JDR - Capítulo 290

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Capítulo 290

¡La primera batalla de la Legión de la Jungla y la Legión de Fuego!

Traducido por Tars
Corregido por Noe
Editado por AMarauder

“¡Auuuuuuu!” Un largo aullido atravesó el cielo sobre la jungla. Ataviado con una armadura de acero, Basura saltó del edificio medio derrumbado, levantando polvo a varios metros de altura antes de precipitarse hacia la jungla como una bala de cañón. ¡La tierra parecía temblar! No necesitaba depender de ninguna fuerza mecánica; ¡los músculos bajo sus escamas de color verde oscuro eran el motor más potente! Y la jungla… ¡era su terreno! La presión de los genes mutantes superiores hizo que los simios de espalda de hierro que colgaban de las ramas de los árboles sintieran un miedo instintivo. Especialmente cuando las afiladas cuchillas que brillaban con una luz fría segaron varias vidas en cuestión de unas pocas respiraciones. Los asustados primates huyeron en todas direcciones. N1 y sus compañeros, que yacían tirados en un piso elevado, quedaron completamente atónitos. “¿Qué demonios? ¿Es una habilidad oculta?” “Grito de Guerra… desventaja de miedo adicional… ¿tiene un efecto milagroso en los mutantes de bajo nivel?” – murmuró Habrá Tiempo mientras se tocaba el puente de la nariz. La supresión de la cadena alimenticia. Los que estaban en la base probablemente se convertirían en alimento de una garra de la muerte, por lo que era natural que sintieran miedo. En cuanto a si funcionaría en humanos… Dependía de cuántas personas hubiera al otro lado y del equipo que llevasen. “¡Genial!” – exclamó Dejar de Fumar mientras se giraba hacia ellos. Caballo Blanco cargó la ametralladora ligera en su mano y sonrió. “Vamos. No dejes que Basura acabe con todos los monstruos él solo. N1, quédate aquí para cubrirnos. Los demás, ¡seguidme!” La última vez que vino solo había llevado un rifle y cinco cargadores. ¡Esta vez tenía más de 800 balas en el exoesqueleto! ¡Ahora podría divertirse! Todos los jugadores alzaron sus armas con entusiasmo. “¡Uaaaaa!” Justo después de Basura, la Legión de la Jungla, liderado por Pollo a Medianoche, fue la siguiente en avanzar. 10 KV-1 aplastaron el suelo de hormigón roto y se abalanzaron hacia la espesura. Nueve ametralladoras ligeras desataron su potencia de fuego simultáneamente, lanzando una densa lluvia de balas hacia la jungla. Pollo a Medianoche sostuvo un hacha corta en una mano y partió en dos a un simio de lomo de hierro que se abalanzó sobre él. Inmediatamente después, levantó la escopeta con la otra mano y disparó al pecho de otro primate, haciéndolo pedazos. Tras subir al menos 5 niveles en el bosque del Pueblo del Arroyo Lejano, nadie sabía luchar en terreno boscoso mejor que los veteranos de la Legión de la Jungla. 10 KV-1 fuertemente blindados, eran como un hacha de acero que se abría un camino sangriento a través de la jungla. La Legión de Fuego los siguió rápidamente. La ronda anterior de bombardeo de mortero ya había hecho temblar de miedo a los monos espalda de hierro que había entre la vegetación. De no ser por el Dispositivo de Interferencia Mental, ya habrían abandonado sus puestos y dispersado hace mucho tiempo. A medida que sus instintos se intensificaban, sus ojos se tornaban gradualmente rojos como la sangre. Los simios que se retiraban atemorizados parecían haber caído en la locura, estabilizaron de nuevo su formación y avanzaron en oleadas. Lanzaron flechas y jabalinas contra los jugadores, además de cócteles molotov y granadas caseras. Algunos monos espalda de hierro armados con cuchillos cortos, barras de acero y mazas se abalanzaron sobre los 10 veteranos