Volumen 19 Capítulo 5

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Volumen 19 Capítulo 5

La flota pirata desaparecida

Traducido por Tars
Corregido por DaniR
Editado por AMarauder

Después de otros nueve días de navegación, finalmente llegaron a su destino: la ciudad portuaria de Kruger. Su velocidad de navegación había disminuido debido a que el barco se había topado con otras tres zonas de monstruos marinos, donde tuvieron que eliminar a 57 monstruos más. Y gracias a que estaba realizando un viaje tan largo, la habilidad de [Navegación] de Weed había mejorado otro nivel. “¡Tierra a la vista!” Eufórica, Surka fue la primera en saltar al muelle. Kruger era un puerto pequeño con encanto. Las casas y las tiendas habían sido construidas como las que se podían ver en una pintura. Nada más desembarcar, Weed se dirigió a la taberna en busca de información. “¿Dices que estás buscando personas o grupos relacionados con el Imperio de Niflheim? No lo sé, hace mucho tiempo que no recibimos visitas con información del exterior.” “Eres la primera persona de fuera en mucho tiempo. Solo los marineros más experimentados conocen el puerto de Kruger.” Sin nada más que hacer, comerciaron con algunas mercancías de primera necesidad, hicieron algo de dinero y volvieron a zarpar de inmediato. Dos días más tarde llegaron hasta el puerto de Runei. Era una ciudad algo más grande que Kruger, por lo que conseguir información en su taberna fue mucho más fácil una vez pagada una ronda de bebidas. Mientras estaban bebiendo, las historias de los marineros fluían con facilidad. “A los marineros no les gusta hablar sobre su procedencia. ¿Y me dices que ni siquiera sabes cómo se llama ese sitio? ¡Encontrarlo será todavía más difícil!” “Si estás buscando marineros del antiguo Imperio de Niflheim, tienes que buscar entre los piratas. Muchos pescadores no podían salir a pescar por culpa de las constantes tormentas y al final se convirtieron en piratas.” “¿Las tormentas? No sabemos por qué, pero después de la caída del imperio los mares se volvieron así… He escuchado que antes el mar solía estar siempre en calma.” Había una gran cantidad de rumores que no se podían confirmar. “En el Mar del Norte hay una isla infestada de monstruos. Ni siquiera pienses en desembarcar allí para buscar suministros. Te convertirás en su cena al instante.” “¿Has visto un pez con aletas rojas? Su carne es tierna, es un pescado ideal para comer.” * * * ‘Dicen que la zona más infestada de piratas es la Bahía de Perion, pero los marineros son famosos por exagerar. Solo puedo confirmar su veracidad si voy por mí mismo.’ – meditó Weed. Los marineros que viajaban por el extenso mar solían ser unos bravucones. Uno solo podía confirmar la verdad viajando por uno mismo. Aun así, incluso las cosas más insignificantes podrían usarse más tarde. En ese instante, Weed estaba investigando en un pequeño puerto llamado Rezad. Había comprado una bebida para un pescador muy viejo. “Joven almirante, ¿me estás preguntando por los piratas armenios?” – dijo mientras bebía agradecido. “No he dicho nada de piratas.” “Hace mucho tiempo escuché a mi abuelo hablar sobre una tormenta que golpeó el mar, fue durante la caída del Imperio de Niflheim. En ese tiempo hubo un hombre que pasó todas las pruebas para entrar en la banda y embarcó con ellos. Parece que finalmente llegó a convertirse en su jefe. Según los rumores era un gran mago.” La cabeza de Weed comenzó a procesar la información rápidamente. El puerto de Rezad estaba muy cerca de los mares tempestuosos, pero se encontraba en la parte posterior de la isla. No era fácil de encontrar y Weed podría haberlo ignorado. “¿Siguen navegando los piratas armenios?” “Sus fuerzas gobernaban sobre todo el Mar del Norte” “¿Y ahora?” “No se les ha visto en las últimas décadas.” “¿Hay alguna forma de saber a dónde se fueron?” – preguntó Weed dándose cuenta de que no tenía otro camino que perseguir a los piratas armenios. “Se dice que si viajas hacia el norte durante el tiempo suficiente se puede observar una hermosa aurora que se extiende sobre el cielo nocturno. Es sabido que incluso los mejores navegantes pueden no verla durante toda su vida. Si sigues la estela de la aurora, llegarás hasta la región más norteña del continente.” Morata también era parte del norte y, por lo tanto, el viejo pescador basaba sus conocimientos geográficos en el hecho de que el Continente de Versalles era la parte central del mundo. Para él, el puerto de Rezad también estaba al norte. ‘Pero… ¿cuánto hacia el norte?’ – la cara de Weed se puso pálida, estaba pensando en un lugar. – ‘De ninguna manera, no puede ser… De ninguna manera puede ser ese lugar. Mi suerte no puede ser tan mala.’ “Debes viajar a través del mar helado, hasta la tierra que respira. Los rumores cuentan que los piratas fueron a una región conocida como Las Falanges. Mi abuelo decía que todos sus tesoros se escondían allí.” – dijo el pescador continuando su discurso.

