Capítulo 229
Trueno de primavera
Traducido por Tars
Corregido por Noe
Editado por AMarauder
Corregido por Noe
Editado por AMarauder
Nueva zona industrial. Taller de Tecnología Goblin.
En una fábrica donde se apilaban varias piezas, había una motocicleta de tres ruedas con una apariencia bastante punk. A diferencia de las motocicletas comunes, esta cosa no solo tenía llantas grandes, sino que el motor que las impulsaba también era ridículamente grande. Debido a que la altura del motor excedía el cojín del asiento, tuvo que montarse en el costado de la motocicleta y montar una rueda adicional. Desde lejos parecía un vehículo de tres ruedas con la parte delantera abultada y la trasera inclinada.
La forma del motor también era bastante única. Era como una estufa. Había una entrada de alimentación redonda en la parte superior, lo que hacía que fuera fácil confundirlo con un cubo de basura al aire libre si se colocaba al costado de la carretera. Pero, de hecho, la entrada de alimentación demasiado ancha fue diseñada deliberadamente de esa manera para que fuera más sencillo para el conductor agregarle combustible.
“Este es un motor de leña inspirado en el camión ligero de la Legión. ¡Es un motor especialmente diseñado para el terreno que se encuentra alrededor del Distrito de Qingquan!” – dijo Mosquito, presentando con entusiasmo su nuevo invento, mientras caminaba al lado del Administrador. – “Después de algunas mejoras simples, ahora está más adaptado a entornos accidentados que antes. Incluso en cuencas de arena, puedo garantizar que el motor no se parará accidentalmente. ¡Nuestros soldados ya no tendrán que dejar sus armas sobre la madera para alimentarlo! Y esta motocicleta también es una obra maestra de nuestra Tecnología Goblin, ¡la llamo Aliento de Muerte! ¿Qué piensas? ¿No se ve genial?”
En cierto sentido, lo era. Fue solo que Chu Guang sintió que el nombre era algo siniestro, como si la persona sentada en él estuviera condenada a no regresar nunca más. Pero aparte de eso, esta cosa era bastante interesante.
El principio en que se basaba el motor probablemente era similar al motor de vapor portátil. El agujero de alimentación en forma de cubo de basura estaba conectado a un dispositivo similar a una tubería de hierro. Después de que se echaba la madera, se secaría en un proceso de secado lento, agrietándose por el calor interno. De esa manera se iría quemando poco a poco debido al oxígeno limitado.
El carbono en la superficie reaccionaría con el agua y el oxígeno para generar una mezcla de hidrógeno, metano y monóxido de carbono. Esa mezcla se introduciría en el motor después de pasar por el tubo de metal que servía de condensador. El principio era similar al de otros motores de gas natural, incluidas la estructura del pistón, el cilindro…
3 kilogramos de madera equivalían a 1 litro de gasolina, lo que era suficiente para que este vehículo pudiera recorrer 20 kilómetros. Haciendo que fueran 15 kilos de madera para 100 kilometros. No solo era fácil de usar, sino también barato. Después de todo, lo único que no faltaba en el páramo era madera.
De hecho, esta cosa no era un invento reciente de Mosquito. Ya había fabricado un motor a base de madera para el taller de carpintería hacía bastante tiempo. Los cócteles molotov que usaban los jugadores en los primeros días, así como el lanzallamas, estaban hechos de subproductos de la conversión de la vaporización de la leña.
Después de observar atentamente este vehículo de forma única durante un rato, Chu Guang miró a Mosquito y continuó preguntando.
“¿Qué velocidad puede alcanzar esta cosa?”
“¡No tendrá problema en alcanzar los 150 km/h! Pero no recomiendo conducir tan rápido. Dadas las condiciones de la carretera, me temo que un bache pueda hacerlo volar.” – dijo Mosquito en tono positivo.
Chu Guang asintió, expresando su comprensión. Aunque nunca había conducido una motocicleta, si había llevado un scooter. Podía imaginarse como sería la escena.
“No está mal. Aunque todavía tiene mucho margen de mejora, ya es lo suficientemente bueno. Con esta cosa, nuestra movilidad en el campo de batalla mejorará. Gracias por su contribución a la Federación Popular.”
Mosquito no esperaba que su invento fuera elogiado tanto por su líder. Su rostro de repente mostró una expresión halagada.
“¡Es un honor para mí poder compartir sus preocupaciones!” – dijo con un tono emocionado, mientras contenía su entusiasmo.
¡Pedidos! ¡Monedas de plata! Y lo más importante… ¡que su invento fuese reconocido!
Mosquito no pudo evitar estallar en lágrimas cuando pensó en su orgulloso trabajo vendiéndose en la tienda de PNJs. Y siendo adquirido por los jugadores de todo el servidor.