de la Legión de la Jungla, se agrraron con fiereza por sus extremidades y comenzaron a morderlos y a golpearlos. Sin embargo… Obviamente eligieron al oponente equivocado. De entre las diversas legiones de la Nueva Alianza, solo la legión de Pollo a Medianoche estaba compuesta por veteranos de tipo fuerza. Es más, todos los presentes poseían experiencia en muchas batallas. ¿Cómo podrían verse obstaculizados por algo como esto? Los jugadores que se vieron atrapados en el combate cuerpo a cuerpo no entraron en pánico y sacaron sus hachas. En ese momento, las bestias que se abalanzaron finalmente se dieron cuenta de lo aterrador que era un jugador de fuerza con un exoesqueleto en combate cuerpo a cuerpo. La hoja de hacha era como una picadora de carne, y los simios espalda de hierro que saltaban cerca, morían o resultaban heridos al instante. ¡El suelo estaba cubierto con trozos de carne y pelo ensangrentados! “Estos monos son más tenaces de lo que esperaba.” Detrás de Caballo Blanco, Habrá Tiempo reemplazó tranquilamente el cargador y usó una metralleta de pequeño calibre para apoyar a las tropas aliadas enfrascadas en el combate cuerpo a cuerpo. Pero… Viendo sus miradas emocionadas, parecía un poco redundante ayudarlos. Caballo Blanco miró al cielo, casi cubierto por las copas de los árboles. “Dale una oportunidad a Mosquito, no sea que se queje después.” – bromeó. “¡Je, je! ¡Déjame hacerlo!” Dejar de Fumar, de pie en la primera línea, sacó con entusiasmo un tubo de papel del tamaño de una lata de la parte delantera del exoesqueleto KV-1, tiró de la pestaña y lo lanzó hacia adelante. El tubo de papel cayó en medio del grupo de simios, estalló en llamas y liberó una gran cantidad de humo rojo. Obviamente, los primates no le hicieron caso, y siguieron gritando a los jugadores mientras les lanzaban flechas y cócteles molotov. Al segundo siguiente, un grito estridente se escuchó repentinamente desde el aire. “¡Ja, ja, ja! ¡Simios! ¡Su abuelo Mosquito está aquí!” Mosquito, con la cara golpeada por el viento, apretó el gatillo de la palanca de control con entusiasmo. Antes de que los simios pudieran reaccionar, una lluvia de balas cayó del cielo al instante. Acompañados por el sonido de un silbido mientras atravesaban la selva, los arqueros simios espalda de hierro escondidos entre las ramas de los árboles murieron o resultaron heridos, cayendo del árbol uno tras otro. Ra, ta, ta…! Mirando las llamas que salían del cañón de 7mm, Mosquito aún no estaba satisfecho. No puso evitar chasquear la lengua. De hecho, ¡la potencia de estas pequeñas tuberías de agua todavía era demasiado pequeña! ¡Sería genial si pudiera reemplazarlo por una ametralladora de 20 mm! Con la mirada grabada en el parabrisas envuelto en humo rojo, Mosquito soltó el dedo índice del gatillo y presionó el botón del lanzabombas. ¡100 metros! Los dos tubos circulares de medio metro que colgaban bajo las alas se separaron del fuselaje, reduciendo al mismo tiempo el peso y, de repente, Mosquito tiró de la palanca con fuerza. El avión pasó rugiendo sobre los árboles. Los dos tubos redondos equipados con espoletas retardadas explotaron en el momento en que tocaron las copas de los árboles, estallando en dos enormes bolas de fuego de color rojo. Un denso humo caliente descendió en cascada, las chispas se extendieron por la selva, extendiendo instantáneamente un mar de llamas. La temperatura en la zona subió tan rápidamente que incluso distorsionó el aire. El grupo de priamtes que había sido diezmado por las ametralladoras un segundo antes se vio envuelto en un mar de llamas al siguiente. Los simios espalda de hierro prendidos en llamas, forcejearon desesperadamente y emitieron un rugido estridente en el mar ardiente en el que se había convertido el bosque, pero fue inútil. El fuego se hizo cada vez más grande y terminaron siendo engullidos hasta convertirse en trozos de carbón. De pie junto a la ventana y presenciando esta escena, los ojos de Tuss se llenaron de miedo, se le erizaron los pelos y tembló incontrolablemente. ‘¿Un avión?’ Estaba seguro de que esa gente venía de los suburbios del norte. “Jefe, ¿qué hacemos?” Kunke miró a su jefe mientras sus piernas temblaban involuntariamente. Eran demasiado feroces. ‘¡No somos rivales para ellos!’ Incluso después de tomar las píldoras de fuerza, seguiría siendo inútil. Por supuesto, Tuss también era consciente de la fuerza de combate de sus hombres. Después de todo, él mismo tampoco era muy poderoso. Sin embargo, si le pidieran que renunciase a la riqueza que tenía en sus manos, ¡preferiría morir! Tuss apretó los dientes al tomar una decisión. “¡Traedme a ese residente del refugio llamado Sun Zewen!” Al oír la orden de su jefe, Kunke asintió rápidamente, salió arrastrándose por la puerta y, al cabo de un rato, trajo a la persona que Tuss buscaba. “Jefe, he traído a ese hombre.” Ese anciano tenía el pelo y la ropa despeinados; su rostro arrugado mostró una expresión de miedo y temor mientras miraba con inquietud al villano que tenía delante. “Ahora ve a las celdas y defiéndelas ¡No dejes que la gente de azul se acerque!” – ordenó Tuss, mirando a Kunke. “Sí, ¡sí!” Kunke, quien trajo a la persona, no se atrevió a quedarse ni un momento. Asintió rápidamente para aceptar la orden y salió corriendo por la puerta sin detenerse. Al ver que la puerta se cerraba, Tuss extendió la mano, agarró al anciano por el cuello y lo jaló bruscamente hacia él, gritándole a la cara. “No me importa el método que uses, ¡ajusta la frecuencia de ese campo hasta que también pueda afectar al cerebro humano! ¡Hazlo ahora!” Sun Zewen, agarrado por el cuello, abrió los ojos de par en par, sorprendido. “¿Estás loco? ¡También eres humano!” Tuss no quería perder el tiempo hablando. Sacó su revólver, se lo puso al anciano en la cabeza. “¡Haz lo que te digo o te haré un agujero en la cabeza ahora mismo!” – gruñó. El anciano tragó saliva; el miedo se marcaba en sus pupilas. Ante la amenaza de muerte, el anciano finalmente asintió con la voz llena de desesperación. “Lo haré… Llévame a la sala de control.” * * * Mirando como ardía el fuego, un rastro de sorpresa se dibujó gradualmente en el rostro de Caballo Blanco. “Añadió espesante de jabón de aluminio al combustible… Ese tipo se está volviendo cada vez más creativo.” Dejar de Fumar estaba completamente atónito. “Mierda…” – murmuró confundido. En ese momento, la voz de Mosquito llegó a través del canal de comunicaciones. Aunque el viento azotaba el micrófono, todos podían escuchar el tono orgulloso de su voz. “Hermanos, os dejo el resto… Por cierto, me moví 30 metros al sur a propósito, así que no debería haber herido a ninguna tropa aliada por error, ¿verdad?” “¡Nadie está herido! ¡Bien hecho!” – respondió Habrá Tiempo. “Ja, ja, ¡gracias por el cumplido! Me voy ya… Maldita sea, todavía no he probado de aterrizar en esta cosa, así que espero que nada salga mal.” – rugió Mosquito. “……” El sonido de la hélice se fue desvaneciendo gradualmente. La batalla había terminado. Probablemente los simios espalda de hierro de los alrededores habían muerto, ya que no había señales de que volvieran de nuevo. Pollo a Medianoche limpió la sangre de su hacha mientras miraba el mar de llamas frente a él y a los jugadores que se acercaban. “¿Está bien dejar esas llamas sin control?” Vendaval miró hacia