domingo, 7 de agosto de 2016

Volumen 12 Capítulo 8

Volumen 12 Capítulo 8
Prisionero de guerra.
Traducido por Ripecour
Corregido por DaniR y Tars
Editado por AMarauder y Tars

Reino de Haven. Ubicado en el centro neurálgico del Continente, cuenta con territorios extensos y fértiles, junto con montañas ricas en yacimientos de minerales. Es por eso, que muchos jugadores eligieron dicho Reino en los primeros días de Royal Road. “Muchas montañas implican que ahí existen muchas mazmorras, cubiles y peligrosos terrenos de caza.” Esta zona, principalmente, se encuentra repleta de jugadores con clase de aventurero o bardo. “Los puestos de comercio que hay aquí también son geniales. Tiene un acceso conveniente al resto de reinos y… con la gran variedad de distintos tipos de aventureros que hay, no falta el botín.” Los mercaderes también elegían el Reino de Haven. Guerreros, sacerdotes e incluso aquellos que solo querían cazar decidían también comenzar en este reino. Gracias a esto, el reino floreció comercialmente unido a un explosivo crecimiento militar. Una persona no relacionada con el reino probablemente la consideraría como una ciudad abarrotada. En la región principal de Illuin, se encontraba la fortaleza de Balkiseu en las que todas las mañanas los residentes se agolpaban en la calles para ver partir a las expediciones militares. La situación se agravaba en Mollin , debido a la gran cantidad de personas que la habitaban, tenían lugar un sinfín de disputas. Tanto en mazmorras, como en guaridas, montañas o incluso en las llanuras, las batallas entre gremios se sucedían constantemente. “El primero en golpear no será devorado.” “¡Guerra! ¡Debemos reunirnos para la guerra!” Por doquier se formaban consejos y reuniones tácticas. Entre los gremios, a menudo se forjaban alianzas o uniones, seguidas de disoluciones y continuas traiciones. En el Reino de Haven existían varios cientos de gremios listos para ir a la guerra; al unir esto con los mercenarios contratados de otros países, era inevitable ver incrementado el número de batallas a gran escala que tenían lugar. El portentoso Bard Ray lideraba el gremio Hermes con la intención de ocupar los castillos de Noreunjawi y gobernar todo el Reino. Las escuadras de ‘Los Caballeros de Sangre’, ‘Los Mercenarios Solitarios’ y ‘Los Magos Rojos’ izaron su bandera donde habían sido derrotados aquellos que se habían opuesto al gremio Hermes.
* * *
Reino de Kallamore. Antaño, el Reino había poseído un vasto territorio, pero el poder de la Casa Real se había visto debilitado debido a las ansias de los miembros de la Corte Imperial por hacerse con el mando de la nación; finalmente, la capital fue quemada hasta las cenizas tras ser invadida por las agresiones de las naciones vecinas. No obstante, intentaron resucitar el imperio izando una vez más su bandera. Para ello, usaron como estandarte al caballero más poderoso de la familia real, alguien que había sido venerado y reverenciado por otros países como el más formidable general militar en el ámbito tradicional del Continente Central. Que el Reino estuviera formado exclusivamente por nobles y aldeanos, era un inconveniente para los jugadores, por lo que no muchos de ellos elegían como lugar de inicio el Reino de Kallamore. Al igual que otros países, contaba con una gran población y tenía la minería, la tecnología y el comercio desarrollados. Pero, al contrario que en otros reinos, las guerras entre gremios no sucedían con frecuencia. Esto se debía a que el Reino estaba rodeado por la Cordillera Senbain y cada semana una gran oleada de monstruos bajaba de las montañas y atacaba todo el Reino. Saqueo y destrucción. Si las defensas caían, el pueblo y sus habitantes se veían condenados a una completa desaparición. Por ello, a la mayoría de jugadores no les gustaba el Reino de Kallamore. “Es muy duro y en este Reino puedes perderlo todo en un instante.” “Yo no lo recomiendo a menos que seas de esos tipos a los que les gusta morir.” “No vayas, la seguridad en la Cordillera Senbain no es buena.” Los viajeros alejaron de su mente la idea de acercarse al Reino de Kallamore debido al brote de monstruos. En el Reino, de forma trabajosa y gracias a las derrotas de los monstruos, su ejército creció de forma sostenida. Era un lugar muy animado para los aventureros. Afortunadamente, existía gran variedad de personas en el mundo. Algunos aceptaron el encargo de misión de los Caballeros de Senbain para encontrar la razón de fuente de infestación de monstruos en el Reino de Kallamore. Aquellos lo suficientemente insensatos, deseosos de una experiencia nueva o sin miedo a perder su vida, lo hacían por diversión. Y así, junto con las tropas del Reino, lucharon contra el descenso de los monstruos de la montaña. ¡Y ganaron honor!

