Volumen 42 Capítulo 4
La decisión del gremio Hermes
Traducido por Tars
Corregido por AMarauder
Editado por AMarauder
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Rafael y Bard Ray celebraron una reunión con otros 25 Señores, líderes clave y gobernadores regionales. Eran las personas que realmente decidían las políticas del Imperio de Haven.
Rafael se cubrió el rostro durante un rato.
‘Fui descuidado. Definitivamente era una guerra que se podía ganar, pero había que tener en cuenta la debilidad de los comandantes. El derrumbe del palacio es el resultado de pasar por alto el hecho de que puede suceder cualquier cosa en el Continente de Versalles.’
El Imperio de Haven estaba pasando por su mayor crisis desde la fundación. Se estaba celebrando esta reunión para pensar en contramedidas para paliar las consecuencias de la derrota en la guerra con el Reino de Arpen y el repentino derrumbe del palacio, pero no era fácil llegar a una conclusión.
Estaban recibiendo informes sobre las rebeliones que estaba sufriendo el imperio en tiempo real. Aunque todavía no se habían producido una cantidad de daños considerable, pero los pequeños disturbios se estaban convirtiendo en grandes problemas a medida que los rebeldes aparecían por todas partes.
“¡Conquistemos de inmediato el Reino de Arpen! Les haremos saber lo que les sucede a aquellos que se burlan del Imperio de Haven.”
“Mm… Una guerra en este momento… Tendríamos que reorganizar nuestras tropas y enviar unidades de suministro adicionales. La petición extra de suministros creará nuevas tensiones en varias regiones.”
Akhim puso una expresión de insatisfacción ante la idea de comenzar una nueva guerra. La expedición al Norte había consumido una gran cantidad de tropas, suministros y tiempo. El Imperio de Haven podía permitírselo, pero sería un desperdicio.
Los jugadores que fundaron el gremio Hermes, los héroes de guerra y las figuras de poder habían sido nombrados gobernadores de alguna región. Desde su punto de vista, si era una decisión que se tomaba por los líderes del gremio la seguirían, pero primero había que lidiar con el caos que tenían dentro del imperio.
Aunque conquistaran el Norte, primero tenían que considerar lo que costaría no ocuparse de sus asuntos internos. Además, los Señores principales conocían muchos de los secretos internos del gremio Hermes. A partir de cierto momento, Rafael no se centró únicamente en establecer un imperio. Después de dominar el Continente Central había planeado centrarse en un gobierno a largo plazo y trazó un plan secreto que aseguraría que el Imperio durase mucho tiempo.
Los Señores y Gobernadores que estaban al tanto sobre el poder oculto del Imperio de Haven, esperaron pacientemente la decisión de Rafael y Bard Ray.
“Solo avancemos, los aplastaré yo mismo. Estaré a la vanguardia. Si Bard Ray toma el mando del ejército, ¡podemos conquistarlos con facilidad!”
Darius volvió a insistir. Era un jugador que comenzó en el Reino de Rosenheim y que lideraba el gremio Ica. Sin embargo, debido a su mala reputación, dejó su ciudad natal y viajó hasta el Continente Central para unirse al gremio Hermes a través de conexiones personales y sobornos. Estaba obsesionado con jugar a Royal Road, por lo que creció rápidamente con el apoyo del gremio. No importaba como tratase a otras personas, sabía cómo tratar a sus subordinados, por lo que había acumulado bastante poder.
Aun así, su posición e influencia no serían lo suficientemente elevadas como para asistir a una reunión de este nivel si no fuera porque tenía una conexión especial con Bard Ray. Había preparado buenos terrenos de caza para él y actuó de manera servil, por lo que se le garantizó un asiento en esta reunión. Darius blandiría su espada en cualquier momento para el gremio Hermes.
¡Los intransigentes y los moderados! La opinión de que debían librar una nueva guerra de inmediato contra la opinión de que el imperio debería limpiar el caos que tenía dentro sus fronteras.
Rafael sintió que ahora era el momento de tomar una decisión.
“Una guerra debe planificarse con cuidado.”
Cuando comenzó a hablar, la sala de reuniones se quedó en silencio.
