sábado, 29 de septiembre de 2018
martes, 25 de septiembre de 2018
domingo, 23 de septiembre de 2018
Volumen 22 Capítulo 2
Volumen 22 Capítulo 2
La gran construcción
Traducido por Tars
Corregido por DaniR
Editado por AMarauder
Corregido por DaniR
Editado por AMarauder
Los barcos de Weed llegaron al continente Norte desde alta mar. Como había vendido la mayor parte del botín a unas interesadas sirenas, Weed ahora estaba concentrándose en aumentar su habilidad para [Esculpir las nubes].
“Moldear nubes es bastante difícil. No es fácil lograr la forma de lo que trato de crear, y plasmar expresiones es tan complicado…”
Por norma general usaba grandes cantidades de piedra o madera para esculpir los detalles de sus esculturas, pero esto no podía hacerlo cuando tallaba nubes. Había creado miles de esculturas a partir de las nubes mientras navegaban por alta mar. Pero como la mayoría se deshacía al poco tiempo de crearlas por culpa del viento, no podía apreciar sus errores. Crear una obra de arte con una nube que solo podía mantener su forma durante un corto periodo de tiempo era un asunto complicado.
“Debería crear algunos peces. Tal vez algunos atunes, camarones y cangrejos; también puedo añadir una ballena.”
¡No era una obra de arte sino un compromiso! Empezó a hacer cosas al azar, elevando su habilidad repitiendo el proceso una y otra vez. Después de producir cien esculturas con nubes, se produjo un misterioso fenómeno natural. Había un montón de nubes blancas y oscuras que se encontraban en la dirección por la que el barco había estado avanzando. Las esculturas de Weed se habían ido desplazando en la dirección del viento hasta mezclarse, formando una tormenta que se aproximaba; ahora las nubes cubrían el cielo. Sin embargo, no estalló una tormenta normal, sino solo una pequeña llovizna que empezó a caer sobre el mar.
“Asombroso…”
“Esta debe ser una de las vistas más hermosas del mundo.”
El resto del grupo, que había estado holgazaneando mientras tomaba el sol sobre la cubierta, se puso en pie y se dirigió hacia la proa del barco. En el oscuro cielo, una luz caía de entre las nubes.
¡Ding!
Has completado una Escultura de la Naturaleza.
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Se trata de una maravilla de la madre Naturaleza. Esta increíble escena repleta de rayos de luz proyectándose sobre el mar ha sido creada por un talentoso escultor.
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La habilidad [Dominio de la Escultura] ha mejorado.
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Subes de nivel: [Esculpir la Naturaleza] Principiante – 3 (0%)
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La [Fama] ha aumentado en 145 puntos.
El [Arte] ha aumentado en 7 puntos.
La [Afinidad con la Naturaleza] ha aumentado en 15 puntos.
La [Sabiduría] ha aumentado en 3 puntos.
La [Inteligencia] ha aumentado en 3 puntos.
La [Suerte] ha aumentado en 3 puntos.
Todas las estadísticas han aumentado en 2 puntos.
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La luz que bajaba hacia el mar se veía absolutamente majestuosa. Era complicado producir una escultura en una nube, ya que exigía una gran cantidad de imaginación y de concentración, pero, ¿en qué otro sitio podría crearse una escultura tan maravillosa tallando luz y nubes?
Esta increíble Escultura de la Naturaleza otorgaba un aumento significativo en las estadísticas basadas en la profesión del usuario. En el caso de Weed, este fenómeno había elevado todas sus estadísticas, especialmente las que influían con el mundo del Arte. También sus amigos, que habían estado observando con asombro la magnífica escena, se dieron cuenta de que habían ganado nuevos puntos de estadísticas. Irene, cuya clase era la de sacerdote, había aumentado su [Fe], mientras Romuna, que era maga, había aumentado su [Inteligencia] en 5 puntos. Hwaryeong había visto aumentado su [Encanto] por ser una bailarina. Todos habían sufrido un impulso en sus estadísticas principales mientras disfrutaban de la Escultura de la Naturaleza.
“Guau, ¡esto es único!”
Sus amigos no podían ocultar su sorpresa.
“Y todo esto con el nivel inicial de [Esculpir las nubes].” – dijo Weed mientras hacía una mueca con la boca que parecía a una sonrisa.
¡Cuando todo está dicho y hecho lo único que importa son los resultados!
Amarillento se tambaleó hacia atrás y pisó a una de las esculturas vivientes, un grifo. El alboroto condujo a otras esculturas vivientes que Weed había dado vida en Las Falanges a subir a la cubierta de la pequeña nave y ver la luz que estaba cayendo desde las nubes.
¡Ding!
Varias estadísticas de las esculturas vivientes han aumentado.
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Aunque las esculturas vivientes habían sido creadas a partir de obras de arte, también se vieron influenciadas por la obra, al igual que cualquier otra especie.
* * *
Se iban acercando a tierra y su largo viaje estaba llegando a su fin. Weed y sus compañeros se estaban preparando para desembarcar cuando múltiples esculturas vivientes se acercaron para plantear sus demandas. Las cañas de pesca y el resto de herramientas de cocina que estaban en la cubierta se guardaron junto al resto de equipaje. Todos llevaban las mochilas llenas. Sin embargo, las esculturas vivientes que habían sido creadas a partir de modelos de monstruos raros o extintos tenían sus propios objetivos. Continuaron molestando a Weed y no paraban de decir que querían marcharse para reconstruir su especie.
“Quiero buscar una hembra, quiero tener hijos. Si voy a sitios lejanos voy a poder conocer a otros de mi especie.”
“Si nos das la libertad, queremos ir a una tierra lejana y formar un clan.”
¡Las esculturas vivientes tenían muchas exigencias! Estaban preocupadas, ya que sin un compañero, irían muriendo poco a poco, hasta terminar toda su miserable existencia solos. Y no era la demanda de una o dos esculturas: casi un tercio de las esculturas creadas en Las Falanges tenían estas exigencias.
“¡Uff!” – suspiró Weed. Estaba empezando a tener dolor de cabeza.
Originalmente, desde el momento en que había dado vida a las esculturas, había hecho todo lo posible por ganarse su respeto y mantener una buena relación con ellas en todo momento. Pero esta vez había dado vida a demasiadas esculturas al mismo tiempo, por lo que no le habría dado resultado gobernarlas por la fuerza como había hecho en otras ocasiones.
Todas las esculturas estaban mirando a Weed con ojos brillantes. ¡Pensaban que era una persona buena y amable que les daría permiso! Pero en la mente de Weed, sus pensamientos eran totalmente diferentes.
‘Debería haberles dado una paliza a todos.’
Si tuviera que forzarlos y mantenerlos como esclavos, podrían comenzar una rebelión, incluso podrían escapar. Dirigir a las esculturas vivientes no era una tarea sencilla. Debido a la alta puntuación de [Liderazgo] de Weed, los wyverns y Bingryong no podían abandonarlo. Sin embargo, el resto de esculturas vivientes que buscaban una vida libre, tenían personalidades demasiado fuertes. Controlarlos como un ejército había sido imposible desde el principio, suponía demasiados problemas, ya que tenía que ganarse su confianza primero haciendo algunos favores. Había llegado el momento de hacer sacrificios.
