sábado, 28 de marzo de 2020

G4L Capítulo 59

Arco 8 Capítulo 59
Salvia Sclarea
Traducido por Kroncar
Revisado del Japonés por Tars
Corregido por Darach
Editado por Tars

Ese día, por la tarde, mientras el sol se escondía por detrás de las montañas, la aldea comenzó a oscurecerse. Mientras tanto, en la entrada a la arboleda de la aldea de Grisea, Zirconia e Isaac se mezclaron con Varin, Valetta y otras docenas de aldeanos. Después de formar equipos de dos personas, estaban llenando los sacos con la montaña de abono que se había tirado en el suelo. Junto a ellos, ya se encontraban una gran cantidad de sacos llenos de abono y parecía que, después de unas pocas decenas de minutos de trabajo extra, podrían terminar. Al lado de los sacos de abono, había un contenedor, bidones de gasolina, una pila de sacos de cal, y una gran cantidad de cajas de cartón de distintos tamaños. Actualmente, Kazura no se encontraba allí, ya que había regresado a Japón para traer el último objeto pesado: el refrigerador. Havel se encontraba un poco más lejos, montado en uno de los carros, recibiendo los sacos de abono traídos por los aldeanos. Estaba ayudando a meterlos en la parte trasera del carro. “Es una cantidad enorme… Me pregunto qué habrá dentro.” – dijo Zirconia clavando la pala que le habían prestado los aldeanos. Tomando un respiro, se giró para mirar el montón de cajas de cartón que se encontraban al lado de los sacos. Isaac, quien estaba abriendo los sacos, fue atraído por las palabras de Zirconia y dirigió su atención hacia las cajas. “Le pregunté esta mañana a Kazura, parece que contienen comida que come en el reino de los Dioses y herramientas como esa linterna que nos mostró antes. Ordenó ser lo más cuidadosos posibles a la hora de transportarlas.” – dijo Isaac. “Hmm… Entiendo si son herramientas, pero para traer tanta comida… Me pregunto si nuestras comidas no son de su agrado”- dijo ella. “Ya veo...La comida enlatada que el Señor Kazura nos dio para comer el otro día estaba bastante condimentada. Los platos que nosotros estamos acostumbrados a comer podrían ser un poco insulsos para su gracia.” – respondió Isaac. “Ciertamente, era un condimento bastante fuerte… Más tarde, debemos consultar con el Señor Kazura sobre el sabor de la comida.” Cuando Zirconia comió con Kazura en Isteria, no puso ninguna expresión de insatisfacción en su rostro. Sin embargo, si había traído tal cantidad de comida, le hacía pensar que solo estuvo actuando con cuidado para no preocuparla. “Cuando Kazura se quedó en la residencia de Havel, escuché que estaba muy complacido con los platos que se le sirvieron. A lo mejor tenemos que hablar con Havel sobre que cocinar.” – dijo Isaac. “¿De verdad? Entonces, lo discutiremos con Havel. O mejor aún, realmente nos ayudaría si pudiéramos llevar a la persona que estaba cocinando en ese momento a la mansión.” “Entonces, tendremos que hacer esto lo más rápido posible.” – respondió. Mientras Zirconia e Isaac hablaban sobre eso, un poderoso sonido comenzó a salir desde la arboleda. Unos minutos más tarde, Kazura apareció desde dentro del bosque, conduciendo el tractor. En la parte trasera del vehículo, había una gran caja rectangular. También había una gran cantidad de mantas debajo de la caja para absorber las vibraciones del tractor. Cuando Kazura llego a la entrada de la arboleda, apago el motor y dejó el asiento del conductor para estirar su espalda. “Ah, finalmente se terminó.” “Buen trabajo, Kazura. Ten un poco de agua.” – dijo Valetta. Había corrido hacia él con una bolsa de agua en la mano nada más verlo llegar. Kazura le agradeció y recibió la bolsa con una sonrisa. Luego tragó el agua refrescando su seca garganta. “Lo he estado pensando últimamente, pero, ¿ no pareciera que a Kazura le gusta esa chica?” – susurró Zirconia a Isaac al ver esa escena. “Eso parece. Cuando escuchó sobre el ataque de bandidos en Isteria, sus primeras palabras fueron preguntando por la seguridad de la señorita Valetta.” “Hmm…” – murmuró Zirconia. Estaba inclinando la cabeza, con una actitud pensativa, mientras observaba a Kazura y a Valetta. Tal vez porque sabía en que estaba pensando, Isaac sacudió la cabeza y soltó un suspiro mientras ataba el saco que tenía entre las manos. Ya estaba lleno. “Señora Zirconia, llevaré esta bolsa al carro.” – dijo Isaac. “Entonces eso significa que apunta para ambos lados… Ah, sí, gracias. Iré más tarde” – respondió. Después de hacer una reverencia, Isaac llevó el saco al carro donde esperaba Havel. Zirconia entonces se aproximó a Valetta y a Kazura que seguían charlando entre ellos. “Señor Kazura, ¿este es todo el equipaje?” – preguntó Zirconia. “Si, ya hemos terminado. Solo queda cargarlos en el carro. Sin embargo, pronto anochecerá, así que deberíamos descansar por ahora y continuar con esto mañana.” – respondió Kazura, asintiendo con una sonrisa. El peso de las cosas que había transportado Kazura era enorme y, si se incluía el abono y la cal, se acercaba a las cincuenta y dos toneladas. Con el número de carros que habían traído a la aldea y si todos los aldeanos ayudaran a cargarlos, podrían terminar con todo el equipaje que planeaba llevar a Isteria en una hora. Sin embargo, el sol ya había comenzado a ocultarse, así que estaría bien incluso si continuaban con el trabajo al día siguiente. Además, aunque Kazura había traído 50 toneladas de abono, solo habían metido en sacos 45 toneladas. El resto era para la aldea de Grisea. “Está bien, mañana traeré los carros hasta aquí. Pero dado que los soldados no pueden entrar en el pueblo, necesitaré la ayuda de algunos aldeanos para que traigan los carros.” En un principio, iba a ordenar a los soldados que llevaban los carros que fueran hasta la aldea, pero la vista de los cultivos de la aldea era demasiado impactante. Era algo que no debía ser visto por nadie más que los aldeanos, así que ahora se encontraba con falta de mano de obra para conducir los carros. “Entonces, informare de esto a todos los aldeanos y, mañana por la mañana, nos dirigiremos a tu campamento.” – dijo Kazura. “Muchas gracias. Entonces regresaremos a nuestro campamento.” – respondió Zirconia. A continuación, caminó rumbo al carro cargado de sacos de abono donde Isaac y Havel la esperaban.
* * *
Unas horas después. En sala central de la residencia de Varin, Kazura y Valetta estaban sentados uno al lado del otro, frente a la chimenea, hablando mientras bebían té de hierbas.
Frente a ellos, había docenas de pequeñas botellas con aceites esenciales y un libro técnico abierto, a todo color, que describía sus efectos. Actualmente, Varin no se encontraba en la residencia, se había ido a guardar las cosas que habían dejado en la arboleda. Había dicho que regresaría después de medianoche, así que Kazura y Valetta se encontraban solos. “Los aceites esenciales son increíbles. Tienen tantos efectos especiales…” – dijo Valetta, mostrando su admiración, mientras leía sobre sus efectos en el libro. El libro explicaba el efecto de docenas de aceites y cómo mezclarlos. Además, se describían las mejores formas de usarlos y los distintos métodos para refinarlos. “Hay muchos tipos de aceites esenciales y sería interesante probarlos, pero no sé qué tan efectivos son para las personas de este mundo…” Teniendo en cuenta los terribles efectos de la comida o de la bebida energética, no sería de extrañar que los aceites esenciales también pudieran mostrar efectos anormales. Sin embargo, a pesar que había utilizado los aceites en Isaac y Marie, todavía no sabía cuan efectivos eran. Pero cuando usó el aceite esencial de lavanda, que poseía propiedades antidepresivas y calmantes, con Isaac, que estaba muy deprimido, este pareció recuperarse en cuestión de minutos. Sin embargo, en ese momento, también estaba bebiendo té de hierbas con acción antidepresiva y efectos relajantes, mientras tenían una breve conversación, así que no estaba seguro de que era lo que había producido la recuperación de Isaac. Cuando uso el aceite esencial en Marie, que sufría mareos, inmediatamente se sintió mejor. Pero el efecto y el tiempo parecían ser similares a los que tendría si se usaba el aceite esencial en Japón. Era natural usarlo debido a sus efectos inmediatos, pero no sabía su grado de efectividad. “Parece que se necesita como dos horas para que la comida y la bebida energética muestren sus efectos, pero ¿qué hay de los aceites…? Como no son absorbidos como nutrientes, la manera en que manifiesten sus efectos podría ser diferente.” – dijo Valetta. “Supongo… Si se ha demostrado que cada aceite esencial funciona de inmediato y tiene un gran efecto, entonces podría ser bastante útil dependiendo de cómo lo usemos. Sin embargo, si es usado de forma incorrecta, podría causar un serio problema.” – respondió Kazura. “Hm, ¿por qué no intentas usarlo en mí en este momento? Creo que podremos determinar su eficacia con mayor facilidad.” – dijo Valetta, ofreciéndose voluntariamente como conejillo de indias, para una prueba en humanos. Después de pensarlo un momento, Kazura asintió. Como no estaría usando veneno, no habría ningún efecto adverso. Además, ya había utilizado los aceites en Isaac y Marie, por lo que podría hacer el experimento con facilidad. La única pega es que Valetta ya había mejorado su capacidad física por la comida de Kazura. Por lo tanto, los resultados obtenidos por este experimento deberían considerarse por separado a los posibles efectos en humanos normales. Aunque si se podía pensar que, si el aceite esencial mostraba un efecto tremendo en Valetta, debería ser mucho más eficaz en gente con una capacidad física deficiente. Tenía la importancia suficiente como para realizar el experimento. “Tienes razón. Entonces, por favor, de estos aceites, elige alguno que te guste. Dado que tenemos el libro que cuenta las propiedades de cada aceite, podemos usarlo como referencia.” – dijo Kazura. “Entendido. ¿Cuál debería escoger…?” – respondió Valetta mientras hojeaba los aceites y sus efectos. Al final, encontró un aceite que le llamaba la atención y cogió la botellita correspondiente. “Quiero probar este… Dice que solo una gota debería estar bien.” “Ah, no puedes poner el aceite sin poner antes un poco de agua.” – respondió Kazura, levantándose para ir hasta el piso de tierra y sacar agua de un cubo con un cucharón. A continuación, vertió el agua en la vasija que poseía una vela en su base para quemar el aceite esencial. Una vez que el receptáculo estaba lleno de agua, Valetta abrió la botella y dejó caer una gota. Luego, encendió la vela de su base con un encendedor. Un rato después, el agua del plato se calentó por el fuego de la vela y comenzó a evaporarse, haciendo que el dulce aroma del aceite esencial flotase por el aire. “Esto está bien… Hm, esto es… ¿Qué es esto? No lo reconozco.” – dijo Kazura, oliendo el dulce aroma que inundaba el aire. Estaba tratando de adivinar de qué tipo de aceite se trataba. Sin embargo, parecía ser un aceite que Kazura que nunca había usado, por lo que no sabía qué tipo de aceite era. “Use Salvia Sclarea. Si tiene el mismo efecto que con la comida, entonces me sentiré extremadamente relajada. Quizá incluso me pondré somnolienta…” “Oh, tiene ese tipo de efecto.” – respondió Kazura. Parece que el efecto no apareció de inmediato después de sentir el olor, ya que, hasta ahora, no había ningún cambio en el estado de Valetta. Hasta que apareciera el efecto, Valetta y Kazura pasaron el tiempo discutiendo sobre el progreso actual de la construcción en la aldea o sobre lo que paso cuando Kazura fue de compras. Pero alrededor de diez minutos después de que la vela había sido encendida, el estado de Valetta cambió. “Hmm… Creo que tengo un poco de sueño…” – dijo Valetta mientras miraba a Kazura con ojos somnolientos Tal vez debido a la iluminación creada por la leña, su expresión estaba ligeramente roja y se sentía inusualmente erótico. “Parece que funciona, ¿sientes sueño?” “No es muy intenso, pero, como decirlo… Si me acostara en este momento, creo que me dormiría rápidamente. Algo como… Cómo lo describiría, es un sentimiento cálido y suave.” Al escuchar los cambios que estaba contando Valetta, Kazura abrió un cuaderno que tenía a su lado y comenzó a escribir todos los efectos que estaba experimentando con un bolígrafo. Además, anotó el tiempo que había tardado en surtir efecto. “Ya veo, ya veo. Esto significa que cuando usé el aceite esencial con Isaac, también funcionó… Me pregunto si habrá diferencias según el individuo.” Cuando utilizo el aceite de lavanda en Isaac, la apariencia de Isaac cambió a mayor velocidad. Sin embargo, si los síntomas que aparecieron en Valetta fueran de tal magnitud, seria difícil pensar que el cambio sólo era causado por el aceite esencial. Pero tampoco podía llegar a una decisión definitiva, ya que podía haber diferencias entre un cuerpo fortificado con alimentos y uno que no. De cualquier manera, parecía que los beneficios de los aceites esenciales eran un poco más fuertes para la gente de este mundo. Tal vez también se obtendrían diferentes resultados si se cambiaba la concentración o la frecuencia con la que se usaba. “Kazura, ¿puedo pedirte algo?” Mientras Kazura murmuraba para sí mismo y asentía mientras escribía en el cuaderno, escucho como Valetta lo llamaba. “Si, ¿qué es?” “Quiero que me abraces tan fuerte como antes…” – dijo Valetta mientras lo miraba intensamente.
Valetta había hecho un comentario repentino y sorprendente que hizo que Kazura dejara caer inconscientemente el bolígrafo que tenía en la mano y se quedará inmóvil. Entonces, mientras dudaba si su oído había malinterpretado las cosas, volvió su cara hacia Valetta a una velocidad extremadamente lenta, como si estuviera chirriando. “......” Valetta lo estaba mirando con una expresión sonrojada, pero todo en lo que podía pensar era en el crujir de la leña y en el sonido de su corazón, que parecía que estaba siendo golpeado por una campana. La distancia entre Kazura y Valetta era de tan solo unos pocos centímetros. Era una distancia donde si él estiraba la mano podría tocarla. Una agradable atmósfera dominaba el salón. ‘Eh… ¿En serio? ¿De verdad…? ¡La última vez fue una trampa! ¿QUÉ ESTÁ PASANDO?’ Aunque su mente estaba dando vueltas en un estado de pánico, mantuvo una expresión de calma. “No… ¿No puedes?” – preguntó Valetta, con una expresión incómoda, al ver la cara de Kazura. Sus ojos estaban ligeramente húmedos. “Ven aquí…” – respondió Kazura, poniendo su mano sobre el hombro de Valetta y acercándola con cuidado, para abrazar su pequeño cuerpo con suavidad. Tal vez porque estaba nerviosa, cuando Kazura la abrazó, su hombro tembló y su cuerpo se puso rígido. Sin embargo, a medida que pasaba el tiempo, se relajó, poco a poco, y como si hubiera perdido toda su fuerza, se recostó sobre el pecho de Kazura. Ninguno dijo ni una sola palabra, solo dejaron que pasara el tiempo. “Kazura…” – murmuró Valetta. Después de mantener la postura durante tanto tiempo, a Kazura comenzaba a dolerle el cuerpo, pero cuando estaba comenzando a preguntarse si debía decirle algo a Valetta, esta, de repente, murmuró su nombre. “¿Sí?” – respondió Kazura “.....” No hubo respuesta. Después de esperar un rato y ver que todavía no había respuesta, Kazura pensó en una posible situación y puso su mano en el hombro de Valetta para empujarla con cuidado y poder mirarle la cara. ‘Me lo imaginaba…’ Estaba completamente dormida. Su expresión era la de alguien que estaba extremamente feliz y, al verlo, Kazura no pudo evitar relajarse y poner una sonrisa. A continuación, se rascó la cabeza e hizo una sonrisa irónica al pensar en el típico desarrollo de un manga. Tampoco sabía qué hacer. Al final, con suavidad, puso a Valetta en el suelo y se dirigió hacia su dormitorio para preparar su cama.