adelante, asintió y volvió a negar con la cabeza. “No te preocupes, el terreno aquí es complicado. Hay bastante humedad y no sopla viento; podría quemar un trozo, pero no irá demasiado lejos.” Pollo a Medianoche asintió y no añadió nada más. A un lado, Basura se limpió la sangre de sus garras de acero y miró hacia el gigantesco edificio con forma de huevo; sus pupilas ámbar ardían de emoción. Esos simios eran demasiado débiles; matarlos era como cortar el césped. ¡Esperaba que hubiera un oponente digno más adelante! El grupo se preparó para avanzar. Sin embargo, en ese momento, Pollo a Medianoche frunció el ceño y retrocedió medio paso, sujetándose la frente. “Hermano, ¿qué te pasa?” – preguntó Basura, al ver su extraño comportamiento. “No lo sé. Simplemente caí en trance de repente. Probablemente debido a las fluctuaciones del servidor… no debería ser un gran problema.” Pollo a Medianoche negó con la cabeza. “¿Fue mi ilusión? Escuché a alguien cantar en mi cabeza.” – murmuró. “No, yo también lo escuché. Pero no cantaba. Era como ruido electrostático… creo que probablemente no sea algo tan simple como las fluctuaciones del servidor…” Caballo Blanco también frunció el ceño y miró a toda la gente de la Legión de la Jungla, solo para ver que todos parecían aturdidos. “Estoy bien… Solo me siento un poco incómodo, pero no estoy aturdido.” – Habrá Tiempo, que se frotaba las sienes con el dedo índice, notó algo de repente y miró rápidamente a Vendaval. Este último obviamente también lo notó y se acarició la barbilla mientras reflexionaba. “No siento nada… ¿Podría estar relacionado con el atributo de inteligencia?” El atributo de inteligencia de la secuencia genética de fuerza era inherentemente débil, con un valor inicial de 3 puntos, y solía alcanzar 5 tras despertar… Ese era el nivel de un adulto normal. En cuanto a agilidad, percepción y constitución, el valor inicial del atributo de inteligencia era básicamente 5, era raro que fuera 4, pero podía llegar hasta 7 tras despertar. El propio Vendaval era actualmente el jugador con mayor inteligencia de todo el servidor, con un atributo de inteligencia superior a 20. Según la configuración del juego, la actividad neuronal de su personaje era cuatro veces mayor que la de un adulto sano. Con un análisis racional… ‘¿Quizás se trata de algún tipo de desventaja de choque mental? ¿El daño se juzgaba según el nivel de inteligencia?’ Basura parecía confundido. “¿De qué demonios hablas? ¿Qué trance? No siento nada.” Habrá Tiempo y Vendaval intercambiaron miradas. “Basura no sintió nada. Así que tal vez esta cosa solo pueda atacar a ciertas especies… ¿Infrasonidos? ¿Ondas electromagnéticas? O… algo más.” Habrá Tiempo frunció el ceño. “Mm, ¿Cambiaron de objetivo a humanos? Con razón los simios se retiraron.” “Bueno… es obvio que la mente humana es superior a la de un mono. Puede que no sea tan fácil controlarla.” Vendaval se tocó ligeramente el puente de la nariz. “En fin, tengo curiosidad, esta cosa… ¿no tiene ningún efecto en los depredadores de ese edificio?” Habrá Tiempo resopló. “No lo sé. Resumamos. El oponente debería tener algún tipo de habilidad de área, que puede aplicar una desventaja de aturdimiento a formas de vida concretas dentro del área objetivo.” “Deja de resumir.” – refunfuñó Pollo furioso. Cortó el tronco del árbol con su hacha y miró a los jugadores de la Legión de la Jungla. – “Hermanos, ¡Vamos a golpearlos hasta que se detenga ese maldito ruido!” “¡Sí!” Los veteranos que llevaban exoesqueletos KV-1 sacaron sus hachas y, siguiendo los pasos de Pollo, se lanzaron hacia el parque ecológico que tenían frente a ellos con intenciones asesinas. Al ver a los jugadores