“En este amplio continente…” – empezó diciendo Weed con voz dudosa. Tenía problemas para dejar que todas las esculturas con una personalidad fuerte, se fueran. – “¿Por qué estás tratando de dejarme? Lo que queréis…”
En este mundo no es posible vivir haciendo todas las cosas que quieras y esperar que todo salga bien.
“La vida…”
Weed estaba luchando contra la tentación de ponerles una anilla en la nariz y arrastrarlos como si fueran vacas para que trabajasen. Estas esculturas no esperaban ganar nada trabajando para Weed. Además, tardarían un montón de tiempo en encontrar una pareja y poder formar una familia; debido a esto, tardaría demasiado tiempo en conseguir beneficios.
“Puedes ir y vivir tu vida…”
Las lágrimas brotaban alrededor de los ojos de Weed cuando esas últimas palabras se escaparon de sus labios. En su cara se estaba mostrando un pesar sincero debido a la marcha de las esculturas vivientes. Cualquier otra persona estaría derramando lágrimas de amor pero, tratándose de Weed, era evidente que sus lágrimas se debían a la pérdida.
“Nos iremos ahora.”
Las extrañas criaturas vivientes se fueron montadas sobre la tortuga gigante y se perdieron en el mar. Estuvo ansioso hasta que desaparecieron de su vista por completo. ¡Ni siquiera le habían dejado algo de oro como compensación!
“Si continuamos a este ritmo deberíamos llegar a Morata en uno o dos días.” – murmuró Seoint mientras se levantaba, se inclinaba ligeramente y lloraba de alegría. Por fin, el viaje de ida y vuelta a Las Falanges había terminado.
A pesar de que no habían recorrido Las Falanges, al menos habían sido pioneros en la búsqueda de una ruta para llegar hasta ellas. Habían atravesado los mares del Norte, a la vez que descubrían nuevos terrenos de caza. Aunque Weed se había llevado todas las ganancias, finalmente había llegado la hora de separarse de semejante demonio.
“¡Je, je, je! Te debo mucho. Gracias por esta divertida aventura.”
“En el futuro seré amable con los demás jugadores y trataré de no meterme en problemas con nadie. Que te vaya bien, estaré esperando tus nuevas aventuras.”
“Viviré como si hubiera nacido de nuevo. Si vuelves al mar, llámanos.”
A pesar de que habían sido contratados como tripulación con engaños, mirando el resultado, habían visitado muchos lugares y el resultado final no había sido malo. Así pues, ‘Los tres tiburones locos de Beckin’ dijeron adiós y se despidieron educadamente. Por supuesto, no tenían la más mínima intención de volver con Weed si los llamaba en el futuro.
“¡Aiiiiiiiiis!” – suspiró Weed exageradamente.
Estaba recibiendo su despedida al llegar a tierra y, aunque se sentía un poco falsa, estaban dando las gracias, por lo que no tenía claro cómo responder.
“¿Estáis seguros de no hacer daño a los demás y ser amables en el futuro?” – dijo Weed frunciendo el ceño.
“Por supuesto que sí. Ayudaremos a los jugadores novatos y viviremos una vida justa y honesta.” – dijo Seoint mientras movía los ojos a izquierda y derecha.
Honestamente no sabía qué iba a pasar en el futuro, pero ahora sus sentimientos parecían sinceros. Weed había rechazado a toda la segunda flota del Reino de Haven y Seoint nunca podría olvidar sus recuerdos de la lucha contra los piratas y la armada. No sabía que habían sido vistos por las emisiones televisivas y se habían vuelto tremendamente populares. Durante los últimos eventos, era como si una cerradura se hubiera desbloqueado en su interior y se sentían totalmente exaltados. Se habían cansado de ser pequeños ladrones. Querían viajar por los mares con su propia fuerza. Sus aspiraciones habían aumentado después de estar en Las Falanges.
“No necesitas vivir una vida amable y estable.” – dijo Weed pensando que estaba escuchando tonterías mientras negaba con la cabeza.
“¿Ein?”
“Es un desperdicio total. Recibir elogios por ser bueno no tiene ningún beneficio. Ser despiadado, mezquino, cobarde y desvergonzado te hará crecer más rápido que los demás.”
“¡Ooooh, es verdad!”
¡Esta era la verdad absoluta del ‘Dios de la Guerra’!
“No te rindas. No pierdas ninguno de tus objetos y asegúrate de saquear las cosas de tus enemigos. No digas que no es tuyo desde el principio, no pierdas la esperanza y terminará apareciendo una oportunidad. Y nunca dejes cosas a medio terminar.”
Weed y ‘Los tres tiburones locos de Beckin’ eran el mismo tipo de personas.
“Eres malo hasta la médula.”
“Eres malvado, pero completamente honesto. Tienes mi admiración y respeto.”
“¿Puedo llegar a ser malvado y tener tanto éxito como tú?”
No lo estaban insultando; su corazón era oscuro, pero también tenía todo su respeto. Para las personas con sueños malvados, Weed era una existencia que la gente admiraba.
“Bueno, es hora de que nos vayamos.”
“Cuidaos. Asegúrate de recoger el dinero del suelo.”
‘Los tres tiburones locos de Beckin’ fueron a despedirse de los compañeros de Weed.
“Entonces, así es como nos separamos.” – dijo Bellot mientras se despedía haciendo que Seoint se pusiera triste.
A pesar de que había terminado en todo este lio después de conocer a Bellot en una taberna y haber vivido tiempos difíciles en medio de un mar agitado, mientras la miraba, una ola de coraje se apoderó de su corazón. Olvidó el resentimiento que sentía por ella mientras la idea de no volver a verla lo empujaba hacia delante.
“Bellot, si no te importa… ¿Te gustaría registrarme como amigo?” – preguntó Seoint nervioso. Era una solicitud de amistad espontánea.
“Sí, está bien.” – respondió Bellot asintiendo con la cabeza después de vacilar por un momento.
“Me pondré en contacto contigo más adelante.”
Seoint estaba encantado más allá de lo indecible y siguió despidiéndose de los demás. Mientras Fractal y Bordomir miraban boquiabiertos la escena que se desarrollaba ante ellos, llegaron a la misma idea. No podían irse sin hablar con Hwaryeong.
“Me enamoré de tu belleza a primera vista. No puedo ni decir lo loco que estoy por ti, pero si me dieras la oportunidad, me gustaría mostrarte mi lado más viril. Por favor, regístrame como tu amigo.”
“Por favor, regístrame como amigo a mí también. Eres la persona más hermosa que he visto en toda mi vida.”
Pale, Irene, Surka y Romuna los miraron con lástima. ¡No sabían que Hwaryeong estaba enamorada de Weed!
“Probablemente serán rechazados sin piedad.”
“Lo siento. Hwaryeong es bastante quisquillosa si no le gusta una persona.”
“Es un honor para mí viajar con personas tan maravillosas. Os registraré como mis amigos.” – respondió Hwaryeong asintiendo con la cabeza.
Fractal y Bordomir estaban aplaudiendo en silencio. Y así fue como el grupo se separó de ‘Los tres tiburones locos de Beckin’. Decidieron quedarse con las tres naves en las que habían viajado desde Las Falanges. Como no les quedaba dinero, las intercambiaron por una pequeña cantidad de valiosos objetos que aún tenían. Si Weed quería vender los barcos tenía que llevarlos hasta un puerto, lo que le haría perder mucho tiempo y era mejor deshacerse de ellos rápidamente. Si ‘Los tres tiburones locos’ regresaban a Beckin y los vendían, podrían recuperar parte de su dinero. Al final, los barcos desaparecieron lentamente en la niebla.