jueves, 26 de marzo de 2020

Survival Capítulo 61

1ª parte: Juego de Supervivencia
Capítulo 61
Mutante – David y Goliat XII
Traducido por Tars
Corregido por Lord
Editado por Tars

Al día siguiente, el equipo de reconocimiento seguía durmiendo como si estuviesen muertos. Además de comer y de controlar la condición de Ha Jin, Yohan se enfocó en recuperarse. Al cuarto día, Yohan se despertó sin ayuda. Eso significaba que estaba listo para comenzar a trabajar una vez más. “¡Despertad a todos! ¡Vamos a trabajar!” “Uh, tranquilo, adicto al trabajo…” – murmuró Saeri. “Estoy de acuerdo.” – respondió Barrendero. “Ah, ¡me asustaste! ¿Qué demonios? ¿Cuándo entraste aquí?” – preguntó Saeri, poniéndose alerta sobre la cama. “Oh, lo siento señorita. No había ningún otro lugar para dormir.” “Hay un salón enorme… Está bien. A nadie le importa de todos modos. Sin embargo, ¿puedes dejar de llamarme señorita?” “Entonces… ¿Hermana mayor?” “Eso me da escalofríos.” “Guau, eres realmente mala…” Yohan le acabó gritando a la pareja a través de la puerta para que dejaran de hacer el tonto. Fue constante en sus críticas. El resto se reunió en la sala sin quejarse cuando escucharon la llamada. Todos tenían una expresión neutral, como si la batalla de hace unos días fuera solo un mal sueño. Para ser justos, la pelea fue fantástica y, en pocos días, habían atravesado por una montaña rusa de emociones: llorar a los muertos, aliviarse por estar vivos, autentico terror y sobrepasar los límites de su agotamiento. “Vamos a trasladar los suministros y municiones al nuevo refugio. Tendremos que hacer varios viajes, así que a trabajar duro si desean terminar antes del anochecer. Barrendero, Jung Eun y Jae Hee se quedan para vigilar este lugar. Todos los demás, síganme.” Dio órdenes claras y todos se movieron con perfecta armonía. Era posible conducir un automóvil desde Kkachiul a Sang Dong, si estaban dispuestos a conducir por las aceras y las cunetas. El nuevo refugio era un edificio residencial, similar al refugio principal de Yohan, pero más grande y espacioso. El único inconveniente era que no había vallas alrededor del edificio. Sin embargo, era adecuado para que vivieran veinte personas. Además, podría haber cuartos separados para hombres y mujeres, lo que hizo felices a los miembros femeninos del grupo. “Por ahora, todo el cuarto piso será para almacenamiento de municiones y suministros. Modificaremos el sótano más tarde para que sea el almacén principal y el refugio. Entonces podremos tener a cuatro personas viviendo en el tercer y cuarto piso. Las chicas pueden usar la habitación 301.” Los miembros del equipo de reconocimiento asintieron. “¿Qué pasa con el primer y el segundo piso?” “El primer piso será una zona común para todos. La habitación 201 será para las personas que se unan a nosotros en el futuro.” “¿Y la habitación 202?” “Esa es mi habitación.” – declaró Yohan, como si fuera obvio. La respuesta firme finalizó las preguntas, pero todos seguían entusiasmados con su nuevo alojamiento. Hace unos meses, o tan solo unas semanas, habrían estado contentos con solo algo de comer y seguridad. No se atrevían a soñar con vivir en un lugar tan cómodo. Era todo un lujo. Como consecuencia, el período de duelo para sus camaradas caídos no duró mucho. No se pudo evitar. Habían soportado el apocalipsis durante seis meses y ya se habían vuelto insensibles. La mayoría habían desarrollado el hábito de obligarse a ser felices y positivos para contrarrestar el sentimiento de pérdida. Terminaron de mover la mayoría de los suministros en unos pocos viajes. Yohan había dividido a la gente en dos grupos, uno para el refugio nuevo y otro en el antiguo. Esto sería necesario mientras no reubicasen los paneles solares. Cuando el sol comenzó a ponerse, aún estaban embalando el último lote de suministros y, después de llegar al fin al bloque de apartamentos, Yohan recibió la buena noticia que había estado esperando durante todo el día. “Yohan, Ha Jin está despierto.” “¡Oh!” Yohan corrió al lado de Ha Jin. El artista marcial se encontraba pálido y demacrado mientras se apoyaba contra la cama, pero nada más ver a Yohan se puso de pie para saludarlo. Una vez más estaba demostrando una resistencia increíble. Varias bolsas con suero, complementos nutricionales y vitaminas estaban hechas un lio cerca de la cama. “¿Cómo te sientes?” “Conocí a mis padres muertos.” “Oh… ¿En serio?” “Me dijeron hola.” – bromeó Ha Jin, mientras Yohan sonreía a su lado. Estaba claro que el hombre grande no iba a morir. Sin embargo, mirando el espacio vacío que dejaba su brazo izquierdo, Yohan se sintió culpable. La decisión y el plan fueron suyos, por lo que asumió la gran responsabilidad de cada muerte y herida. “Estoy seguro de que estarás incómodo durante un tiempo.” – dijo Yohan con tristeza. “Está bien. Apuesto por la nueva era.” “¿Qué…?” “¿No te gustaban los mangas japoneses? Había uno sobre piratas en tu casa. Hay uno donde un tipo pierde un brazo y dice esa frase.” ‘Qué demonios…’ “No, lo conozco, pero lo dices así de repente. Siempre dices cosas que no se ajustan a la situación.” “No he leído cómics desde la escuela primaria. Fue divertido volver a leerlos.” “Sí, estoy seguro de que es divertido, pero ¿es este el momento para estar bromeando?” “Barrendero pensó que era bastante divertido cuando se lo dije.” Yohan frunció el ceño. ‘¿Se lastimó el cerebro cuando se cortó el brazo? Además, el personaje del que estás hablando no te conviene. Es guapo. Es mejor que te pongas un disfraz de un tipo grande y corpulento.’ “Realmente pensé que esta vez iba a morir. Desde que te conocí, cada día ha sido como caminar por un sendero espinoso.” – comentó Ha Jin. A pesar de que no tenía la intención de insinuar nada con esa declaración, todavía le dolió profundamente a Yohan. Ha Jin era una persona en la que se podía confiar y siempre lo seguía sin dudarlo. Hizo que se sintiera culpable. “Lamento meterte siempre en situaciones peligrosas.” “¿Por qué estás tan serio? Si no fuese por ti, ya habría muerto. Además, en estos días, ¿qué no es peligroso en este mundo?” “……” “No te preocupes por mí. Personalmente te respeto. Creo que eres asombroso. No sé cuánto confías en mí, pero voy a seguir siguiéndote. Bueno, no sé lo útil que seré con un solo brazo...” Los sentimientos de culpa y arrepentimiento de Yohan se hicieron más fuertes. El hecho de que Ha Jin intentara mantenerse brillante y alegre solo empeoraba las cosas, al igual que sus bromas. Pero antes de que Yohan pudiera decir algo más, Barrendero y Saeri entraron corriendo a la habitación. Saeri sostenía un pasamanos redondo con forma de gancho y Barrendero llevaba un sombrero de paja. Sus expresiones traviesas hicieron que Yohan frunciera el ceño. ‘¿En qué parte del mundo encontraron esas cosas?’ “Grume…” “Largo.” “……” “¡Dije que largo!” – repitió Yohan con más fuerza. “Jefe, no sabes nada sobre el romance y la aventura.” – contestó Barrendero, sacudiendo la cabeza. “Estoy de acuerdo.” – dijo Saeri, interviniendo. – “No sabes nada.” Yohan sacó con calma su radio. “Que todo el mundo venga aquí. Cojan a estos piratas y arrójenlos al lago Sang Dong.” Poco después los dos fueron arrastrados por el grupo de Jung Hwan. Yohan tenía un terrible dolor de cabeza. Les había dicho que descansaran y todo lo que hicieron fue leer cómics. De repente, alguien llamó a la puerta. Solo había una persona en el campamento que golpeaba con tanta suavidad. “Pase doctor.” “Ah, Yohan. Mientras estés aquí, quería hablarte sobre algunas prótesis para Ha Jin.” – dijo el doctor Park, mientras entraba, cogía una silla y se sentaba. A continuación, le mostró algunos dibujos de varias prótesis y le explicó la importancia de que Ha Jin tuviera una. – “La pérdida de masa en su lado izquierdo afectará a su equilibrio. También causará molestias a su vida diaria. Hay algunos brazos protésicos universales en el campamento del hospital que serían de utilidad. Puedes ir allí y elegir uno que le guste. Le ayudaré a ponerlo. Ten en cuenta que, aunque uno con forma de brazo real se verá mejor, un modelo con un gancho será más útil para su uso diario.” “Algo para el uso diario no es buena idea.” – añadió Ha Jin, sacudiendo la cabeza. Había estado escuchando su conversación. – “Si es posible, me gustaría adjuntar un arma para poder luchar.” Pero el doctor Park estaba en contra de la idea. Argumentó que unir una cuchilla a un brazo protésico era peligroso. Además, no había ningún brazo en el hospital que pudiera usarse como arma. “Es un poco peligroso... Y será incómodo.” “Está bien.” “El señor Kim es bastante bueno haciendo cosas.” – interrumpió Yohan. – “Tal vez podamos pedirle que modifique uno de los brazos.” Le había preocupado que la capacidad de lucha de Ha Jin disminuyera. Pelear con una mano sería una desventaja, no solo para él, sino para sus compañeros. “Lo que quieras, lo conseguiremos.” – añadió Yohan, dándole unas palmaditas en el hombro. “Pero…” El doctor Park parecía preocupado, como siempre, pero al ver la resolución en sus rostros, cedió y asintió. “De acuerdo. Hablaré con el señor Kim de todos modos, de momento, no te muevas demasiado o tus puntos se abrirán. Si es posible, deberíamos ir juntos al hospital y hacer un seguimiento.” “De acuerdo. De todos modos, estaba pensando en que hiciera ejercicios de mantenimiento durante un tiempo. No te esfuerces demasiado y cuida tu cuerpo.” “Sí. Gracias.” Yohan le dio otra palmadita en el hombro a Ha Jin y se fue a su habitación. Llenó la bañera con agua tibia y entró. Cuando su agotamiento se desvaneció, repasó sus planes a largo plazo en su cabeza. Lo más importante era fortalecer la zona de seguridad. Después, agregaría a más miembros a los equipos de reconocimiento. No había necesidad de retrasarlo y tenía la intención de comenzar ambas tareas mañana. Con una gran valla a su espalda, verían con mayor confianza lo que tenían por delante. Estaban listos para comenzar un nuevo capítulo en sus vidas. Habían experimentado muchas situaciones complicadas, pero las manejaron bastante bien. Había encontrado compañeros en los que podía confiar y creado una base sólida. Hasta tenían suficiente comida y suministros. Nunca había tenido un grupo tan fuerte, incluso en la línea de tiempo anterior. Había aprovechado sus tres años de experiencia. Todos sus fracasos pasados se convirtieron en peldaños hacia el éxito. Yohan se quedó en la bañera media hora. Mientras se levantaba, examinó su cuerpo musculoso en el espejo. Gotas de agua se deslizaron por su cuerpo bien construido y cayeron al suelo. Había pequeños cortes y contusiones por todas partes, principalmente por culpa de la última misión. Se concentró en la mordedura de su hombro. Se estaban formando costras sobre los puntos donde los dientes del mutante habían dejado marcas. Todavía no le había mostrado esa herida a nadie y, como resultado, no lo desinfectó ni recibió el tratamiento adecuado. La lesión permanecería, clara como el día, en su hombro. Sería una evidencia que podría usar para probar su inmunidad. Por mucho que ocultase el hecho de que lo mordieron, también ocultaría el que no se infectó. No era algo que pudiera decir fácilmente a los demás. No quería hacerse ilusiones, ni tenía suficiente información como para decir algo con certeza. Esta información era peligrosa. Si las personas pensaran que existía la posibilidad de que pudiera ser inmunes, no abandonarían a los compañeros que eran mordidos hasta que exhalaran el último aliento. Intentarían permanecer a su lado, aunque si la situación fuera peligrosa. Incluso si su compañero estaba infectado. Al final, aquellos que eran mordidos solo terminarían siendo una carga. Yohan se sintió mal por pensarlo de esta manera, pero no quería sacrificar a un grupo de personas por una bomba que podría explotar en cualquier momento. Pensó que era mejor guardar esa información para sí mismo hasta que supiera más al respecto. Después de su baño, Yohan subió a la azotea, relevó a Jae Ho del turno de vigilancia y se sentó en una silla de campamento que habían instalado allí. Miró hacia la ciudad oscura sin ninguna expresión en su rostro. La ciudad parecía triste por la tarde, pero por la noche, era una ciudad que encandilaba y lo hacía sentirse sentimental. Habían pasado siete meses desde el comienzo del apocalipsis. Siete meses desde que tuvo tiempo para observar las estrellas que había en el cielo sobre Seúl. Ni siquiera sabía si estaba mirando estrellas o algún satélite. ‘Estoy seguro de que será más claro a medida que pase el tiempo.’ Una brisa de verano rozó su rostro. El viento caliente tenía un hedor a podredumbre, pero todo lo que hizo fue ayudarlo a darse cuenta de que todavía estaba vivo.



