Volumen 58 Capítulo 5 - parte 1

A⁺

A^-

Volumen 58 Capítulo 5 - parte 1

La gente de Royal Road

Traducido por Tars
Corregido por Noe
Editado por Tars

¡Tac, tac, tac…! Weed taló árboles y pronto construyó una cabaña en una playa poco profunda. La casa de madera se alzaba sobre el mar cristalino. “Construyamos también algunos muebles.” “¿Podemos?” Seoyoon y Weed hicieron los muebles juntos. No era una casa en la que vivirían juntos durante mucho tiempo, pero los sentimientos que tenían al crear un hogar juntos eran maravillosos. Hicieron un armario, una cómoda, una cama… que iba a juego con la habitación. “Creo que quedan bastante bien.” “Pienso lo mismo.” Weed también empezó a pescar de noche con Seoyoon.

La [Suerte] ha aumentado en 1 punto.

La [Perseverancia] ha aumentado en 1 punto.

Había estado mejorando sus estadísticas y habilidades de pesca. La [Vitalidad], la [Resistencia] y el [Aguante], que tenían un impacto directo en el combate, también aumentaron ligeramente. Pero lo más importante, permanecer juntos en una pequeña isla en el océano les hizo concentrarse el uno en el otro. “La restauración de Morata avanza más rápido de lo esperado.” “Sí, es cierto.” “Es complicado reconstruir los edificios principales, pero decidimos levantarlos de nuevo en sus ubicaciones originales. Planeamos ampliar un poco más las calles. También ensancharemos la plaza y el mercado.” “Eres libre de tomar decisiones sobre ese tipo de cosas.” Seoyoon dirigió las obras de restauración mediante susurros. Pescaron, comieron y conversaron durante días. Empezaron a comprender los sentimientos del otro tanto en el mundo real como en Royal Road. “¿No te aburres?” “Es divertido. Escuchar historias y contemplar el mar. No creo que me aburra nunca de esto, por mucho que dure.” Weed sentía que ahora tenía una familia con la que compartir alegrías y superar las dificultades. Había encontrado un compañero en su largo viaje por la vida. * * * Después de que regresaron a la región de Haven, el gremio Hermes había estado ocupado recuperándose de las inmensas pérdidas sufridas durante la batalla contra el dragón. “Comencemos una gran cacería en mazmorras.” “¿Cazar?” “Sí. Hagamos lo que mejor sabemos hacer. Sencillo.” Arkhim se hizo cargo de los principales asuntos del gremio. Tras la marcha de Rafael, BardRay se dedicaba a cazar durante períodos más largos que antes. “Aún quedan muchas mazmorras por despejar. Ahora que formamos parte del Imperio de Arpen, podemos despejar el Continente Central, el norte, el Desierto del Sur e incluso las regiones del este.” La caza del dragón había dado como resultado la pérdida de nivel y grandes daños materiales. Sin embargo, el gremio Hermes no se consideraba debilitado. Recuperaron la moral y se fortaleció la unidad dentro del gremio. “Hemos ganado una oportunidad. El gran sacrificio en Morata no solo benefició a Weed. Podemos ascender de nuevo.” Se dieron cuenta de que, tras la batalla, la actitud del público se había vuelto mucho más amigable. Al mismo tiempo, el gremio Hermes abrió sus puertas de par en par. En el pasado, solo los más fuertes podían registrarse en el gremio. Con solo por formar parte de él, se otorgaban numerosos beneficios y privilegios, lo que los colocaba entre la clase dominante. Ahora, solo imponían una condición:

Condiciones de reclutamiento

Buscamos ser el gremio de combate más poderoso, por lo que el gremio Hermes busca nuevos miembros. Aquellos que quieran volverse más fuertes. Acudan a nosotros. Nivel mínimo requerido: 300 Proporcionaremos terrenos de caza y equipamiento. Juntos seremos los más poderosos.