“¿Por qué aceptaste sus solicitudes de amistad?” – le preguntó Bellot a Hwaryeong ante lo que había sucedido.
“Era incómodo y embarazoso rechazarlos delante de todos. Solo los he aceptado, ya los borraré más tarde.”
“Haré lo mismo.”
Las dos eran bastante populares, por lo que recibían una cantidad enorme de solicitudes de amistad. Generalmente les daban sus números para no crear un escándalo y luego cambiaban de número o bloqueaban sus llamadas.
* * *
“Ya casi hemos llegado.”
Weed cabalgaba a lomos de Amarillento mientras el resto montaba sobre otras esculturas vivientes. Pronto estuvieron en las colinas que rodeaban Morata. Los caminos estaban repletos de mercaderes que entraban y salían de la ciudad, mientras que grupos de novatos, vestidos con ropa sucia, caminaban juntos con energía. Finalmente, Weed había vuelto a su ciudad.
“Desde que era pequeña he tenido cachorros en casa, así que siempre me han gustado los perros. Cerberus, te daré un baño en el río más tarde.”
Surka pensaba que era un cachorrito lindo y le dio un par de palmaditas en una de sus cabezas mientras iba montada en el perro. Era la escultura viviente Cerberus, el guardián del infierno. ¡Y lo trataba como si fuera un cachorro! No era tan malo como Weed, y había viajado a muchos lugares para ir de caza por lo que estar rodeada de monstruos no le daba miedo. También mientras regresaba de Las Falanges en barco, había cazado monstruos marinos con un aspecto horrible.
“¡Los monstruos son comida, artículos y experiencia!”
Gracias a Weed, ahora tales monstruos eran normales para el grupo. Cerberus movió la cola y actuó de forma encantadora. Su lengua incluso lamió la mano de Surka. Era una imagen increíble viniendo de un perro de ese tamaño; si lo hubieran visto en medio de una batalla, nadie habría supuesto que podía cambiar tanto de temperamento.
Durante su viaje a Morata habían pasado mucho tiempo comiendo solo lo que pescaban del mar, y todos tenían ganas de comer carne, por lo que organizaron grupos de caza. En un momento, Cerberus olfateó el suelo, saltó a los arbustos y en menos de dos minutos regresó con un jabalí en sus fauces.
“Te llamaré ‘Sabueso’.” – dijo Weed nada más verlo regresar.
¡Acababa de dar el primer nombre al azar que le había venido a la mente! Pero al escuchar sus palabras, sus amigos no pudieron soportar esa atrocidad de nombre.
“¿Qué diablos haces? No le des un nombre tan ambiguo.” – dijo Bellot.
“Se parece a un guardián del infierno, así que llámalo Cerberus.” – añadió Hwaryeong.
Ambas estaban protestando, pero Weed no hizo caso.
“No, no me gusta.”
“¿Por qué? ¿Cuál es la razón por la no quieres llamarle Cerberus?”
“Es un nombre molesto.”
Los perros eran únicamente carne, y por tanto comida. Además, cuando llegaba el verano su lealtad podía disminuir. Y como era un perro de caza, ¡era perfecto llamarlo Sabueso! Sin embargo, sus amigos siguieron insistiendo y se negaron a llamarlo como un perro de caza. Como meneaba la cola cada vez que se le llamaba con su nombre original, se quedó como ‘Cerberus’.
Weed continuó dando nombres a otras esculturas vivientes por la noche.
“Tú vas a llamarte ‘Serpiente de campo’.”
Una elegante serpiente con docenas de patrones en su piel recibió el nombre de Serpiente de campo.
“Voy a llamarte ‘Lombriz’.”
Era un gusano de la muerte. Se trataba de un monstruo que vivía debajo de la tierra y que podía llegar a crecer hasta ser un monstruo colosal de más de doscientos metros. Cuando volvió a la vida en Las Falanges su tamaño había sido solo de un metro, pero a medida que había ido consumiendo alimentos, había crecido hasta los ocho metros de longitud. Mientras pescaba, Zephyr había querido usarlo como cebo, pero ahora era tan grande que podía tragarse una ballena. Hasta ahora, nadie había sido capaz de atrapar un gusano de la muerte.
“¿Qué tal si te llamó ‘Hierro’?” – le preguntó al caballero. Estaba a punto de nombrarlo directamente, pero luego recordó que era mejor pedirle su opinión.
‘De momento, el caballero no siente mucha lealtad y tiene un fuerte sentido de orgullo; si le doy cualquier nombre me pedirá su libertad y posiblemente se vaya, aunque le diga que no.’
“Me gustaría que mi nombre fuera ‘Sol Negro Plateado’.” – dijo el caballero contestando directamente.
“¿Y la razón?”
“Es un recuerdo de los deseos de la persona que me creó.”
La lealtad del caballero por la persona que le había creado era fuerte. Era una escultura que no iría en contra de los deseos de su escultor.
“Bien. Te llamaras ‘Plateado’. Espero con ansia trabajar contigo.”
El resto de las esculturas que lo acompañaban recibieron cualquier nombre, según los criterios disparatados de Weed.
Desde el momento en que las esculturas vivientes desembarcaron, fueron de caza juntas a un bosque con los wyverns. El gigante de fuego, que había abandonado Las Falanges viajando a lomos de Fénix junto con Bingryong, también estaba cazando junto con ellos en el gran bosque.
“A medida que las esculturas vivientes se hagan más fuertes, ¡puedo hacer que hagan muchas cosas y ganen dinero!”
* * *
Weed estaba de regreso en Morata. Podía ver la ‘Torre de la Luz’ en la montaña oriental, el gran lago con ‘La estatura de la diosa Freya’ y el Centro de Artes. Los jugadores se apiñaban por todas partes. En el pasado, frente al gigantesco castillo negro donde vivían los vampiros, había habido una vez edificios derrumbados pertenecientes a un pueblo humilde. Pero ahora había caminos empedrados, tiendas construidas con ladrillos y áreas residenciales.
“Vamos, rápido. Si llegamos tarde habrá demasiada gente.”
“¿Volverás a la noche?”
“Sí, volveré para ver el espectáculo de luces de la ‘Torre de la Luz’.”
Muchos grupos se formaban para ir de caza o de aventuras y se movían montados sobre toros mientras se dirigían a las mazmorras cercanas. Desde las colinas se podían ver los barrios de viviendas que rodeaban el centro de la ciudad.
“Ha aumentado el número de personas y de casas.” – dijo Weed cuando observó las distintas zonas de la ciudad. Sentía que volvía a casa.
En sus cinco plazas, la gente estaba haciendo negocios y vendiendo los botines ganados con esfuerzo. El aumento de la cantidad de jugadores se podía notar solo con mirar. Sabía que Morata se había hecho más grande a través de los tablones de anuncios de Royal Road, así como por las retrasmisiones de KMC y del resto de emisoras. Aunque era distinto comprobarlo personalmente. Se hacía difícil recordar la humilde aldea que había sido en el pasado. El número de tiendas se habían multiplicado por cuatro o cinco veces.
“Debido a la guerra en el Continente Central, la ciudad ha recibido una gran afluencia de jugadores novatos. Una encuesta reciente realizada entre los nuevos jugadores de Royal Road ha demostrado que su lugar favorito para comenzar el juego es Morata.” – dijo Mapan a su lado.