Como defensor de Senbain, has ganado 3 puntos de [Honor].
Gracias a los combates, se podía obtener puntos de [Honor], algo exclusivo de la profesión de caballero. Si se tenían suficientes puntos de [Honor], los subordinados siempre eran leales y, hasta cierto punto, la persona siempre era considerada como alguien de la nobleza. Algunas veces era posible recibir regalos de los nobles o de la Cortes Reales, y la popularidad con las damas aumentaba. Los puntos de [Honor] eran algo esencial para aquellos que querían unirse a las órdenes de caballería o convertirse en oficiales de alto rango. Los aventureros que llevaron a cabo la misión difundieron ampliamente la noticia de este hecho. Francamente, tenían deseos de mantenerlo para ellos mismos, pero temiendo el peligro de luchar en Senbain, necesitaban más gente. “¿Podremos obtener los valiosos puntos de [Honor]?” “Los puntos de [Honor] son tan difíciles de obtener que solo es posible ganarlos a través de victorias en duelos o hazañas especiales…” Los combatientes se dirigieron hacia Senbain para luchar en sus montañas. Muchos murieron interceptando las hordas de monstruos, pero el placer de bloquearlos con éxito era algo difícil de explicar. También se enviaron voluntarios a los alrededores de los castillos de Senbain. Gracias al aumento en [Fama] y [Honor], se podía ser designado para dirigir las tropas de nuevos voluntarios. Cada vez, era posible obtener más experiencia de combate, mientras que los puntos extra de contribución con el Reino aumentaban. Las misiones eran terriblemente peligrosas y, a pesar de los muchos fracasos, todo el mundo se encontraba inmerso en la defensa del Reino. Infantería, guerreros, arqueros, caballeros, y así sucesivamente. Decenas de miles de jugadores se convirtieron en miembros de las tropas del Reino y se unieron para pelear en feroces batallas contra los monstruos. Y todo debido a la emoción de formar parte de la guerra en el Reino de Kallamore. “¿Guerra? ¿Qué pasa con los gremios? ¿Cómo luchan por los territorios?” “Simplemente sube a alguna de las montañas de la Cordillera Senbain. Podrás encontrar gran cantidad de pueblos de monstruos para ocupar…” A pesar de ello, cuando la caza comenzó por todos lados, la cantidad de hordas de monstruos que descendían de las montañas no decreció. Ya no había mazmorras y guaridas alrededor, pero los monstruos continuaban descendiendo a través de la inmensa cordillera. Incluso exhaustos, no había otra elección más que luchar hasta la muerte. ¡El mayor honor en el Reino de Kallamore era defender Senbain! Habiendo jugado su papel en la preservación de la paz de un Reino y ganando premios activamente, la influencia de muchos gremios se esparció ampliamente pero, por raro que pudiera parecer, en la Cordillera Senbain numerosos gremios luchaban unidos bajo la misma bandera. Más que belicistas, eran soldados disciplinados. En el Reino de Kallamore, los caballeros participaban en actividades extraordinarias de manera particular. Los caballeros acataban la creencia tradicional mantenida por la caballería original y, como una nación de caballeros, aportaban generosos su apoyo. En las cercanías de Senbain podía encontrarse gran variedad de terreno libre. El valle entre las montañas era una gran llanura. Esta llanura actuaba como una significativa línea final de defensa. En este lugar, los monstruos tenían que ser detenidos o, de lo contrario, los graneros y los pueblos cercanos tendrían que pagar el precio. ¡Los caballeros montados en sus corceles cargaban sin temor! Todos habían sido bendecidos por los clérigos y portaban sus armaduras dispuestos a masacrar la oleada de monstruos. ¡El asalto de más de tres mil caballeros del Reino! A través de la densa niebla, los caballeros aceleraron sus corceles hacia el hambriento enjambre de monstruos. Para la gente que participaba no podía existir otro momento más estimulante que ese. “No puedo describirlo. Es, simplemente, impresionante. El sentimiento de atravesar la línea de monstruos a caballo es muy, muy excitante.” “No tengo miedo, pero mis manos están temblando.” “Es