‘¿Quién se atreverá a decir que mis inventos son inútiles? ¿Quién dirá que mis creaciones no aportan nada? ¡Ja!’
¡Nadie se atrevería!
Chu Guang miró extrañado a Mosquito, que de repente estaba emocionado. Pero no dijo nada. Prefirió continuar preguntando sobre el invento.
“¿Ese motor es problemático de fabricar? Y esa… Uh… motocicleta Aliento de Muerte… ¿Cuántas se pueden producir al mes?”
“¡No hay problema! Siempre que el suministro de materiales sea suficiente y los pedidos de la planta siderúrgica no se retrasen… ¡Se podrá montar una cada tres días! ¡Puede que incluso en dos con más practica!” – respondió Mosquito con una sonrisa.
Tres días. Un poco más lento de lo esperado.
Probablemente no llegarían a tiempo para la próxima batalla. Sin embargo, Chu Guang también sabía que esto era algo que no podía arreglar.
Para fabricar algo a gran escala se necesitaba una gran cantidad de mano de obra y de recursos materiales. En la actualidad, el 80% de los recursos de la nueva zona industrial se concentraban en la producción de armas y municiones. Aunque consiguiese nuevos trabajadores, le sería imposible solucionarlo.
En cuanto al vehículo, solo podía colocarse temporalmente en segundo plano.
Pero lo que hizo que Chu Guang se sintiera satisfecho fue que Mosquito parecía haber recuperado el sentido común. Finalmente comenzó a considerar abandonar el modelo de producción de un pequeño taller y adaptarse a las necesidades de la nueva versión. Contrataría a nuevos jugadores y habitantes del páramo como en la Planta Siderúrgica N81 para que el asentamiento se volviese más grande y poderoso.
Sin duda, este fue un buen comienzo.
* * *
Después de ordenar un pedido a la Tecnología Goblin a través de la MV, Chu Guang abandonó el lugar y fue a inspeccionar la Planta Siderúrgica N81. Luego volvió al puesto de avanzada. Sin embargo, poco después de regresar a la base, vio a Llave Inglesa caminando hacia él con una expresión seria.
“¡Señor! El equipo de patrulla desplegado en el noreste ha enviado un mensaje. Informan que han presenciado a una gran cantidad de depredadores moviéndose desde la zona de la Base Experimental Aeroespacial del Continente Central hasta el Campamento de los Sauces de Invierno. ¡Deben venir desde los suburbios del sur de la Ciudad del Agua Celestial!”
¡Por fin estaban aquí!
Por alguna razón, después de escuchar la noticia, en lugar de sentirse ansioso, Chu Guang en realidad dio un suspiro de alivio.
Sería mejor para Serpiente Negra lanzar el ataque en este momento que esperar hasta dentro de un mes. Él y Vanus ya habían esperado que atacaría antes de tiempo. Parecía que esos depredadores querían pasar el final de un invierno en una celda.
Muy bien.
“Movilizad a todos los soldados. ¡Desplegaos de acuerdo con el plan que elaboramos anteayer!” – ordenó Chu Guang a Llave Inglesa, con calma.
“¡Sí, Señor!” – respondió el guardia con una expresión solemne.
* * *
Al noreste del Distrito de Qingquan.
Un convoy con veinte camionetas ligeras, ocho blindadas y un tanque avanzaban lentamente sobre la nieve blanca en formación. Además de los vehículos, había cientos de depredadores dispersos por los flancos, así como casi mil esclavos encadenados. Como habían traído todas sus pertenencias, marchaban muy lentamente.
De vez en cuando, un camión se quedaba atascado en la nieve debido a las malas condiciones de la carretera, haciendo que los esclavos tuvieran que esforzarse para volverlo a poner en marcha. Tanto era así que los depredadores que caminaban a su lado tenían que reducir la velocidad y esperar a estos grandes y voluminosos vehículos.
Sentado en el asiento trasero de una camioneta blindada, Serpiente Negra parecía un poco impaciente.
“¿Cuánto tiempo nos llevará llegar allí?”
“Deberíamos poder llegar antes del anochecer, Señor.” – respondió el conductor, nervioso.
‘Antes de que oscurezca…’
Parecía que tenían que pasar la noche en la nieve. Sabiendo que insistir era inútil, Serpiente Negra solo pudo maldecir en su mente y luego continuó esperando con impaciencia.
El explorador que envió al sur la noche anterior descubrió que había estallado una feroz batalla en dirección a la Ciudad de la Longevidad. Y durante un tiempo, se pudo ver una bengala elevándose hacia el cielo nocturno. Aunque se desconocía la situación específica de la batalla, su explorador informó que había al menos 300 o más personas intercambiando disparos por lo que pudo escuchar.
Dos o tres compañías.