Survival Capítulo 63

2ª parte: La ley de la jungla
Capítulo 63
Más allá de la frontera II
Traducido por Tars
Corregido por Lord
Editado por Tars

Yohan dejó escapar otro suspiro y tachó el primer punto de la agenda con un bolígrafo. “Corre la voz por los campamentos. No solo lo discutáis entre vosotros. Obtén sugerencias de todo el mundo y elegiré una. Ofrece algún premio. Recientemente el equipo de reconocimiento encontró un poco de licor de avispas en una licorería que podemos usar. Parece que ha estado fermentándose durante bastante tiempo.” Los encargados de cada campamento se animaron ante la mención del alcohol. No era un premio extravagante, pero si a alguien le gustaba probablemente trabajaría duro para conseguirlo. En cambio, Yohan simplemente estaba estresado de que el mismo asunto trivial se había planteado durante tres semanas seguidas. “Lo siguiente de la lista es analizar a las personas que quieren unirse a los equipos de reconocimiento. ¿Son tres? Como siempre, evaluaremos a los voluntarios por la tarde mientras hacemos nuestras rondas. Barrendero, puedes tomar el mejor de los tres para tu equipo.” “Entendido.” “Lo siguiente…” Yohan leyó el siguiente punto en silencio y frunció el ceño. Ponía ‘Ampliar la zona alrededor de cada campamento para poder pasar el tiempo libre y permitir que las personas se muevan con mayor libertad entre los campamentos.’ Después de establecer el muro fronterizo, apenas quedaban zombis dentro del territorio y algunos de los campamentos permitieron que las personas deambularan libremente siempre que permanecieran dentro de una franja que iba de 5 a 10 m del campamento. Estar atrapado en su interior todo el tiempo no era bueno para la salud mental, pero permitir que la gente se alejara libremente era algo completamente diferente. Daría como resultado nuevos campamentos, dividiría a la gente y dificultaría su control. “Todo esto es rechazado. No hay ninguna razón para considerarlo.” “Pero Yohan, siendo sinceros, ahora mismo el territorio dentro del muro fronterizo es bastante seguro. ¿No está bien que la gente se mueva con mayor libertad?” – dijo Gap Soo. “¿Te olvidaste de mi advertencia sobre las oleadas de zombis?” – respondió Yohan. Su tono era neutral, pero estaba riñendo al gerente del hospital. “Eso no es… Pero, ¿no está bien mientras no se junten muchas personas?” “Si comenzamos a perder el control de las personas, será complicado recuperarlo. Si una persona no capacitada deambula por el interior de la frontera, no sabremos qué tipo de peligros pueden enfrentar. Necesitamos saber dónde están las personas y cuántas hay para poder prevenir los desastres con anticipación.” – contestó Yohan con frialdad. Gap Soo se dio cuenta de que Yohan no iba a ceder, así que se limitó a asentir. Yohan frunció el ceño, al darse cuenta de que el encargado del hospital todavía no estaba convencido. “Parece que hay más cosas que quieres decir. Adelante.” “Sobre las oleadas de zombis… Las reglas establecen un número específico de personas y la distancia requerida entre los campamentos, pero no sé cómo se te ocurrió esa cifra. ¿En qué te basas para poner ese número?” Yohan lo escuchó con calma. Solo aquellos que nunca antes experimentaron una oleada zombi, aquellos que nunca experimentaron el terror de ese fenómeno, harían este tipo de preguntas. “Los números no son precisos. No es como un problema matemático en el que todo cae exactamente en su lugar. Desde mi experiencia, nunca ha habido un campamento con menos de 20 personas que se haya encontrado con una oleada zombi. El número proviene de mi experiencia.” “Eso es lo que estoy diciendo. No hay garantía de que aparezca.” “Y si ocurre… ¿qué vas a hacer? ¿Qué es mejor? ¿Tener unas condiciones de vida ligeramente mejores o arriesgar la vida de todos?” Gap Soo no respondió. “Sobre los puntos de esta reunión… Si seguimos trayendo siempre los mismos problemas voy a tener que asignar nuevos líderes de campamento.” Los encargados se estremecieron. Marco, el líder del campamento del pueblo de Park, estaba especialmente conmocionado. Esto se debía a que su campamento era el único que ya había sufrido un cambio de liderazgo. No era algo que Yohan pretendía hacer, pero el líder original fue expulsado de la organización después de que se opusiera firmemente a sus reglas. Él y algunos otros, se escabulleron fuera de la frontera sin permiso, trataron de robar algunos suministros y fueron secuestrados por saqueadores cercanos. Al final, Yohan los siguió y los mató a todos. Marco había sido testigo de cómo Yohan abrumaba a su líder anterior y, naturalmente, le tenía miedo. “Limitar el intercambio de gente entre campamentos… ¿quién escribió este?” “Es mío.” – dijo el teniente Ahn. La temperatura en la habitación estaba cayendo en picado. Las reglas del campamento que se le ocurrieron a Yohan fueron diseñadas para garantizar la supervivencia o suavizar las operaciones de la organización. La rotación de los miembros entre los diversos campamentos era por ese último motivo. Si las mismas personas permanecieran en la misma área durante mucho tiempo, se formarían facciones y la gente podría comenzar a pensar que los suministros les pertenecían. La organización no era un grupo unificado, sino varios campamentos que tenían poca afiliación entre sí. Eran cuatro entidades que consumían lo que los equipos de reconocimiento les daban de comer. Ese punto de la agenda probablemente no vino de los miembros del campamento. Era más seguro que fuera la opinión personal del teniente Ahn. Si las personas rotan constantemente, era complicado para el encargado sentir que los miembros del campamento fueran suyos. Además, era una molestia entrenar a nuevos miembros cada vez que rotaban. ‘Se han echado a perder.’ Yohan describió la situación con una frase. “Olvídalo. Lo siguiente es un punto que vale la pena discutir. Una solicitud para aumentar las raciones de agua, así como las reservas. ¿Se ha agorado el agua del hospital y del campamento escolar?” “Si. Podemos conformarnos con el agua potable que nos proporcionan, pero no queda agua no potable.” “Pasa lo mismo en el hospital.” “Si pueden aguantar un poco más, podemos despejar el camino hasta Gulpocheon y obtener un camión de suministro de agua. Así que, por ahora, intentad racionar el uso del agua.” El siguiente punto del orden del día hizo que Yohan se riera a carcajadas. Se trataba del almacén de suministros básicos. En lugar de reunir todos los suministros en el campamento del centro comercial, la gente quería que los suministros se distribuyeran uniformemente entre los distintos campamentos. Leyó la solicitud textualmente. ‘Si los suministros se almacenan en un solo lugar, es difícil asegurar de que se distribuyan de manera justa. Además, si el campamento del centro comercial es atacado, entonces podría convertirse en un gran problema.’ Era una solicitud razonable sobre el papel. Sin embargo, la intención detrás del mensaje era diferente. Querían fortalecer sus posiciones dentro de sus campamentos. En cuanto a la organización en su conjunto, el método de distribución era eficiente y justo. Los suministros estaban estrictamente racionados y, aunque puede parecer que el campamento del centro comercial estaba haciéndolo todo, en realidad era Yohan quien verificaba y administraba la distribución. Cada vez que el equipo de reconocimiento traía suministros, el campamento del centro comercial los revisaba y creaba una propuesta de distribución dependiendo de la cantidad de suministros. Yohan lo revisaría, le daría el visto bueno, y solo entonces, los suministros se distribuirían a los campamentos. Era inconveniente, pero hacer un inventario regular de los suministros restantes era la mejor manera de mantenerlo todo organizado. Los suministros eran la fuente de energía y vida del campamento. Yohan nunca consideraría entregárselo a otra persona. Las propuestas de distribución se creaban semanalmente y, todos los días antes del atardecer, los equipos de reconocimiento prepararían los suministros para su distribución para cuando hicieran sus rondas a la mañana siguiente. El propio Yohan se aseguró de que los equipos de reconocimiento obtuvieran las distribuciones correctas y administraran los suministros. Cada semana, también revisaba el nivel de contribución de cada miembro del campamento, ya fuera combatiente o no combatiente. Él era quien calificaba cuán duro había trabajado una persona para defenderse y decidía la cantidad de raciones que recibiría. Era natural que algunas personas pudieran pensar que no estaban obteniendo lo suficiente y que se quejarían ante el líder de su campamento. Si bien la ejecución de la política era subjetiva, la norma estaba clara. Si no tenían las habilidades, no tendrían más remedio que entrenar duro y unirse al equipo de reconocimiento. Si fueran inútiles, se morirían de hambre. Esta era la regla más importante de la organización. Aquellos que se encontraban en puestos de liderazgo recibieron la mayoría de los beneficios. Esto no fue porque a Yohan le gustara la política. Era necesario para mejorar el bienestar de la organización. Y no era un problema de confianza. Cada vez que la gente estaba a solas con Yohan, le creían y lo seguían con pasión. Sin embargo, las cosas se ponían extrañas cada vez que se reunían todos los encargados. Expresarían los intereses de su campamento o discutirían entre ellos sobre su rango. Obviamente la política estaba involucrada. “Todos…” – dijo Yohan con una sonrisa amarga sobre su rostro. Tenía que controlar la situación desde el principio. Como había dicho antes, esta organización no era una democracia. No era la República de Corea. – “Estoy seguro de que todos se sienten más cómodos ahora. Estás a gusto, los suministros llegan todos los días y no hay batallas que pelear. Sus vidas no están en peligro.” A continuación, la voz de Yohan cambió de tono y los encargados pudieron sentir un escalofrío recorriendo su columna vertebral. El sudor comenzó a gotear sobre sus cejas. Era cierto que habían estado viviendo con comodidad. Habían perdido de vista lo que era importante y Yohan estaba a punto de devolverlos a la realidad. “Dejad de tratar de pelear por los suministros mientras soy amable al respecto o de lo contrario no obtendrás ninguno.” Tenían que recordar que Yohan era el que los protegía, los alimentaba y los controlaba.
* * *
“Te ves cansado.” “Sí, estoy cansado.” Barrendero y Yohan estaban de vuelta en la habitación del primero. Estaba organizando la información de la reunión mientras Barrendero estaba a su lado, comiendo algo y leyendo un manga. De repente, Barrendero se echó a reír por algo que leyó. Se rio tanto que tuvo que agarrarse el estómago. Yohan frunció el ceño. “Hermano, relájate. Te saldrán arrugas.” “Estoy celoso porque te ves tan despreocupado.” – se burló Yohan. Barrendero sonrió y cerró el libro. “Hay un dicho que dice que, si no quieres enemigos internos, entonces crea un enemigo externo.” “¿De qué estás hablando?” “Bueno, tu plan no está mal. Es realmente razonable y está bien ejecutado, como algo que esperarías de un político experimentado. Sin embargo, las aguas están empezando a estancarse. A medida que pase el tiempo, comenzará a empeorar. Cuanto más estables sean las cosas, más ambiciosos se volverán. Como dice el viejo refrán, ‘Cuando uno esté lleno y contento con la vida, comprarán mujeres para tener sexo’.” “¿Ese dicho es real…?” Barrendero agarró algunas nueces del escritorio de Yohan, las lanzó al aire y las atrapó con la boca, antes de responder. “Llévalos fuera de la frontera de vez en cuando. Ser tacaño como un niño es fácil, pero si experimentan algunas dificultades, comenzarán a actuar como perros entrenados y serán más obedientes.” Barrendero tenía razón. El campamento no pasaba por ningún problema, lo cual era un problema en sí mismo. Si bien las cosas se mantuvieron estables dentro del territorio, los equipos de reconocimiento todavía tenían experiencias de vida y muerte todos los días. Como consecuencia, se hicieron más unidos mientras que el equipo de apoyo y el equipo de combate que protegía los campamentos se volvieron más perezosos. Sin embargo, obligar a todos a ser un miembro del equipo de reconocimiento, incluso por un día, no era fácil. Un miembro débil podría poner en peligro a todo el equipo de reconocimiento y no podía arriesgarse a comprometer su mano de obra. Mientras Yohan pensaba más en el tema, Barrendero se aburrió y comenzó a jugar con la radio. A pesar de que las transmisiones de otros campamentos siempre eran las mismas, las revisaba constantemente en busca de nueva información. - Ven a la Unión de Supervivientes de Seúl. Un refugio libre de zombis y de hambre te está esperando. Ven al Centro de atención al cliente de la Estación de Yongsan a las tres en punto. Como de costumbre, la transmisión de reclutamiento de la Unión de Supervivientes de Seúl todavía se estaba reproduciendo. Era una de las transmisiones que más había escuchado. El otro era del refugio Ilsan Deokyang-gu que estaba buscando un superviviente. Estas dos transmisiones eran una presencia constante en las ondas de radio. De vez en cuando, había supervivientes que solicitaban ser rescatados, pero ninguna de esas transmisiones duraba más de cuatro días. Al final, un día, ese tipo de transmisiones se detuvieron. La gente se dio cuenta de lo tontos que eran. Ahora estaban en una era donde los humanos daban más miedo que los zombis. Era algo que Yohan siempre tuvo en mente. Sin embargo, simplemente incrustarlo en su cuerpo no fue suficiente. Algunos miembros del campamento habían sugerido que deberían hacer sus propias transmisiones, pero Yohan rechazó la idea sin explicar el motivo. ‘¿Qué tiene de bueno dejar que el mundo sepa dónde se encuentra nuestro campamento? Además, sería difícil dar cabida a más personas en este momento.’ “Guau, hermano. Hay una nueva transmisión.” “¿De verdad?” – respondió con indiferencia. Al principio, hubo muchas transmisiones, pero ahora comenzaban a desaparecer. “Es de un campamento cerca de aquí.” Ahora Yohan estaba interesado. Si había un campamento de supervivientes cerca, tenían que verificarlo. Al ver que su interés se despertaba, Barrendero subió el volumen. La transmisión estaba en bucle. - Buscando supervivientes ‘femeninas’ en el área de Incheon. Todos los días al mediodía, ven al anexo de la Fundación de mujeres y familia de la Estación de Bypyeong con el mínimo armamento y sostenga algo blanco. Una vez más. Buscando supervivientes ‘femeninas’ en el área de Incheon. Todos los días al mediodía, venga al anexo de la Fundación de mujeres y familia de la Estación de Bupyeong con el mínimo armamento y sostenga algo blanco. La voz era clara y cada palabra estaba entonada a la perfección. La transmisión en sí era interesante, pero lo que llamó la atención de Yohan fue la voz. Era una voz familiar, que había escuchado muchas veces con anterioridad.