Desde el punto de vista de los novatos, la guerra del Continente Central estaba envolviendo todo en caos, por lo que elegían Morata en detrimento de otros reinos del continente.
Weed caminó con su grupo hacia las puertas de la ciudad. Los novatos que estaban cazando zorros y conejos dejaron lo que estaban haciendo y agrandaron sus ojos cuando vieron llegar a ese grupo de personas.
“Ese toro… No puede ser, ¿no es Amarillento?”
En lugar de reconocer a los jugadores de alto nivel, ¡habían reconocido al instante al famoso toro Amarillento! Weed, al no estar transformado en un Lich o en su forma de orco, sino con su apariencia normal, fue reconocido inmediatamente por los guardias de la puerta.
“¡Es el Señor! ¡El Señor de Morata ha vuelto!”
Los jugadores novatos se reunieron a su alrededor y los rumores de su regreso se extendieron por todas las plazas de la ciudad. Los comerciantes cerraron sus negocios, los bailarines, bardos, escultores, pintores y arquitectos que estaban ayudando a construir la ciudad, abandonaron sus obligaciones y se reunieron alrededor de Weed. Casi el diez por ciento de la gente que se estaba congregando a su alrededor eran jugadores que se habían mudado a Morata. No había espacio para moverse. Se estaban reuniendo a su alrededor como si estuvieran recibiendo a un héroe.
“¡Queremos escuchar tu punto de vista sobre lo que sucedió en Las Falanges!”
“¡Cuéntanos la historia de tu disputa con el gremio Hermes!”
La popularidad de Weed era muy superior a la del líder de una secta, a pesar de que ya lo habían visto todo en las retrasmisiones de las emisoras, todos querían escuchar directamente sus palabras.
“Todos están esperando que hable.”
Weed meditó por un momento qué decir y usó su [Rugido del León].
«¡FUI! ¡LUCHÉ! ¡Y GANÉ…!»
¡Era como aquel momento tras derrotar a la Orden de Embinyu! Entre los jugadores de Morata, las frases de Weed eran muy famosas, pero los jugadores gritaban sus felicitaciones, ahogando sus últimas palabras, por lo que usó una vez más su [Rugido del León].
«¡FUI! ¡¡LUCHÉ!! ¡¡¡¡¡¡Y GANÉ MUCHO DINERO!!!!!!»
“¡¡¡Guuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuaaaaaaaaaaaaaaaah!!!”
Era el pico del frenesí y el júbilo. Había miles de jugadores felicitándolo por su victoria y el éxito de su misión. Todos querían hacerse amigos de Weed, dado que querían unirse a sus emocionantes aventuras. Weed terminó retirándose a la residencia del Señor y comenzó una tarea más importante: ¡contar dinero!
“Si añado el dinero hecho en Las Falanges, el intercambio con las sirenas y las ventas de los objetos conseguidos durante la misión, tengo 249.720 monedas de oro, 35 monedas de plata y 14 monedas de cobre.”
A pesar de que eran unos ingresos suculentos, se consideraba pobre si lo comparaba con todos los esfuerzos que había tenido que hacer como nigromante durante los meses que había estado en Las Falanges. Todos los minerales que había extraído durante la caza o la minería todavía tenían que ser procesados antes de poder venderlos. Las rocas lunares y la malaquita se podían vender después de crear productos con ellos, eran materiales muy demandados. Utilizando sus habilidades para esculpir podía crear algo simple con unos pocos detalles para que fueran más fáciles de vender. Tal vez un cuenco de cerámica sería suficiente y no sería difícil de hacer. Si al final sobraban algunas rocas lunares, podía fabricar otros accesorios para vender, obteniendo un sabroso margen de beneficios.
“Me pregunto cuánto ha cambiado Morata. ¡Ventana de estado!”
¡Ding!
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“Je, je, je, je, je.”
Weed tenía una sonrisa en los labios. Durante el tiempo que había estado en Las Falanges, los ingresos tributarios habían aumentado enormemente. ¡Y la población había aumentado con la llegada de nuevos habitantes! Además de los exploradores del Norte que andaban sin un hogar, había un gran número de nuevos novatos.
“Realmente tengo ojos para entender a la gente.”
¡Un buen gobernante sabe cómo reunir una gran cantidad de población!
Mientras el Señor estaba fuera, se habían construido casas y edificios comerciales. Esta era una de las razones por las que planificar zonas era muy importante. Si dejaba que hicieran lo que quisiesen, se tendrían que crear carreteras complejas, lo que dificultaría el movimiento de los carros y caravanas. Por ello, Weed había construido de antemano varias plazas y había expandido las distintas áreas alrededor de los caminos principales, para minimizar tales efectos secundarios.
En su ciudad, Weed vivía en un vecindario agradable a las afueras; por supuesto, no era una vivienda desde la que se pudiera ver el río Han, un lago hermoso o un parque. Vivía en una ciudad que parecía un tablero de ajedrez y desde la que se podía ver las montañas a lo lejos. En resumen, ¡Morata se parecía tanto a su verdadero hogar! Si se observaba la urbe, con la llegada de la noche se podía ver una ciudad plagada de luces. Por la mañana había que correr entre calles para repartir periódicos y durante el crudo invierno era muy difícil y peligroso viajar por los distintos callejones que subían a las colinas más cercanas.
Como ya tenía experiencia por vivir en una zona montañosa, le resultó más fácil planificar la ciudad para mejorarla. Por ello, había ubicado el área comercial en el centro, con parques, plazas y áreas residenciales rodeándolas. Más tarde, tenía planeado crear una zona residencial de lujo en las orillas del río. Por supuesto, ahora mismo todo estaba lleno de chabolas, pero eso no era un gran problema. Weed no tenía como objetivo los residentes de clase alta, ni siquiera los de clase media; como Señor, ahora mismo pensaba únicamente en los novatos.
“Los principiantes necesitan tener acceso a comprar una casa, ¡para que puedan pagar impuestos!”
Al principio, los jugadores novatos estarían satisfechos con una choza. Cuando subieran de nivel y tuvieran más dinero ya preguntarían por las casas de lujo. Primero tenían que enamorarse de su propiedad en Morata, sentirse apegados y luego pagarían más impuestos. Weed no creía que el barrio se viera horrible. Las chabolas, al lado de la gran escultura, le daban una apariencia encantadora.
“¡Todo esto es por los impuestos!”
¡Ding!
El desarrollo cultural de Morata está mejorando las capacidades de la región.
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Modo de Asuntos Internos de Morata: Expansión Cultural
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Morata se ha convertido en un área cultural floreciente debido a la influencia del arte en la vida cotidiana. Ahora los trabajadores y artistas de Morata pueden impartir sus conocimientos a monstruos de tipo humanoide.
Si consigues que los monstruos mejoren su inteligencia, los harás menos agresivos y, si les enseñas a hablar y leer, el comercio será posible y los humanos y el resto de tribus se volverán más amigables.
Sin embargo, para poder transferir cualquier tipo de cultura, arte o tecnología se deben poseer, como mínimo, habilidades intermedias en los campos relacionados y el conocimiento y la sabiduría necesaria. Así como habilidades lingüísticas.
Debido a la mejora en el desarrollo cultural, ahora se pueden construir grandes edificaciones.