“Como sabéis por los informes que siguen llegando, este incidente ha tenido un impacto profundo e inesperado en el Imperio de Haven. En una guerra que debía ganarse con suma facilidad, una parte de nuestras fuerzas han sido aniquiladas y el Palacio Imperial, nuestro orgullo, se ha derrumbado. La pérdida del palacio está causando un daño enorme a todas las regiones y si no lo solucionamos rápidamente, podría volverse un problema mucho más grande de lo que pensamos.”
Era una reunión entre líderes, pero era Rafael quien dirigía todo el proceso. Con la información que recibía de los agentes de inteligencia repartidos por todo el Continente, comprendía el estado actual y predecía el futuro. Rafael y Bard Ray eran los únicos que tenían la voz y la autoridad para dirigir la política del gremio Hermes. Los Señores y Gobernadores inclinaron la cabeza hacia abajo, pero se sentían optimistas.
‘Todavía no va a revelar su poder oculto.’
‘Si los mostramos antes de tiempo será contraproducente. Solo los sacará en el peor de los casos.’
Rafael continuó hablando con un tono de voz serio.
“La seguridad interna se reducirá todavía más con la aparición de los rebeldes. Y tenemos demasiada notoriedad. Normalmente ignoramos esos asuntos, pero en este caso habrá consecuencias si no los reprimimos desde el principio y los rebeldes se salen de control.”
El Continente Central era amplio. Aunque los rebeldes no fueran capaces de apoderarse de fortalezas o ciudades, podrían causar un caos constante por todo el Imperio. Si los insurrectos continuaban aumentando, el daño causado al poder del Imperio sería considerable.
Pero todos sabían que Rafael siempre estaba preparado.
“Afortunadamente tenemos muchos medios disponibles. El ejército puede retomar con facilidad cualquier ciudad perdida dentro del Imperio y el poder económico en una región puede compensarse con el crecimiento de otra. Sin embargo, esto solo será posible si abandonamos por completo la idea de comenzar otra guerra y nos centramos en limpiar el caos que hay dentro del Imperio.”
Rafael se volvió hacia Bard Ray.
“Si vas a luchar contra el Reino de Arpen, tendremos que concentrar todos nuestros esfuerzos en unificar el Continente. A cambio, el caos actual puede extenderse hasta un punto con el que no podremos lidiar.”
Bard Ray, que hasta ahora se había limitado a mirar, abrió la boca.
“Entonces, tenemos que elegir entre la guerra o apaciguar el Imperio.”
“Así es. Si eliges la guerra debes ir al Reino de Arpen. Aunque el Norte no tiene demasiado poder, de haber usado mejor las tácticas y nos hubiéramos movido con más tranquilidad, los hubiéramos conquistado. Si queremos mostrar la majestuosidad del Imperio de Haven, la victoria no importa por si sola. Esta vez necesitamos utilizar las mejores tropas.”
“Las mejores tropas…”
“La mitad serán miembros del gremio Hermes y la otra mitad soldados del Imperio de Haven. Podremos acabar con Weed y los jugadores del Norte, sin importar lo que intenten.”
“¿No es demasiado?”
“Es necesario un ejército de ese tamaño si queremos convertir a Morata y a las principales ciudades del Norte en ruinas y desarraigar a todos los que piensen en resistir hasta el final. Y debe hacerse en el menor tiempo posible.”
Por un instante, la composición de las tropas del ejército del Imperio de Haven pasó por sus mentes. En esta ocasión habían aniquilado a 1.700.000 soldados. El Imperio de Haven poseía numerosos castillos y ciudades y todos tenían a su cargo muchos caballeros. Había muchos Señores que habían entrenado caballeros en el Continente Central, por lo que, si reclutaban tropas de todo el territorio, podrían recuperar con facilidad el número de efectivos perdidos.
A pesar de que la guerra acababa de terminar, el Imperio de Haven seguía poseyendo el poder militar más poderoso. Sin embargo, una expedición militar a gran escala empeoraría aún más la seguridad del Imperio y el reclutamiento forzoso de personas haría que muchas actividades productivas sufrieran una falta de personal, haciendo que decayera tanto el poder económico como la lealtad.
Llegados a este punto los líderes del gremio Hermes no querían consumir una enorme cantidad de suministros o que ocurriera una recesión económica. La estabilidad del Continente Central ya estaba amenazada por la constante destrucción y revueltas.
En el Continente de Versalles no había nada tan aterrador como los rumores. Cada vez que alguien lograba realizar una gran aventura o un mago desarrollaba una magia nueva, la información comenzaría a salir de la boca de la gente.