¡Has adquirido información de una misión!

¡Nueva información! Las Falanges. Incluso su nombre sonaba horrible. Era una de las diez áreas prohibidas del Continente. Para empezar, ¡era una región rodeada de un feroz frío glacial! Y su interior era aún peor; en ella había volcanes que entraban en erupción constantemente, arrojando lava al exterior. Sus monstruos rondaban entre el nivel 500 y el 600, por lo que era imposible entrar a menos que fueras preparado para morir. Weed estaba anonadado. ‘¡Ah! ¡Una misión que trata de matarme!’ Había pasado por muchas ocasiones en las que había logrado su objetivo, aunque había estado a punto de morir. Pero ahora parecía que ya tenían el ataúd y el agujero excavado, y solo estaban esperando a que se tumbara y dejara de respirar. “En mi familia hay un mapa de Las Falanges, dado que mis antepasados fueron allí una vez. ¿Lo quieres?” – siguió diciendo el pescador. “¿Es gratis?” – respondió Weed. “No me es útil. Llévatelo si quieres.” El pescador se acercó hasta su casa y le dio a Weed un viejo mapa de cuero.

¡Has adquirido un Viejo Mapa Arrugado!

El mapa marca un camino para dirigirse hasta Las Falanges, el lugar donde termina el norte del Continente de Versalles.

