a bordo.” – explicó Desir. “Oh, mi vida es mía. Por supuesto que debería huir. Solo soy una perra que huye cuando mi ciudad natal está siendo devastada.” – respondió Romántica, con un tono bastante frío. “Lo siento, eso es…” Romántica cortó a Desir, antes de que pudiera poner una excusa. “Vale, está bien. De hecho, tienes razón. Sé que es imprudente. Estoy de mal humor. Ve rápidamente a buscarlos.” * Sonrisa * Romántica se rio mientras sus labios formaban una línea. El niño y la niña, cubiertos de hollín y ceniza, se miraron el uno al otro como si buscaran algo en el otro. “¿No te vas?” “Lo haré.” – dijo Desir, comenzando a alejarse. – “No me llevará mucho tiempo.” Cuando Desir desapareció entre la multitud, Romántica se quedó sola. No solo estaba esperando. Cada vez que su poder se recuperaba un poco, ayudaba a romper las rocas que volaban hacia el puerto. Afortunadamente, debido a que el número de refugiados que quedaban en el puerto se había reducido considerablemente, el área que tenía que proteger también había disminuido y ahora podía ser considerada segura. “¿……?” Sin embargo, de repente el movimiento de la fila se detuvo. Al escuchar los murmullos que llegaban desde delante, parecía que había una pelea. Era natural que las personas estuvieran nerviosas durante una crisis y los refugiados se pelaban con facilidad, incluso por un ligero malentendido. Sin embargo, en ese momento en particular, Romántica tuvo un presentimiento siniestro. ‘De ninguna manera, ¿se vio atrapado?’ Tenía sentido. Desir parecía estar en medio de todos los desastres. Cuando vio que le estaba tomando demasiado tiempo en traer de vuelta a Pram y Ajest, comenzó a ponerse nerviosa. Acarició el rifle que Desir le había dado, una y otra vez. ‘¿Se ha visto envuelto en eso?’ Justo cuando Romántica se preguntaba si debía ir a buscarlo, alguien le tocó el hombro. Parecía que habían vuelto. Soltando un amplio suspiro en un intento de alejar sus preocupaciones, se dio la vuelta para ver quien la había tocado. “Está usted aquí, Señorita Romántica.” “¿Mayordomo?” Era el mayordomo de la familia Eru y estaba vestido con un traje elegante. “La he estado buscando. Estabas aquí después de todo. Vamos, date prisa.” Cuando terminó de hablar, comenzó a salir de la procesión y se dirigió hacia la nave. “¡Espera! ¿A dónde vas?” El mayordomo se dio cuenta de que algo estaba fuera de lugar por la reacción de Romántica y trató de explicarle. “Este barco para refugiados es en realidad un barco mercante de la familia Eru. Definitivamente mereces subir a bordo primero, ya que eres una señorita de la familia Eru.” “Sé lo que quieres decir. Pero estoy esperando a mis amigos.” “Puedes verlos cuando estés a bordo. Por favor, apúrate en salir de aquí. El Barón está preocupado.” Cuando escuchó que sus padres estaban preocupados, tuvo que estar de acuerdo con el mayordomo. ‘Bueno, Desir me dijo que subiera a bordo si llegaba tarde.’ Siguió al mayordomo y pasó la fila. Rápidamente llegó al lugar donde los refugiados estaban causando problemas. “¡Golpeaste primero!” “¡Mira quién habla!” Aunque las personas a su alrededor les habían obligado a separarse, no dejaron de maldecirse los unos a los otros. Romántica pasó junto a ellos y abordó el barco. Pero no abandonó la cubierta. “¡Oh! Ya estás aquí.” Unos cinco minutos después, Pram y Ajest se acercaron a Romántica. Parecían bastante sorprendidos de que hubiera sido capaz de subir primero. Pero Desir no estaba con ellos. “¿Dónde está Desir?” “¿No estaba contigo?” “No, dijo que fue a buscarte.” “Pero no lo hemos visto.” “¿Qué?” Desir había desaparecido sin dejar rastro. Romántica miró a su alrededor. Casi todos los refugiados habían abordado el barco, pero todavía no había señales de Desir. No estaba aquí. No estaba en ninguna parte.