Si la reputación del Imperio disminuía, los rebeldes no dejarían de aparecer y las protestas de los residentes no podrían ser reprimidas. Realizar una guerra mediante un reclutamiento a gran escala causaría enormes pérdidas en los asuntos internos y, como resultado, sería mucho más complicado gobernar.
Pero el corazón de Bard Ray estaba inclinado hacia la guerra.
“Incluso si la recuperación es lenta, ¿no es mejor aniquilar por completo al Reino de Arpen con una guerra? El valor de unificar rápidamente el Continente también es grande. Desarraigar a nuestros enemigos evitará una futura oposición.”
Los jugadores del gremio Hermes asintieron con simpatía ante sus palabras. En el futuro, el gremio Hermes seguiría siendo la única y más poderosa organización del Continente de Versalles. Después de acabar con la última resistencia de los jugadores del Norte, el gobierno del gremio Hermes sería eterno. Valdría la pena incluso si los asuntos internos del imperio se sacudían en este momento.
“Es difícil decir cuál decisión es mejor. Si elegimos recuperarnos, el Reino de Arpen volverá a desarrollarse. No será mucho, pero les daríamos algo de tiempo. Por otro lado, si optamos por la guerra y enviamos un gran ejército al Norte, no podremos resolver el caos dentro del Imperio y surgirán más problemas de los esperados.”
“¿Qué problemas pueden surgir?”
“No ha pasado mucho tiempo desde que conquistamos los reinos del Continente Central. Si los territorios no se estabilizan, la cantidad de rebeldes crecerá rápidamente. También hay mucha gente que ha sido derrotada por nosotros. Seguro que aprovechan la confusión para levantarse.”
“Les hemos inculcado con dureza la derrota durante la guerra.”
“Por supuesto. Las medidas que implementamos los dividieron e incluso absorbimos parte de su poder, haciendo que estuvieran tranquilos hasta ahora. Pero si ven la oportunidad también se rebelarán. Si los enemigos derrotados se levantan por todas partes y no podemos reprimirlos al principio… Incluso después de conquistar el Norte, es posible que nos enfrentemos a una larga guerra civil. En el peor de los casos, los territorios conquistados serán destruidos y la población se reducirá, dejando únicamente un cascarón vacío y reduciendo el poder del Imperio a la mitad.”
“Será un problema difícil de resolver si pasa eso.”
Si Bard Ray se embarcaba en una expedición a gran escala en el momento en que el Imperio de Haven necesitaba encontrar estabilidad, les daría una oportunidad a sus enemigos. Ya ocupaban alrededor de una cuarta parte del Continente Norte, por lo que ya tenían que estacionar continuamente un número considerable de tropas en cada región.
Si el Continente se tambaleaba, el Norte también acabaría rebelándose, haciendo que el caos se expandiera mucho antes de que el Imperio de Haven pudiera hacerse con todo el Continente de Versalles.
Si eso sucedía, todos los habitantes y jugadores del Continente serían hostiles contra el Imperio de Haven. No importa cuán grande sea el poder del gremio Hermes, no querían que eso pasase. Además, si las cosas iban tan lejos, la reacción dentro del gremio también sería violenta.
Crevolta movió la cabeza, como si le doliera.
“Escuché que lo complicado venía después de fundar el reino, veo que es cierto.”
“Se necesita mucho tiempo para construir una torre apilando las piedras de una en una, pero solo tarda un momento en derrumbarse. Aun así, la situación no es tan mala. Tenemos el control y no se ha producido ningún daño fatal todavía. Tenemos opciones. El futuro lo decidiremos nosotros. Y cualquier opción tiene sus ventajas e inconvenientes, así que solo tenemos que lidiar con ella y minimizar los daños secundarios.”
Entre los líderes del gremio Hermes había muchos que preferían la línea dura. Eran los que tenían actualmente una posición alta en el Continente Central, o los antiguos comandantes que arrasaron con varios reinos. Aun así, nadie estaba dispuesto a decir que deberían ir a la guerra a pesar de todos los problemas internos.
El Imperio de Haven ya había logrado una gran hazaña. El tamaño de su territorio, la población, el poder económico, la tecnología o su poder militar eran los más grandes del Continente. Su único punto débil era que todos los logros que había alcanzado hasta ahora podían ser destruidos en una guerra civil por culpa del sentir de la gente. Todos querían un gobierno estable a largo plazo.