Survival Capítulo 62

2ª parte: La ley de la jungla
Capítulo 62
Más allá de la frontera I
Traducido por Tars
Corregido por Lord
Editado por Tars

Agosto de 2017, enfrente de un banco. Se escucharon pasos apresurados cuando tres hombres huyeron de los zombis. El grupo de Barrendero los observó desde la azotea de un edificio que estaba cerca de la frontera de su territorio. Los recién llegados parecían cansados, pero siguieron corriendo hasta que se encontraron con una pared de vehículos que bloqueaba la calle. Sorprendidos, comenzaron a mirar a su alrededor. De repente, una voz llegó desde un megáfono que estaba por encima de sus cabezas. “Hola, probando, un, dos, tres. Hola hermanos. Antes de entrar, desármense. Después de que entres, pon tus manos sobre tu cabeza y espera.” Los supervivientes miraron a su alrededor, pero no pudieron determinar de dónde provenía el sonido. En cambio, maldijeron en una dirección aleatoria. “¡Qué coño! ¿Quién diablos eres tú?” “Oye, ¡vamos a entrar!” ‘Dios, será un problema si lo hacen.’ – pensó Barrendero, mientras daba un suspiro al verlos acercarse a la frontera. “Ey chicos, esta es su segunda advertencia. No hay zombis en el interior, por lo que será mejor que se desarmen y entren. Si sigues caminando, morirán. Estáis advertidos chicos.” “Bastardo, ¡cállate!” Los hombres comenzaron a escalar la pared de coches. Barrendero se encogió de hombros y bajó el megáfono. Había pasado un tiempo desde que tuvieron invitados, pero parecía que iban a tener que darles una bienvenida violenta. “Oye Ong, ¿los ves?” – dijo Barrendero, después de sacar la radio. - Sí señor. ¿Qué debemos hacer?” “Nada que podamos hacer. Las reglas del jefe son siniestras. Mátalos.” - Sí señor. El cabo Ong se encontraba en un edificio al otro lado de la calle. Cerró un ojo y apuntó con su rifle de francotirador K-14. Lentamente, movió la mira hacia la pared de coches abandonados y se centró en los intrusos que la estaban subiendo. Tan pronto como una de sus cabezas apareció sobre la pared, el rifle de francotirador retrocedió con un poderoso golpe y el intruso cayó hacia atrás. “¿Qué demonios? ¡Oye!” Los otros dos supervivientes trataron de retirarse, pero antes de que pudieran hacerlo, sonaron dos disparos más y atravesaron sus cabezas. Ambos fueron tiros limpios. Los tres intrusos fueron asesinados en un instante. El cabo Ong levantó su radio con indiferencia. “Despejado.” Barrendero silbó ante la impresionante demostración del francotirador. No importaba cuántas veces lo viera, las habilidades del cabo Ong lo asombraban. Su nueva arma, a la que llamaba su ‘cielo’, fue la mejor adquisición que obtuvieron de una expedición que les llevó lejos. Fue una batalla contra un grupo violento formado por supervivientes de las fuerzas especiales. Pelearon por los suministros de un almacén al por mayor. Con esa batalla, habían adquirido un rifle de francotirador y tres ametralladoras. El cabo Ong se convirtió en el dueño del rifle. Aunque nunca había disparado uno antes, había jugado a juegos siendo un francotirador, y lo manejaba bien. Después de solo unos combates, su puntería estaba fuera de dudas. Antes siempre tenía miedo cuando se encontraba con un solo zombi, pero ahora estaba demostrando su valía e incluso, algo más. “Eres increíble.” – exclamó Barrendero mientras bajaba del edificio. Todavía tenían que encargarse de los zombis que los intrusos trajeron con ellos. La pared de vehículos fue construida para ser resistente, pero si había demasiados muertos vivientes, era posible que pudieran derribarla. Se encargaron de los no muertos rápidamente y quemaron todos los cadáveres. Cuando el humo se elevó por el aire, el cabo Ong se sacudió las manos. “Todavía me siento mal al matar gente.” – susurró. “Te entiendo.” A pesar de que estaban en un estado de anarquía, matar personas que ni siquiera podían defenderse no se sentía bien. Sin embargo, su líder fue firme y frío cuando se trataba de este tipo de situaciones. Si un recién llegado se negara a ceder sus armas y pasar por el registro, serían asesinados sin dudar. Esta drástica medida entró en vigencia hace tres semanas, después de ser amenazados por un grupo de intrusos. El grupo había entrado en su territorio y, como de costumbre, dos miembros del equipo de reconocimiento se les acercaron para desarmarlos. Sin embargo, los intrusos los atacaron y uno de los miembros del equipo de reconocimiento murió mientras que el otro resultó gravemente herido. Después de ese incidente, comenzaron a exigir que las personas se desarmaran antes de cruzar la frontera y someterse a un registro obligatorio. Si los recién llegados no seguían la norma después de dos advertencias, serían asesinados, sin importar las circunstancias. Recientemente, no han visto muchos supervivientes nuevos y, cuando aparecieron, menos de la mitad se unieron a su organización. Barrendero escuchó un sonido a su espalda y giró la cabeza. Saeri y Jung Hwan viajaban juntos en una motocicleta. Se detuvieron y se quitaron los cascos. “Barrendero, ¿has visto a Yohan?” “¿Uh? ¿No está trabajando para expandir la frontera occidental?” “Supongo que fuimos por el camino equivocado. ¿Cómo es que nunca responde en la radio? No te olvides de venir a la Biblioteca Nueva Luz a las dos en punto. No llegues tarde.” “Oh, cierto.” Barrendero parecía haber olvidado que tenían una reunión de líderes hoy. Saeri frunció los labios. “Dios, ustedes dos son los únicos que olvidan la reunión cada vez. Tenemos que ir a buscarlos cada vez que tenemos que reunirnos. No llegues tarde, ¿de acuerdo?” “Sí, lo tengo.” “Vamos, Jung.” La pareja volvió a su motocicleta y se alejó. Habían pasado dos meses desde que pelearon contra David. No fue hace mucho, pero la organización había cambiado en gran medida en ese período de tiempo. Se habían metido en muchas peleas y mucha gente se había unido. Las batallas generalmente eran contra saqueadores que ingresaban sin previo aviso en su territorio o supervivientes hostiles que se encontraban mientras exploraban más allá de sus fronteras. La organización comenzaba a ser más estable y, a pesar de todas las batallas, apenas habían sufrido bajas. Desafortunadamente, perdieron algunos de los miembros nuevos que estaban borrachos de coraje. Ahora tenían cinco campamentos y tres equipos de reconocimiento. Barrendero era el líder del tercer equipo de reconocimiento, fue una decisión obvia. El mayor cambio fue que las carreteras entre los campamentos ya no estaban bloqueadas. Habían encontrado una gran carretilla elevadora y una grúa en una zona de construcción del sureste. Con esas máquinas, despejaron las calles y construyeron un gran muro fronterizo. La carretilla elevadora de 10 toneladas movió los coches y la grúa se utilizó para amontonarlos. Para carreteras más grandes, doblaron y triplicaron las capas de la muralla de vehículos. En los callejones estrechos, utilizaron cercas de alambre de espinas para crear una frontera firme. Aparte de algunos zombis que ocasionalmente salían de sus escondites, los muertos vivientes eran tan raros como los nuevos supervivientes. ‘Uh, siempre nos hacen movernos cuando hace mucho calor.’ El asfalto hacía que el aire fuera cálido y húmedo mientras Saeri y Jung viajaban en su motocicleta. Todos los lunes a las dos en punto, había una reunión de líderes. Cada líder de campo de la organización se reuniría en la Biblioteca Nueva Luz, que estaba ubicada en el centro de todos los campos. Sin embargo, los líderes de los equipos de reconocimiento siempre daban problemas. En esta ocasión Hyuk no iba a asistir porque estaba en una expedición de larga distancia, pero si los otros dos líderes de los equipos de reconocimiento no estaban presentes, no tendría ningún sentido tener la reunión. Condujeron durante unos cinco minutos antes de ver a Yohan a lo lejos. Se habían preguntado por qué estaba fuera de la frontera, pero parecía que habían aparecido zombis mientras expandían el muro. Por un lado, la carretilla elevadora y la grúa se detuvieron mientras los zombis entraban por un espacio estrecho. Yohan los escuchó acercarse y se dio la vuelta para saludarlos. Otros dos miembros del equipo de reconocimiento salieron de los vehículos de construcción y lo relevaron del deber de luchar contra los zombis. “¡Yohan!” “¿Qué?” “Ya son las dos en punto.” “¿Ya?” “¿Por qué sigues apagando la radio?” “No la apagué. Había demasiado ruido y no la escuché.” – dijo mientras limpiaba la sangre de su cuchillo de caza y se encogía de hombros. A continuación, miró a Jung, que se encontraba detrás de Saeri. Jung Hwan permaneció en silencio. La semana pasada, cuando formaron el tercer equipo de reconocimiento, Yohan y Jung tuvieron un desacuerdo y Yohan había tenido que elevar la voz para tratar con él. Desde entonces, las cosas habían sido incómodas entre ellos. “¿Por qué estás con Saeri? ¿Qué hay de Barrendero?” “Es mi tiempo de descanso.” ‘Todavía me guarda rencor.’ – pensó Yohan para sí mismo. No sabía cuál era exactamente el problema. Normalmente Jung expresaba sus objeciones con claridad, pero esta vez fue diferente. No estaba seguro si era porque ya no estaban en el mismo grupo o porque Barrendero fue elegido para ser el líder del tercer equipo de reconocimiento. También podría ser algo completamente diferente. Sin embargo, Yohan estaba seguro de que se resolvería a tiempo. “Ya veo. Ha Jin, voy a regresar. ¿Estarás bien?” “Por supuesto. Adelante.” “Hay un zombi detrás de ti.” Tan pronto como Yohan mencionó al no muerto, Ha Jin se dio la vuelta y dirigió su brazo protésico hacia la cabeza del zombi. El final del brazo tenía la forma de una cúpula redonda. Sin embargo, cuando tiró de un mecanismo situado en la parte inferior del brazo, una cuchilla afilada salió del borde redondo y atravesó la cabeza del zombi. Luego, presionó la hoja contra la pared para volver a encajar el arma en su resorte. “Es una molestia tener que volver a colocarlo cada vez que se usa. ¿Por qué no lo dejas fuera?” “Esto es más cómodo. Volver a colocarlo tampoco lleva tanto tiempo, no es complicado empujarlo.” Al igual que una persona que acaba de comprar un nuevo teléfono inteligente, Ha Jin probablemente era adicto a su brazo nuevo y su mecanismo de cuchilla oculta con resorte. Antes de esto, habían soldado una cuchilla a su brazo y con él, pudo matar grupos enteros de zombis durante la prueba. Además, junto con sus músculos y su apariencia robusta, la hoja del brazo lo hacía parecer muy intimidatorio, lo que también tenía sus usos fuera del combate. Sin embargo, cuando la gente del pueblo de Park se unió a la organización, fue confundido con un saqueador y esto casi causó un problema. Los recién llegados lo miraron con miedo y suplicaron piedad. Ha Jin hizo todo lo posible para tranquilizarlos y, afortunadamente, nadie trató de luchar contra él. “Es como un bolígrafo retráctil...” – dijo Ha Jin con un tono de satisfacción. Sacó la cuchilla una vez más y la volvió a empujar contra la pared para volver a encajarla en su sitio. ‘Bueno, mientras esté contento, lo demás no importa.’ Con pasos serios, Yohan se dio la vuelta y se dirigió a la reunión. Aunque todavía era el líder absoluto de la organización, las recientes reuniones habían sido un dolor de cabeza.
* * *