de la Legión de la Jungla corriendo hacia el domo gigante, el grupo de Toros y Caballos quedó ligeramente aturdido. Eran demasiado imprudentes. Habrá Tiempo miró a Caballo Blanco. “Démonos prisa… Caballo Blanco, ¿quieres retirarte primero?” Caballo Blanco negó con la cabeza. “No, fue solo un pequeño impacto.” Huevos Revueltos se apartó medio paso, nervioso. “Maldita sea, me da mucho miedo tu bandera de muerte.” Caballo Blanco sonrió y colocó la ametralladora ligera sobre el hombro. “No tengas miedo. Solo necesitamos tres días para reaparecer.” “¡Uaaaaaaaa!” Sin verse afectado por la penalización, Basura aulló de emoción y persiguió a la Legión de la Jungla, temiendo llegar demasiado tarde al enfrentamiento contra el jefe. En realidad… No había ninguna bandera de muerte. Había un grupo de depredadores viviendo en el parque ecológico, pero en ese momento estaban locos, con los ojos inyectados en sangre, matando a cualquiera que veían. ¡No importaba si eran amigos o enemigos! El combate cuerpo a cuerpo comenzó al instante. Las balas silbaban en pasillos y escaleras. Atacar edificios no era el fuerte de la Legión de la Jungla, pero la armadura del exoesqueleto KV-1 era lo suficientemente resistente. La mayoría de los depredadores usaban balas de plomo. Aunque podían causar un daño enorme, la premisa era que la bala pudiera penetrar la placa de acero soldada al exoesqueleto. Al ver que persuadirlos para que se rindieran era imposible, Pollo a Medianoche ya no mostró piedad. Inmediatamente ordenó a los miembros del equipo que eliminasen a los asaltantes. Basura se movía más rápido que ellos. Sus garras de acero se movían con la velocidad del rayo, desatando un baño de sangre en los estrechos pasillos. Desde el primer piso hasta el segundo, había extremidades rotas esparcidas por todas partes, haciendo que la escena fuera extremadamente sangrienta. Habrá Tiempo y Vendaval, armados con metralletas, no se unieron a Basura, sino que corrieron rápidamente a las profundidades del primer piso del parque ecológico. Según el mapa, allí se encontraba el área de observación. Sin embargo, lo que se guardaba dentro de esas jaulas transparentes ya no eran animales, sino esclavos mantenidos por los saqueadores. En la jaula más grande, había varias mesas colocadas una tras otra, y un gran número de personas yacían en el suelo. Por su aspecto delgado y desaliñado, no era complicado identificarlos. Las mesas contiguas estaban repletas de botellas, frascos y herramientas para envasar pastillas. Era evidente que, justo antes de que entraran los jugadores, seguían trabajando frente a los bancos de trabajo bajo la vigilancia de los depredadores. “Maldita sea, ¡incluso las celdas son meros cubículos!” ¡Era demasiado inhumano! Dejar de Fumar chasqueó la lengua, pero cuando estaba a punto de dar un paso al frente, un depredador escondido en las sombras, salió corriendo como un loco empuñando un rifle de hierro. “¡Aah! ¡Vete al infierno!” Al hombre solo le quedaba un ojo, y la otra pupila se había vuelto de color rojo como la sangre. Su aspecto desquiciado parecía el de un demonio poseído. Habrá Tiempo activó hábilmente su habilidad de Tiempo Bala, giró el cañón del arma y apretó el gatillo en cuanto el hombre asomó la cabeza. ¡Pa, pa, pa…! Ese depredador quedó acribillado a balazos al instante. Los casquillos cayeron al suelo con un ruido metálico constante. Habrá Tiempo bajó el cañón humeante y le dio una palmadita en el brazo a Dejar de Fumar antes de dirigirse a la entrada de la celda y empujar la pesada puerta de hierro. El hedor a descomposición le golpeó en la cara. No había ventilación, ni luz solar durante todo el año, así que