El gremio Hermes se apoderó del Reino de Haven y comenzó una guerra con decisión para conquistar el Continente, pero ahora era diferente. Rafael había preparado un plan secreto para el Imperio, pero por ahora era necesario mantener ese poder oculto. Solo se podría usar cuando hubiera una crisis real.
“Si elegimos recuperarnos… ¿Qué pasará después?” – preguntó Bard Ray de repente.
“Estabilizaremos por completo el interior del Imperio. Fortaleceremos tu gobierno aumentando la lealtad de los habitantes para corregir el deterioro de la seguridad y evitar que aparezcan nuevos rebeldes. En lugar de usar la fuerza, seremos amables. El Continente Central es una región rica con cultura y prosperidad económica. Ahora está devastada por la guerra, pero si aplicamos una política activa de reconstrucción podemos hacer que la economía sea mucho más fuerte en el futuro.”
“Las ganancias serán mayores a corto plazo si optamos por la recuperación. La conquista del Norte nos dará honor y tiene la ventaja de eliminar las potenciales fuerzas enemigas, pero hay más cosas que proteger.”
Los jugadores que ingresaron al principio de Royal Road experimentaron los reinos del Continente Central cuando eran prósperos. Los gremios prestigiosos se establecieron en castillos y ciudades e implementaron políticas militares que se concentraron en la supervivencia y el saqueo.
Las sucesivas guerras provocaron muchos reveses en la economía y la tecnología.
“El potencial del Imperio de Haven es ilimitado. Una vez que los problemas internos desaparezcan y los planes de desarrollo se implementen por completo, las regiones conquistadas recuperarán su desarrollo anterior y la lealtad de los residentes aumentará. Nuestro gobierno seguirá siendo estable durante mucho tiempo.” – dijo Rafael con tono agridulce.
A pesar de las perspectivas positivas, pensó que sería mejor estabilizar el Imperio y luego continuar con la conquista del Norte.
Bard Ray asintió.
“Estabilidad y desarrollo. Mirándolo con objetividad, posponer la unificación del Continente puede ser la elección correcta.”
“Se puede ver de esa manera. Incluso si conquistamos el Norte, no será una unificación prefecta si no podemos conquistar el este, el sur y el oeste. Hasta entonces, la conquista por el Continente no habrá terminado. Por supuesto, una vez que el Norte se rinda, el resto será cuestión de tiempo.”
Los líderes quedaron absortos en sus pensamientos.
‘Desarrollo o caos. Si partimos hacia el Norte y dejamos la situación como está… El Imperio no se derrumbará, pero me causa ansiedad.’
‘Conquista. Tiene que ser conquista. Todos los que se resistan deben morir. ¡Demostremos el poder del gremio Hermes!’
‘Lleve el tiempo que lleve, revivir la gloria del Continente Central es esencial. Y la zona que gobierno tiene poca seguridad, por lo que no podré oponer mucha resistencia. Incluso si conseguimos suprimir a los rebeldes más adelante, el daño será enorme. No quiero sufrir por la gloria del Imperio.’
‘El Imperio de Haven no se derrumbará, pero tampoco tenemos necesidad de elegir el camino más complicado. Podemos ir tras el Reino de Arpen una vez que desaparezcan los rebeldes. Bueno, ni siquiera con problemas internos pueden luchar contra nuestra fuerza militar.’
‘Weed. Es un problema hasta el final. Maldito bastardo. Deberíamos haberlo matado antes.’
La opinión general de los líderes era que no importaba que el Reino de Arpen tuviera tiempo para desarrollarse. Aunque se podía decir que Morata se desarrolló a una velocidad milagrosa, al final se fue volviendo más lenta. Por otro lado, el Imperio de Haven se volvería tres o cuatro veces más poderoso de lo que era ahora con solo restaurar su poder económico. No podían competir.
Como resultado de la conquista del Norte, alrededor de una cuarta parte del Reino de Arpen ya estaba en manos del Imperio. Además, su palacio también fue destruido, por lo que podía decirse que estaban en una situación similar.
Su honor y su orgullo estaban en juego, pero no pensaban en el Reino de Arpen como en un enemigo.
