Volumen 11 Capítulo 3
Dentro de la Agencia Federal
Traducido por Tars
Corregido por Lord y DaniR
Editado por AMarauder
Corregido por Lord y DaniR
Editado por AMarauder
“Lo que dijiste ahí dentro… ¿Hablabas en serio?” – preguntó Adam, que había estado esperando fuera de la sala de conferencias. Aunque no precisaba a qué se refería, Jinwoo solo había dicho una cosa.
“Sí.” – respondió con una sonrisa.
“Ja, ja…”
Aunque no era momento de reír, Adam terminó sonriendo entre dientes después de ver la sonrisa de Jinwoo.
¿Quiénes eran las personas que había dentro de la sala? Habían invitado a los quinientos mejores cazadores de ciento veinte países. En otras palabras, se trataba de la élite más importante de la humanidad y este hombre les había dicho que estaba dispuesto a convertir a todos los cazadores del mundo en sus enemigos.
Ni siquiera un tipo duro se atrevería a imitar lo que había hecho Jinwoo. Pero lo que resultaba aún más sorprendente era que nadie se había burlado de él. Hasta Liu Zhigeng, famoso por su naturaleza cruel, se limitó a mirarlo en silencio sin hacer ningún comentario.
No solo los cazadores dentro de la sala de conferencias, ni siquiera los agentes que observaban la conferencia a través de varios monitores pudieron cerrar la boca. Adam White estaba entre esos agentes.
“Quizá solo hay dos personas en el mundo, incluido tú, que se atrevan a decir eso.” – dijo con admiración.
“¿Quién es el otro…?” – preguntó Jinwoo sintiendo curiosidad por quién podía ser esa otra persona.
“Bueno, ahora está en el hospital.”
Al ver el rostro de Adam con una sonrisa irónica, Jinwoo se dio cuenta de quién era la otra persona: Thomas André. Ciertamente, su personalidad era lo suficientemente arrogante como para hacerlo.
‘No estoy seguro de si todavía estará dispuesto a hacerlo.’ – pensó Jinwoo poniendo una sonrisa al recordar la expresión que había puesto Thomas al admitir la derrota.
“Se ha programado una cena para esta noche. La Agencia Federal ha preparado una gran fiesta, así que si no tienes prisa puedes comer con los otros cazadores…” – dijo Adam explicando rápidamente el resto del itinerario del día.
“Estoy pensando en ir al hospital.” – respondió Jinwoo negando con la cabeza.
“¿Eh?”
Adam puso cara de sorpresa al pensar que se había lesionado la noche anterior, aunque luego consideró que sería algo natural. Thomas André, un cazador con rango de Autoridad Especial, había resultado gravemente herido y no podía ponerse de pie aun después de ser tratado por los sanadores. Eso atestiguaba lo violenta y feroz que había sido la pelea. Resultaba normal que el cazador Sung hubiera sufrido alguna lesión…
“Estoy preocupado por Yoo Jinho.”
“Ah…”
Se refería a eso. Adam, que había estado preocupado por Jinwoo durante un instante, lamentaba su conclusión, pero no pudo evitar preguntar por si acaso.
“Uh… ¿No te duele el hombro o las muñecas desde anoche…?” – preguntó
“¿Eh?”
“Ah, no. No es nada…” – añadió Adam avergonzado.
Los cazadores, que se habían reunido en pequeños grupos de dos o tres para charlar, se separaron de repente para formar un pasillo. Jinwoo y Adam los miraron. Se debía a la presencia de Liu Zhigeng. El Cazador de siete estrellas de China, flanqueado por sus hombres, la conocida ‘División Liu Zhigeng’, se acercó a Jinwoo. Caminaba en línea recta, como si ya hubiera decidido su destino desde el principio y se detuvo ante él.
‘¡Ugh…!’
‘Qu… ¿Qué están haciendo esos dos?’
Todos los cazadores dejaron de hablar. La tensión que fluía entre Jinwoo y Liu Zhigeng silenció por completo los alrededores. Una sensación de malestar llenó rápidamente el lugar mientras los cazadores miraban a su alrededor ansiosos.
‘¿Por qué Liu Zhigeng está haciendo eso?’
‘¿Será por lo que ha dicho el cazador Sung?’