Yohan podía decir que todos los encargados del campamento ya habían llegado a la Biblioteca Nueva Luz ya que los supervivientes asignados para protegerlos estaban sentados en el pasillo. Se pusieron de pie de inmediato cuando vieron llegar a Yohan y este levantó la mano y les indicó que se sentara. Lo hicieron de inmediato, pero mantuvieron una mirada severa y disciplinada mientras lo hacían. Cuando Yohan llegó hasta la puerta, ya podía escuchar a los encargados de cada sección hablando del otro lado. Pudo sentir el dolor de cabeza mientras abría la puerta. Tan pronto como lo hizo, todos lo miraron y guardaron silencio. Estaba Barrendero, el líder del tercer equipo de reconocimiento; Seo Jun, del campamento del centro comercial; el Teniente Ahn, del campamento de la escuela; Gap Soo, del campamento del hospital; y Marco, el líder del campamento del pueblo de Park que acababan de unirse a la organización. Un total de seis personas. Normalmente, Hyuk también estaría en la reunión, pero en estos momentos se encontraba en una expedición de larga distancia. Yohan podía sentir sus ojos cuando cruzó la puerta. Sus miradas eran pesadas. “Lo siento, llego tarde.” “Hm, está bien. Todos sabemos que eres la persona más ocupada.” “Bienvenido.” Todos saludaron a Yohan mientras se sentaba. “¿Cómo va la expansión de la frontera?” – preguntó Seo Jun. “Estamos terminando. Creo que estará listo mañana.” “Seguid con el buen trabajo.” Después de Yohan, cada uno de los campamentos dio un breve informe del estado en que se encontraban y a continuación, empezó la verdadera reunión. Yohan revisó los informes de estado brevemente antes de mirar los puntos de la agenda. “El primer punto de la agenda es... El nombre de nuestra organización. ¿No hemos hecho esto ya? Pensé que ya habíamos decidido la última vez.” “Mira Yohan, el nombre es lo más importante para una organización. Les da a las personas un sentido de pertenencia. Algo con lo que pueden identificarse.” Los líderes no estaban totalmente equivocados. Sin embargo, el problema eran los nombres propuestos. Unión de Bucheon, Unión de supervivientes y nombres similares, fueron rechazados directamente. Tampoco estaba interesado en un nombre grandioso y cursi como Salvadores. Yohan suspiró mientras miraba la lista de sugerencias. ‘¿Qué demonios es Los cinco campamentos? Suena como un grupo pop. Esto es ridículo.



miércoles, 25 de marzo de 2020

Retro Capitulo 86

Volumen 3 Capítulo 86
Su decisión VIII
Traducido por Tars
Corregido por Zura
Editado por Tars

Hans amonestó a su amigo por ser tan patético. “¿Crees que un Forastero es lo suficientemente tonto como para beber cerveza en una taberna abierta al público?” “No es malo estar vigilante... Oye, ¿a dónde vas?” “Voy a darle a ese estúpido extranjero la verdadera experiencia de nuestra ciudad.” Hans agarró la mano de su amigo y le pidió al dueño dos jarras de cerveza oscura. Era el primer extraño en visitar el pueblo en mucho tiempo. Parecía un vagabundo, pero parecía estar interesado en algunas de las conversaciones de la taberna. “Hola, amigo. ¿Puedo unirme?” Era una pregunta educada, pero no esperaba una respuesta. Hans se sentó sin esperar la respuesta y, a continuación, apartó la cerveza que el hombre encapuchado estaba bebiendo y la reemplazó con su cerveza oscura. “Invito yo. Deshágase de esa cerveza pálida y maloliente. Esta es la buena.” En ese momento, la boca del hombre tranquilo se abrió. “Largo…” “¿Qué?” “Tienes 30 segundos para sacar a tu amigo de aquí.” “……” Hans estaba avergonzado. Le había hecho un favor a este extranjero y, a cambio, le ordenó que se largara. “Eres un hombre grosero. ¿De dónde eres? ¿Del Norte? Oh ya veo. Eres de…” “Demasiado tarde.” * Baam * De repente, Hans miró hacia atrás. Había dos personas caminando por la puerta abierta. Una voz insidiosa resonó en la taberna. “Damas y caballeros, ¡bienvenidos a mi espectáculo!” El hombre que había hablado era bastante alto y vestía un traje elegante. Pero, por extraño que parezca, llevaba una divertida máscara de arlequín en la cara. Sin embargo, en contraste con su ridícula máscara, por alguna razón, las personas de la taberna tenían la piel de gallina en sus brazos. Había una correa colgando de su mano que estaba conectada al cuello de un hombre de mediana edad que entró con él. “Soy Pierrot y estaré a cargo de este espectáculo. Encantado de conoceros.” La hermosa ropa del hombre de mediana edad estaba polvorienta y desgarrada. Su cuerpo una vez musculoso, ahora estaba destrozado por la tortura, como un trozo de tela hecho jirones. Su aspecto digno había desaparecido y había sido reemplazado por un temblor incontrolable y una mirada llena de terror. Hans reconoció la cara del hombre de mediana edad y, sin darse cuenta, aguantó la respiración. “¡Déjame presentar a mi asistente! Del gran país del acero, ¡el rey de Divide! ¡Su majestad Waldersch!” Nadie respondió. Nadie se atrevió a entrometerse en esta situación. Silencio. Todos estaban congelados por el miedo y no podían decir nada. El sonido de las moscas zumbando en el aire parecía más fuerte que un trueno. Haciendo un gesto como si estuviera jugando, el hombre con la máscara de Arlequín desenredó la cuerda que ataba las manos de su esclavo y le quitó la venda que le cubría los ojos. Los ojos del rey de Divide se revelaron. Estaban hinchados por las lágrimas. “¡Ei! Qué estás haciendo…” Alguien reaccionó, pero no tuvo tiempo para terminar su oración. Algo brilló en la mano del hombre con una máscara de Arlequín y, antes de darse cuenta, algo atravesó el cuello del espectador rebelde. La sangre se esparció por el aire. Un alambre delgado, lo suficientemente pequeño para que no fuera fácil de ver con el ojo humano, le había cortado el cuello. Nadie lo vio mientras volaba. Fue un acto abrumador. “¡Hip…!” Nadie se atrevió a gritar. Sintieron como el hombre de la máscara miraba a su alrededor, comunicándoles con su mirada que le sucedería lo mismo a cualquier otra persona que emitiera un sonido. “Ahora, todos, cojan un arma. Cualquier cosa que se pueda usar para lastimar a otros está bien. Un cuchillo, una silla, hasta un vaso es una buena elección. Pero ni siquiera pienses en moverte.” *Brrrr* De repente, la gente estaba ocupada buscando un arma adecuada. Poco después todos sostenían algo que podían usar como arma. Incluso Hans había agarrado algo. Derramó la cerveza y agarró la jarra para romperla y convertirla en un objeto afilado. Hans miró al hombre que llevaba la capucha, pero seguía sentado. El hombre con la máscara de Arlequín actuó como si no estuviera allí y continuó dirigiendo su espectáculo. “Bien, todos deberían conocer a la gente que tienen a su alrededor dado que son del mismo pueblo. Pero trágicamente, solo una persona podrá salir con vida de aquí. Mi asistente también participará en este juego.” El rey de Divide dio un paso hacia adelante agarrando una daga. No había ningún orgullo en sus ojos, tan solo un deseo enorme por vivir. Todos se miraron los unos a los otros. “El comienzo siempre es complicado. Está bien. La primera persona en matar podrá irse. Es una excepción.” Hans agarró su arma. No podía dejar de pensar en maneras de someter a ese hombre. Quizá si pretendía luchar y lo atacaba cuando estuviera mirando para otro lado podría tener éxito. Sabía que no podía detener el ataque del alambre. El amigo de Hans se le acercó con un sacacorchos en la mano. “Amigo, cálmate.” “Lo has escuchado.” Hans bajó primero su arma y, una vez más volvió a hablar a su amigo con sinceridad. “Baja el arma.” “Hans, quiero vivir.” – dijo mientras se abalanzaba hacia Hans. En un instante, las salpicaduras de sangre y los gritos se extendieron por todas partes. En un momento, mientras observaba como la taberna se convertía en un infierno, el hombre con una máscara de Arlequín estalló en carcajadas.
* * *
La taberna estaba en silencio. Nadie estaba vivo. Era una visión terrible que costaba mirar. “Esta es una mala costumbre.” “¿Eso crees?” El hombre con la máscara de Arlequín se sentó junto al hombre de la máscara de cuervo. Se había quitado la capucha. “Me preguntaba si planeabas detenerme.” “No voy a seguirte el juego.” – respondió el hombre de la máscara de cuervo. Dicho esto, el hombre de la máscara abrió sus ojos por un breve momento antes de reírse satisfecho. “Has cambiado.” “¿Es una queja?” “No, me gusta. De verdad. Está claro que no eres diferente de nosotros.” El hombre de la máscara de cuervo ya no lo negó. Quizá era porque era demasiado molesto andar negándolo siempre o porque finalmente lo había admitido en su corazón. “Vayamos al grano.” – dijo, para cambiar de tema, sin responder a las palabras del Arlequín. “No pude matar a todos los reyes que asintieron a la reunión. Pero obtuve algunos beneficios. La capital del Reino de Prillecha ha perdido su función y sufrirá económicamente. También logré atrapar a uno de los reyes de la Alianza de Reinos Occidentales.” Señaló un cadáver. El rey de Divide, Colora Ash Waldersch. Luchó con una daga para sobrevivir. Hizo todo lo posible por masacrar a los plebeyos y quitarles la vida. Pero al final, todo fue inútil. Incluso en medio de tantas tragedias, su rostro estaba perfectamente conservado. “No sabes lo fácil que fue todo, una vez que decidió moverse separado de los demás.” El rey de Divide se separó del resto de monarcas de la Alianza de Reinos Occidentales. Esa fue la razón por la que fue atacado. Poseía demasiada confianza en su poder. El hombre con la máscara de Arlequín pinchó su cuerpo con los dedos de los pies y sonrió. “Puede que lo use para hacer algo divertido.” Al hombre de la máscara de cuervo no le gustaba al hombre que tenía delante. Su comportamiento siempre era sucio y desagradable. “Escuché que Desastre resucitó…” “Fue destruido.” El hombre con la máscara de Arlequín inclinó la cabeza. “¿Qué? ¿Cómo murió? Al menos debería ser capaz de destruir un reino.” “Había un mago poderoso…” “¿Zod?” “No, un mago más peligroso.” “¿Dices el niño del que hablan los periódicos? Ni siquiera es capaz de lanzar hechizos del cuarto círculo, ¿Cómo va a lanzar uno del séptimo?” El hombre de la máscara de Arlequín mostró el mismo desprecio que el hombre de la máscara de cuervo la primera vez que vio a Desir. “Su habilidad mágica ya ha superado a Zod. Y a tan temprana edad también es bueno en combate. No es alguien con el que puedas jugar. También usó una magia que no puedo comprender.” Con un solo conjuro derrotó a Desastre, un demonio al que Zod no pudo derrotar. Su poder excedía a los magos del séptimo circulo. No sabía cómo desarrollar magia de tal nivel, pero lo que estaba claro era que su enemigo. “Debes haber luchado con él, ¿cuál es tu impresión?” – dijo el hombre con la máscara de Arlequín, interesado. “Si lo pienso, está definitivamente por debajo de mí. Sin embargo, en todo el mundo de la magia, pocas personas podrán lograr lo que hace. Al principio pensé que su falta de hechizos poderosos sería una gran debilidad, pero terminó siendo algo que no tenía sentido.” – dijo el hombre de la máscara de cuervo. – “Es el mayor factor de riesgo. Más que Zod. Será un gran obstáculo para nuestros planes en el futuro. Espero que podamos deshacernos de él rápidamente.” “Estoy muy impresionado. Más fuerte que Zod.” “No pienses que será fácil.” “No te preocupes.” – contestó, agarrando la jarra de cerveza. – “Vamos a hacer que todos tengan miedo con solo escuchar nuestro nombre. Vamos a imprimir el terror en sus huesos. Será algo incomparable a lo que hemos hecho hasta ahora y, al mismo tiempo…” La mirada del hombre con la máscara de Arlequín se volvió hacia el rey de Divide. “Vamos a cavar más y más en el corazón del enemigo y, sin que se dé cuenta, destruirlos desde dentro.”