miércoles, 5 de febrero de 2020

Volumen 30 Capítulo 8

Volumen 30 Capítulo 8
La canción de Bahamorg
Traducido por Tars
Corregido por DaniR
Editado por AMarauder

Con la ayuda de Yurin, Weed se trasladó a la capital del Imperio de Arpen, Antarosa. ‘Los edificios están completamente destrozados.’ ¡Unas ruinas de mil años de antigüedad! Muchos edificios estaban completamente destruidos, mientras que otros solo habían perdido su tejado y todavía tenían las paredes en pie. Apenas quedaban edificios sin daños. El área estaba repleta de monstruos. Aquí habitaban desde una mezcla de débiles lobos a otros monstruos poderosos, cuyos jefes superaban el nivel 520. Era la zona central de los monstruos y se podían encontrar de todos los tipos posibles. La riqueza y el poder concentrado en el antiguo palacio había desaparecido por completo a manos de los aventureros y los monstruos sedientos de destrucción. Era imposible poder apreciar las magníficas construcciones del pasado. Los monstruos vivían principalmente en los niveles subterráneos de Antarosa. Hacían nidos en los complicados sistemas del alcantarillado y emergían a la superficie durante la noche. Antarosa era más grande que Morata y todo el actual Reino de Arpen juntos, y sus monstruos luchaban todas las noches por ampliar sus territorios. Ni siquiera los jugadores de alto rango se podían permitir luchar contra ellos. Hasta los gremios más prestigiosos eran incapaces de manejar a todos los enemigos que deambulaban en la oscuridad. Solo unos pocos miles de monstruos salían al exterior, pero nadie sabía realmente cuántos quedaban todavía bajo tierra. Todos los aventureros curiosos que habían entrado para averiguarlo murieron sin llegar a enterarse de nada. Esta era la digna ciudad de Antarosa, capital del antiguo Imperio de Arpen y el lugar donde todos los cazadores de tesoros y saqueadores de tumbas acudían para poder realizar sus sueños. Cuando buscaban en las mansiones de los nobles o excavaban entre sus escombros, encontraban metales preciosos, equipos increíbles y joyas extremadamente caras. Eran tesoros deseados por cualquier reino y, si fueran entregados a un rey, podrían cumplir de inmediato su sueño de convertirse en parte de la nobleza. O simplemente podían encontrar esos artículos por el placer de poder usar algo que los demás serían incapaces de tener. Por este tipo de oportunidades muchos ladrones de tumbas y cazadores de tesoros perseguían el sueño de encontrar el mejor tesoro enterrado.