‘Me preguntaba por qué se había quedado callado…’
Sin lugar a dudas, lo que había dicho Jinwoo podía interpretarse como una provocación hacia el resto de cazadores. Y había sido el mismo Zhigeng quien hizo esa pregunta. Primero Thomas André y ahora parecía que había llegado el turno de Liu Zhigeng.
Los cazadores prestaron mucha atención a los cambios de expresión de los dos hombres con inquietud, preguntándose qué pasaría después. Mientras tanto, el rostro de Adam se puso azul al verse atrapado entre los dos.
“Ca… Cazadores…”
Pero antes de que Adam pudiera decir algo, Liu dio otro paso adelante y abrió la boca. Era un tono de voz serio.
‘¿Qué narices está diciendo…?’ – pensó. A medida que lo escuchaba, su expresión se fue volviendo sombría.
Nunca había estado ni remotamente cerca de China, por lo que no tenía ningún conocimiento de su idioma. Dado que el otro tipo estaba hablando con una expresión seria, decidió poner una expresión similar, pero escuchar a alguien que no podía comprender era una tarea bastante incómoda. Justo cuando comenzaba a pensar que el cazador chino no se estaba burlando de él con una expresión tan seria en su rostro, Adam le susurró al oído.
“Cazador Sung, está diciendo que ha cazado al monstruo gigante que se te escapó en tu viaje a Japón en la costa de China.”
“¿Hablas chino?” – preguntó Jinwoo con una expresión de sorpresa.
“Bueno, estaba a cargo de la sucursal de Asia. Puedo hablar algunos idiomas asiáticos. Ah, también, puedo hablar un poco de ruso, español, árabe, alemán…”
Por un instante, Jinwoo pensó en lo cómodo que sería si el agente Adam fuera un soldado sombra. Podía ser muy útil.
“Por favor, sigue traduciéndome.” – pidió. Parecía que Liu Zhigeng tenía muchas cosas que decir.
“Entendido.” – respondió asintiendo y, con una expresión decidida, inició su papel como intérprete. – “En ese momento estaba asombrado porque el gigante era mucho más poderoso de lo que pensaba. Especialmente porque estaba peleando en el agua. Lo pasé mal.”
Jinwoo recordó haberse sorprendido por la fuerza de esos monstruos gigantes cuando los estaba cazando. Tenían cuerpos enormes, pero se movían con tanta agilidad como las bestias voladoras. Dado que había luchado en el mar, donde el movimiento estaba limitado, su sorpresa tuvo que ser todavía mayor. Podía entender bastante bien cómo se había sentido el cazador chino.
Cuanto más hablaba Liu, más brillante se volvía la expresión de Adam.
“Desde entonces, ha estado esperado encontrarse con usted. Tiene curiosidad por el tipo de cazador que puede matar a bestias tan poderosas con tanta facilidad.”
Al mismo tiempo que Adam terminó de traducir, Liu formó una sonrisa brillante y extendió la mano. Parecía que la expresión anterior provenía de su nerviosismo. Jinwoo miró la mano que le ofrecía por un instante antes de estrecharla con una sonrisa. No tenía ninguna razón para rechazar un saludo ofrecido por uno de los mejores cazadores del mundo. Adam White se dio cuenta de lo que estaba pasando y pudo suspirar aliviado.
“Uf…”
Construir un vínculo entre cazadores. Ese era el propósito original de la Conferencia Internacional de Gremios. Mientras se estrechaban la mano, Liu Zhigeng dijo varias palabras con una sonrisa. Jinwoo se volvió para mirar a Adam.
“Parece que está haciendo una broma, ¿qué dice?”
“Ah…”
Adam puso una expresión de vergüenza, antes de mover los labios.
“Dice que está muy feliz porque le has dado una lección a Thomas y seguro que toda la culpa era de él…”
Jinwoo también sonrió. Su primera impresión había sido que el cazador chino era un tipo irritable y grosero, pero resultaba ser una persona bastante interesante. Cuando el saludo terminó, sus manos se separaron. Sin embargo, el rostro de Liu Zhigeng se oscureció y la sonrisa de Adam desapareció mientras traducía las palabras del chino.
“Dice que desea que el Sospechoso no sea un miembro de tu familia. Dice que nunca querría pelear contra ti.”
Jinwoo asintió sin decir palabra.
“Estáis aquí.”