Los edificios únicos dependerán del nivel de habilidad de los arquitectos que trabajen en la obra.
La edificación de este tipo de arquitectura proporciona un alto valor cultural a la ciudad y promueve el desarrollo de los campos relacionados con su uso.
Un trabajo relacionado con la cultura que pueda prosperar sin la necesidad de pelear, recibirá mejores beneficios.
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La expansión de la cultura era algo maravilloso. Si hay un aumento en la cantidad de pueblos que pueden comerciar, aumentará el desarrollo del comercio y la tecnología. El número de bienes disponibles también aumentará. También era una ventaja que las misiones estuvieran más diversificadas. En el futuro, los trabajos relacionados con la cultura se convertirían en uno de los mejores trabajos que alguien pudieran poseer. La cultura podía ser la mejor arma.
“Más pronto que tarde debería aumentar los impuestos en otras tres monedas de oro…” – dijo Weed decidiendo comenzar los trabajos antes de lo previsto.
A medida que iban aumentando los principiantes, estaba recaudando más impuestos de lo que esperaba. ¡Era la prueba de que valía la pena aguantar un poco antes de subir los impuestos! Hasta ahora, los impuestos en el Continente Central, a excepción de la tarifa para entrar en el Centro de Artes, eran mucho más altos que en Morata. Daba igual que fueran los impuestos comerciales, los impuestos a las viviendas o los impuestos a la industria.
“¡Modo del Señor de la Ciudad!”
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Esta era una de las funciones disponibles para el gobernante de Morata. El ‘Modo de Asuntos Internos’ había sido diseñado para manejar cosas a pequeña escala dentro de una aldea. Por ejemplo, cuando los residentes necesitaban nuevas infraestructuras o bienes, como una taberna o vacas. Podía manejarlo todo, desde la construcción hasta la fundación de nuevos gremios.
En las primeras etapas, el desarrollo del pueblo debía ser vigilado por su gobernante, pero ahora Morata ya se había convertido en una gran ciudad. Los arquitectos estaban aceptando y construyendo edificios que de otro modo Weed habría tenido que construir por sí mismo, y el tamaño de la ciudad había aumentado exponencialmente.
Era difícil obtener márgenes de beneficios aceptables de tabernas, posadas y tiendas normales debido a la gran cantidad de establecimientos y su pelea por atraer clientes. Aunque por ahora, todavía se podía ganar algo de dinero construyendo ese tipo de edificios, ya que daban un buen retorno de la inversión. La ciudad de Morata era el centro comercial de todo el Norte y, por ello, tenía una gran cantidad de comerciantes novatos. Así, en lugar de crear nuevas posadas o tabernas era el momento de expandir las minas y aumentar el comercio.
“Aun así, hay muchas cosas que debo desarrollar primero.”
Weed iba a invertir todo su dinero en Morata. Si sumaba su dinero personal y lo ingresado por la ciudad, junto con las 210.000 monedas de oro recaudadas de las entradas al Centro de Artes, ¡había juntado la increíble cantidad de 1.700.000 monedas de oro!
“Me parece que necesito plantar algunos árboles en los lados de los caminos.” – dijo Weed decidiendo primero usar su dinero para cosas menores.
¡Weed estaba mejorando el medioambiente! No parecía ser una mala idea plantar árboles, ya que estaba aprendiendo a esculpir la Naturaleza. Si había jugadores con la profesión de jardinero en Morata, podrían cuidar los árboles colocados a los lados de los caminos y ganar algo de experiencia. Aunque tales profesiones eran muy raras. ¡Weed invirtió la friolera de 1.298 monedas de oro en plantar árboles!
“Los arboles necesitan crecer de forma constante.”
Se dedicó a esparcir semillas baratas a los lados de las calles. Manzanos, perales, melocotoneros… ¡Solo árboles que daban fruta! Debido a que las semillas estaban bendecidas por la Orden de Freya, en el momento en que las semillas golpeaban el suelo, comenzaban a echar raíces y crecer rápidamente. ¡En un momento, creó huertos a lo largo de las calles!
“¡Me siento orgulloso de hacer buenas obras!” – dijo Weed satisfecho con su contribución al medioambiente.
Desde que se había convertido en Señor de la ciudad, había invertido de manera agresiva en el área agrícola para asegurarse de que nadie pasara hambre y, como resultado, Morata tenía grandes provisiones de alimentos. Trabajando juntos, los agricultores de Morata y la Orden de Freya comenzaron a despejar las tierras; plantaron, cultivaron y cosecharon una gran variedad de alimentos, como fresas, tomate, arroz, trigo o patatas. Morata estaba demasiado lejos como para importar alimentos desde el Continente Central y, debido a la gran concentración de monstruos, era muy arriesgado cultivar en los pueblos que rodeaban la ciudad.
Los agricultores también se reunían en Morata para celebrar un festival de la cosecha cuando terminaban de recoger los cultivos. Era un festival donde todos los habitantes del Norte se reunían y disfrutaban. Los agricultores competían por ver quienes habían logrado los mejores cultivos, mientras que los cocineros peleaban por hacer los mejores platos. Además, cuando ocurría este tipo de eventos, la ciudad y las aldeas circundantes tenían un aumento en la tasa de natalidad. La producción de alimentos estaba estrechamente relacionada con la tasa de natalidad en el Continente de Versalles, ya que generaba que el pueblo confiara en sus gobernantes y decidiera ampliar sus familias.
Debido a la alta producción de alimentos, la economía de Morata se había disparado y, hasta cierto punto, la seguridad había sido capaz de protegerlos de los ladrones. Cualquier pérdida de la cosecha, ya fuera por una sequía o por una inundación, produciría una falta de alimentos y la caída de la gente en la pobreza. Al final se quedarían sin hogar, lo que terminaría con una disminución de la seguridad pública.
“Ahora tengo que construir edificios.”
Weed ya no se molestaba con los edificios menores.
“Al fin puedo comenzar a construir una de las edificaciones únicas...”
¡Crear una edificación magnífica y sorprendente! A petición del Señor de la ciudad, todos los residentes y jugadores trabajarían juntos para construir tal monumento. Sería más grande que el resto de los edificios de la ciudad, de hecho, muchas personas con la profesión de arquitecto tendrían que unirse para construirlo. Si tuviera que compararlo, ¡sería algo como el Partenón, la catedral de Chartres, la catedral de Notre Dame o el faro de Alejandría! Solo se podían construir edificios de ese tamaño bajo las órdenes del Señor de la ciudad. El coste de este tipo de edificio era astronómico y el periodo de construcción era de unos cuantos meses, por lo que los señores del Continente ni siquiera lo intentaban.
“Vamos a ver qué podemos construir.”
A pesar de que Weed era un novato como arquitecto, ahora podía crear grandes edificios y no iba a perder la oportunidad ahora que tenía los fondos necesarios para hacerlo.
“Aunque sea demasiado ambicioso tengo que ir hasta el final, aunque me arruine.”
¡Cuántas esculturas se habían estropeado al empezar a tallarlas! Si se espera a que llegue el momento propicio, la gente nunca hace nada. Si la mente solo se preocupaba por el fracaso, entonces es mejor que se dedique a otra cosa. Si quieres hacerlo, es mejor hacerlo antes que dejarlo para más tarde. Aunque sea rudo y apresurado, es mejor hacerlo ahora que nunca. ¡No tenía sentido pensar en hacerlo más tarde!