* * *
En unas ruinas próximas a la orilla del río. Originalmente había sido una taberna rodeada por el gran afluente que transcurría a través de Antarosa, pero ahora los jugadores acudían allí para recibir misiones o encontrar tesoros. Una base estable era imprescindible para explorar la gran Antarosa. “Argh. He excavado en el suelo durante tres días, pero no he podido encontrar nada.” “Baisul, no te desanimes. Ten, bebe alcohol.” “Ah, ¡refrescante! Necesito encontrar la mansión de Hidram, pero no puedo encontrar la ubicación del edificio. Ya he excavado en cinco lugares diferentes en vano. Creo que me iré a explorar una mazmorra.” “Illedo, ¿es cierto que has encontrado algo?” “Una pequeña pieza de oro. Habría preferido un libro mágico.” Si se tenía suerte, se podían obtener muchas cosas, por ello siempre había mucha gente esperando por conseguir su oportunidad. Cientos de personas se quedaban en la taberna y en la posada mientras excavaban en las ruinas. Weed indagaba mientras comía en la taberna. Solo con limitarse a escuchar en silencio, ya conseguía una información considerable. Los aventureros que exploraban esta gran área eran muy activos en el intercambio de noticias. “Creo que casi han terminado de buscar al sur del pozo. No hay una sola persona que haya encontrado algo últimamente.” “Se han encontrado siete mazmorras en el palacio imperial. Sería bueno su pudiéramos encontrar suficientes jugadores para entrar allí.” “He oído que aquel que entra no sale con vida.” “Si es peligroso… ¡Habrá mayores ganancias!” Resultaba complicado encontrar un lugar sin gente en las ruinas. Weed sumergió un trozo de pan en miel mientras bebía leche. Esta era una zona de Royal Road donde abundaban ese tipo de productos. Si se tenía en cuenta el nivel de los jugadores y se lo comparaba con los monstruos, este era un lugar realmente peligroso. De cada cien personas que entraban en las ruinas, solo una o dos regresaban con vida. Pero los tesoros y los equipos que se encontraban siempre eran mucho más altos que el nivel de los jugadores, haciendo que obtuvieran enormes ganancias y se convirtieran en celebridades. Los aventureros iban encontrando tesoros mientras morían y, con su búsqueda incansable, el riesgo en la superficie se había reducido ligeramente. Sin embargo, todavía era imposible explorar los subterráneos, había monstruos muy peligrosos. Aunque todavía había tesoros ocultos en su interior esperando a ser descubiertos. Los objetos de Antarosa fueron de gran ayuda para los primeros jugadores del Continente de Versalles y, ahora mismo, esos aventureros excepcionales estaban viviendo aventuras por el resto del mundo. “Debo abandonar la solicitud del señor Chargne. Me pidieron que encontrara un león de piedra… Ah, pensaba que no tenía una dificultad elevada y que podría encontrarlo con rapidez.” “¿Aún no lo has encontrado?” “Soy incapaz de localizarlo, no importa cuánto haya buscado. Seguramente alguien lo cogió antes que yo.” Las historias de las personas que estaban bebiendo siguieron fluyendo hacia sus oídos. Pero el único tema de información era sobre la búsqueda de tesoros de Antarosa. ‘Bahamorg… Nadie habla de él.’ Las formas de vida tenían una esperanza de vida predeterminada dependiendo de su raza. Si no morían en combate, al final envejecían y morían. Aunque Bahamorg hubiera logrado sobrevivir a las heridas, había transcurrido demasiado tiempo y era lógico pensar que estaba muerto. ‘No hay garantías de que esté aquí… Estaría más relajado trabajando.’ ¡Las misiones para ser Maestro de Clase eran muy diferentes! Weed terminó de comer y esperó al anochecer. ¡Era cuando los monstruos estaban en su apogeo! Se podían ver moverse a multitud de monstruos a través de la ventana. Los monstruos despertaban y deambulaban entre las ruinas. ¡La tierra donde duerme la leyenda! Según los registros históricos, Antarosa se perdió cuando el Imperio Arpen se fragmentó y derrumbó. Fue el objetivo de invasiones militares y saqueos, pero desde que fue ocupada por los monstruos, la humanidad había tenido que abandonar este lugar. Al final, Antarosa se había convertido en una ciudad dominada por los monstruos. Aunque estaba incluida dentro del territorio de la Confederación Britten, los comerciantes no se atrevían a aproximarse y se alejaban todo lo que podían. Los jugadores se quedaban en las tabernas y posadas escondidas por conjuros mágicos. Gracias a eso, la gente estaba a salvo, pero el corazón de Weed estaba intranquilo. “¿Te vas a quedar? Son 30 monedas de oro.” Era un precio demasiado alto para una sola noche. “¿No puedes reducir el precio un poco?” “De ninguna manera, señor.” “No quería decir esto, pero… Soy una persona realmente famosa en el continente.” “Entonces puedes pagar más dinero.” El dueño de la posada tenía un carácter obstinado, por lo que no importaba cuánto lo intentaba, nada funcionaba.