Decidieron centrarse en el objetivo más fundamental que todos habían defendido desde los primeros días de Royal Road y que apasionaba a la gente. “El gremio Hermes sería el mejor si no causara problemas.” “Se trata de un honor. Una vez que te unes a sus filas, puedes presumir de ello dondequiera que vayas. Los beneficios también son enormes.” El gremio Hermes expandió sus filas con la incorporación de nuevos jugadores. Con la salida de miembros del gremio del León Negro, el gremio de la Nube o los mercenarios de la Espada Negra, el equilibrio de poder comenzó a cambiar poco a poco. * * * “Sorprendentemente todo va como dijo Weed. La unificación mundial no fue el final, todos siguen ocupados expandiendo el poder de su facción.” Seed, señor del Imperio de Arpen. A diferencia de los demás señores, tenía una relación personal con Weed. ¡Compartieron un trozo de pan que acababan de robar! Seed recordó cuando conoció a Weed por primera vez. Cuando Kim Yo Sam se mudó a un barrio siendo joven, vivía un bicho raro llamado Lee Hyun. ‘¿Por qué actúa así?’ Durante el día, deambulaba solo por el vecindario con unos pantalones deportivos viejos y unas pantuflas. “Quiero comer arroz frito con kimchi. Guiso de habas con muchas almejas… cómo las que hacía mamá…” Siempre iba murmurando algo para sí mismo con tristeza, haciendo evidente de que algo estaba mal con él. Por la mañana temprano repartía periódicos y leche en su bicicleta, y era muy rápido, como si fuera en moto. Como si fuera un vendaval, arrojaba leche y periódicos hacia cada casa que aterrizaban con una precisión casi perfecta. ‘¿Ese tipo es jugador de béisbol?’ Kim Yo Sam estaba en tercer grado de la escuela primaria cuando conoció a Lee Hyun, quien no tenía padres. Lee Hyun había llamado su atención mientras deambulaba por el vecindario como hiena a plena luz del día. “Eso que tienes en la mano es un caramelo.” “¿Uh?” “Parece un caramelo de fresa…” “Sí, lo es.” El ojo de ese tipo para los detalles era extraordinario. Parecía delgado y escuálido, pero sus ojos brillaban como los de un tigre. Más tarde descubrió que era cuatro años mayor que él. “¿No sabes que te va a doler el estómago si comes caramelos?” “A veces me duele el estómago…” “Como no queremos que vayas al hospital, dámelo por un momento.” “Sí, hermano.” Tenían 10 años, por lo que no era que no tuviera discernimiento, pero la actuación y la voz de Lee Hyun superaban a las de un actor de cine, así que fue engañado por un momento. Lee Hyun rápidamente se metió el dulce en la boca. “Delicioso. Caramelo de fresa.” “De… Devuélvemelo.” “No. La ley de este mundo dice que nunca devuelvas un caramelo que ya has metido en tu boca.” “¡Me robaste!” “No ganas nada culpando alguien de que te quitó algo. Deberías agradecerme que te haya enseñado una lección. La vida es cruel y despiadada.” “¡Buaaaaaaaaa!” ¡Una persona extraña que robaba caramelos sin ningún remordimiento! “¿Tienes pan?” “Solo tengo un pedazo.” “Compartámoslo.” Aunque vivían en el mismo barrio, se encontraban cada pocos días, y en todas las ocasiones le robaban la comida. Kim Yo Sam se sentía como si Lee Hyun fuera un perro callejero hambriento buscando a su presa. ‘Debería decírselo a mi mamá.’ Un día, se decidió y le contó la verdad a su madre. Sin embargo… “Yo Sam. Hoy en día, si alguien te pide algo de comer, simplemente dáselo.” “¿Mamá?” “Es peligroso juntarse con gente como él. Es mejor darles lo que quieren y largarse.” “Vale…” “Hijo, ¿sabes cuánto te quiere tu madre? No crezcas para ser alguien como él.” “Sí, mamá.” Ni siquiera su madre, que era como un rompeolas que bloqueaba todos los peligros del mundo, pudo hacer nada con respecto al niño que vivía en el barrio. Kim Yo Sam pasó toda su infancia sin poder comer un bocadillo. Cuando fue a secundaria, llamó la atención de los llamados malos estudiantes de último año y comenzó a juntarse con ellos. “¿Tienes algún hermano mayor en tu barrio?” “Sí. Siempre me roba la comida.” “Je, je. ¿No te quita el dinero?” “No acepta dinero.” “No te preocupes. Ahora que estás en nuestro círculo negro, nadie puede tocarte. Pero… tengo un poco de hambre ahora mismo. Cómprame pan.” Se sentía explotado, pero era difícil escapar de los malos estudiantes de último año mientras asistía a la escuela. Pasaron varios días y, de camino a casa con los de último año, se encontraron con Lee Hyun. “¡Es ese gamberro!” – gritó Kim Yo Sam señalando a Lee Hyun. – “Vengaos, hermanos.” Los de último año reinaban como los más fuertes de la escuela, pero gimieron cuando vieron a Lee Hyun. “Ugh.” “Uh…” “Jis…” “Ueh!” Los estudiantes de último año se quedaron paralizados mientras hacían ruidos inquietantes. Lee Hyun se acercó como un tigre que había encontrado a su presa. “¿Sois Jin Sik, Sung Hoon y Bong Gyu?” “Sí, señor.” “Sí. Es un honor que recuerde nuestros nombres.” Estos estudiantes de último año eran famosos por su mal carácter y por realizar actos despreciables en la escuela, pero se inclinaron profundamente frente a Lee Hyun. Sus manos temblaban como si estuvieran sufriendo escalofríos, parecían sentir un miedo extremo. ‘¿Qué? Todo esto por un lunático de barrio…’ Lee Hyun palmeó suavemente la