triste ser un caballero y nunca haber peleado hasta la muerte contra estas hordas de monstruos.” Las tabernas del Reino de Kallamore estaban siempre abarrotadas de caballeros. Era un lugar donde presumir de haber luchado sin sentir remordimientos y liberar tensiones, o donde poder tomar una copa antes de ir a la siguiente batalla defensiva. Las tabernas se habían convertido en los lugares más concurridos para divulgar las experiencias de aquellos que defendían Senbain. Por otro lado, aquellas personas que pertenecían a otros Reinos no podían entender a los que pertenecían al Reino de Kallamore. “Pero, aun así… ¿No tienes miedo de ser asesinado?” – preguntó un viajero. “Si mueres, la penalización es bastante alta. Las armaduras y armas de caballero son muy caras… también, hasta puedes perder tu caballo.” “Tu nivel y tus niveles de habilidad también descenderán.” “Tenéis razón, pero el [Honor] es lo más importante. Si puedo conseguir más, puedo obtener una montura mejor e incluso pueden asignarme tropas.” Al observar a los combatientes, solo se podía ver muerte y una lluvia de sangre. Los cascos golpeando el suelo, una densa niebla, la sangre esparciéndose, el avance y el bloqueo hasta desplomarse los caballos… todo esto acompañaba a la emoción de arrollar el ejército de monstruos. Los combatientes del Reino de Kallamore viajaban mientras continuaban con su crecimiento y seguramente llegaría el momento donde podrían mostrar la habilidad que habían obtenido durante su época en Senbain. ¡Los caballeros que habían sobrevivido en el Reino de Kallamore !
* * *
Corte Real del Reino de Kallamore. Ante el Rey y la Corte Real Oficial, el caballero Koldeurim apareció tras treinta años de ausencia. “¡Tú! ¿Cómo…?” – ahogado en sus propias palabras, los ojos del rey se humedecieron. En nombre de Kallamore, la escena se emitió hacia los reinos de Haven , Todium , Masen, Thor, Aidern… para que la vieran todos los jugadores. En medio de sus actividades, repentinamente, una imagen apareció frente a cada jugador, mostrando la escena que se estaba desarrollando en la Corte Real de Kallamore. “¿Qué?” “¿Qué está ocurriendo?” “¿Qué clase de evento es este?” Los jugadores de todos los lugares se preguntaban sobre el evento que estaba teniendo lugar en la Corte Real del Reino de Kallamore. “Estoy muy arrepentido mi Rey. He regresado.” “¿Qué ha ocurrido? ¿Cómo es que has regresado después de treinta años?” “Caí en las despreciables manos del Reino de Haven… Si no hubiese sido por unos grandes aventureros, no habría sido capaz de regresar para pelear por mi Rey y mi Reino.” “Así que la culpa también reside en el Reino de Haven. ¿Es este el día por el que he estado esperando? Regresa a mí de nuevo como mi oficial. Juntos, el Reino de Kallamore volverá de nuevo a extender sus alas.” – dijo el Rey Vincent III de Kallamore. El rey actual junto con Koldeurim, tan pronto como accedió al trono formaron una fiera pareja. Juntos lideraron el Reino de Kallamore contra su némesis, el Reino de Haven, ¡logrando una serie de victorias consecutivas! Expandieron su territorio y se convirtieron en dignatarios a lo largo de todo el Continente. Como héroes de la nación y su salvación del caos, en esos momentos eran los favoritos para unir todo el continente bajo su dominio. Pero, por razones que se desconocían, después de la desaparición del caballero y debido a la fuerte resistencia del Reino de Haven, la guerra había finalizado. ¡Ahora el mejor caballero había regresado y el espíritu del Reino aumentó una vez más! “La guerra que comencé en mi juventud y que aún perdura todavía no ha visto su final. Ahora que has regresado, el Reino estará en su apogeo, y aunque no tenemos un castillo del que hablar, el orgullo de nuestros soldados nunca podrá ser detenido, Koldeurim.” – proclamó Vincent III. “¡Sí, Su Majestad!” “Te encomendaré nuestras tropas; haz que nuestros enemigos del Reino de Haven se den cuenta de la grandeza que todos compartimos.” “Marcharemos sin pausa al son de nuestras trompetas y destruiremos todo hasta que no quede ninguno de esos cobardes.” ¡Ding!