* * *
Los geomchis, instructores y aprendices, se dirigieron hacia una mazmorra. “Esta es la entrada a la mazmorra.” “Maestro, ¡iremos primero!” Una vez que los geomchis aprendieron las habilidades de [Clonación de espadas] y [Espada deslumbrante], su velocidad de cacería se volvió asombrosa. “Este es el efecto de la habilidad.” “Eso parece. Es tan fácil de usar como una lavadora.” ¡Habían alcanzado el nivel 400 utilizando únicamente habilidades básicas! Y ahora, por primera vez, estaban usando habilidades de combate. Tuvieron que invertir puntos en [Sabiduría] y [Maná], el poder de sus ataques aumentaba cada vez que la habilidad subía de nivel. El consejo que les dio Weed había sido crucial. “Sé que es suficiente para el Maestro y los hermanos pelear solos, pero, ¿por qué no intentáis cazar en grupo?” “Nos gustaría hacer eso, pero… No hay personas adecuadas por aquí.” Geomchi, los instructores y el resto de discípulos trataron de cazar en grupo en las Montañas Yuroki. Pelear junto a guerreras era una gran esperanza para ellos, pero cuando llegaron al Norte y se reunieron, apenas pudieron encontrar chicas para crear un grupo. “Maestro, tus puntos de contribución son suficientes para contratar sacerdotisas que te acompañen cuando vayas de caza. Hay una catedral de la Orden de Freya en Morata, por lo que es fácil encontrarlas.” “¡Uh! Si lo dices así… Supongo que podemos echar un vistazo.” Geomchi se tomó la molestia y fue a la Plaza de la Torre de la Luz con sus discípulos. “Uh, esa sacerdotisa es muy bonita.” “¡Maestro! ¿Has visto a la sacerdotisa que acaba de pasar? Esa cara inocente es mi tipo ideal. ¡Qué hermoso cabello…!” “Tercer hermano, ¡esa viene hacia aquí!” Las sacerdotisas que seguían a Freya, la Diosa de la Belleza, presumían de su hermosura. Por este motivo la Orden de Freya era muy popular entre los jugadores. “Tercer hermano, ¿deberíamos contratar algunas sacerdotisas para ir de cacería?” “Sí. Weed dijo que es posible con nuestros logros. Maestro, ¡hagámoslo!” Los Geomchis entraron en la Catedral de Freya. “Nos están visitando aquellos que han hecho grandes contribuciones, ¿qué os gustaría? Si deseáis mejores armas, os las daremos encantados.” Hasta ahora se habían ocupado de limpiar los territorios de monstruos y habían acumulado una gran cantidad de logros que nunca habían usado. Eran más que suficientes para cambiar por un arma o contratar a una sacerdotisa. Los jugadores normales sabían cómo usar los puntos de contribución, pero era difícil obtenerlos. La mayoría de los guerreros no estaban dispuestos a enfrentar el castigo por morir. “Me gustaría un arma, pero ahora no la necesito. En vez de eso, quiero ir de caza, ¿sería posible llevar a una sacerdotisa?” “Si luchas contra los monstruos por supuesto estamos dispuestos a colaborar. Por favor, asegúrate de que no puedan lastimarse o morir. Si eso ocurre será complicado que volvamos a colocar a nuestras sacerdotisas en situaciones peligrosas.” “Me aseguraré de que ni una sola gota de agua toque sus manos.” Cada geomchi contrató a una sacerdotisa. Hasta ahora no sabían el valor que tenían sus logros y siempre los habían considerado un desperdicio. Pero gracias a las sacerdotisas, su eficiencia a la hora de cazar se triplicó. ¡Recibir bendiciones y curaciones en medio de la batalla era realmente bueno! “Este mundo es maravilloso...” “Es una suerte que entendamos el mundo ahora.” “¡Escuchad! Si recibimos heridas… ¡Deberán tocarnos para realizar las curaciones!” Los geomchis usaban un método de combate distinto al de los demás. Normalmente eran precisos y efectivos cuando atacaban y se defendían, pero después de ver a las sacerdotisas, comenzaron a pelear de forma salvaje. Además, protegían