parte posterior de las cabezas. “¿Siguen por ahí haciendo bullying a los niños?” “¡Eso no es cierto…!” “Relájense.” “Je, je, je.” “No les roben el pan a los niños. Podrían terminar comiendo gachas por el resto de su vida por romperse la mandíbula comiendo pan.” “¿Eh? ¡Claro!” “¡Lo sentimos!” “Lo haremos bien. ¡Déjennos vivir!” Kim Yo Sam se quedó atónito mirando la escena. Cada vez que Lee Hyun hablaba, los mayores lo ignoraban y comenzaban a suplicar por sus vidas. Lee Hyun, que deambulaba por el vecindario sin nada que hacer, ahora parecía tan feroz como una bestia hambrienta. Lee Hyun miró a Kim Yo Sam y sonrió. Era su expresión habitual, pero de alguna manera su sonrisa hacía que su corazón se sintiera tranquilo. “Yo Sam, ¿te queda algo de pan?” “Eh. Sí, tengo. Pero tengo que dárselo a estos hermanos.” Cuando Kim Yo Sam dijo esas palabras, los mayores se sorprendieron tanto que casi se desmayaron del susto. “¡Ah!” “Oye, oye. Tienes que dárselo ahora mismo.” “Señor, por favor, dese un festín con este pan. Iré a comprarle leche de inmediato.” “No, yo voy a por ella. Leche de fresa…” “Olvídate de la leche de fresa. Compraré leche con chocolate, leche normal y leche de plátano…” Los mayores actuaban con gran amabilidad, como si estuvieran compitiendo entre ellos. Aunque Lee Hyun era aproximadamente unos dos años mayor que ellos, mostraban una actitud completamente diferente a las que ellos usaban con los estudiantes de secundaria o los adultos. “El pan está delicioso. ¡Lástima que no tenga pasta de habas rojas!” Cuando Lee Hyun devoró el pan y se fue satisfecho, la tensión de los mayores disminuyó. “¡Ah! Sobrevivimos.” “Ah… Por eso dije que no viniéramos a este barrio.” “No pensé que nos lo encontraríamos a estas horas.” Los mayores hablaron un rato y llamaron a Kim Yo Sam. “¿Conoces bien a ese tipo?” “¿Eh? Solo vivimos en el mismo barrio.” “Ya veo. Viven en el mismo barrio… ¿no te diste cuenta del peligro?” “¿Qué tipo de persona eres?” “Eso…” Los párpados del mayor temblaron violentamente. Luego, bajó la voz y empezó a contar una historia. “Hay una leyenda aterradora en esta ciudad.” “¿Una leyenda?” “Es tan increíble, que ni siquiera puedo hablar de ella. Pero la mayoría de las historias se confirmaron como ciertas.” Hace tiempo hubo un incidente en el que un grupo de delincuentes juveniles se peleó con Lee Hyun mientras este repartía leche. Y fueron completamente aniquilados. Algunos reunieron a más amigos para vengarse, pero lamentablemente se encontraron con usureros saliendo de la casa de Lee Hyun. “¡Oh! Tenemos un grupo nuevo de puerros frescos por aquí.” Uno de los usureros intentó darle una palmadita en la cabeza a uno de los matones, pero los adolescentes no se lo tomaron bien. “¿Quiénes son estos viejos?” “Ja, ja, ja, ja. Estos mocosos son monísimos.” Esos usureros eran los más crueles de todos. Arrastraron a los adolescentes a su casa con una facilidad experta. Cuando bajaron al sótano oscuro, un fuerte olor a sangre llenó el aire. “¡Ah! El olor del último cerdo que sacrificamos todavía apesta.” “Le eché una gran cantidad de agua, pero parece que no funcionó.” “¡Bastardo ignorante! Ni que nunca hayas ido a la carnicería. ¿Qué loco mata a un cerdo aquí con un cuchillo?” “Lo hice lo mejor que pude, ya que íbamos a organizar una fiesta. El cerdo se resistió tanto que me tuvieron que dar cinco puntos en el hospital.” ‘Bien. Esos niños no se van a creer que nos tuvieron que dar puntos por matar a un cerdo…’ ‘Deberíamos asustarlos un poco. ¿No es un buena oportunidad?’ ‘Bien. Hasta las películas dan miedo cuando se ve como descuartizan a la gente.’ ‘Es absolutamente aterrador. No pude dormir nada después de ver eso.’ Los usureros crearon la atmósfera adecuada al no encender las luces correctamente. “¿Qué les pasó?” “Les extirparon los riñones y las córneas para venderlas. El hígado quedó demasiado destrozado para venderlo.” “Maldita sea, los negocios hay que hacerlos bien. ¿Cómo permitiste eso?” “Lo siento, hermano.” “Maldita sea. ¡Al final tendré que traer un técnico de Yanbian!” “Se le da bastante bien abrir cuerpos. Es muy bueno extrayendo corazones.” La conversación entre los usureros provocó el pánico entre los adolescentes que todavía iban a secundaria o al instituto. “Tengo hambre. ¿Qué hay para cenar?” “Preparé costillas.” “¿Costillas?” “Sí. El sabor es impresionante. Después de todo, la carne humana es la que mejor sabe. Sobre todo, cuando masticas el cuello después de asarlo, simplemente…” Algunos jóvenes se desmayaron. El resto palideció y se desplomó cuando sus piernas perdieron la fuerza como ciervos recién nacidos. “Oye. Lo de la carne humana fue demasiado. Iba a pedir fideos con habas negras.” “Lo siento, hermano. Es divertido meterse con estos chicos.” “Creo que se lo tragaron.” “Actuamos de maravilla.” Los usureros los dejaron libres pensando que ya eran una molestia. Aunque los denunciasen a la policía, no los habían golpeado, por lo que todo se podía considerar una broma. Sin embargo, los delincuentes se lo creyeron por completo y nunca volvieron a pasar por la casa de Lee Hyun. Hasta corrieron rumores de que era un experto desmembrando cuerpos humanos.