Con este acto, el Reino de Kallamore da comienzo la guerra.
¡Koldeurim, el Ministro de la Guerra, lidera los noventa mil hombres del ejército del Reino de Kallamore!
8.500 Caballeros.
60.000 Infantes.
16.000 Arqueros.
3.500 Clérigos.
2000 magos
Las tropas del Reino de Kallamore no solo son muy poderosas; también se trata de un grupo de soldados despiadados que no han olvidado las afrentas del pasado.
Aunque no han ido a la guerra en los últimos treinta años, han alcanzado el apogeo de su poder de combate debido a la amplia experiencia obtenida luchando contra monstruos.
Además, el Reino de Kallamore permite que toda clase de mercenarios pueda participar en la guerra a su lado.
El objetivo es ocupar el Reino de Haven.


A partir de este momento, el precio de armas y armaduras y el costo de las necesidades básicas serán congelados a su precio actual, tanto en el Reino de Kallamore como en el Reino de Haven.
Los jugadores que participen en la guerra obtendrán un aumento del 20% en los puntos de experiencia.
Los jugadores estaban atónitos. “Bueno, es la guerra.” “Finalmente ha estallado la guerra.” Sabían desde el principio que los Reinos de Kallamore y Haven se odiaban mutuamente, pero aun así, una guerra a gran escala entre ambos Reinos era algo que no podían comprender.
* * *
Weed también contempló en la pantalla el desarrollo de los acontecimientos que tenían lugar en la Corte Real del Reino de Kallamore. El grupo también podía participar en esa misión. En un breve lapso de tiempo, pensó en las repercusiones de la guerra; necesitó aproximadamente una centésima de segundo. “Bueno, no me repercute. No es mi trabajo.” – dijo con actitud indiferente. Geomchi actuó como si fuese algo natural y asintió. “Si nos unimos a la batalla, la balanza se inclinará hacia algún lado. Vivan o mueran, no necesito preocuparme de sus problemas.” “Contra esos niños, dame tres días y será suficiente para derrotarlos a todos.” – añadió Geomchi3. “He pasado mis días golpeando muchas cosas pero, por extraño que parezca, todavía duermo tranquilo.” – dijo Geomchi4 recordando su pasado. Ya fuera por aquellos que formaban parte del Reino de Kallamore o por los del Reino de Haven, los geomchis tenían muy poco interés en si los jugadores morían o no. Pale, por otro lado, sentía unos ligeros remordimientos. Su frente se frunció profundamente y no se relajó. “La guerra…” Irene también se sentía muy ansiosa. “¿Crees que los jugadores de los dos reinos estarán bien?” Pale no pudo responder por un tiempo. La guerra era una oportunidad. ¡Era un momento dorado para que las fuerzas entre los dos reinos intentaran inclinar la balanza del poder! Estaban aquellos que no tenían nada que hacer mientras esperaban este día y otros que inevitablemente serían dañados por la guerra y se convertirían en víctimas. El Reino de Kallamore y el Reino de Haven. Si cualquiera de los dos bandos perdía su territorio o se encontraba con su destrucción, para los jugadores podría ser una pérdida increíble, puesto que esas eran sus bases. Además, todo el esfuerzo que habían puesto aumentando su reputación con la nobleza y los caballeros en esas áreas sería fundamentalmente cuestionada una vez el Reino cayera. En el peor de los casos, serían exiliados. Para jugadores como Pale o Irene, que tenían su base en Rosenheim, acudir a la guerra significaría tener que viajar largas distancias y no necesitaban hacerlo; pero otros muchos jugadores no podían simplemente abandonar su Reino, porque su tierra natal era el lugar