* * * En el momento en que Weed observó el mapa, un montón de imágenes comenzaron a fluir en su cabeza. ¡Una tierra helada pintada de blanco! Se podían ver mamuts, grandes osos polares y yetis caminando mientras dejaban enormes huellas. Incluso mostraba una enorme manada de osos peludos muertos y congelados debido a las bajas temperaturas de la tierra del norte. Comparándolo, la región de Morata era como un niño diciendo que tenía frío después de comer un helado y esto era directamente el congelador. Era un lugar demasiado miserable como para poder considerarlo un terreno de caza. Si no se tenía una muy buena razón para entrar, nunca había que acercarse a esta región. Aunque llevara 100.000 soldados con él, más de 90.000 morirían de frío y otros 8.000 de hambre. Los otros 2.000 serían los más inteligentes y habrían desertado antes de llegar al glaciar. Sin embargo, una vez se cruzaba la región exterior de Las Falanges, el clima no era tan frío. El agua apenas llegaba a congelarse y se podía sentir una cálida atmosfera en el ambiente. De las grietas de la tierra salían halos rojos y vapor. Las montañas localizadas en Las Falanges lanzaban lava con frecuencia. ¡Broooooooooooooom! En la visión podía ver a guerreros del caos, esferas fantasmales, una especia de castores salvajes que se arrastraban a cuatro patas llamados bolgs, dervet alados y otros monstruos más típicos de los climas tropicales extremos y con nombres desconocidos. El monstruo más débil eran los desgarradores alados; tenía forma de murciélago y con su nivel 380 era la comida del resto de monstruos de la zona. En la distancia se podían ver gigantes de fuego bajo la lluvia de lava originada por los volcanes. Eran unas montañas peligrosas, pero alrededor de las mazmorras había gran cantidad de minerales brillantes, entre ellos grandes vetas de mithril, oro, plata y muchos otros minerales preciosos utilizados en joyería. Las Falanges también contaban con una gran cantidad de piedras raras diseminadas por su superficie. Definitivamente, era un lugar al que debía viajar un escultor. Era una tierra extremadamente peligrosa en la que nunca había estado, infestada de monstruos poderosos. Pero aún con esa información, Weed no tenía ganas de abandonar la búsqueda. “Si la derrota fuera la primera opción en mi mente, luchar contra la Legión Inmortal habría sido imposible.” Si no te enfrentas a las misiones, nunca tendrás éxito. “Por lo menos no moriré a causa de un resfriado. Es un millón de veces mejor quemarse y morir en llamas.” – dijo Weed intentando ser positivo. La durabilidad de las armas y armaduras se reducía significativamente cuando se quemaban en unas llamas. Aunque podían llegar a derretirse, haciendo imposible que se pudieran restaurar, no era algo que pasara muy a menudo y, con sus habilidades de [Herrería], podía reparar los daños menos graves. No debería haber muchos problemas. “Dado que pelearemos sobre tierra en lugar de en un mar desconocido, es más fácil de soportar.” Cuando luchase sobre tierra firme también podría contar con sus esculturas vivientes, aunque le llevaría mucho tiempo llevarlas hasta zona inhóspita del norte. “Ahora mismo soy un Lich y no un escultor, así que tengo ventaja.” Los escultores podían aumentar su poder y contribuir al desarrollo de una ciudad. Era un trabajo capaz de reforzar al resto de residentes y usuarios. Por otro lado, los nigromantes podían luchar usando cadáveres y maná. Las esculturas vivientes daban un efecto similar, pero el beneficio de invocar zombis y ghouls de los cadáveres era mejor. En términos de combate, se decía que los nigromantes eran la profesión más poderosa hasta el momento. No era que pudieran usar los poderosos ataques a distancia de los magos, o que tuvieran el poder de un guerrero o de un caballero. Sin embargo, si se pensaba bien, era una profesión que permitía convertirse en un ejército de un solo hombre. Era una ventaja incomparable con el resto de profesiones. ‘Será mejor no usar el Escudo Antiguo.’ No podría utilizar el Escudo Antiguo, que suponía el 30% de su defensa total. ‘Todo lo que me queda es aguantar tanto como sea posible.’ Tenía que pensar que su necesidad de vivir podía convertirlo en algo más resistente que una cucaracha o un bicho venenoso. * * * En el Reino de Ritthen, Mandol vivía con su esposa en una enorme mansión de decenas de metros cuadrados. En ese momento, unos visitantes estaban llegando a la mansión en la que vivían. “Tengo un mensaje para entregar. La escultura ya está lista en Morata. Es difícil moverla, por lo que esperamos que vayáis allí.” En el Continente de Versalles había una empresa que entregaba mensajes y objetos pequeños a otros siempre que se conociera su dirección. A través de ellos, el mensaje que había enviado Weed fue entregado a su destinatario. Al recibir el aviso, Mandol le contó a su esposa la solicitud que había hecho. “Has hecho algo inútil. Aunque Weed sea un escultor famoso, ¿cómo podrá esculpir a mi hija si nunca la ha visto?” “Bueno…” “Está bien, si realmente es lo que quieres… Vayamos.” Aunque solo fuera por el hecho de viajar, Mandol quería recuperar la felicidad que había perdido con su esposa. “Ha pasado mucho tiempo desde que viajamos juntos; vamos a ver muchas cosas y a comer platos deliciosos.” “Sí.” Hicieron su viaje a Morata mientras cazaban y cocinaban su propia comida. Viendo cómo Mandol daba continuamente lo mejor de sí, su esposa, Delfina, a veces llegó a