Parecía que su viejo conocido Colmillo de León había descubierto sus planes y estaba decidido a adelantarse. Quería llevar a sus tropas hacia el sur y capturar directamente un gran parte de territorio en los suburbios del norte del Distrito de Qingquan antes de que la nieve se derritiera.
Serpiente Negra sabía que tenía que hacer un movimiento. Si continuaba esperando hasta la primavera, era posible que no pudiera conseguir nada.
“Marchar en medio de una intensa nevada no es una buena idea. Nuestras unidades blindadas no pueden aprovecharse de su movilidad con medio metro de nieve.” – dijo Vaders con cautela, sentado junto a Serpiente Negra.
Ya fuera una camioneta blindada, el tanque o los camiones que transportaban la munición de 100mm eran vehículos pesados que podían atascarse en la nieve con facilidad si no se tenía cuidado. Y si se atascaban en un lugar inoportuno, era probable que se convirtieran en blanco del enemigo.
Sin embargo, a Serpiente Negra no le importó, o no se tomó en serio la advertencia. A juzgar por la resistencia demostrada por los supervivientes de los suburbios del norte en las dos primeras batallas, solo se encontraban al nivel de dos compañías como máximo. Había cuatro compañías justo a su lado. Y seis más se encontraban explorando el terreno.
¿No poder aprovecharse de la movilidad? Era una broma. ¿Acaso lo necesitaba? Frente al poder absoluto no podrían hacer nada. Solo necesitaba apuntarles con el cañón a la cara para que soltasen las armas y se rindieran de inmediato.
“La tormenta de nieve ha terminado. Por el momento ha pasado lo peor. Nuestra infantería despejará los obstáculos en el frente, permitiendo a nuestras tropas blindadas y suministros que les sigan. Si la situación es optimista, podremos vivir en sus casas mañana por la noche.”
“¿Y si las cosas no van bien?” – preguntó Vaders.
“Entonces será pasado mañana.” – Serpiente Negra le dio una palmadita a Vaders en el hombro con una mirada feliz en su rostro. – “No te preocupes, amigo mío, sé que te gusta planificar todo con detalle, pero también es importante tener la capacidad de adaptarse.”
“Eso no es adaptarse, es apostar.” – dijo Vaders, sacudiendo la cabeza.
“¿Apostar? No odio esa palabra.” – continuó Serpiente Negra con una sonrisa. — “Sé lo que te preocupa. Si nuestras tropas de primera línea son atacadas, nuestros tanques no podrán brindarles apoyo a tiempo.”
“……”
Pero antes de que pudiese contestar, Serpiente Negra continuó con orgullo.
“Esa preocupación es completamente innecesaria. No somos solo nosotros los que estamos siendo golpeados por la intensa nevada. Ellos están igual. No importa cuán larga sea la línea del frente, todavía está dentro del alcance de mi artillería. Sin vehículos, ¡serán como hormigas atrapadas en la nieve y aplastadas contra el suelo por nuestra artillería!”
“¿Qué pasa si eligen atacar nuestra retaguardia?” – preguntó Vaders, incapaz de mantenerse callado. – “Si fuera ellos, no sería tan tonto como para atacar desde el frente.”
Un rastro de disgusto apareció en el rostro de Serpiente Negra. Aunque en ocasiones este consultor podía aportar algunas sugerencias muy constructivas, en ocasiones sus palabras sonaban realmente desagradables. Especialmente porque no creía que fuera una buena idea atacar su retaguardia.
“¿Crees que no he considerado esa situación? De lo contrario, ¿por qué dejaría cuatro compañías atrás? Incluso si por un milagro pasasen a través de las tropas que van por delante sin que nos diéramos cuenta, cuatro compañías son más que suficientes para abrumarlos.”
Además, eso era imposible. El frío invierno era igual para todos. Y esos supervivientes no iban a caer del cielo. Si querían evitar a esas seis compañías, solo podían dar un enorme rodeo por el este que les llevaría una gran cantidad de tiempo. Siendo conservador, su ruta se extendería por más de 30 kilómetros. Y durante ese período, necesitarían atravesar grandes áreas repletas de nieve, árboles y ruinas.
Para cuando lograsen llegar a su retaguardia agotados por el esfuerzo, ¡tal vez sus unidades blindadas ya habrían entrado en el área urbana del Distrito de Qingquan! E incluso si los alcanzaban a tiempo, no importaría. Aunque el tanque quedase atascado en la nieve, como mucho no podría moverse. Su torreta no se vería afectada. Con la cooperación de las cuatro compañías, la densidad de los disparos y las balas de cañón, ¡aplastarían a esos malditos insectos sobre la nieve!
¡Había estado esperando este día durante más de un mes!
Después de escuchar las palabras de Serpiente Negra, Vaders decidió permanecer en silencio porque realmente no sabía qué decir. No enviar a todos al frente solo demostraba que no era estúpido, pero no significaba que fuese una decisión lo suficientemente inteligente. Si este tipo fuera el comandante de la Legión, probablemente no podrían durar ni una semana, haría que un millón de soldados muriesen en tres días.