de forma implacable a las sacerdotisas de los monstruos. Como las sacerdotisas habían sido contratadas con puntos de contribución, no era necesario compartir puntos de experiencia ni objetos. “Maestro, también iremos.” “De acuerdo, apresuraos y traedlas rápido.” Los discípulos fueron a Morata a contratar más sacerdotisas. “Huh, lo siento, pero todavía no tengo el nivel suficiente para ir a cazar. En cambio, ese sacerdote…” “¡No te preocupes!” La Orden de Freya se estaba quedando sin sacerdotisas, ¡y decidieron contratar mujeres de otras órdenes religiosas! Desde entonces, el número de monstruos que se encontraban alrededor de la Fortaleza de Vargo disminuyó lo suficiente como para que los puntos de contribución que se concedían también disminuyeran. Las invasiones de los monstruos contra la Fortaleza de Vargo desaparecieron, aumentando la seguridad de la región. “La esgrima es verdaderamente hermosa.” “¡Sí, Maestro!”
* * *
Weed salió de la posada temprano al día siguiente. ‘Primer debo echar un vistazo a las esculturas que desenterraron de aquí.’ La mayoría de los objetos excavados de las ruinas se vendían a los aristócratas de la Confederación Britten. Las memorias contenidas dentro de las esculturas podrían darle alguna información. “Tu fama como escultor es bien conocida en el continente. La Condesa Valdmont ama el Arte. Por favor, se bienvenido.” “He escuchado un montón de historias acerca de tus aventuras. Siempre he querido conocerte.” “He oído que eres el Rey de un pequeño reino en el Norte, realmente es un honor poder reunirse contigo.” A Weed no le resultaba difícil reunirse con los nobles de la Confederación Britten. Aun así, el número de esculturas recuperadas era muy pequeño. Ni siquiera estaban expuestas en los corredores y eran guardadas en el almacén. “Es una escultura muy elegante.” “Esta escultura es muy antigua. Es una reliquia histórica, pero solo tengo esta.” “¿Puedo observarla durante un rato?” “Por supuesto.” “¡[Memoria Escultural]!” Se trataba de la estatua de un león, agrietada y lisa. Cuando examinó la memoria de su interior, pudo ver el Palacio Imperial y la capital del Imperio de Arpen. Era difícil de imaginar que una ciudad tan hermosa terminase de esa manera, pero en aquella época una gran cantidad de formas de vida esculturales vivían allí. Al lado de una fuente se podía ver una escultura del Emperador Geihar Von Arpen que había sido esculpida por él mismo. Además, los mejores tesoros del continente estaban expuestos a simple vista. ‘Ahora que puedo ver cómo era la capital en el pasado, será más fácil encontrar tesoros.’ Si tenía pistas acerca de los tesoros, podía ir allí directamente y cavarlo todo. Desgraciadamente, como Rey del Reino de Arpen, tenía demasiadas cosas por hacer. ‘No puedo encontrar a Bahamorg.’ Muchas de las esculturas descubiertas estaban dañadas, por lo que sus memorias no estaban completas. “¿Puedo arreglarla?” “Sería un honor tener a un famoso escultor como usted para reparar esta escultura.” Weed recibió una misión para restaurar la escultura. A continuación, procedió a revisar las memorias que había en su interior. Ahora, el vídeo mostraba más detalles de los paisajes de los alrededores, pero seguía sin mostrar los últimos momentos de Bahamorg. ‘No he conseguido mucha información, pero tengo que pensar de forma positiva. Si pienso de forma negativa durante toda mi vida no podré explotar a la gente. Al menos sé que Bahamorg no está donde las demás esculturas fueron desenterradas. Tendré que trabajar más duro.’ Weed extendió su mapa de las ruinas. En realidad, aunque Bahamorg dijo que regresaría, no sabía si había sido capaz de llegar hasta aquí. Las posibilidades de que hubiera muerto por el camino eran bastante altas. Si no había llegado a Antarosa, el radio de búsqueda sería enorme. No iba a ser una misión sencilla…