sonreír. “Hemos llegado a Morata.” A diferencia de su esposo, que tenía una barba tupida y parecía un bandido, su esposa era una belleza delgada y atractiva. “La ciudad ha crecido mucho desde la última vez que estuve. También hay muchos edificios nuevos.” Mandol había ido a Morata para hacerle a Weed su encargo. “Cuando estuve la primera vez no había tantas personas ni edificios.” También habían construido muchas estructuras grandes y coloridas. Parecía que incluso unos pocos días no serían suficientes para explorar toda la ciudad. A medida que se iban acercando a Morata, Mandol siempre trataba de tranquilizar a su esposa. “Aunque la escultura sea decepcionante, por favor no te enojes.” – dijo Mandol con inquietud. “Estoy bien, me ha gustado mucho el viaje hasta aquí.” ¡Una moneda de cobre! ‘Espero que por pedir una sola moneda de cobre no haya creado una mala estatua.’ Después de realizar un trayecto tan largo, la angustia podría ser devastadora para su esposa, incluso para él si la escultura era horrible. ‘Solo puedo dejárselo a su conciencia, pero no parecía amable ni muy honesto.’ Cuando pasaban por las puertas de la ciudad, se encontraron con una chica esperando para acompañarlos. “¿Es usted Mandol?” “Sí, pero…” Se trataba de una chica linda y bonita y su nombre era Prina. Había estado trabajando en varias ocupaciones después de haber sido salvada por Weed. Había vendido flores, ayudado a hacer prendas de ropa y también había colaborado en la taberna cuando Weed cocinó y sirvió la carne del Rey Hidra y el Imoogi. En este momento era la encargada de mostrarles el camino. “Mi Señor tiene un trabajo urgente en otro lugar, por lo que no puede recibiros en este momento.” Preguntas y dudas asolaban la cabeza de Mandol. ‘Realmente ha hecho una baratija y ha escapado.’ “En su lugar, yo os llevaré allí.” – dijo Prina continuando con la conversación. “¿Allí?” “A la ubicación de la escultura.” ‘Bueno, al menos no la ha dejado por ahí tirada.’ Se podían ver a jugadores principiantes por todas partes de la ciudad, haciendo que los lugares estuvieran luminosos y animados. Atraído por su atmosfera, Mandol estaba deseando ir a explorar la ciudad. Todos los días se descubrían nuevas misiones y terrenos de caza, y también quería visitar el paisaje montañoso y los lagos de los alrededores. Delfina y Mandol siguieron a su guía hasta llegar a la zona céntrica de Morata. Allí había un edificio gigante rodeado de jardines y de un estanque con peces de vivos colores. En su pared había un letrero. «CENTRO DE ARTES DE WEED» “Hemos llegado.” “¿Aquí está la escultura que le encargue a tu señor…?” ‘¿Qué?’ Mandol estaba abrumado. El edificio que ocupaba el Centro de Artes era mucho más grande que muchas de las viviendas de los Señores del Continente Central. “Sí. A partir de aquí el arquitecto Pavo les guiará personalmente.” Pavo se encontraba en la entrada del edificio, esperando de antemano. “Soy el arquitecto de este edificio, mi nombre es Pavo.” “Saludos. Soy Mandol y esta es mi esposa Delfina.” – dijo inclinándose educadamente ante Pavo, ya que parecía mucho más viejo que el matrimonio. – “Pareces mayor que nosotros, así que vayamos con calma. Por cierto, ya es mediodía. ¿Cómo es que las puertas del edificio están cerradas?” “Eso es porque todavía no está abierto al público. Vamos a abrir las puertas ahora mismo, así que por favor tomaos el tiempo que necesitéis.” Los primeros invitados de Centro de Artes de Weed eran Mandol y Delfina. La apertura oficial del edificio sería después de que los dos lo abandonasen. Las puertas que habían estado cerradas hasta su llegada se abrieron de par en par. * * * Después de obtener la información necesaria en el puerto de Rezad, partieron hacia Las Falanges. En su camino hicieron una breve parada en la aldea de Mokon para buscar a su herrero. Todos tenían la misión menos Weed, que no dijo mucho mientras los veía entrar en la aldea. Eso sí, resopló más de setecientas veces. “¡Ahhh!” “¡Buff!” “¡Agg!” “¡Afff!” “¡Shiiii!” “¡Uuuuh!” “¡Pheeew!” “……” “¡Invoco al caballero de la muerte!” “¿Me has llamado, Maestro? ¿Con quién debo luchar?” “Conmigo.” “¿Eh?” “Peleemos.” El inocente Caballero de la Muerte iba a recibir una buena paliza debido a algo que había pasado. “Hago esto solo para aumentar el dominio de mis habilidades de combate, así que no te preocupes por mí. Definitivamente, no es porque tenga algún tipo de resentimiento.” Mientras tanto, en la herrería de la aldea de Mokon, el grupo de Pale había recibido otra misión. “Hay una falta de mineral de hierro y no puedo forjar todo lo que necesito. He escuchado que cerca de Mordred hay buenas minas, ¿podríais ir a buscar allí? No puedo esperar para siempre, así que espero que estéis de vuelta en menos de cuatro meses.” Una solicitud de dificultad ‘C’. Por supuesto, todos aceptaron la misión. Podrían realizar la misión dada por el artesano, ya que Mordred les venía de camino. Así que una vez más zarparon de Mokon a toda vela. “Rumbo a Las Falanges…” El Continente del Norte era una región polar, y para llegar por tierra había que atravesar montañas y ríos, así como bosques llenos de demonios. Quizás se podría decir que era más seguro ir por mar, pero había que dar muchísimo rodeo. “Además, las tormentas y las corrientes son bastante fuertes, no es una ruta fácil.” Cuando Weed veía sus habilidades de [Navegación] o el estado de la nave fantasma, no se sentía seguro. Se decía que si se iba más al norte era