Jinwoo y Liu Zhigeng movieron sus ojos hacia la dirección de la voz. Habían sentido la presencia de esa persona; sabían que no era un cazador, ya que no emitía ninguna energía mágica. La voz pertenecía al director de la Agencia Federal, que alternó su mirada entre los dos antes de hacer una pregunta. Sonaba bastante tenso.
“¿Puedo pedir algo de su tiempo?”
Jinwoo miró a Adam en busca de confirmación, pero este último negó con la cabeza. Esto no estaba en la agenda. Quería algo de ellos. Pero antes de responder, Jinwoo usó toda su estadística de [Percepción] para captar el movimiento de todos los cazadores del edificio.
‘Hay dos personas con un enorme poder mágico…’
Dos cazadores muy poderosos se dirigían hacia el lugar bajo la guía de varios escoltas. Al ver que también los habían convocado a los dos, no podía descartarlo como una mera coincidencia.
‘¿Habrá pasado algo?’ – pensó Jinwoo.
“Ah, director. El cazador Sung dijo que debe ir a visitar a Jinho al hospital…” – dijo Adam al ver que estaba dudando. Sin embargo, Jinwoo puso su mano sobre el hombro del agente estadounidense para detenerlo. Cuando Adam se dio la vuelta, Jinwoo negó con la cabeza.
“Está bien.” – respondió, mirando al director.
La expresión del director se iluminó de inmediato y luego miró a Liu Zhigeng.
“¿Qué hay del cazador Liu?”
“Vale.”
“Bien. En ese caso, síganme.”
La expresión del director era tan brillante como la de un trabajador que se las había arreglado para llevar a cabo una negociación complicada.
* * *
Curiosamente, sus destinos fueron diferentes. Liu Zhigeng siguió a un agente y se fue por el pasillo de la izquierda mientras que Jinwoo siguió al director.
‘¿No es un poco raro…?’
Con la llegada de Liu, ahora había tres cazadores de alto nivel reunidos en un solo lugar. Jinwoo pensaba que también irían hasta allí, pero al ver que lo llevaban a un destino completamente diferente, comenzó a intentar adivinar a dónde iba. Sin embargo, al final se rindió y decidió preguntar.
“¿Por qué soy el único que va a una habitación diferente?”
“Ah…” – dijo el director, haciendo una pausa para reflexionar sobre cómo responder. – “Hay alguien esperándole. Se lo explicará todo cuando lleguemos.”
“……”
De hecho, Jinwoo podía sentir una energía en la habitación que había al final del pasillo.
‘¿Uh? ¿Esa onda de energía es…’
Los ojos de Jinwoo se agrandaron, ya que la persona que lo estaba esperando era alguien a quien no esperaba ver. De hecho, nunca habría pensado que se volverían a encontrar.
“Parece que ya sabe quién es.” – dijo el director extremadamente nervioso, con el sudor acumulándose en su frente. – “Somos extremadamente reacios a exponer su ubicación, pero en este caso, no teníamos muchas opciones…”
“¿La Agencia Federal le pidió que viniera?”
“No. Ella exigió venir. Quiere verte.”
Toc
Cuando el director abrió la puerta, Jinwoo se encontró con la mirada de una mujer negra.
“Ha pasado un tiempo, cazador Sung.”
“Lo mismo digo, señora Selner.”
Norma Selner, la despertada que poseía la habilidad para mejorar a los cazadores. Se preguntaba si se había calmado con el paso del tiempo, pero sus ojos seguían igual. Todavía estaban aterrorizados. Definitivamente sentía un fuerte temor en los ojos de la señora Selner al mirarlo. No obstante, quería encontrarse con él. ¿Qué podía hacer que una persona superara sus miedos? Jinwoo estaba realmente interesado.
“No esperaba que la señora quisiera verme…” – dijo Jinwoo, sentándose frente a la señora Selner. Adam, el intérprete, se situó cerca de Jinwoo.
“Me gustaría disculparme por lo sucedido ese día. Mi mente no estaba preparada para…” – respondió la señora Selner inclinando cortésmente la cabeza.
Jinwoo levantó las manos y la detuvo. No planeaba hablar de ese incidente solo para poder escuchar una disculpa. La señora Selner miró al director y éste asintió con una cara seria.