martes, 24 de marzo de 2020

SYN Capítulo 76

Volumen 8 Capítulo 4
Proposición
Traducido por Tars
Corregido por Lord
Editado por Tars

Debido a la naturaleza del incidente, multitud de personas se apresuraron hacia los alrededores de la escuela. “¡Mi hijo va a esa escuela!” “¡Sal de mi camino!” “¡Tengo que comprobar qué ha pasado con mis propios ojos!” “¡Ah!, ¡ah!” Si no hubiese sido por los desesperados esfuerzos realizados por la policía y la Asociación, el incidente se habría convertido en un completo caos con una multitud enloquecida. Además, tan pronto como escucharon la noticia, los periodistas se apresuraron a acercarse al lugar y se encontraban ocupados sacando fotografías con sus cámaras. “¿Uh? ¡Es Sung Jinwoo!” “¡Fotografiadlo!” Jinwoo evadió sus miradas y se acercó en silencio a la persona que parecía ser un funcionario de la asociación. Este miembro del personal inmediatamente se congeló por la tensión después de ver la cara de Jinwoo. Así de aterradora se veía la mirada del cazador en ese momento. “Cazador Sung…” “¿Dónde está mi hermana?” “La señorita Sung Jinah y el resto de estudiantes han sido trasladados al hospital Ilsin de Seúl.” “……” Jinwoo asintió con una expresión seria y se dio la vuelta. EL miembro de la Asociación tragó saliva sin darse cuenta mientras veía como su espalda se alejaba. Glup Lo primero que había hecho nada más llegar, siguiendo las órdenes de la Asociación, fue confirmar el estado de la estudiante Sung Jinah. Afortunadamente, estaba ilesa. A excepción de unas abrasiones alrededor de su cuello y de su muñeca, no se encontraron otras lesiones. El cazador Sung la había rescatado, así que debería conocer ese hecho mejor que nadie. ‘Aun así se nota que está muy enfadado…’ Había sido una suerte que fuera capaz de llegar a tiempo, no podía llegar a imaginar qué hubiera pasado si algo le hubiera pasado a su hermana. El miembro de la asociación se estremeció ante el miedo que sintió en ese momento. De hecho, era un gran alivio. Sin embargo, al contrario que el alivio que estaba sintiendo el miembro de la Asociación, Jinwoo sacó su teléfono. Estaba bastante preocupado. ‘Estoy seguro de que mamá estará a punto de escuchar la noticia.’ Muchos estudiantes habían perdido la vida a manos de los monstruos. Era natural que su madre sintiera que su mundo estaba a punto de desmoronarse cuando recibiera la noticia. ‘Antes de nada, necesito decirle que Jinah está a salvo.’ Pero cuando estaba a punto de presionar el número, una voz inesperada sonó detrás de él y se detuvo. “Ya envié a algunos agentes para hablar con su madre, señor Sung. Deberían estar camino al hospital mientras estamos hablando.” Jinwoo miró hacia atrás. “Presidente.” Go Gunhee estaba quieto, con una expresión igual de seria que la de Jinwoo. Aunque el presidente no tenía la culpa, como la persona que representaba a la Asociación de Cazadores de Corea del Sur, sentía la responsabilidad por no prevenir esta tragedia. Jinwoo solo puso expresar su gratitud por la preocupación del presidente por su familia en una situación como esta. “No, somos nosotros los que deberíamos darte las gracias.” – dijo Gunhee, sacudiendo la cabeza. Diecisiete estudiantes regresaron con vida. Solo la llegada de Jinwoo permitió que los estudiantes atrapados dentro del edificio pudieran salir con vida. “Señor Sung, estamos constantemente en deuda con usted.” Jinwoo solo pudo sonreír con amargura ante sus palabras. Si hubiera podido usar el intercambio de sombras, podría haber salvado a muchos más estudiantes. Ese pesar se mostraba con claridad en su cara. En ese momento, Go Gunhee podía percibir lo que Jinwoo estaba sintiendo. Pero el anciano sacudió la cabeza. ‘No es momento de hundirnos en nuestras emociones.’ De hecho, tenía algo importante que decirle a este joven. “¿Vas a ir al hospital?” – dijo Gunhee levantando la cabeza. Jinwoo recordó la puerta de Gwang-Anri, pero rápidamente la borró de su memoria. Su maná seguía siendo estable, así que Beru, y el resto de hormigas estaban conquistando la mazmorra sin encontrar ningún problema. ‘Bueno… Beru no es un soldado cualquiera, estará bien.’ En este momento, no tenía que preocuparse por el problema de la incursión. “Sí.” “Vamos, te llevaré.” “No hace falta.” “Insisto. Vayamos juntos. Hay otra cosa de la que quiero hablar.” Al principio, Jinwoo se negó por cortesía, pero terminó asintiendo con la cabeza, después de ver la actitud sincera del Presidente de la Asociación. “Vale.” Jinwoo se subió a la parte trasera del automóvil, al lado de Go Gunhee. A pesar de que era un sedán grande, el gran tamaño de Gunhee hizo que sus hombros chocasen con los de Jinwoo y diera la sensación de que el asiento trasero estaba lleno. Woo Jincheol estaba sentando en el asiento del conductor y asintió con la cabeza a través del espejo retrovisor. Jinwoo también asintió, levemente, como saludo. El vehículo avanzó lentamente y solo entonces, el Presidente de la Asociación dejó de dudar. “En cierto modo, se podría decir que la tragedia de hoy se había predicho de antemano…” – dijo con una expresión seria. Por otro lado, Jinwoo se sentía confundido. ‘¿La Asociación no hizo nada con un incidente que podía haber evitado?’ Justo antes de que su confusión tuviera la oportunidad de transformarse en ira, el Presidente de la Asociación sacó su teléfono móvil y le mostro a Jinwoo su pantalla. Mostraba un gráfico con datos. “Esto muestra el aumento de puertas alrededores de la ciudad de Seúl durante los últimos seis meses.” La gráfica mostraba una curva suave, pero cuando se acercaba a los últimos meses, de repente, se disparaba de forma abrupta. “Y esta muestra las estadísticas a nivel mundial.” Si el presidente de la Asociación no lo hubiera explicado, Jinwoo podría haberlas confundido con dos tablas exactamente iguales. Las dos tenían un patrón similar. “El número de puertas que aparecen en el mundo están creciendo de forma exponencial.” – dijo Gunhee con una expresión cada vez más seria. – “Sin embargo, no es lo único extraño.” En ese momento, guardó el teléfono en el bolsillo interior de la chaqueta. “Las personas que forman una fila fuera de la asociación para confirmar su rango como despertados, no deja de crecer.” El número de portales de donde salían los monstruos no dejaba de aumentar y, al mismo tiempo, parecía que el número de cazadores capaces de bloquear las puertas aumentaba en consecuencia. Parecía que se intentaba mantener un equilibrio. “Algo está empezando a cambiar…” – dijo el presidente con un tono de voz complicado, al ver la expresión de interés de Jinwoo. – “…Y esa es mi idea.” Era solo una opinión personal, pero explicó con calma todo lo que le había llevado a alcanzar esa suposición. Jinwoo asintió con la cabeza. De hecho, era una opinión interesante. Después de ver estos datos cualquiera podría decir que algo grande estaba sucediendo. Desafortunadamente, Jinwoo no podía hacer nada. Y Gunhee, tampoco. Pero una simple llamada telefónica hubiera sido suficiente para compartir esa información y hablar sobre su hipótesis. Jinwoo pensó que el presidente de la Asociación no se habría tomado un tiempo de su apretada agenda para tener esta conversación. “Entonces, ¿de qué quieres hablar?” Como si estuviera esperando eso, Gunhee levantó el maletín que había puesto bajo sus pies y sacó varios documentos. “Japón, Estados Unidos, China, Rusia, Francia, Inglaterra, Alemania e incluso Oriente Medio…” Todas las naciones con una cierta influencia internacional estaban en esa lista. “Estos son documentos que contienen solicitudes oficiales que desean ponerse en contacto con usted. Estoy bastante seguro de que algunos ya habrán hecho algún tipo de contacto no oficial.” Por un instante, Jinwoo recordó el incidente que involucró a la gente de la Oficina Federal de Cazadores Americanos, pero decidió no mencionarlo. “De hecho, la Asociación de Cazadores no tiene la autoridad para detenerlos. Solo estamos protegiendo su información de acuerdo con su solicitud.” Jinwoo escuchó en silencio la historia. “Cazador Sung, todo depende de su decisión, pero… Pero me temo que nuestro país no podrá adaptarse si decide dejarnos.” En lugar de responder, Jinwoo desvió la mirada por la ventana del automóvil. Mientras estaba inmerso en sus pensamientos, uno de los hospitales más grandes del país apareció dentro de sus ojos. Era el hospital donde Jinah había sido ingresada. “Le proporcionaremos todas las comodidades posibles.” – continuó Gunhee, volviendo a guardar los documentos dentro del maletín. A continuación, hizo una pregunta con el rostro serio. – “Entonces, ¿podrías permanecer en Corea del Sur?”
* * *
El equipo de asalto de la Orden de los Caballeros persiguió a las hormigas y llegó a la entrada de la sala del jefe. Los ojos de Jung Yoon-Tae se hicieron más grandes después de ver cómo las hormigas entraban sin detenerse. “Hermano, ¿no deberíamos tratar de detenerlos?” “No creo que pueda…” De hecho, Park no estaba seguro de ser capaz persuadir a las hormigas para que detuvieran la incursión por un momento, para que pudieran recuperar los restos de los monstruos muertos y los cristales mágicos. ‘Olvídalo.’ – pensó resignado, mientras soltaba un suspiro. Ya hacía tiempo que su cerebro funcionaba como si hubiera sufrido un cortocircuito. De todos modos, la Orden de los Caballeros se beneficiaría cuando el mundo supiera que seguían siendo fuertes. Completar una mazmorra de rango A, de máximo nivel, sin perder un solo miembro o sin que nadie saliera lesionado, era suficiente para presumir. ‘Además, el cazador Sung abandonó la mazmorra.’ Nadie sabía lo que pasaba dentro de una mazmorra. Aunque fueran las hormigas las que mataran al jefe de la mazmorra, la gente solo recordaría a la Orden de los Caballeros y no a las criaturas que convocó Jinwoo antes de marcharse. Mejor aún, una vez que el jefe de la mazmorra estuviera muerto, no habría forma de confirmar la verdad. Además, a juzgar por la personalidad del cazador Sung, tampoco iría hablando sobre lo que había ocurrido. Cuando el proceso de pensamiento de Park llegó a esa conclusión, una sonrisa apareció en sus labios. ‘¿Es lo que se conoce por encontrar la fortuna en medio de la desgracia?’ De repente, en ese momento, los cazadores de la parte posterior del grupo comenzaron a gritar. “Jefe, ¡hay muchas criaturas que vienen por detrás!” “Sí, también puedo escuchar cómo se acercan.” “¿Eh?” Park Jong-Soo giró la cabeza y caminó hasta la parte trasera del grupo. De hecho, podía escuchar el sonido de muchos pasos. ‘¿Es el equipo de recolección?’ Pero en el momento en que pensó en ello, se dio cuenta de que el altamente capacitado equipo del gremio de la Orden de los Caballeros no habría entrado en la mazmorra sin recibir la orden. “¡Ah!” Los ojos de Park se abrieron de golpe. Los monstruos no muertos que las hormigas no se habían comido habían vuelto a la vida y estaban corriendo hacia donde estaba el equipo de asalto. ‘¿Qué…?’ Por un instante pensó que las hormigas habían devorado a los muertos vivientes porque sabían que esto iba a suceder. Aunque tal pensamiento duró tan solo un momento en su cabeza, Park se dio cuenta de que su equipo no podría lidiar con tal cantidad de monstruos. “¡Todos a la sala del jefe!” – ordenó rápidamente a su equipo. Su única esperanza eran las criaturas convocadas que había dejado el cazador Sung Jinwoo. El equipo de asalto ni siquiera tuvo la oportunidad de confirmar qué los estaba esperando dentro de la sala del jefe, antes de entrar. “¡Bloquea la entrada!” – gritó Park Jong-Soo, con las venas visibles en su cuello, cuando confirmó que el último cazador había entrado en la sala. Jung Yoon-Tae activó su habilidad [Muro Sagrado] y bloqueó el pasaje que conectaba la sala del jefe con el exterior. ¡Broom! ¡Brooooom! El caballero de la muerte que iba al frente de la horda golpeó con furia el muro invisible. “¡Jefe! No podré aguantar por más de cinco minutos.” – gritó Jung, con la cara empapada por un sudor helado. “Lo sé.” No solo Park, sino que el resto del grupo de asalto ya había terminado de prepararse para la batalla para cuando se rompiera el muro. Pero cuando miraban a la horda de no muertos que avanzaba hacia ellos, comenzaron a dudar de si tenían alguna posibilidad. “Todo lo que podemos hacer es rezar para que las invocaciones maten al jefe rápidamente y abran un camino.” Park volvió su mirada para observar a las hormigas, mientras rezaba que fuera un monstruo fácil de combatir. ‘Dios mío.’ Sus ojos se abrieron aún más que antes. El monstruo contra el que se estaban enfrentando las hormigas era algo que Jong-Soo conocía. En el pasado, le habían hablado de él en innumerables veces. Un mago con la cara pálida y una túnica raída. Un Archiliche. Se decía que era el peor tipo de monstruo no muerto y estaba en la cima de la cadena alimenticia. ‘¿Por qué tenía que ser un maldito Archiliche?’ La cara de Park Jong-Soo se oscureció considerablemente. Quería que las hormigas lo matasen rápidamente y vinieran a ayudarlos, pero su oponente era un Archiliche. Sería mucho más realista esperar que los cazadores eliminasen a todos los no muertos y luego, corrieran a ayudar a las hormigas. Pero en ese momento, Beru dio un paso adelante y se acercó al Archiliche que, de inmediato convocó a una docena de caballeros de la muerte alrededor de las hormigas para rodearlas. ¡Iiiiiaaaaaaaaack! Beru mostró sus colmillos y desplegó sus garras. ‘¿……?’ El Archiliche reconoció el humo negro que se alzaba constantemente del cuerpo de Beru. Era como si las cuentas de sus ojos oscuros se hubieran ensanchado de golpe.
“¿La legión de las sombras?”
El lenguaje de los monstruos salió de la boca del Archiliche. Beru retrajo sus garras después de escuchar las palabras del líder de la mazmorra.
“¿Por qué nos atacan las tropas personales del rey?” – preguntó el Archiliche con voz perpleja, al mirar las hormigas que había detrás de Beru.
Je, je, je Beru filtró un sonido que sonó como una carcajada de ridículo, antes de señalarse a sí mismo.
“Hemos sido elegidos por el monarca.” – dijo, antes de señalar con la garra al Archiliche. – “Tú… No.”
El Archiliche no podía creerlo.
“¡No puede ser! ¡Informaré personalmente al rey y…!” – dijo con un rastro de ira.
Desafortunadamente, antes de que el Archiliche pudiera terminar su oración, Beru apareció ante sus ojos. “¡……!” Los hombros del Archiliche temblaron. Beru era un monstruo de clase alta, por el que el jefe de una mazmorra de rango S sacrificó parte de su vitalidad para crear un cuerpo superior. Aunque sus estadísticas generales habían disminuido un poco después de convertirse en un Soldado Sombra, no había forma de que el propietario de una miserable mazmorra de rango A pudiera ser su oponente. Beru metió su garra en el pecho del sorprendido Archiliche. ¡Zaaas! Cuando salió por el otro lado, llevaba el colgante que portaba el Archiliche. Esa joya era su corazón. Para un monstruo de nivel superior como Beru, no era complicado detectar qué era lo que suministraba la fuerza vital a su enemigo. El Archiliche sacudió desesperadamente la cabeza.
“Ah… ¡No…!”
Sin embargo, a Beru no le importaban los gritos del enemigo y simplemente aplastó el colgante en su mano. Crack
“Hablas demasiado para alguien que va a morir.”
Con esas palabras, el cuerpo del Archiliche se deshizo en polvo. La boca de Park Jong-Soo se abrió de golpe. Estaba tan sorprendido que le costó procesar lo que acababa de presenciar con sus propios ojos. ‘¿Cómo puede matar un Archiliche de un solo golpe?’ Entre los múltiples monstruos de tipo jefe, el Archiliche era especialmente famoso. Había sido el responsable de la aniquilación del gremio del Dragón Dorado. Todo un gremio fue completamente destruido por un solo Archiliche. Y no era un gremio cualquiera, sino uno que era considerado como uno de los gremios más fuertes de china. Pero quizá ese había sido un resultado natural. Los Archiliches podían convocar en cualquier momento a los ‘Caballeros de la muerte’. Era un monstruo de tipo de no muerto muy poderoso que requería de la unión de varios cazadores de rango A para poder derrotarlos. Si subestimabas al jefe de la mazmorra porque al principio no podías ver a ningún guardia a su alrededor, entonces serías incapaz de evitar la aniquilación. El gremio del Dragón Dorado fue incapaz de cerrar la puerta y causó una rotura en la mazmorra. Al final, el cazador de nivel nacional de china, Liu Zang llegó justo a tiempo antes de que todo se convirtiera en un auténtico desastre, pero no pudo evitar que muchos cazadores llegasen a conocer el terror que representaba un Archiliche. ‘Pero…’ Esa invocación con forma de hormiga derrotó al Archiliche de un solo golpe. Era algo sorprendente. De hecho, Park no era la única persona que pensó de esa manera. A su lado, Jung Yoon-Tae tampoco fue capaz de cerrar la boca. “Dios…” – dijo Yoon-Tae, incapaz de creer lo que veía. – “Hermano, ¿eso no era un Archiliche?” “Sí. Lo que salió del portal del incidente del Gremio del Dragón Dorado. “Pero ha muerto de un solo golpe…” La cara de Jung Yoon-Tae era increíble. El resto de cazadores también se sorprendieron al escuchar la conversación y fueron incapaces de ocultar su conmoción. “¿Un Archiliche?” “¿Eso es un Archiliche?” “¿Murió de un golpe?” “Guau.” Cuando todo el grupo de asalto de la Orden de los Caballeros estaba asombrado que la ‘invocación’ de Jinwoo pudiera matar al jefe de una mazmorra de rango A en tan poco tiempo, la sanadora Ye-Rim, que en ese momento estaba sudando mientras intentaba detener a los no muertos, se moría de curiosidad por saber qué estaba ocurriendo. “¿Qué? ¿Qué pasa?” Sin embargo, su curiosidad no duró mucho tiempo. Algo aún más sorprendente estaba sucediendo ante sus ojos. “¿Uh?” Todos los monstruos no muertos, que estaba a un solo paso de romper el ‘Muro Sagrado’, se derrumbaron repentinamente en el suelo, como marionetas a las que se habían cortado los hilos. Plaf Plaf Y no volvieron a levantarse. “Je… ¿Jefe?” – gritó sorprendida por el repentino cambio de la situación, mientras se daba la vuelta. Pero Park Jong-Soo estaba asintiendo con la cabeza. ‘El Archiliche debe haber tenido algo que ver con la resurrección de los no muertos.’ Cuando había visto a las hordas de muertos vivientes se sintió aturdido y completamente perdido sobre cómo podía sobrevivir. Pero ahora podía volver a respirar tranquilo. “Uuuuuf…” – suspiró aliviado. El resto de cazadores eran incapaces de ocultar sus expresiones de euforia. Todos estaban entusiasmados con la idea de salir de la mazmorra sanos y salvos. “Hermano, trabajaste duro.” “Eso no… Esas cosas hicieron todo el trabajo.” – contestó Park, usando su barbilla para señalar hacia adelante. Jung Yoon-Tae se dio la vuelta. Las invocaciones se habían quedado quietas, como si se estuvieran preguntando a dónde tenían que ir. ‘Viéndolos así quietos parecen un poco más lindos…’ Sin embargo, una de las hormigas rugió hacia el techo como si estuviera aburrida. Iiiiiiiaaaaaaaaaaack La expresión favorable desapareció de inmediato. Zius “Hermano, ¿esto no es como si Jinwoo limpiase él solo la mazmorra?” – preguntó Jung Yoon-Tae girando la cabeza. “Eso parece.” Park estaba de acuerdo con esa evaluación. En las partes más profundas de la mazmorra, donde la dificultad era mayor, el grupo de asalto de la Orden de los caballeros no hizo otra cosa que seguir a las hormigas. Dado que esas criaturas eran las invocaciones del cazador Sung, al final era lo mismo que Jinwoo despejando solo la mazmorra. ‘Que poder más aterrador…’ Lo había visto en la Isla de Jeju, pero ahora que lo había presenciado en persona tuvo que reconocer que poseía unas habilidades increíbles. Sus invocaciones eran mucho más poderosas de lo que había imaginado y, el hecho de que fuera capaz de manejarlas sin estar presente causó un profundo impacto en la mente de los cazadores de la Orden de los Caballeros. “Parece que el cazador Sung ni siquiera necesita entrar en una puerta para despejarla.” – dijo Yoon-Tae sin pensar demasiado. Sin embargo, Park sintió que toda su piel sentía un escalofrío cuando pensó en lo que acababa de escuchar. ‘Espera un minuto…’ El número de invocaciones que se vieron en la isla de Jeju era de al menos doscientas. Aunque eso solo era lo que había capturado la cámara, era probable que todavía tuviera más. Sería algo inimaginable que solo necesitara hacer un movimiento para enviar a todas sus criaturas a limpiar las mazmorras. ‘Las invocaciones deben gastar algo de energía mágica al convocarlas y al controlarlas, por lo que no debería poder usar muchas al mismo tiempo, pero…’ Si fuera la mitad. No, aunque solo fuera la mitad de la mitad, sería mucho más efectivo que el resto de grandes gremios. ‘Argh.’ Park Jong-Soo se dio cuenta de que, si el gremio del cazador Sung cotizara en bolsa, habría invertido todos los ahorros de su vida. Incluso habría vendido su casa. “Hermano, no perdamos el tiempo y propongamos fusionar nuestro gremio con el del cazador Sung.” “Este niño…” – contestó Park, mientras miraba horrorizado a Yoon-Tae. A continuación, su rostro se puso serio. – “Una fusión… Promover la unión del gremio del mejor cazador y el gremio de la Orden de los Caballeros, uno de los cinco gremios más importantes del país. ¿Suena bien?” “Ah.” – dijo Jung Yoon-Tae, estremeciéndose. – “¿Realmente quieres probar?” “Piénsalo. Con las habilidades del cazador Sung y los conocimientos de nuestro gremio… ¿No tendría miedo el gremio Cazadores?” La cazadora Cha nunca dejaría el gremio Cazadores y se uniría a Sung Jinwoo sin ninguna buena razón. Jung Yoon-Tae asintió con una expresión brillante, pero luego comenzó a poner una sonrisa mientras se frotaba la barbilla. “Pero, sinceramente, ¿crees que el cazador Sung nos necesita?” “Tsk, tsk.” – Park chasqueó la lengua, antes de comenzar a explicar con más detalle. – “¿Realmente crees que el cazador Sung podrá ignorar la ley si quiere trabajar?” “¿Eh?” “Aunque puede despejar solo las mazmorras, todavía necesita completar el mínimo de personas para un equipo de asalto.” “Oh…” La cara de Yoon-Tae volvió a iluminarse al escuchar esa explicación. “Sí, tienes razón.” “El cazador Sung sabe que necesita un mínimo de personas y como ya lo conocemos podremos verlo.” Era una oferta que beneficiaba a ambas partes. Aumentar el número de brazos podía maximizar la eficiencia y minimizar el periodo de preparación de una incursión. Si no podían traer al cazador de rango S al gremio, el gremio podía ir al cazador de rango S. Yoon-Tae sonrió ante el prometedor futuro que estaba dibujando Park Jong-Soo. “Hermano, eso es genial, pero… ¿No será demasiado para el cazador Sung?” “Uh, ¿Por qué lo dices?” – preguntó, luego, se dio cuenta a qué se refería y respondió con una sonrisa. – “Si vamos, vamos a por todas.” “Cierto, hermano.” Mientras los dos hombres se miraban con sonrisas de felicidad en sus caras, el suelo bajo sus pies comenzó ligeramente a temblar. Brooooom “¡Ah!” Park Jong-Soo dejó de perder el tiempo. Con la muerte del monstruo de nivel jefe, la Puerta estaba comenzando a cerrarse. “Hablemos luego, tenemos que salir primero.” “Sí, hermano.” “¡Salgamos antes de que se cierre la puerta!” – gritó Park en voz alta al resto del grupo de asalto.