* * *
Aproximadamente una semana después. ‘Esto no está funcionando.’ Weed bajó el pico y la pala. ‘No he sacado nada de estas ruinas…’ Durante todo ese tiempo, al igual que el resto de aventureros, recorrió Antarosa mientras excavaba la tierra. “¿Te gustaría formar un grupo conmigo?” “Tu pico se ve inusual. Hay un lugar al que le tengo echado un ojo, vayamos a excavarlo juntos.” Recibió muchas solicitudes de otros jugadores. Su [Fuerza] y [Vitalidad] le hacían parecer que estaba jugando a ‘Aplasta al topo’. Cada vez que comenzaba a cavar, atravesaba con facilidad todos los escombros de los edificios. Weed rechazó todas las invitaciones y se centró en cavar la tierra. “Bahamorg... Antiguo guerrero bárbaro... Su equipo será increíblemente valioso... Si consigo excavarlo... Sería un tesoro que causaría una tormenta de dinero... Esa torre mágica... La sala del tesoro del Palacio Imperial...” ¡La búsqueda de Bahamorg se transformó en una misión para saquear de tesoros! Sin embargo, buscar riquezas en Antarosa no era fácil. En una semana solo había obtenido dos armaduras y una maza. Eran dignas de ser antigüedades y, con su valor histórico, podría obtener entre 1.500 y 2.000 monedas de oro. Aunque otros aventureros podrían pensar que era una cosecha decente por un mes de trabajo, Weed podía fundir directamente los objetos y forjar una armadura de nivel 300 con facilidad. Weed se dedicó a la repetitiva tarea de buscar a Bahamorg durante el día cavando y regresar a la taberna para esculpir por la noche. Mientras tanto, sus habilidades de [Minería] aumentaron desde el nivel Intermedio – 1 al nivel Intermedio – 2. ¡Su técnica para excavar la tierra estaba mejorando! ‘El coste de la posada es demasiado alto, esto no me está beneficiando.’ A pesar de que Weed contaba con excelentes habilidades de excavación, le era imposible buscar por toda la superficie de las ruinas. Solo podía centrarse en las ubicaciones donde era más probable encontrar algo. ‘Hasta ahora no he tenido suerte… Pero quizá esta vez tendré suerte, ¡solo necesito tener éxito para cambiar la situación!’ ¡Su desafortunado destino siempre hacía que le esquivara la suerte! ‘Tengo que buscar otra manera…’ Weed creía que su capacidad de razonamiento era excelente. Después de todo… ¡Había pasado el 98% de su vida trabajando y solo un 2% disfrutando! ‘Todo lo que sé es que Bahamorg se dirigía hacia Antarosa.’ Weed decidió tomar la arriesgada decisión de abandonar las ruinas. Podía usar sus habilidades de [Minería] y [Memoria Escultural], pero la zona era demasiado amplia. Además, el resto de sus habilidades no le eran de utilidad. ‘Sería realmente afortunado si pudiera encontrar sus pertenencias aquí, pero no hay nada que me lo asegure.’ Weed no había encontrado ni una sola pista a pesar de estar cavando durante una semana. Para empeorar las cosas, su pico se movía de forma involuntaria hacia los tesoros en lugar de mantener su objetivo original. Si se quedaba, podría encontrar los grandes tesoros del Imperio de Arpen que unificaron el continente, pero no creía que pudiera averiguar el paradero de Bahamorg. ‘¿Qué información puedo usar para comenzar la búsqueda?’ Weed trató de organizar sus pensamientos. Sabía exactamente qué era Bahamorg y cómo era su apariencia. Había leído los libros de historia de la Gran Biblioteca de Morata, pero no había encontrado ninguna información sobre él. ‘Tal vez sí…’ Weed sacó su cuchillo para esculpir y comenzó a tallar un gran trozo de piedra que en algún momento había formado parte de la muralla de la ciudad. Estaba tallando una figura de Bahamorg.