“He tenido el mismo sueño todos los días.” – dijo la señora Selner vacilando, como si hiciera un gran esfuerzo para poder mover los labios.
Jinwoo no confiaba en la interpretación de los sueños, pero hasta él podía comprender que no le habían llamado para eso.
“¿Qué tipo de sueño?” – preguntó Jinwoo.
“Todas las noches, en mis sueños veo a los mejores cazadores siendo perseguidos.”
Alguien estaba cazando cazadores. Jinwoo se dio cuenta de que no sería irrelevante para él.
“Y unos días después, el sueño se hizo realidad.”
“Te refieres… ¿Christopher Reed?”
La señora Selner asintió con la cabeza.
“Habíamos advertido al señor Reed, pero no escuchó nuestras palabras. El resultado… Bueno, ya sabe qué pasó.” – dijo el director continuando con la explicación.
De hecho, ese mismo día Jinwoo había visto y oído suficiente sobre lo sucedido a Christopher Reed.
“Los poderosos cazadores que apoyan este mundo seguirán muriendo. Los que los están cazando no se detendrán.” – continuó la señora Selner con voz temblorosa.
“Lo que estás diciendo es…” – dijo Jinwoo con cautela tras ordenar sus pensamientos. – “Que debo tener cuidado…”
“No es eso.” – respondió negando con la cabeza.
Si no quería avisarlo, ¿entonces para qué estaba aquí? Jinwoo la miró con una expresión perpleja.
“Por favor, te lo ruego. Protege a los cazadores.” – suplicó la señora Selner.
* * *
‘Perdí.’
Thomas André abrió lentamente los ojos mientras su cabeza repetía esa palabra que nunca pensaba que volvería a decir. Estaba en una habitación de hospital.
‘¿Cuándo fue la última vez que pasé por un hospital?’
A diferencia de Jinwoo, que entraba y salía de hospitales cada día si fuera su segundo hogar, durante sus primeros años como cazador, Thomas no recordaba haber cruzado la puerta de un hospital desde que se había convertido en cazador.
¿Quién hubiera predicho que el encuentro entre un cazador de rango E y el mejor cazador del mundo acabaría así? Por supuesto, a Thomas André no le importaba el pasado de Jinwoo. Sin embargo, todavía estaba profundamente avergonzado por el resultado.
‘Realmente… Perdí.’
Thomas se sentó lentamente con el rostro blanco de un hombre que había perdido su alma.
Tac, tac…
El sonido de alguien golpeando un teclado se detuvo. Thomas desvió la mirada hacia esa dirección y vio a Laura, la directora principal del gremio Carroñeros, sentada no demasiado lejos de su cama. Estaba trabajando, y las yemas de sus dedos descansaban sobre el teclado de su portátil.
“¿Estás molesto?”
“Bueno…”
Thomas evadió su mirada y se frotó la barbilla. Podía predecir cuánto tiempo había pasado por la longitud de su barba. Por un instante pensó si debería darle las gracias, su barba no había crecido tanto como temía.
“Aproximadamente… ¿Un día?”
“Sí.” – respondió Laura. – “El médico que te examinó sugirió que me preparara para el caso de que no despertases en varias semanas.”
Así de terrible había sido la condición de Thomas anoche. Pero entonces… Le resultaba complicado decidir si despertar un día después era por recibir un mal diagnóstico o por las capacidades de Thomas.
“¿Llamo a un médico?” – preguntó Laura confundida, colocándose junto a la cama.
“No, aún no.”
Thomas se masajeó las sienes doloridas y negó con la cabeza. Todavía sentía la conmoción de ser golpeado por ese hombre en la cabeza. Era un dolor terrible que odiaba recordar. Además, un médico no podía hacer nada en este momento. Sin embargo, había algo más importante que comprobar.
“¿Qué le pasó a Hwang?” – preguntó Thomas.
Los labios de Laura se separaron por un momento, pero no pudo responder y simplemente negó con la cabeza.
“Ya veo…”
Después de pensar por un instante, volvió a hacer otra pregunta con un tono de voz que no era indiferente.
“¿Hubo alguna otra pérdida?”
“Hubo muchos heridos, pero están todos recuperados gracias a la rápida respuesta de la Agencia Federal.”
“¿No hay muertos?” – preguntó elevando la voz, incapaz de mantener la calma.
“No, señor.”