donde todo había comenzado. Éstos tendrían buen trato con los habitantes de la ciudad, y conocerían datos sobre la situación que los rodeaba. Y habiendo visto crecer el Reino hasta su estado actual, muchos jugadores no querrían irse a otro sitio a costa de perder la amistad y los puntos de contribución que tanto les había costado conseguir. Hasta los jugadores de nivel superior al 300 que habían recibido misiones de los nobles para salir en una expedición, no podían dejar su Reino como si no pasara nada. Sin embargo, Pale no sabía si elegir el Reino de Kallamore o el Reino de Haven, dado que no conocía toda la verdad de la intrincada maraña entre los reinos. Al final, llegó a la respuesta más cómoda y razonable. “Mientras no nos veamos envueltos, todo estará bien.” “Es realmente un buena observación.” – Zephyr mostró su acuerdo. “Si no nos encuentran, todo estará bien.” “Sí, digamos que no es asunto nuestro.” La opinión de Pale fue bien acogida por todos. La maldad de Weed estaba afectando poco a poco a la totalidad del grupo. “Editaré esa parte.” – dijo Maylon para evitar ser descubiertos. Si podían ocultar el hecho de que habían sido ellos los que habían liberado a Koldeurim de su confinamiento, entonces no había nada de lo que preocuparse. Lo más sensato sería borrar esa parte antes de enviar el vídeo a los medios.
* * *
En ese momento, Weed y el resto recordaron lo que les había ocurrido en la cámara del tesoro. El interés del grupo se centró de nuevo en el tesoro de los vampiros. Tras completar exitosamente la misión, Weed había obtenido una llave oxidada que estaba a punto de romperse, hecho que Weed no podía reparar.

Llave del Tesoro de los Vampiros
Ha sido utilizada infinidad de veces y se encuentra completamente oxidada, por lo que la llave está cerca de romperse en mil pedazos. Debido a una corrosión tan severa, lo más probable es que solo pueda ser usada tres veces.
Atributos:
Durabilidad: 2/20.
‘Puf, solo uno o dos usos tras la misión. Bueno, sin embargo es un pedazo de pastel.’ Localizar la cámara del tesoro era una necesidad. El vampiro no les había dado la localización del tesoro, así que tendrían que hacer pruebas con la oxidada llave. No obstante, Weed había sobrevivido por todo Todium y había confirmado la localización del susodicho tesoro. “Está en la torre anterior, ubicada directamente debajo de la luna en el centro de Todium.” Weed, cada vez que había sentido ganas de rendirse en la misión, miraba hacía la torre y comenzaba a babear, incluso después de los rayos, truenos y cataclismos del día anterior. Todo lo que podía ver era la atractiva apariencia del oro en el interior de la torre. “¿Pero la torre no tiene ningún camino ascendente bloqueado por una puerta que nos conduzca a ella?” – preguntó Maylon expresando sus dudas. “La ventana es la respuesta a eso.” “¿Perdón?” “Es una característica de los vampiros. Todo lo que necesitan es una ventana. Una vez que atraviesan la ventana pueden utilizar las escaleras para subir a otra parte por su interior. Su localización nos será revelada exactamente cuando la luna la ilumine.” Todo el grupo observaba a Weed. Éste, sin ninguna dificultad, cruzó la ventana de la torre, y entonces junto a él acudió un vampiro que le confirmó que ese lugar era, de hecho, la localización de la cámara del tesoro. “Cada persona puede llevarse solamente un objeto, ya sea un arma o una pieza de armadura. Coger más de esa cantidad desembocará en la ira de nosotros, los vampiros.” – dijo el vampiro sin nombre.