muy probable encontrar icebergs flotando sobre el agua, que no serían fáciles de esquivar. “Lo más seguro es que me hunda antes incluso de llegar allí.” Si eso ocurría, no tendría otra opción más que la de morir congelado en el mar. La velocidad del barco fantasma no era muy elevada, por lo que después de cinco días de navegación no habían avanzado mucho hacia el norte. No solo tenían el viento y las corrientes en contra, sino que también tenían que parar a vender sus bienes en los puertos de las islas, a la vez que iban recopilando información. “Ir a Las Falanges es una locura.” – dijo una anciana con voz seria. – “¿Deseas morir?” Dos días más tarde, Pale se acercó hasta Weed. “Weed, el límite de tiempo de nuestra misión se acerca.” Al principio había seguido a Weed en su camino hacia Mordred, pero como habían estado varados durante un tiempo, el tiempo de la misión llegaba a su límite. “¿Debemos cancelar nuestra búsqueda? Las Falanges es un área realmente peligrosa, vas a necesitar nuestra ayuda.” A pesar de la buena voluntad de Pale, Weed no podía aceptar su propuesta sin más. Aun estando en el barco, Weed estaba aumentado el dominio de habilidades como [Pescar], [Escultura], [Cocina] y otras, pero sus compañeros solo podían sentarse y mirar el paisaje en su camino a Las Falanges durante solo Dios sabía cuánto tiempo más. Además, no había forma de asegurar que todos llegaran a salvo hasta allí. No podía pedirles que fueran tan lejos y encima renunciar a una misión. “No, iré solo. Trataré de encontrar Las Falanges por mi cuenta.” “Pero si nos vamos las batallas marinas serán más complicadas.” “Solo tengo que llevar las esculturas vivientes a bordo cuando os vayáis.” Aunque el Pájaro Dorado era ligero y no representaba ningún problema a bordo, Fénix, Bingryong y los wyverns no podían ir juntos hasta Las Falanges. Hwaryeong e Irene protestaron enérgicamente, pero Weed no aceptó. “Por favor, primero terminad la misión de Mordred. Aunque vaya yo solo, debería ser suficiente para mi búsqueda, así que no os preocupéis. Si realmente necesito ayuda más tarde, siempre podéis venir a través de la habilidad [Teletransporte Pictórico] de Yurin.” Su hermana se había reunido con ellos en Morata gracias a su habilidad, usando una pintura. Solo después de escuchar eso, el grupo de Pale quedó convencido. El barco fantasma navegó a toda velocidad y atracó en la seguridad de un muelle cercano. “Hwaryeong, tienes mis 1.190 monedas de oro, así que la suerte te acompañe. Irene, no dones esas 810 monedas de oro porque voy a terminar por recuperarlas más tarde. En cuanto a ti, Bellot, que me ganaste 690 monedas de oro, ¿puedes permanecer en el barco un rato más? Tengo algo que pedirte.” “¿Qué?” “No es nada importante, te enviaré con los demás a través de Yurin.” “¿Estás seguro?” – respondió desconcertada. ‘Sin el resto de nosotros en el barco, estarán solo los marineros y Weed. Va a ser un viaje solitario.’ Bellot estuvo de acuerdo y decidió quedarse un poco más. Weed era un hombre raquítico, tramposo y loco por el dinero. Sin embargo, no parecía que albergara ambiciones sucias o confusas. Así pensaba Bellot, que tenía a Weed como una persona bastante seria. Ver que su mejor amiga no estaba preocupada en absoluto también era un alivio. Bellot se quedó mirando la cara esquelética de Weed mientras se despedía de sus compañeros. ‘Todavía me siento un poco triste.’ La mandíbula de Weed se abrió todo lo que pudo, parecía que se le iba a desprender del cráneo. “¡Ya no tengo que compartir con nadie! ¡Todo el tesoro será mío!” * * * Tiempo después, pudieron verse unas esculturas vivientes que se acercaban al barco fantasma. ¡Muuuuuuu! ¡Eran los wyverns, Fénix, Amarillento, Geumini y Bingryong! “Sube al barco, Geumini.” “Claro, Maestro.” “Wyverns, probad a subir.” Los wyverns eran demasiado pesados para estar sobre la cubierta de la nave, y cuando uno de ellos intentó posarse sobre el mástil, éste se rompió. “¡Bajad!” – lo dijo justo a tiempo, antes de que el resto intentara subir al barco. ¡Bingryong era cinco veces más grande que el barco fantasma! Caminando sin ningún signo de vergüenza, Bingryong estaba tratando de subirse al barco fantasma. Parecía como si quisiera destruirlo con una de sus patas. “¡Alto ahí!“ – gritó Weed justo antes de que Bingryong pisara el barco. – “No puedes subir.” Con esas palabras, Bingryong se alejó con gesto entristecido. * * * “Necesito marineros expertos.” Lee Hyun se conectó al sitio web de Royal Road. Mientras navegaba cerca del Mar de Nelia no tuvo mucha preocupación por perderse. Por otro lado, para llegar a Las Falanges, debía cruzar el gran mar. Si no sabía donde estaban las corrientes, en el peor de los casos podía quedar atrapado y terminar en un desastre. Un solo día en la dirección incorrecta podía llevar a montones de días para recuperar el rumbo o acabar al lugar equivocado. “Para llegar hasta Las Falanges se necesita un navegante de alto nivel.” Los marineros fantasmas tenían un nivel bastante alto, pero solo en ciertas áreas; realmente solo servían para combatir. Cuando se trataba de ajustar las velas o de manejar la nave, eran tan torpes que les era imposible llegar a su destino de forma rápida y precisa. “Necesito un capitán o navegante famoso…” – Lee Hyun buscaba en los distintos temas del sitio web. – “Aunque sería mejor conseguir a alguien que no pertenezca a ningún gremio o grupo.” Entre todos, terminó encontrando un tema llamativo.