“Ahora necesito dedicar todos mis esfuerzos a esto.”
Weed no podía crear una construcción de este tamaño por sí solo, por lo que no tenía más remedio que dejarlo en manos de los jugadores. Solo experimentando el fracaso, a través de pruebas y errores, se puede llegar al éxito.
“Pero no voy a fallar.”
Como su Señor, tenía confianza en los jugadores y sus residentes.
“Si fracasan les subiré los impuestos.”
¡Weed tenía un fuerte deseo de aumentar los impuestos!
Había decidido construir dos edificios. ¡La Catedral de Freya! ¡Y la Gran Biblioteca de Morata! Una vez que se completase la catedral, tanto la orden de paladines como la de sacerdotes podrían realizar el avance a la segunda especialización de sus clases. No necesitarían viajar al Continente Central para realizarlo.
“No puedo dejar que se vayan tan lejos, podrían ser contratados y nunca volver.”
Hay un dicho que dice: ‘Si dejas que salga, puede regresar con un cambio de opinión’. Además, la catedral tenía el efecto adicional de mejorar las habilidades de los sacerdotes y paladines. Y tenía un gran valor arquitectónico. El edificio aportaba múltiples ventajas: fortalecía la [Fe] y la [Moral] de la gente y la Orden de Freya podía usar la catedral para guardar objetos sagrados y reliquias. Los agricultores también podían rezar en la catedral para conseguir bendiciones en sus cosechas. La catedral también servía como disuasión para la invasión de monstruos gracias a los paladines que se apostaban para defenderla.
En cuanto a la biblioteca, todas las ciudades o castillos del Continente central tenían una o dos. El desarrollo del conocimiento era la quintaesencia de cualquier ciudad, incluso podía ayudar a que los magos desarrollaran nuevas habilidades. Cuando una misión estaba en progreso, uno tenía que ir al Continente de Versalles para investigar las historias y leyendas de los monstruos relacionados con tu cometido. ¡Pero Weed iba a construir una Gran Biblioteca! Cuando ibas de caza o de aventuras, a menudo encontrabas textos, documentos, libros, jarrones, esculturas de piedra o mapas con pistas sobre tu búsqueda. Si estaban relacionadas o eran importantes para tu misión, solo podrías deducirlo cuando consultabas una biblioteca. Y cuando no lo eran se acababa vendiendo en una tienda. Pero con una Gran Biblioteca habría mucha información sobre el Continente de Versalles en los distintos libros, y si los jugadores los consultaban y resultaba en una ventaja en la resolución de su misión, la experiencia también se compartiría con el propietario del libro. Era muy fácil buscar información ordenándola por la región, el año o el nivel de dificultad. ¡A veces se necesitaban entre cinco y diez pistas para resolver la misión!
En el Norte del Continente había muchas áreas inexploradas y todavía había muchos monstruos desconocidos. En este tipo de áreas inexploradas, las zonas circundantes podrían explorarse de forma segura. Además, construir una Gran Biblioteca desbloqueaba varias misiones para descubrir artefactos y se producía un aumento de las misiones de caza y aventuras. En el Continente Central solo las capitales de los reinos y algunas ciudades importantes contaban con una Gran Biblioteca.
“Este edificio debería elevar los precios de las viviendas.”
¡El aumento de impuestos siempre es el objetivo final!
“¡Construir la Catedral de Freya! ¡Construir la Gran Biblioteca de Morata!”
En el ‘Modo de asuntos internos’ seleccionó un área al lado de la Plaza de la Luz, junto a la Plaza de Bingryong. Se trataba de una zona más grande de la que ocupaban las dos plazas juntas.
¡Ding!
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Has ordenado la construcción de una gran edificación en la ciudad.
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¿Te gustaría que dieran comienzo las obras de la Catedral de Freya?
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“Comienza.”
Por orden del Señor, comienza la construcción de la Catedral de Freya.
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Esta era la primera inversión en casi dos meses en Morata. No importaba la decisión del Señor, si los habitantes de Morata y los jugadores no ayudaban a completar la obra, su construcción tardaría demasiado en hacerse o podría no terminarse nunca. ¡El Señor necesitaba tener la confianza de su pueblo! En el Continente Central no había confianza entre los habitantes de las ciudades y sus señores, dado que los jugadores solo hacían cosas para ayudarse a sí mismos o para mejorar su imagen.
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Has ordenado la construcción de una gran edificación en la ciudad.
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¿Te gustaría que dieran comienzo las obras de la Gran Biblioteca de Morata?
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“Empieza de una vez.”
Por orden del Señor, comienza la construcción de la Gran Biblioteca de Morata.
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La finalización de las obras dependía del número de residentes que se involucraran.
Weed terminó gastando el dinero que le quedaba en edificios simples. Hizo puestos de vigilancia donde podían estar cinco guardias; si patrullaban un poco, podrían atrapar ladrones. Estos edificios eran necesarios para aumentar la seguridad. Si había un fuerte declive de la seguridad, la lealtad de los residentes podría disminuir y con el aumento de ladrones empezarían a desaparecer los artículos de los comerciantes. Y si la seguridad se deterioraba demasiado, al final los comerciantes terminarían evitando la ciudad. Weed desplegó una gran cantidad de este tipo de puestos de guardia alrededor de las plazas y de los barrios marginales. También construyó un hospicio para dar de comer a los pobres. ¡Se necesita dinero para poner en marcha servicios sociales!
“¡Hmm!”
Weed se estaba mordiendo los labios, hasta el punto de llegar a reducir sus puntos de [Salud]. Los jugadores de alto nivel no se preocupaban por lo que iban a comer. ¡La alegría de viajar mientras recorres el Continente de Versalles para buscar todo tipo de tabernas con grandes cocineros! Sin embargo, durante el tiempo de ser un novato, hay que luchar para mantener el equipo en buen estado, por lo que no se come de forma adecuada. Weed hasta había llegado a comer cortezas y frambuesas que había encontrado en el bosque, pero esto no siempre lograba mantener la sensación de saciedad. Incluso se había hecho amigo del Instructor del Salón de Entrenamiento para conseguir algo de comer.
“Recuerdo esos tiempos difíciles… Debería ayudarles para que me tengan siempre en su memoria.”
El solo hecho de tener la presencia de una sopa realizada por un cocinero aumentaba mucho la lealtad de la gente. En Morata quería al menos tener un sistema de bienestar mínimo.
“¡Todo lo que necesito es dar comida! Entonces podrían trabajar más duro para devolvérmelo con impuestos.”
Los jugadores necesitan comer y crecer bien para luego gravarlos regularmente. El bienestar es esencial en el crecimiento económico.
* * *
Por orden del Señor de la ciudad, comienza la construcción de la Catedral de Freya.
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Los residentes que participen en esta gran obra obtendrán un salario diario y se otorgarán puntos de contribución de la ciudad.
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Por orden del Señor de la ciudad, comienza la construcción de la Gran Biblioteca de Morata.
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Los residentes que participen en esta gran obra obtendrán un salario diario y se otorgarán puntos de contribución de la ciudad.
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Los comerciantes que habían estado haciendo negocios en las plazas quedaron desconcertados.
“¿Qué es eso de la Catedral de Freya?”
“¿Qué está construyendo el Señor esta vez?”
Los comerciantes hablaban entre ellos, buscando más información. Mapan también estaba haciendo negocios en la plaza. Compraba grandes cantidades de armas de los jugadores y de los residentes y las vendía en los poblados más alejados del Norte.