* * *
Esa noche, muchos monstruos deambularon por Antarosa. Estaban peleando entre ellos y cazando animales pequeños. En algunas ocasiones, los monstruos al igual que los humanos, también excavaban en el suelo para encontrar cosas. Los monstruos de Antarosa tenían su propia inteligencia y eran capaces de localizar tesoros y usarlos. Los jugadores querían cazar a los monstruos que tenían tesoros, pero estos eran más poderosos durante la noche. Durante el día vivían en los intrincados pasadizos subterráneos, por lo que eran complicados de rastrear. Sin embargo, algunos lo conseguían en ocasiones, pero era muy arriesgado. Y cuando un monstruo débil obtenía un tesoro, algún monstruo fuerte se lo arrebataba rápidamente. Cuanto mejor fuera el objeto, más fácil era que terminase en las garras de algún monstruo de tipo jefe. Unos monstruos encontraron la escultura de Bahamorg que acababa de esculpir. “¿Eh?” “¿Uh?” Los monstruos no le prestaron atención y pasaron de largo. “Tengo hambre.” “Vamos allá.” Les gustaba el oro, la plata y las joyas, por lo que las tomaron y se trasladaron hacia el oeste. Dependiendo de los hábitos de los monstruos, algunos acumulaban los tesoros hasta tener una montaña. Pero como era de esperar, a los monstruos las obras de arte no les importaban demasiado. “Eh, ¿esto es…?” Justo antes del amanecer, un grupo de monstruos encontró la escultura y mostró interés por ella. ‘Sí, éxito.’ Weed se había transformado en un cuervo y observaba lo que pasaba desde una grieta entre los escombros. ¡Si el monstruo era capaz de reconocerlo sería una pista! “¿Por qué te ves así? “Solo destrózala.” ¡Crash! ¡Traaaash! ¡Crack! ¡Un monstruo bajó su hacha contra la escultura, rompiéndola! ‘Bastardo…’ – pensó Weed mientras veía cómo su trabajo era destruido. No tuvo otra opción que aguantarse, ya que por la noche los monstruos deambulaban por Antarosa por todas partes. Cuando llegó el amanecer los monstruos desaparecieron. ‘Parece que hay algún problema con mi trabajo.’ – pensó mientras miraba los restos de su obra. Weed decidió mejorar la escultura. Aparte de tallar la piedra, ¡sabía cómo hacer esculturas con otros materiales!
* * *
Al atardecer, antes de que llegara la noche, Weed estaba terminando otra escultura. “¡[Esculpir la Luz de la Luna]!” ¡Un grupo de luces brillantes se desprendía de sus manos e iluminaba el cielo! Estaba creando una bella y colorida escultura de luz. La habilidad de [Esculpir la Luz de la Luna] era muy útil y siempre la utilizaba un poco con el resto de esculturas. ¡Una escultura hecha de luz! Si ponía un brillo suave sobre su superficie, el color hacía que la escultura se viera aún más maravillosa y lujosa. Pero esta vez, había creado la escultura por completo con luz y estaba flotando en el aire. ¡La escultura de Bahamorg! Mientras Weed movía las manos, fue dando forma al guerrero bárbaro Bahamorg. ‘¿La luz atraerá demasiado la atención en medio de la noche? No quiero que sea tan brillante.’ No quería que resaltase como un letrero de neón. ‘A los monstruos les gustan las cosas brillantes, ¡me he decidido!’ Weed creó la figura de Bahamorg en el cielo de Antarosa con una mezcla de luces doradas y plateadas. El sol ya se estaba poniendo, así que no le quedaba mucho tiempo. Aunque la escultura estaba hecha a toda velocidad, estaba acostumbrado a lidiar con la luz para crear sus obras. Cuando terminó, una escultura de luz con la forma de Bahamorg quedó suspendida en el cielo. ‘Ahora es fácil de reconocer.’ Weed decidió relajarse y esperar. Esta vez los monstruos no serían capaces de destruirla.