“……”
Su sorpresa pronto se transformó en asombro. Thomas gimió en su interior. El hecho de que no hubiera víctimas mortales a pesar de participar en una pelea tan feroz significaba que la otra persona había sido amable con ellos. Era una señal clara de una derrota abrumadora.
Cuando una persona vive una derrota tan completa, ni siquiera tiene ganas de enojarse. Así es como se sentía Thomas en este momento: asombrado.
Jinwoo había derrotado, no solo a Thomas André, sino a todos los cazadores de élite que había reunido, él solo. Esto hizo que temiera un poco al joven cazador coreano. No, iba más allá, sentía respeto. El impacto era aún mayor porque siempre había pensado que el poder era justicia. Sin embargo… ¿Por qué se sentía así?
Había terminado derrotado, pero no se sentía tan mal. Parecía que no sentía ningún arrepentimiento después de confirmar la brecha que lo separaba de su oponente. No sentía enojo con el oponente que lo había derrotado, ni sentía ganas de maldecirlo.
‘No, más bien…’
Cuando varios pensamientos comenzaron a cruzarse en su mente, Laura le dio una caja pequeña y alargada. Se trataba de un estuche para gafas.
“¿……?”
Thomas André aceptó la caja con una cara perpleja.
“Pudimos recuperar sus gafas de sol del lugar del combate, pero estaban demasiado dañadas para poder repararlas.” – añadió Laura.
Clic
Había un nuevo par de gafas de sol con el mismo diseño que le gustaba usar.
“Siempre te estoy preocupando.” – dijo Thomas poniéndose las gafas con una sonrisa.
Laura estaba preocupada de que su jefe comenzara a hacer un alboroto en el momento en que despertara, pero su respuesta provocó una sensación de alivio y soltó un suspiró en su interior, antes de formar una suave sonrisa.
“Es mi trabajo, señor.”
“Hwang… Asegúrate de celebrar el mejor funeral. Después de todo, era uno de los nuestros.” – dijo Thomas en voz baja mirando a lo lejos.
“Entendido.”
“Oh, y también…”
Laura dejó de anotar las órdenes de Thomas en su libreta y levantó la cabeza.
“Dile al cazador Sung que el gremio Carroñeros… No, espera. Borra eso. Dile que yo, Thomas André, le ofreceré una disculpa oficial.”
* * *
Protege a los cazadores. Jinwoo puso una expresión de desconcierto cuando escuchó las palabras de la señora Selner.
“¿Por qué yo…?”
La señora parecía no estar muy segura de por dónde empezar, pero al final abrió lentamente la boca.
“Mientras el sueño seguía repitiéndose, hice todo lo posible para memorizar los rostros de los que perseguían a los cazadores, pero fue en vano.”
Cada vez que despertaba lo único que podía recordar era un velo de oscuridad.
“Así que decidí utilizar un método diferente. Aunque solo fuera un sueño, usé mi habilidad para investigar su verdadera naturaleza, su verdadera forma.”
“¿Por eso que me miraste a los ojos la última vez?”
“Sí.” – respondió en voz baja. La señora Selner admitía cómo funcionaba su habilidad.
Du-dum
El corazón de Jinwoo comenzó a acelerarse de nuevo. Se preguntaba qué había detectado la señora dentro de él para que temblara de miedo de esa manera. Desafortunadamente, la historia aún no había terminado, por lo que tenía que reprimir su curiosidad y escuchar sus palabras.
“Lo que encontré en su interior fue un poder ilimitado. Pero, cada vez que cruzo una mirada con ‘eso’ no tengo más remedio que despertar.”
Los ojos de Jinwoo se movieron hacia abajo para ver cómo las yemas de la señora estaban temblando.
“Cuando lo miré a sus ojos… Todavía puedo recordar las palabras de ‘eso’.”
Jinwoo levantó ligeramente la cabeza. Tanto el rostro del director, como el de Adam que estaba traduciendo a su lado, estaban tensos.
“¿Qué dijo?” – preguntó tranquilo.
“Dijo que debería… Volver y esperar tranquilamente la guerra.”
La señora Selner comenzó a temblar cuando recordó sus palabras. Las voces de sus sueños eran más reales que cualquier otro sonido que había escuchado despierta. Sin embargo, a diferencia de la mujer asustada, Jinwoo sabía que la palabra ‘guerra’ era una pista.