“Las grandes construcciones arquitectónicas necesitan múltiples habilidades, desde escultores a pintores, y requieren ciertas condiciones para poder ser construidas. Es un proyecto formidable.” – dijo Mapan a las personas a su alrededor.
Como comerciante que había superado el nivel 300, había comerciado una gran cantidad de bienes en muchos lugares y estaba informado de una gran multitud de cosas.
“Las grandes estructuras cuestan mucho dinero y necesitan decenas de miles de personas para completarse. Es algo que no se puede hacer fácilmente.”
A medida que Mapan iba explicando, los mercaderes que venían del Continente Central iban asintiendo con la cabeza.
“¡Ah! Entonces es eso. He escuchado sobre ello, ¿pero no es muy pronto para construir algo así en Morata?”
“Aunque Morata es el centro del comercio del Norte e ingresa mucho dinero, creo que es demasiado prematuro asumir una construcción como esta.”
Los comerciantes no paraban de hablar entre ellos, habían viajado a muchos reinos y pueblos diferentes. Aunque habían conocido múltiples lugares, nunca habían visto que un gobernante comenzara este tipo de construcción. Hacer este tipo de obras llevaba varios meses y requería de grandes sumas de dinero.
“Construir uno solo ya es muy complicado, pero para intentar construir dos a la vez… El Señor es muy codicioso.”
“Siendo el Señor debe comprender que no puedes hacerlo todo por ti mismo. Es completamente diferente a estar únicamente cazando monstruos de alto nivel o gobernar una mansión.”
“A eso me refería.”
Los comerciantes del Continente Central se estaban burlando de Weed. Los jugadores que estaban en la plaza Bingryong buscando un grupo para ir a cazar, habían dejado de gritar al mismo tiempo. Todos habían tenido la misma idea.
“Iremos de caza en otra ocasión.”
“Sí, hay tiempo para terminar esta búsqueda. Hagámosla más tarde.”
“Muy bien, gracias chicos.”
Todos los jugadores corrieron hacia los sitios de construcción de la Catedral y de la Gran Biblioteca.
“¡Vamos!”
“Pongámonos a trabajar. Trabajemos duro.”
“Es un proyecto de construcción.”
“Me voy adelantando.”
Con la guía de los soldados que estaban vigilando la obra, comenzaron a cavar la tierra mientras otros iban hasta los almacenes de la ciudad a conseguir suministros. Los jugadores se movían como si estuvieran enfrentándose a un monstruo.
“Vamos a cortar algunos árboles.”
“¡Uaaaaaaaaaaaah!”
Los comerciantes estaban experimentando algo que no sucedía a menudo. Las hachas y muchos otros artículos terminaron agotándose en un instante. Los jugadores se amontonaban ante los puestos comerciales para comprar hachas. Las Hachas de mano eran las mejores herramientas para talar árboles y se vendieron rápidamente. Nada más conseguir una, corrían hacia los bosques cercanos.
“¡Vamos a juntar muchos troncos!”
Al adentrarse en los bosques de la montaña podían encontrar buenos árboles que se usarían como materiales de construcción. Quitaban las ramas y los arrastraban enteros. Cada árbol era transportado hacia Morata por seis personas.
Los mercaderes que vendían clavos, martillos, sierras y cualquier otra cosa necesaria en una obra se quedaron rápidamente sin existencias.
En cuando escuchó las noticias, Pavo corrió rápidamente hasta las obras. Desde la construcción del Centro de Artes, su nombre era reconocido como el del mejor arquitecto del Norte y supervisaba una gran cantidad de obras. ¡Había construido cabañas, caminos y puentes que conectaban la ciudad con las aldeas cercanas! Cuando escuchó las noticias de un amigo que estaba en Morata, corrió rápidamente hasta la ciudad.
“¿Dónde está el lugar de trabajo?”
Pavo y otros treinta y cinco arquitectos que solían trabajar con él revisaron la escena que tenían ante sus ojos. Una rápida estimación les daba que había más de quinientas personas cavando agujeros con sus espadas. Dado que el suelo era plano, la excavación se estaba realizando rápidamente.
“¡Avanza bien!”
“Cuando hayan terminado tenemos que mirar el área circundante. Empecemos a trabajar de inmediato.”
Los arquitectos se reunieron e inmediatamente comenzaron el trabajo de diseño. Para ellos, ¡construir una Catedral y una Gran Biblioteca era una oportunidad de oro! La orden de un arquitecto es ley en una obra. Además, los jugadores no eran los únicos comprometidos con la construcción de la obra.
“Es una orden de nuestro Señor.”
“¡Vamos a construir una Gran Biblioteca!”
Hasta los residentes de Morata salieron de sus casas y comenzaron a cargar sacos de tierra y piedras.
“¡Que los artistas se preparen para construir una catedral! ¡Reuníos!”
Muchos escultores que estaban tirados por el suelo se levantaron mientras que los pintores dejaron lo que estaban haciendo y corrieron hacia la obra. Desde que se había construido el Centro de Artes de Morata habían ganado una cantidad considerable de dinero. Pero la Catedral y la Gran Biblioteca iban a requerir una gran cantidad de artistas. ¡Por defecto tenía que haber decoraciones e ilustraciones elogiando a la diosa Freya! Era el sueño de los pintores y escultores; llenar todo un edificio de esculturas y pinturas, ¡desde el suelo hasta el techo! Muchos otros artistas también se estaban movilizando.
“Es una gran solicitud de Weed.”
“Ven a ayudar, podrás comer gachas de hierba.”
El grupo más grande de Morata se autodenominaba el Culto de Gachas de Hierba. La gran mayoría estaba compuesta por novatos, pero todos se apoyaban unos a otros de una manera extraordinaria. Había sido creado por una niña llamada Lemon, que había ayudado a cargar piedras para construir la Pirámide del Reino de Rosenheim, y estaba conformado por muchos otros jugadores que habían trabajado con Weed. Incluso habían ayudado a mover piedras para crear el lago de ‘La estatua de la diosa Freya’. Habían obtenido muchos puntos de contribución de la ciudad, dándoles la oportunidad de conseguir más cercanía con los habitantes de Morata. Esto les había permitido obtener muchas misiones, lo que había hecho su vida mucho más agradable. Su rendimiento en Morata era muy superior al que conseguirían en otras ciudades.
A pesar de que la ciudad había sido pobre y tenía falta de materiales y de muchos servicios, se había desarrollado rápidamente. Y como los jugadores y residentes trabajaban juntos mano a mano, era posible elaborar un plan rápidamente y llevarlo a cabo. Este era un gran proyecto de construcción que estaba movilizando a todo el mundo, incluso los jugadores orientados al combate estaban esperando a que Weed apareciera. Todos esperaban ansiosos que Weed comenzara a cocinar. Jugadores y PNJs trabajaban con entusiasmo.
“¡Tenemos trabajo que hacer!”
“Vamos a trabajar.”
Cuando comenzó la construcción de la obra, desde la distancia, otros jugadores corrieron apresuradamente hacia el sitio de construcción gritando con emoción.
“¡Weed ha creado un comedor de beneficencia!”
“¡Uooooooooooooooooooh!”