* * *
“¿Proporcionará todas las comodidades posibles?” “Sí. Es correcto.” En respuesta a la pregunta de Jinwoo, el presidente de la Asociación respondió con total firmeza. Oficialmente había 10 cazadores de rango S en la Asociación de cazadores de Corea del Sur. Pero habían perdido tres. Dos murieron a manos de los monstruos y otro abandonó Corea para irse a los Estados Unidos. Desde la perspectiva de la Asociación de Cazadores, ya no podían permitirse el lujo de no intervenir en ese asunto. Querían hacer todo lo posible; no se trataba solo de la opinión del Presidente de la Asociación Go Gunhee, sino también del resto de la Asociación. ‘A menos que sean otros cazadores de rango S…’ No podían permitirse dejar escapar al cazador Sung Jinwoo. Los ojos de Gunhee brillaron con la luz de la determinación. Como representante de la Asociación de Cazadores, se había encontrado con innumerables cazadores a lo largo de los años. Muchos de ellos también podían ser calificados como poderosos. Sin embargo, Sung Jinwoo fue el primero en acelerar su corazón. Quería que se quedara en Corea, ya no solo como presidente, sino como ciudadano de la nación. «“Le proporcionaremos todas las comodidades posibles.”» Esas palabras no solo expresaban el fuerte deseo del presidente Go por mantener a Jinwoo en el país, sino también su evaluación sobre el joven. “Entonces…” – dijo Jinwoo. Después de pensarlo por un momento, comenzó a abrir la boca. – “¿Puedes darme acceso a las puertas de alto rango solo?” “¿Perdón?” – preguntó Gunhee, cuando apareció una demanda completamente inesperada. Sus ojos se abrieron de par en par. – “¿Me estás pidiendo que te excluya de la regla de un número mínimo?” Jinwoo asintió con la cabeza. “Uh…” Esa norma se usaba para mantener una mínima red de seguridad para los cazadores. Era una política que buscaba evitar que los cazadores entrasen en una mazmorra sin un mínimo de preparación y terminasen perdiendo la vida. Sin embargo… ¿Realmente necesitaba esa norma un cazador que podía invocar criaturas capaces de exterminar a múltiples bestias de rango S? “Por causalidad… ¿La obtención de ese permiso es para poder despejar todas las puertas solo?” – preguntó Gunhee nervioso, después de recordar la escena del hormiguero. “Sí.” Gunhee se quedó sin palabras ante la respuesta directa de Jinwoo. No había ni un solo rastro de preocupación en su voz. ‘Ha creado el gremio para eso…’ Todo indicaba que había creado un gremio para poder limpiar las puertas de alto rango él solo. Había muchos cazadores poderosos en el mundo, pero nadie se había planteado una incursión como esa. Pero cuando la imagen de Jinwoo hablando con total confianza y la escena que observó en el hormiguero se superpusieron, llegó a una conclusión que lo hizo temblar sin control. ‘Un ejército de un solo hombre…’ – pensó de repente. Para Go Gunhee, que había estado contantemente preocupado por el crecimiento descontrolado de los grandes gremios era un concepto increíblemente atractivo. Du-Dun… Du-Dun… Su corazón comenzó a acelerarse de nuevo haciendo que tuviera que colocar la mano sobre su pecho, pero cuando se comparó con el viril y saludable Jinwoo, no pudo evitar poner una sonrisa amarga. “¿Será complicado de hacer?” – preguntó Jinwoo. “No es imposible.” – respondió Gunhee, de inmediato, negando con la cabeza. Sería algo complicado, pero no era imposible. Gunhee pensó que no iba a ser algo sencillo, pero era el presidente de la Asociación, un cazador de rango S y miembro de la Asamblea Nacional. Además, esta no era una solicitud realizada por un ciudadano común, sino por el cazador Sung Jinwoo. Aunque fuera complicado, no habría nada que le impidiera cumplirla. Y si eso era suficiente para mantenerlo en Corea del Sur, mucho mejor. “Déjamelo a mí.” Jinwoo sonrió al escuchar el tono de voz confiado del presidente de la Asociación. ‘Bien.’ Una de las cosas que más le preocupaba se había resuelto en este momento. “Gracias.” – dijo Jinwoo con una sonrisa, expresando su gratitud. “Siempre menciono esto, pero muchas gracias por todo.” – respondió Gunhee con otra sonrisa. Ñiiiiiiic El coche se detuvo lejos del hospital. “Hasta la próxima, cazador Sung.” “Hasta luego.” Después de dar una simple despedida, Jinwoo salió del vehículo. Había una gran cantidad de periodistas a las puertas del hospital para enterarse del estado de las víctimas. El vehículo se había detenido a una distancia considerable de la entrada por la consideración de Woo Jincheol. Estaba claro que si el coche del presidente de la Asociación se detenía ante el hospital para dejar a Jinwoo habría estallado otra conmoción. ‘En momentos como este, ser famoso es realmente molesto.’ – pensó Jinwoo mientras sacudía la cabeza. A continuación, usó Sigilo para ocultarse.
* * *
Dentro de la oficina del presidente de construcciones Yoojin. El presidente Yoo Myunghan, que se había quedado dormido sobre su amplio escritorio, levantó la parte superior de su cuerpo. La luz del sol se filtraba entre las rendijas de la ventana. Sintió que sus párpados se volvían increíblemente pesados y, al final, parecía que se había caído dormido. En el sofá frente a él, el secretario Kim, que era como su mano derecha, estaba sentado erguido mirando a su jefe. “Parece que he dormido un poco, ¿Cuánto tiempo estuve dormido?” – preguntó Myunghan frotándose la cara para ahuyentar la somnolencia. El secretario Kim miró su reloj de pulsera y luego volvió a levantar la cabeza. “Señor, ha estado dormido durante 23 horas y 46 minutos.” “……” La mano con la que se estaba frotando el rostro se detuvo de repente. “Señor, he estado esperando aquí para llevar a cabo su orden de acompañarlo al hospital si no se despierta antes de que hayan transcurrido 24 horas.” Había sido esa enfermedad otra vez. Mientras su mano caía, su rostro se puso rígido. A veces caía en un estado de sueño profundo sin ningún signo de advertencia y, con cada vez que se dormía, le resultaba más difícil despertarse. La enfermedad del ‘Sueño Eterno’. Aunque el proceso era lento, esta enfermedad definitivamente arrastraba a todas sus víctimas a la puerta de la muerte. El secretario Kim avanzó rápidamente y se situó frente a Yoo Myunghan “Señor, hay dos cosas que necesito informarle.” “¿Qué son?” Conocido como ‘Cara de póker’, Yoo Myunghan borró todo rastro de preocupación de su rostro y volvió a su expresión habitual. El secretario Kim recogió el periódico que se encontraba al borde del escritorio y, cortésmente, lo colocó ante su jefe. “¿……?” Algo desconcertado, Yoo Myunghan hojeó rápidamente el periódico. La primera página contaba que cientos de estudiantes habían sido asesinados cuando se abrió una puerta en una escuela de Seúl. Tsk, tsk… Yoo Myunghan hizo una mueca después de leer esa terrible noticia. “Que terrible incidente. Asegúrese de que nuestra empresa done algo a la escuela y a las víctimas.” “Si señor presidente, pero eso no es todo.” Flush Yoo Myunghan dejó caer el periódico. A su lado, el secretario se inclinó levemente y pasó la página del periódico con cuidado, hasta situar las yemas de sus dedos sobre una imagen. Había una foto grande que dominaba la página. “Señor, esta es la fotografía que quería mostrarle.” La punta del dedo del secretario estaba sobre la foto de una mujer. “Esa mujer… Señor, ¿la recuerda?” La fotografía mostraba el hospital en el que habían sido ingresados los supervivientes de ese horrible incidente. El secretario había señalado a una mujer entre la multitud. Estaba corriendo de forma apresurada hacia la entrada del hospital. Por casualidad, era alguien que el presidente Yoo Myunghan recordaba con claridad. “Pero, ¿cómo…?” Nunca olvidaba la cara de una persona. Había visto la imagen de esa mujer. No era otra la que madre del cazador Sung Jinwoo. “¿No estaba sufriendo la enfermedad del Sueño Eterno?” Había estudiado la ficha del cazador Sung con gran detalle. Según la información que había en su mente, debería estar confinada en una cama, incapaz de moverse mientras dependía de una máquina de soporte vital. Pero ahora estaba caminando completamente saludable. Sabía lo que el secretario estaba tratando de decir. “¿Puedes averiguar más sobre lo que sucedió?” – preguntó cuando las manos que agarraban el periódico comenzaron a temblar. “Entendido, señor.” “Gracias…” El secretario Kim inclinó la cabeza por un breve momento, como respuesta al agradecimiento de Yoo Myunghan, antes de volver a levantarse. “Dijiste que hay dos cosas que necesito saber.” – dijo Myunghan después de soltar el periódico. “Sí señor.” “¿Cuál es el segundo asunto?” – preguntó, levantando la cabeza y buscando la mirada del secretario Kim. La luz en los ojos del secretario no era buena. Era uno de sus viejos hábitos. Siempre contaba las buenas noticias primero y dejaba las malas para el final. El secretario dudó por unos instantes, pero pareció darse por vencido y comenzó a hablar. “La joven señorita regresó ayer a casa.” Y como si hubiera estado esperando… Clack La puerta del baño de la oficina se abrió de par en par y Yoo Jinhee entró en la habitación con lágrimas en los ojos. “Padre, ¿Cuánto tiempo has estado así?” – preguntó, cuando vio lo delgado que se había vuelto su padre.