Solo se permite un objeto.
Dado que los vampiros no permiten superar esa cantidad, incumplirlo hará que todos los vampiros te atacarán. En el momento en que mueras perderás todos tus objetos.
Visitar una cámara del tesoro era el sueño de cualquier jugador, hasta tal punto que todos babearían por tener una oportunidad como esta. Había decenas de obras de arte de mármol expuestas, incluso montones de perlas estaban esparcidas por todas partes, algunas sueltas y otras atadas formando collares. En uno de esos collares había grabado el símbolo de un alma. “¡Ooohhh! Finalmente signos de humanos…” – dijo una voz fantasmal. A pesar de ser el grito de un fantasma, estaba lleno de emociones tales como júbilo y éxtasis. “Humano, libérame. Me llamo Koldeurim, y pertenezco al Reino de Kallamore; finalmente seré capaz de nuevo de dedicar mi lealtad al Rey.” Pero para su desgracia, se encontraba entre el tesoro de los vampiros, y no estaban obligados a hacer nada por un fantasma. A Weed solo le importaba el dinero y, aparentemente, el resto del grupo actuaba como él. Mientras, los geomchis, ¡no se preocupaban de nadie más que ellos mismos! “¿Quién eres?” – dijo Weed irritado. “¿No me conoces? Soy el caballero del Reino de Kallamore, Koldeurim.” “¿Dices la verdad? Te han atrapado.” “……” Koldeurim hablaba ahora con mucho más cuidado. “Si puedo liberarme de la atadura de esta perla, entonces mi alma será puesta en libertad. Debido a una argucia de los vampiros, mi alma fue capturada. Incluso ahora, mi cuerpo está en algún lugar esperando al día que mi alma regrese.” “¿Cómo sabes que no está podrido ahora mismo?” “……” ¡La frase de Weed se encontraba al borde de hacer que Koldeurim estallase de la frustración! La esperanza que había sentido con la llegada de los humanos se desplomó siguiendo el inequívoco camino del infierno. Dentro de la perla que contenía el alma de Koldeurim, el brillo se iba volviendo más tenue. ¡El alma herida de un caballero! “Weed, en este caso su resurrección estaría muy bien ya que su cuerpo puede haber sido preservado.” – susurró Maylon suavemente dentro del oído de Weed. “¿Cómo es eso?” “Los historiadores cuentan que existen ciertos prerrequisitos para resucitar un alma, como el de ocupar un cuerpo nuevo… bien, lo más normal es que toda alma busque el cuerpo de un brujo. O también es posible usar un cuerpo que exista en un templo. Cuando el alma de una persona se pierde pero el cuerpo sigue intacto, dicho cuerpo puede ser preservado a través de la magia situándolo en una mazmorra apropiada para repeler cualquier intruso. De esta forma, el cuerpo sobrevive.” “Así que estás diciendo que realmente puede ser resucitado en el Continente.” “Es perfectamente posible.” Pero incluso así, Weed no liberaría a Koldeurim de forma tan sencilla. “Koldeurim, nunca sabrás los duros combates que hemos tenido que hacer para llegar hasta aquí. Para salvarte hemos tenido que aceptar los pedidos de los vampiros. Eso es como tirarnos barro por encima de todo nuestro cuerpo… después conseguimos llegar hasta aquí… Si nos limitamos a liberarte así como así, entonces puede que olvides el favor que has recibido.” “Un caballero nunca olvida los favores que ha recibido de otros.” “Koldeurim, si tú practicas la caballería tal y como lo haces contra los monstruos, espero que no olvides mantener rectas tus convicciones. Eso es todo lo que quiero que hagas.” ¡Modo corazón de oro! Antes de romper la perla que contenía el alma, Weed ya trabajaba para incrementar su familiaridad con la entidad que se encontraba dentro. Para un recto caballero, su misión en la vida era demostrar continuamente su integridad e inocencia. Sin embargo, Koldeurim era un gran caballero por una serie de motivos, y no fue fácilmente influenciado. “Esto es extraño. Hace un segundo habéis dicho que no teníais ninguna intención de liber…” “¡Esa es la convicción que quiero ver en ti…! De hecho, con el objetivo de salvarte, hemos perdido a muchos de nuestros compañeros… ¡sniff!” ¡Weed incluso trataba de soltar algunas lágrimas! Mientras, esbozaba una fugaz sonrisa al pensar en los geomchis muertos. ‘Supongo que se han ganado su sustento.’ De tal forma, viendo a un aventurero priorizando la camaradería de esa manera, la voz de Koldeurim se suavizó. “En aras de salvarme… en el futuro, cuando regrese al Reino de Kallamore, nunca os olvidaré. Lo siento, no poseo nada en este momento para regalaros, pero en el futuro os prometo que no me olvidaré de hacerlo.” Cuando alguien se hace amigo de reyes o nobles, entonces la oportunidad de recibir misiones es grande, además de que las ganancias también serán mejores. Y gracias a la ligera amistad que había logrado en la cámara, podría establecer un marco de confianza donde conseguir un acceso más fácil al Reino de Kallamore y poder ir y venir a su antojo. Como Jugador Oscuro, necesitaba trabajar para conseguir familiaridad con múltiples reinos sin importar lo peligroso que pudiera ser. Weed estaba satisfecho con esto, pero de pronto una idea vino a su mente. “¡Invoco al Caballero de la Muerte, Van Hawk!” “¡Respondo a tu llamada, Maestro!” El Caballero de la Muerte. La razón por la que se le invocaba era porque antes había sido un caballero del Reino de Kallamore. “¿Tú también fuiste un caballero del Reino de Kallamore?” “Era mí día a día. Ahora, como Caballero de la Muerte, estoy fielmente dedicado a mi dueño.” “Aun así, podéis tener una pequeña charla entre vosotros, dado que los dos sois nativos de Kallamore.” “Entendido.” Los ojos del Caballero de la Muerte se posaron en Koldeurim, que estaba atrapado en la perla. “¿Eres nativo del Reino de Kallamore?” “Sí, pero no puedo revelar mi nombre a un Caballero de la Muerte.” Koldeurim estaba intentando denegar la idea de estar en la misma prestigiosa orden de caballería que un Caballero de la Muerte. “¿De qué pelotón?” – preguntó pacientemente el Caballero de la Muerte. “¿Qué?” “Te he preguntado que a qué pelotón fuiste asignado en la academia de caballería.” “El 694º.” Tras escuchar sus palabras, el Caballero de la Muerte lo miró con desdén. “Han avanzado tanto, ¿eh? Yo pertenecí al 164º.” ¡Era su superior! ¡Una vez caballero, siempre caballero! Van Hawk había obtenido un mando en Koldeurim durante su vida debido a sus servicios al Reino de Kallamore. Esto no tenía nada que ver con la amistad. ¡Se trataba de rango! El rango de jerarquía entre el Caballero de la Muerte Van Hawk y Koldeurim se había creado. En cierto sentido, era lo mismo que ocurría con aquellos altos rangos del ejército que nunca han levantado un dedo. El Caballero de la Muerte había vivido por un largo periodo de tiempo y había ido ascendiendo en la jerarquía. “Durante mi época en Kallamore, tuvimos a todo el Continente temblando de miedo. ¿Desde cuándo Kallamore parece tan muerto?” “Lo siento, Señor. Nuestro poder nacional se ha visto debilitado mucho por los reinos vecinos hasta el punto que ya ni siquiera aparecemos en el mapa.” “Simplemente maravilloso.” “Es por completo nuestra culpa no haber sido lo suficientemente fuertes . ¡Si no hubiese sido capturado por los vampiros, entonces…! ¡Ah! Por favor, sálveme Señor. “Como antiguo caballero del Reino de Kallamore, eso será lo que haré.” “Gracias, Señor” “¡Qué demonios! No puedo creer que fueses mantenido cautivo por esta clase de vampiros.” “……” La gran autoestima del espíritu de Koldeurim se hundió frente a Weed y el Caballero de la Muerte.