Vaders suspiró silenciosamente en su interior. Ahora solo podía rezar para que esos supervivientes también fueran un grupo de aficionados. Sin embargo, no sabía por qué, cada vez que pensaba en ello, tenía una sensación de inquietud.
Esa intuición la había desarrollado mientras luchaba contra la gente del Gran Valle de la Grieta en el frente norte. Ese instinto le había ayudado a evitar el peligro en innumerables ocasiones.
‘¿Realmente todo irá bien?’
* * *
En ese momento, ni Vaders, ni Serpiente Negra, ni las patrullas que seguían a los camiones notaron que, en una pendiente cubierta de nieve a 3 kilómetros hacia el este, había un par de ojos mirándolos. Sosteniendo unos prismáticos cubiertos por una gasa, N1 estaba acostado sobre la nieve. Lentamente, estiró su dedo índice y presionó los auriculares de manera extraña.
“¡Atención a todos los líderes de escuadrón! El objetivo ha pasado el área marcada como A y se dirige hacia el área C… Deberían dirigirse hacia la autopista interprovincial. ¿Vamos a dejar escapar a ese pez gordo?” – dijo conteniendo la emoción en su interior.
En un saco de dormir, no muy lejos de él, Vendaval estaba durmiendo. Más tarde tendría que desconectarse para avisarlo. Habían estado escondidos aquí de guardia durante dos días. En ese tiempo, no regresaron a la base ni una sola vez.
¡N1 ni siquiera sabía cómo aguantaron!
Las voces de cada líder de escuadrón llegaron rápidamente a través del canal de comunicación.
“¡Maldición! ¡No vienen hacia mí!” – gritó Topo.
“¡Bien! ¡Es hora de ponerse a trabajar!” – dijo Pollo.
En un campo nevado a 5 kilómetros del objetivo, Agua de Manantial se encontraba de pie al lado de un camión. Rápidamente, regresó al asiento del pasajero.
“Conduce, vayamos al Área C. Más tarde, contrólate y detén el vehículo antes de empezar una pelea.” – le dijo a Grupo Emocionado en el Campo de Batalla que estaba en el asiento del conductor.
“¿Ya estás aquí? Maldita sea, esta misión es realmente aburrida… Casi me desconecto.” – contestó Batalla. Luego sacudió la cabeza para despejarse y arrancó el motor.
Manantial lo ignoró y presionó el auricular con su dedo índice.
“Nos movemos al área objetivo C… Atención, equipo Remo, esa gente se dirige directamente hacia vosotros. Me temo que esta vez seréis los primeros en el lugar.”
En la autopista interprovincial, a 4 kilómetros del objetivo, un equipo de jugadores con camuflaje blanco se arrastraba sobre la nieve. Detrás de ellos había un bosque y frente a ellos una suave pendiente. Esa era la zona más cercana a la autopista interprovincial.
Golpe de Remo extendió la mano y presionó el auricular, respondiendo con calma.
“Recibido.”
Después de finalizar la comunicación, miró a sus ansiosos compañeros y aspiró profundamente.
“Amigos, el enemigo se dirige directamente hacia nosotros. Están aproximadamente a 4 kilómetros de distancia. Este será el centro del campo de batalla.” – dijo con una expresión seria.
“…Obrero, apunta a la oruga del tanque más tarde. Aunque no le des, cambia de posición de inmediato tras disparar. Si la oruga se rompe, déjaselo a Gran Deudor.”
Frente a él había un rifle antitanque tipo Lanza de casi dos metros de largo.
“¡Déjamelo a mí!” – contestó emocionado Obrero.
“+1.”
Gran Deudor sacó un pequeño robot de su mochila. Después de confirmar que los explosivos estaban firmemente atados en la parte superior, se rio entre dientes.
“¿Hacemos una apuesta? Apuesto que…”
“¡Piérdete!”
“¡Imbécil! No nos gafes. ¡Date prisa y despliega ese maldito robot!”
Al ver que todos estaban enfadados, Gran Deudor tosió secamente.
“Solo estaba bromeando…”
Iba a ser una pelea complicada. Los enemigos a los que se enfrentarían serían varias veces más que los de la última vez. Sin embargo, nadie tenía miedo.
Golpe de Remo pudo ver como los rayos de luz centelleaban en los ojos de sus compañeros. Estaban completamente emocionados ante la idea de la batalla. Todos los depredadores serían detenidos aquí. Si creían que podían derrotarlos con facilidad, ¡eran bienvenidos a intentarlo!
Golpe de Remo miró la máquina virtual de su brazo. Vio como una línea de texto azul claro aparecía en la pantalla.
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¡Ese trueno aplastaría toda la oscuridad!