“Si elegimos recuperarnos, ¿eso significa que vamos a dejar al Reino de Arpen haga lo que quiera?” – preguntó Stendhal, uno de los nuevos Señores de las ciudades libres.
“Por supuesto que no. Prepararé algunas medidas. Aunque nuestro ejército fracasó, no estuvo exento de logros. Mantendremos los territorios que hemos ocupado mientras continuamos entrenando tropas y ejercemos presión sobre ellos. Para el Reino de Arpen eso será una carga considerable. También cortaremos el comercio y bloquearemos el tráfico que va hacia el Norte. Si los aislamos por completo les será complicado desarrollarse tan rápido como ahora.”
La mayor parte de la estrategia del gremio Hermes surgió del cerebro de Rafael. Tenía ya preparados varios planes independientemente de la opción que se eligiera. El desarrollo del Imperio de Haven y del Reino de Arpen continuarían, pero como el punto de partida era completamente diferente, tenían la confianza de alzarse con la victoria. Sin embargo, no sabían que decisión sería más beneficiosa para su futuro.
Además, su opinión por sí sola no movería al Imperio de Haven. El gremio Hermes era una fuerza enorme y, para tomar una decisión tan importante, necesitaba que el resto de líderes estuviera de acuerdo.
Después de que Bard Ray miró a los ojos del resto de personas que estaban en la sala tomó una decisión.
“Pospondremos la guerra. Ahora es el momento de restaurar la paz y fortalecer el Imperio.”
“Bien. Entendido.”
* * *
Yoo Byung Jun renunció a conocer a Bard Ray y regresó a su laboratorio.
‘Al final triunfó el Reino de Arpen.’
De forma inesperada, el Norte detuvo la invasión del Imperio de Haven.
“Una vez más Weed ha vuelto a superar una situación desfavorable… La suerte está con él. Bueno, tampoco es que cambie nada.”
Lo más probable era que el gobernante del Continente fuera Bard Ray. Sin embargo, también era cierto que Weed todavía tenía posibilidades. Yoo Byung Jun se sintió decepcionado al ver la reunión del Imperio Haven en el monitor.
“Podían fortalecer su dominio después de conquistar el Continente. El futuro es desconocido, ¿acaso hay alguna opción que sea totalmente estable y segura? El gremio Hermes es fuerte, pero tiene muchos enemigos.”
¿Debería comprobar el número de personas a las que no les gusta el gremio Hermes?
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“No es necesario.”
Cancelando el análisis.
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El gremio Hermes había estado luchando constantemente. Había acumulado poder mientras ganaba guerras y aplastaba a sus enemigos.
Al observar al Reino de Arpen, la gente decía que su desarrollo era un milagro, pero no era el único. El gremio Hermes había pasado de ser un gremio a todo un imperio. Bard Ray y Rafael superaron a sus numerosos competidores para dominar el territorio actual. Definitivamente era algo mucho más complicado que apoderarse de un territorio vacío en el Norte.
Rafael y Bard Ray podían ser calificados héroes simplemente por su habilidad para atacar a sus enemigos y expandir sus fuerzas. La preparación de su plan de gobierno a largo plazo podía considerarse admirable.
“Desde el principio, Bard Ray debería haber ido directamente al Norte. El Imperio de Haven tenía suficiente poder para hacerlo, pero se confió.”
Un poco de negligencia y un pequeño error fue lo único que hizo falta para darle tiempo al Reino de Arpen.
Yoo Byung Jun pensó en lo que les deparaba el futuro, pero la historia nunca fluía según lo previsto.
En el Continente de Versalles, Weed y Bard Ray no estaban solos. Numerosos jugadores estaban creando su propia historia.
* * *
“Esta es nuestra última oportunidad.”
“Estoy de acuerdo. Ahora que el Imperio de Haven está temblando, podremos establecernos de nuevo.”
“Los dos pilares del mundo son el Imperio de Haven y el Reino de Arpen. En ese momento, habrá pocas personas que se unan a nosotros.”
“Es bueno que hayamos decidido movernos antes de que sea demasiado tarde. El Continente Central es nuestro por naturaleza.”
Loam, Gunt, Michel, Carlise y Shoud.
Desde que se reunieron habían ido recopilando información sobre el caos del Continente Central. Y al final, a través de los pocos compañeros y subordinados que les quedaban decidieron aprovechar este momento de confusión en el Imperio de Haven para recuperar el poder.