* * *
“Es una escultura de Weed.” “¡El ‘Dios de la Guerra’ está aquí!” La atmósfera de Antarosa cambió a medida que los aventureros observaban la escultura de luz. Se podría decir que Weed era su ídolo. Cuando se iba de aventuras, en ocasiones había que estar solo y era necesario enfrentarse enormes adversidades. Pero cuando se encontraban frustrados y a punto de rendirse, la imagen de Weed superando cualquier aventura aparecía en sus mentes. “¿Dónde está?” “Me pregunto si una misión lo ha traído hasta aquí.” “Últimamente el interés de las personas por Antarosa se ha reducido. Pero cuando se enteren que Weed está aquí vendrá mucha más gente.” Los lugares que eran visitados por Weed siempre terminaban infestados de personas. Era el mismo fenómeno que ocurría cuando una celebridad iba a algún lugar y salía en televisión. Los capitanes de los barcos que navegaban hasta Las Falanges lanzaron al mismo tiempo una oferta de viaje: Paquete de aventuras de Weed. “¿Estará por aquí?” “Puede que ya se haya ido. Siempre aparecer de forma repentina para luego desvanecerse. Puede que esté comiendo un filete en Morata en estos momentos.” “Eso es verdad, los jugadores de Royal Road a menudo preguntan por sus actividades.” “Siempre se disfraza cuando sale de viaje.” Los jugadores nunca se daban cuenta de la presencia de Weed, aunque estuviera sentado a su lado en una taberna. Hasta ahora había estado transformado en un cuervo, haciendo que fuera mucho menos probable que se dieran cuenta de su presencia. ¡Hasta un pequeño cambio en la forma de su peinado era un disfraz perfecto! De hecho, hasta sus amigos más cercanos se sorprendían. Cuando estaba en combate siempre vestía una armadura increíble, pero como la durabilidad bajaba al usarla, siempre se ponía un conjunto de ropa de novato y hacía que la atmósfera a su alrededor cambiara por completo. ‘Ya es la hora.’ Weed terminó una cena sencilla mientras llegaba la noche. Esta era una zona en la que era un poco complicado conseguir comida, así que se había acercado hasta la taberna para obtener información. Aunque esto no ayudaba a sus ingresos. Ese día, en vez de transformarse en un cuervo, se convirtió en uno de los monstruos más poderosos de la zona por medio de la [Transformación Escultural].

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Muuuuuy buenas Geomchis Hoy os traemos un cap extra de LELL, q viene patrocinado por nuestros incansable Legión del F5, y espcialmente por el geomchi M_Mayuscula con el cual estamos de celebración por el nacimiento de una nueva geomchi guerrera. ¡¡Felicidades de parte del staff!! Y gracias por el rico pan de cebada 😊 Ahora q los Geocmhis ya están explotando sus habilidades y gastando generosamente sus puntos de contribución... me pregunto cuanto tardaran en hacer ellos tmb la misión de clase... os imagináis a 505 tipos grandes como armarios haciendo las misiones de maestría a la vez? la gente lo fliparía xDD En fin... gracias a todos por colaborar dandole a la publi para q podamos traeros estos caps extras, tmb agradecer a todos los q cometíais cada capítulo y a los q nos dais guerra en discord y facebook Un saludo Geomchis ¡Nuestra espada es invencible!