‘Es lo mismo que dijo el Rey de los gigantes.’
La guerra entre los Gobernantes y los Soberanos. El Rey de los gigantes había dicho que se estaban preparando para la guerra, pero quizá no eran los únicos que estaban haciendo preparativos. Si fuera así, ¿a qué bando pertenecían los bastardos que estaban cazando a los cazadores? Aunque sentía curiosidad, todavía no había escuchado la respuesta a la primera pregunta.
“¿Pero qué tiene eso que ver con tu solicitud para proteger a los cazadores?” – preguntó de nuevo.
“Porque vi el mismo poder durmiendo en tu interior…” – respondió con cuidado.
La mente de Jinwoo brilló ante las palabras de la señora. El poder del Soberano de las Sombras. Ese día, la señora Selner vio el poder del Soberano. Y si había visto ese mismo poder en sus sueños, entonces…
‘Los Soberanos…’
La expresión de Jinwoo se endureció.
“Son más que cazadores. Para detenerlos necesitamos un cazador con el mismo poder.” – explicó la señora rápidamente al ver la expresión de Jinwoo.
“Con toda honestidad, teníamos dudas sobre la historia de que fuera el único capaz de defender a los otros cazadores…” – dijo el director interrumpiendo la conversación. Había estado en silencio hasta ese momento.
Jinwoo podía comprender por qué habían preparado esta reunión de manera tan repentina.
“Mi pelea con Thomas hizo que cambiarais de opinión…”
“Tiene razón.” – respondió el director avergonzado. Había dado en la diana.
El día anterior, la Agencia Federal se había dado cuenta de la diferencia de habilidad entre Jinwoo y el resto de cazadores. Había sido un gran incidente, pero también ayudó a la Agencia a descubrir un nuevo rayo de esperanza.
Seres capaces de matar a los cazadores con rango de Autoridad Especial y un cazador solitario con su mismo poder. La Agencia Federal de Cazadores necesitaba de forma desesperada la ayuda de Jinwoo. Los Estados Unidos ya habían perdido a uno de sus mejores cazadores y, desde su perspectiva, Thomas André tenía que ser protegido a toda costa.
“Por supuesto, no esperamos que un cazador tan excelente nos ayude sin una compensación adecuada.”
Todo lo que quisiera estaría disponible. Y eso incluía la piedra rúnica de Kamish. La nueva propuesta de la Agencia Federal no trataba de reclutar a Jinwoo. En lugar de molestarlo volviendo a presentar una oferta que ya había rechazado, preferían pedir prestado su poder para proteger a la mayor potencia de los Estados Unidos. Esa había sido la conclusión de la Agencia Federal después de la muerte de Christopher Reed.
“……”
Jinwoo cerró la boca y pensó en el problema. La señora Selner había sido sincera sobre lo que había visto para ayudarlo a tomar una decisión.
“Hay cazadores que han sido bendecidos con una poderosa habilidad. Han apoyado al mundo con sus poderes. Si desaparecen, este mundo no resistirá.”
“Lo siento…” – respondió Jinwoo después de una prolongada deliberación.
Los ojos del director se agrandaron ante una firme negativa que no daba lugar a reconsideración.
“Si es por algunos sentimientos personales hacia el cazador Thomas…”
Pero antes de que llegara a una conclusión equivocada, Jinwoo negó con la cabeza.
“No, en absoluto.”
Solo había una razón por la que había tomado esta decisión.
“No sé nada sobre el enemigo con quien tengo que luchar.”
Aunque suponía cuáles eran sus identidades, todavía no se los había encontrado. Resultaba natural no poder prometer que protegería a una persona sin conocer las capacidades del enemigo. Jinwoo no era tan despreocupado como para hacer una promesa que no estaba seguro de cumplir.
‘Primero debo observar la situación.’
Y luego se ocuparía de las cosas que pudiera manejar. Su forma de pensar no había cambiado en absoluto desde su entrada por vez primera en la mazmorra doble. Afortunadamente, Jinwoo poseía varios soldados sombra que le transmitirían información precisa. Si plantaba una sombra en los cazadores que preocupaban a la Agencia Federal sería capaz de responder a sus movimientos en el acto.
“Bueno.”
Jinwoo se levantó de su asiento, pensando qué iba a hacer en el futuro.