* * *
El día que Weed llegó a Morata se convirtió en un gran festival. Después de un largo tiempo de ausencia, el Señor había regresado de sus viajes, por lo que muchos habitantes corrieron a su encuentro para llevarle algunos regalos. El nivel de lealtad e intimidad de los habitantes de la ciudad era muy alto.
“Traigo algo de fruta para el Señor.”
Un comerciante de frutas ha traído manzanas, peras y granadas.
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“Me gustaría regalarte estas espadas, mi Señor. Si un monstruo invade Morata, úselas para proteger la ciudad.”
El maestro de armas te ha regalado 35 Espadas largas.
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Los colonos que habían vagado sin rumbo por el Norte finalmente tenían un lugar al que llamar hogar y le estaban dando las gracias a su nuevo Señor.
“No tienes que hacer esto… Solo soy una persona más que vive en Morata. Pero haré de la ciudad un lugar aún mejor en el futuro. Gracias. No voy a olvidar esto.” – dijo Weed dándole un apretón de manos.
No rechazaba ningún regalo. Estrechaba sus manos para animar al hombre a trabajar más duro por el futuro de la ciudad. ¡Había aprendido este método en la televisión viendo a los políticos estrechar las manos de los soldados!
“Si hay algo que necesites, por favor, dímelo. Somos una familia.”
“Siendo sincero, hay muchas personas que necesitan armas, pero el suministro de mineral de hierro es demasiado escaso.” – respondió el herrero, que estaba portando piezas de armadura con un requisito mínimo de nivel 150.
¡Ding!
Nueva Misión: [La urgente necesidad del herrero.]
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En las montañas que rodean Morata hay minas abandonadas que poseen minerales de hierro. Debido a la amenaza de los monstruos, comenzar una prospección minera no será fácil. El herrero Salloam tiene demasiadas peticiones y teme que no pueda cumplirlas todas.
Necesitas entregar 13 Menas de hierro.
Dificultad: ‘D’
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Restricciones:
Necesitas tener la habilidad [Minería].
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¡Había aparecido una misión!
Al llegar a Morata, Weed había viajado al Río de las Lamentaciones a través del portal de la ciudad para completar una misión que tenía pendiente. Se trataba de una misión en la que simplemente tenía que informar de lo ocurrido a la Orden de Matalost, por lo que ahora tenía espacio suficiente para aceptar nuevas búsquedas y poder aceptar la misión del herrero.
“Pero mi Señor. Eres famoso y estás muy ocupado, no es algo por lo que debas preocuparte.”
Como su [Fama] era alta, era una misión que no tendría penalizaciones por rechazar.
“¿De qué estas hablando? Si hay tal necesidad, el Señor definitivamente ayudará.”
Has aceptado la misión.
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Weed abrió su mochila y extrajo la cantidad requerida de Menas de hierro.
“Aquí tienes.”
“Muchas gracias, mi Señor. Con esto puedo cumplir todos los encargos.”
“En previsión de que algo como esto fuera a suceder había preparado algo de mineral. Es un alivio que aún tenga suficiente.”
“Sé que no es una gran cosa, pero iré hasta mi casa y traeré una armadura de las que fabrico.”
Has completado la misión: [La urgente necesidad del herrero.]
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Salloam ha podido obtener rápidamente el material que necesitaba.
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Recompensas:
Has adquirido un poco de experiencia.
La [Fama] ha aumentado en 13 puntos.
La [Lealtad] de los residentes ha aumentado.
Por ser su Señor, como logro adicional has conseguido una armadura.
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Los granjeros también se acercaron y hablaron acerca de sus problemas.
“Mi Señor, sé que es una petición difícil, pero he oído historias que cuentan sobre tu regreso de Las Falanges. Así que quería preguntarte sobre una flor conocida como el Segador del Sol, que crece en esas tierras. Me gustaría intentar plantar algunas… ¿Sería posible conseguir algunas semillas? Más tarde, cuando florezcan te devolveré el dinero.”
“Tengo unas pocas, así que te las daré.”
Weed siguió finalizando las misiones que actualmente tenía pendientes en Morata gracias a la información obtenida en el tablón de anuncios. A pesar de que eran búsquedas rutinarias y comunes, ayudaban a aumentar la intimidad y la fama con la población. Para alguien como Weed, que ya poseía un elevado valor de [Fama], era raro verlo hacer estas pequeñas misiones, pero si quería aumentar la lealtad de su pueblo, necesitaba completarlas. Debido a que era su Señor, la recompensa por completarlas era pequeña. Pero seguían dándole cierta satisfacción.
El botín conseguido en Las Falanges, así como el tiempo que había estado pescando mientras navegaba, le había permitido adquirir bienes que no eran comunes en la zona. Debido a estos elementos pudo completar las misiones con gran rapidez. Gracias a realizar una aventura por tierras desconocidas, todas las misiones que estaban sin resolver en Morata, fueron solucionadas en un instante. Si se encontraba con una misión en cadena, como Weed no tenía tiempo para avanzar en la misión, podía dejársela a otros jugadores.
“Estoy tratando de convertir un campo estéril en fértil, pero necesito algo de dinero, ¿podrías invertir algo para ayudarme?”
Como su gobernante podía hacer misiones donde la recompensa era parte de la cosecha. Inmediatamente completó la búsqueda dándole algo de dinero, aunque tendría que esperar a la próxima cosecha para obtener los beneficios.
“Necesito que des lo mejor de ti mismo para que la gente de Morata tenga comida en su mesa.”
Weed estaba dando la bienvenida a todo tipo de misiones. Era muy probable que la agricultura solo estuviera teniendo éxito gracias a que la Orden de Freya residía en Morata. Además, gracias al aumento de los jugadores no había monstruos que pudieran acercarse y devastar la zona, por lo que el daño a los campos de cultivo se había reducido.
“Muchas gracias. Nunca olvidaré tu bondad; el dinero y la fe que has depositado en mí dará sus frutos.”
Los habitantes de Morata han aumentado la lealtad con su Señor.
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¡Weed estaba consiguiendo misiones gracias a la confianza de la gente! Durante mucho tiempo, el gobernante de Morata no había estado atendiendo sus obligaciones, por lo que había una gran cantidad de misiones únicamente para el Señor.
“Siento que por la noche la seguridad es un poco escasa, ¿podrías aumentar algo la vigilancia de la ciudad?”
“Aumentaré la cantidad de soldados para que puedan atrapar a los ladrones por la noche.”
Weed tuvo que apostar más guardias para que vigilasen por la noche la ciudad, este tipo de misiones también eran responsabilidad de su gobernante.
Mientras se encontraba separado del grupo, pasó el tiempo resolviendo misiones y pronto llegó la noche. La ciudad al pie del castillo se fue iluminando con multitud de antorchas. Una de las medidas que había tomado fue la de realizar una gran fiesta para celebrar el regreso del gobernante de Morata, por lo que una enorme cantidad de jugadores estaba entrando por las puertas de la ciudad. Todos los jugadores que se encontraban dispersos por los terrenos de caza cercanos regresaron para disfrutar de la fiesta. Mientras se llevaban a cabo diversas actuaciones, la multitud mostraba su satisfacción al tiempo que reía.
“No es tan malo ver a la gente contenta.”
Weed era un gobernante que protegía a los habitantes dentro de su propiedad y tenía un poder absoluto sobre la construcción de la ciudad, la economía y el ejército. Después de regresar a Morata, realmente sentía que estaba gobernando un territorio.
“Es todo mío.”
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