nunca se había limpiado. Olía a cloaca. Era difícil imaginar la calidad de las pastillas que se elaboraban en semejante ambiente. En ese momento, un esclavo arrugado levantó ligeramente los párpados. Al ver a Habrá Tiempo de pie en la puerta, le extendió la mano con dificultad. “Ayuda…” – vio el abrigo azul de Habrá Tiempo y reconoció su identidad. – “Por favor, ayúdanos…” Aunque Habrá Tiempo entendía a grandes rasgos lo que decía el anciano tendido en el suelo, no bajó la guardia, mirándolo fijamente, habló en el lenguaje de la Federación. “¿Dónde están esos depredadores?” El anciano probablemente no entendió, o tal vez sí, pero su conciencia no estaba clara. No dejaba de murmurar las mismas palabras. “Date prisa… detenlos…” ‘Detenerlos’ Habrá Tiempo frunció el ceño, solo para sentir que el dolor sordo en su mente se hacía cada vez más evidente. Pero en ese momento, la presión mental en su cabeza se aflojó repentinamente, como si la nube oscura hubiera sido arrastrada por el viento, desapareciendo sin dejar rastro. Y el anciano que yacía frente a él pidiendo ayuda, de repente, dejó caer el brazo al suelo y entró en coma. “¿Qué ha pasado?” De pie fuera de la celda, Caballo Blanco miró a su alrededor con expresión de sorpresa. Por un instante, sintió un dolor en la cabeza como si le fuera a estallar, pero la sensación desapareció de repente. ‘¿Desapareció el efecto negativo?’ Huevos Revueltos y Dejar de Fumar estaban igual de aturdidos. “No tengo ni idea…” En ese momento, la radio resonó por encima del ruido. La voz ronca y emocionada de Basura salió por el altavoz. “Hermanos! ¿Están bien? ¡He capturado al jefe! Si todavía te duele la cabeza, dímelo. ¡Le arrancaré la cabeza!” * * * A las afueras de la Ciudad de la Longevidad, en un espacio abierto y prácticamente nivelado, un planeador de madera descendía lentamente, acercándose a la pista. El tren de aterrizaje chocó violentamente contra el suelo varias veces, antes de detenerse bruscamente. Estuvo a punto de volcar en unas cuantas ocasiones. Los más sorprendidos fueron sin duda los ayudantes de Mosquito cuando esa chatarra aterrizó. Sus ojos estaban abiertos de par en par. Tomar Vidas miró a Mosquito con asombro. “¿Qué demonios? ¿De verdad aterrizó esa cosa?” Perseguir Almas y Matar Dioses estaban igual de impresionados. “¡Maldición!” “¡Genial!” Detener Peleas guardó silencio un buen rato antes de suspirar suavemente. “Es realmente sorprendente que no se haya roto en pedazos.” Era cierto que él había diseñado el motor y la batería, pero si no recordaba mal… Su profesión en la vida real era la de fabricar drones cuadricópteros. Era comprensible que el planeador pudiera despegar, pero nunca esperó que Mosquito lo trajera de vuelta y aterrizara con él. Tras salir de la cabina, Mosquito, con el pelo completamente despeinado, abrazó a sus hermanos pequeños mientras gritaba emocionado. “¡JA, JA, JA…! ¡Lo logré! ¡Regresé con vida!” ¡Era muy emocionante! Aterrizar había sido mucho más excitante que lanzar una bomba. Sobre todo, en el momento de tomar tierra, sintió que el avión se sacudía violentamente, como si estuviera sufriendo un calambre. Estaba convencido de que tendría que permanecer en el foro otros tres días. Chu Guang, que observaba de pie, también parecía sorprendido. Sabía que podía volar, pero construir algo que pudiera aterrizar con seguridad no era algo que cualquier persona pudiera lograr. ‘Ya veo… Así que la mejor manera de jugar esta versión del juego para la plantilla de agilidad es pilotar un avión…’ Chu Guang lo pensó un momento y sintió que era necesario animar al loco de Mosquito, así que movió el dedo índice, editó un logro y se lo envió.