“Conozco a alguien de la caballería de Barang, me puse en contacto con ellos y decidieron unirse a nuestra causa.”
“Te lo agradezco. Serán de gran ayuda.”
“El gremio Asirium, los que gobernaban el Triángulo de Morelang, también se unen.”
“No he sabido nada de ellos por un tiempo, ¿todavía siguen vivos?”
“Han estado yendo de aventuras, aun parecen tan buenos como en el pasado.”
Utilizaron sus conexiones personales para reunir compañeros que compartían sus pensamientos y ponerse en contactos con los líderes de otros gremios. Los jugadores del Continente sucumbieron ante el poder del Imperio de Haven. Aquellos que estaban enfadados, pero que no tenían manera de solucionarlo, decidieron ponerse en pie cuando vieron una oportunidad.
“La inteligencia del gremio Hermes es grandiosa. Necesitamos hacer nuestro mejor esfuerzo antes de que conozcan nuestra determinación.”
“Mañana por la noche, comenzaremos a recuperar el territorio perdido con la Fortaleza de Odin.”
“La batalla tendrá más posibilidades de éxito si la lideran aquellos que gobernaron el área. ¿Alguien no está de acuerdo con este enfoque?”
“Sin quejas.”
“Entonces comencemos.”
¡El llamado Día de la Gran Rebelión!
Trece de las fortalezas del Imperio de Haven fueron atacadas repentinamente y perdieron su territorio frente a los rebeldes.
* * *
“Esta vez no podemos cometer fallos.”
“Estoy seguro. Será perfecto.”
Terose entró en la mazmorra con cincuenta mercenarios PNJs de élite y seis compañeros.
Sus habilidades individuales les habían hecho famosos en Royal Road y cada uno había conseguido un apodo. En su momento fueron considerados uno de los diez mejores gremios del Continente, pero mientras exploraban la tumba del Rey Belsos cometieron un error y causaron una oleada de calor sofocante por todo el Continente que causó su ruina. Después estuvieron involucrados en la expedición del gremio Rosa Fría hacia el Norte y fracasaron después de intentar traicionarlos.
El gremio Alas Carmesí se hizo añicos y solo quedaron Terose y algunos amigos. De hecho, se encontraban en la situación de que no podían ir a ningún lado por su reputación y notoriedad.
Los gremios poderosos fueron aplastados por el gremio Hermes y hubo diferencias entre sus niveles y el de los jugadores comunes. Terose y sus amigos no tuvieron más remedio que vagar por el Norte en busca de aventuras antes de aceptar una misión.
Nueva misión: [El secreto de las estrellas y la luna].
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¿Cuánto sabes sobre los misterios del Continente de Versalles? No importa si sabes mucho o si eres un ignorante. A partir de ahora todo lo que conoces y experimentarás será nuevo.
Ve al área de Muhejadin y encuentra las figuras desconocidas talladas en el suelo.
Encontrar pistas sobre las estrellas revelará el siguiente secreto.
Nivel de dificultad: S
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Restricciones:
El [Conocimiento] debe ser superior a 1.000 puntos.
Debes poseer experiencia en viajes a larga distancia
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Recompensa:
Conduce a una misión en cadena.
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“¡Una misión en cadena!”
“Tiene una dificultad tremenda.”
Terose intentó negarse debido a los hechos acaecidos en la tumba del Rey Belsos.
“Tenemos otro trabajo que hacer, así que no podemos encargarnos de esto.”
La misión no se puede cancelar debido a la alineación estelar.
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La [Suerte] aumenta permanentemente en 7 puntos.
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Has aceptado la misión.
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“¡Maldita sea!”
“Está bien. Pasemos de la búsqueda por ahora, recopilaremos información e investigaremos durante unos meses.”
Has aceptado una misión especial.
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Debes completar la misión en los próximos 15 días, antes de que la Osa Mayor deje de estar visible.
Si no tenéis éxito se os otorgará la [Maldición de las estrellas].
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“¡Maldición!”
La misión en cadena condujo a esto.
Mientras deambulaban por el Continente de Versalles descubrieron los secretos de la estrella y la luna. Arriesgaron su vida para ir a un lugar desconocido donde poder encontrar la tierra donde caían las estrellas, incluso terminaron vagando por el mar para encontrar el secreto grabado en la tierra.
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