¡Sucios y Bastados Navegantes!

Me robaron todo en el Mar de Nethys. Contraté a estos marineros y perdí el barco junto con todos los bienes comerciales que portaba debido a un motín del resto de miembros de la tripulación. Después de buscar sus nombres, descubrí que estos tipos son famosos. Se llaman Seoint, Fractal y Bordomir, y son amigos. Nunca los contrates.

Sus nombres también fueron publicados en otros temas del foro.

Me asaltaron en el Mar de Polarne.

Aunque tienen alto nivel, son unos imbéciles que asaltan las naves de los demás. Al principio parecen ser buenos tipos, pero después de contratarlos robaron el barco y tuve una pérdida total. Nunca te dejes engañar. Pierden la cabeza con las mujeres y sus personalidades son una mierda. Su base está en Bermer. Seamos todos cuidadosos.

Lee Hyun estaba en una posición en la que llegaría a usar a un pirata condenado a esclavitud si no podía encontrar a ningún navegante. “Para empezar solo necesito que firme un contrato.” Cuando se firma un contrato de marinero, el estado de esa persona pertenece al barco. En otras palabras, mientras el barco no se hunda, revive en el barco. Por lo tanto, el derecho a decidir sobre la vida y la muerte de la gente de mar pertenecen al capitán. Sin embargo, siempre era posible que los marineros tomaran el control del barco amotinándose y derrocaran al capitán. ¡En el mar puede pasar cualquier cosa! * * * ¡La ciudad portuaria de Beckin! Más que una ciudad portuaria, podía considerarse como un pequeño ducado marino. El comercio y la industria de construcción naval eran sus valores más desarrollados. Se trataba de una isla por la que había que pasar si se quería ingresar en el Mar de Neria desde el Mar de Polarne. La isla tenía buenos terrenos de caza, y sus corrientes oceánicas conducían hasta el Reino oriental de Brent en solo cuatro o cinco días. “¡Je, je! Otra botella de vino aquí.” Bellot iba vestida con un pulcro vestido de cuero y estaba bebiendo en una taberna llena de borrachos. Sus lindas mejillas sonrosadas, sus ojos claros y su expresión inocente habían atraído la atención de todos los hombres. ‘¡Hmm!’ ‘Una mujer bebiendo sola… ¿Estará esperando a sus amigos?’ Muchos de los jugadores masculinos la estaban mirando. Como esta taberna estaba cerca del puerto, la proporción de marineros varones era abrumadoramente alta. Muchos de los hombres estaban acumulando el coraje necesario mientras miraban a Bellot tomar su bebida cuando tres hombres se levantaron. Eran Seoint, Fractal y Bordomir, unos marineros famosos por su mal gusto. Amaban el licor fuerte y las mujeres, y tenían experiencia en apoderarse de los barcos traicionando al capitán. Tenían una reputación notoria por alternar entre usuarios normales y asesinos. También eran conocidos como ‘Los tres tiburones locos de Beckin’. En un instante se sentaron al lado de Bellot y hablaron con una voz clara. El que tenía la misión de romper el silencio era Seoint, cuya apariencia era la mejor de los tres. “Parece que es tu primera vez en Beckin.” “Sí, he venido aquí con mis amigos. Je, je.” El primer intercambio de palabras era muy importante para no espantar a su presa y Seoint pensó que este no había sido un mal comienzo ya que la chica se había reído de corazón, sin mostrar ninguna repulsión. “¿Dónde están tus amigos?” “Están esperando en el puerto.” Seoint no iba a retirarse solo porque tuviera amigos, y menos cuando era una chica con una expresión tan inocente y bella como la de Bellot; cualquiera querría salir con ella. “¿Tus amigos son chicos?” “Sus nombres son Romuna y Surka, ¿os gustaría ver una imagen?” “¿Una imagen?” “Una amiga que conozco es pintora, así que nos dibujó un retrato.” – contestó Bellot mientras sacaba una pintura de su mochila. El dibujo mostraba a una chica atlética con un sombrero rojo de mago, a una luchadora con una mirada inocente y a una encantadora bailarina mirando con ojos muy abiertos… Los tres compañeros tragaron saliva al verlas. ‘¡Premio!’ Conocer a Bellot ya era increíble, pero si se juntaban sus amigas el asunto se volvía una exageración. Todas eran muy hermosas. “Por cierto, ¿por qué no hay ningún marinero en ese dibujo?” – preguntó Seoint mientras su sonrisa se hacía más grande. “Porque ninguna es marinera.” “Supongo que llegaste hasta aquí en un barco de pasajeros.” “No, un amigo nos dio un paseo en su propio barco. Es un capitán principiante.” “¡Uf! Debe haber sido difícil llegar hasta aquí.” Las corrientes alrededor de Beckin eran muy fuertes, por lo tanto, un navegante novato tendría problemas. “Fue realmente difícil, nos llevó llegar a la isla más de tres días.” “¿Tanto? Habría sido mucho mejor si hubierais tenido la ayuda de un navegante con experiencia.” – respondió echando una ojeada a sus compañeros. Como si estuviera escrito en un guion, al ver la mirada, Fractal carraspeo mientras hacía la siguiente pregunta. “¿No crees que el mar es muy hermoso?” “Sí, es realmente bonito. Las nubes se desplazan suavemente y también puedes ver las estrellas… Y ver los peces y a los delfines saltar al lado del barco me hace realmente feliz.” “El mar es un lugar realmente agradable. ¿Vais a continuar vuestro viaje? Si es así, a lo mejor podemos ayudar un poco… ¿Verdad?” – dijo Seoint con palabras elocuentes mientras miraba a Bellot. “Conocemos las mejores vistas desde la costa de la isla de Beckin. Incluso solemos echar unos tragos mientras disfrutamos del paisaje.” “En realidad hay un sitio al que me gustaría ir…” – dijo Bellot mientras ponía una mirada culpable. Si uno la miraba de cerca, parecía una cara congelada, como si estuviera haciendo algo que no debería hacer. ‘¿Se está disculpando por pedirnos ayuda? ¡Qué dama tan encantadora!’ – pensó Seoint malinterpretando la cara de Bellot. Ir de paseo con una belleza como Bellot no representaba ningún problema. Con esta oportunidad, los corazones de los tres hombres estaban latiendo como uno solo. “¿Cuál es el problema? Si es por no tener dinero, no te preocupes.” “Honestamente, he venido en busca de un equipo de navegantes, pero no he podido soportar la vergüenza de tener que ir preguntando… ¿Realmente me ayudareis?” “Por supuesto, deberías haberlo dicho antes.” “¿Nos harás un contrato?” – dijo Bordomir interrumpiendo la conversación. Se sentía celoso de los otros dos por ser los únicos que estaban hablando con Bellot. – “¿Tienes un barco?” “Es de un amigo. Es un velero algo viejo de tamaño medio.” “Ah, entonces no hay problema.” Nada podría ser mejor que irse de viaje con Bellot y sus amigas, pero si a mitad del trayecto las cosas no iban bien siempre podían robar el barco en medio del mar. Era una oportunidad de conseguir un barco y los objetos de Bellot y sus amigas. ‘¡Genial!’ – pensaron a la vez ‘Los tres tiburones locos de Beckin’. “Comencemos primero con el contrato de embarque.” “¿Cuánto es el salario por día?” Todos estaban pensando que al final se quedarían con todo, por lo que no era necesario exigir mucha remuneración. “Nos conformaríamos con cinco monedas de oro al día. Incluso si es necesario, podemos mirar de bajarlo un poco.” Un viaje acompañado de bellezas y con la posibilidad de hacerse cargo del barco a cambio de un bajo salario no era ningún problema. “Eso es genial, mi contrato es de capitana en funciones temporal, así que puedo dar contratos.” – respondió Bellot mientras sacaba de su bolsa los documentos que habían preparado con anterioridad. ¡Ding!

Bellot te ha propuesto un contrato de viaje en el barco ‘María’ en nombre del capitán.

Contrato de trabajo

Objetivo: Contrato para marineros y navegantes. Asignación: 1 moneda de oro por día. Duración del contrato: Hasta llegar al destino. La Cofradía de Marineros de la Isla de Beckin avala este acuerdo. Los marineros serán penalizados si rehúsan las órdenes del capitán del barco o si abandonan el navío sin autorización.