Royal Road. Se ha creado un nuevo mundo.

El Continente de Versalles, ¡un lugar dónde los sueños se hacen realidad! ¡Dónde residen los héroes!

El momento que todos estaban esperando.

La historia ha comenzado.

Los mayores ya no volvieron a molestar a Kim Yo Sam. Pudo asistir a la escuela con normalidad, y cuando entró en su último año de secundaria, internet comenzó a volverse loco. La Corporación Unicorn había anunciado la finalización del desarrollo de Royal Road. “¿Esto es real?” Su escuela estaba sumida en el caos. La realidad virtual estaba a un nivel completamente diferente de los juegos para móviles o PC. Kim Yo Sam se emocionó cuando vio anuncios que mostraban a personajes navegando en barco o volando alrededor de una ciudad en un pájaro. “¡Hurra! Estoy agradecido de haber nacido.” Fue pasando un día tras otro. Finalmente, el día en que se inauguró Royal Road, ganó una inmensa popularidad. “Te compraré una cápsula si logras entrar en la Universidad de Corea.” Sus padres se lo habían prometido, por lo que Kim Yo Sam estudió con diligencia, con las palabras de sus padres grabadas en su mente. Las cápsulas para jugar todavía se seguían fabricando y no estaban disponibles para la venta. “¡Empezaré cuando entre en la universidad! ¡Créelo!” Después de tres años en los que no hizo nada más que comer y estudiar, finalmente fue admitido en la Universidad de Corea. Por supuesto, se unió a la facultad de Realidad Virtual. Desde ese día, instó incondicionalmente a sus padres a conseguir una cápsula incluso antes de recibir la carta de admisión.

¿Quiere conectarse a Royal Road?

“¡Ahora mismo!"