Has desbloqueado un logro: ¡Primer vuelo!. ¡Has despegado y aterrizado con éxito por primera vez!

Volar no contaba. Un vuelo solo estaba completo si podías aterrizar con seguridad. Mosquito bailó de emoción tras recibir las recompensas. Las insignias de logro obtenidas en el juego eran igual que las medallas y se podían poner en el foro para destacar. En otras palabras, era algo que podía utilizar para presumir ante otros jugadores. “¿De verdad hay un logro tras volar de regreso con éxito? ¡Qué sorpresa!” “¡Mierda! ¿De verdad desbloqueaste un logro?” – Tomar Vidas se quedó atónito a su lado. “¿Qué demonios? ¿Incluso puedes desbloquear un logro con esto?” “¡Buen hermano! ¡Déjame probarlo!” – gritó Perseguir Almas emocionado. Mosquito protegió rápidamente su avión. “¡Piérdete…! ¿Sabes cuántas monedas de plata se necesitan para construir uno de estos? ¡Primero te conseguiré una versión simplificada para que practiques!” “¡Maldita sea! ¿Tienes que ser tan tacaño?” – se burló Detener Peleas. “¡Exacto! ¡Al menos la mitad de ese avión fue construido por nosotros!” – asintió Tomar Vidas. A pesar de lo que dijeron sus aprendices, Mosquito se negó a dejarlos subir. Sin embargo, pese a que era tacaño al final llegó a un acuerdo. Prometió proporcionarles materiales y conseguirles dos máquinas de entrenamiento que costaran menos de 1.000 monedas de plata para entrenar. Al mirar a los ruidosos jugadores, Chu Guang mostró una sonrisa feliz. ‘Es demasiado fácil complacerlos.’ Un logro gratuito podía hacerlos muy felices. “¡Maestro!” – dijo Pequeño7 a través del canal de comunicación. Chu Guang apartó la mirada del aeropuerto a lo lejos, extendió la mano y tocó el lateral del casco. “¿Qué pasa?” “Tus jugadores han controlado con éxito el Tercer Parque de Protección Ecológica del Distrito de Qingquan.” Chu Guang asintió. “Buen trabajo.” No se sorprendió ante la eficiencia de los jugadores. Después de todo, eran jugadores de los primeros puestos de la clasificación. No solo eran poderosos en el combate individual, sino que poseían una amplia experiencia en batalla. También eran increíbles trabajando en equipo. Unos pocos simios no eran suficientes para darles un dolor de cabeza. Pequeño7 continuó. “Según la información enviada, el Parque de Protección Ecológica no es una ruina vacía. Había una guarida con unos 50 depredadores. Se sospecha que poseen algún tipo de tecnología que les permite controlar a los simios espalda de hierro que hay en los alrededores del Parque de Protección Ecológica y emplearlos en la recolección de hongos cerebrales para elaborar medicinas...” “¿Tienen esa clase de tecnología?” Una expresión de sorpresa se dibujó en el rostro de Chu Guang. Por supuesto, lo que más le sorprendió fue que un grupo de depredadores realmente usase esa tecnología para recolectar hongos. “Mm, además tus jugadores también han rescatado a 117 esclavos, la mayoría son empleados para elaborar medicinas… Algunos vivían en refugios.” ‘¿Supervivientes de un refugio?’ Al darse cuenta de la importancia de ese asunto, la expresión de Chu Guang se tornó seria de inmediato. “Que la Legión de Fuego y la Legión de la Jungla rescaten a los esclavos y vigilen a los depredadores cautivos. Además, llama a Yin Fang y a Heya y pídeles que me esperen en la puerta norte del parque.” Pequeño Siete respondió con gran entusiasmo. “¡Sí, Maestro!”