El salario era solo de una moneda de oro, era peor que ser un mendigo, pero después de presumir de que estaban dispuestos a hacerlo gratis, no tenían tanta cara dura como para quejarse. Mientras firmaban el contrato, Seoint, Fractal y Bordomir tenían una cara de felicidad a pesar de tener delante un contrato tan irrazonable. Además, el contrato estaba avalado por la Cofradía de Marineros, por lo que les sería imposible abandonar el barco. Si se les ocurría irse, su inscripción en la cofradía sería eliminada, por lo que no podrían embarcar en ningún otro barco, ni podrían entrar en ningún otro puerto, aunque tuvieran un barco en propiedad. Les sería muy difícil conseguir un trabajo. Pero ahora no pensaban en eso, los tres hombres tenían la misma cara que un lobo cuando rastrea su caza. “¿Vamos a ver el barco?” “Claro.” Sumidos en unos pensamientos optimistas, siguieron a Bellot hasta el puerto. Sin embargo, cuando llegaron allí quedaron algo sorprendidos. A pesar de los claros signos de reparación, la embarcación de tamaño medio todavía estaba en muy mal estado. “¿Este es el barco?” – preguntó Seoint mientras miraba atónito la embarcación. “Sí. ¿Hay algún problema?” “Ninguno, es solo que no parece que vaya mucho con tu estilo.” Un navío tan antiguo no podía alcanzar un gran precio, pero un barco de tamaño medio seguía siendo un barco de tamaño medio. “¿Podéis embarcar? Ahora os alcanzo.” “Claro, te esperaremos en el barco.” – contestaron mientras empezaban a subir por la escala satisfechos. ‘El mundo es nuestro.’ ‘Un viaje por mar con muchas mujeres bonitas… ¡Es un sueño hecho realidad!’ ¡Conmoción, confusión, desesperación! En cubierta podían verse a tres hombres con caras blancas como la muerte, y a su alrededor se veían marineros fantasmales caminado por la cubierta. Habían imaginado que no todos los miembros de la tripulación serían mujeres, pero nunca habían llegado a imaginarse una escena de este calibre. “D… Dis… Disculpe. Sa… ¿Saben dónde está el barco ‘María’?” Cuando escucharon el tartamudeo de Seoint, los marineros fantasmales empezaron a reírse estruendosamente. “¡Ke, ke, ke, ke, ke, ke, ke! Este es el barco ‘María’.” “¡Ke, ke, ke, ke! Este es el barco maldito apodado como el ‘Desastre del Océano’. ¡El barco fantasma ‘María’! ¡KE, KE, KE, KE, KE, KE!” “Pero qué demoni… ¡Nos han engañado!” Como estaban apurados por firmar el contrato, no habían preguntado mucho los detalles. “Ha… Haci… ¿Hacia dónde se dirige la nave?” “¡Ke, ke, ke, ke, ke, ke, ke! Va a Las Falanges.” “¿Las Falanges? Ese nombre lo he escuchado en alguna otra part… ¡LAS FALANGES!” Era una de las diez regiones prohibidas. Un lugar al que se iba a morir. ¡Las Falanges! Como navegantes habían oído hablar de eso, aunque solo conocían el nombre. “Vamos a Las Falanges. ¿Tienes miedo? A lo mejor te mueres y te conviertes en uno de nosotros. ¡Ke, ke, ke, ke, ke, ke, ke!” “Has sido bendecido por los dioses, puedes ser un marinero y quedarte para siempre en este barco. ¡Ke, ke, ke, ke, ke, ke, ke!” Viendo a la tripulación fantasma, la cara de Seoint estaba distorsionada. Según el contrato no podían irse hasta que llegaran a su destino. Si abandonaban el barco no podrían volver a trabajar en ningún puerto, por lo que las desventajas eran enormes. - No pasa nada. Solo tenemos que matar al capitán. – dijo Fractal enviándoles un susurro. Todo lo que tenían que hacer era matar al capitán y tomar los documentos del contrato. Entonces no tendrían problemas con la Cofradía de Marineros de la Isla de Beckin. - Matemos al capitán como siempre y tomemos el barco ya. - Aunque sea viejo… Podremos obtener un buen precio por él. – dijo Seoint manteniendo la esperanza. “¿Dónde está el capitán de esta nave?” “¡Ke, ke, ke, ke! Nuestro temible capitán está pescando.” “¿Dónde?” “Por allí.” Los tres navegantes sacaron sus cuchillos y se movieron con audacia hacia la dirección que les marcaba la tripulación. Planeaban acuchillar al capitán y vender el barco de inmediato. Sin embargo, en el momento que vieron al capitán, sus caras se volvieron todavía más blancas. Ante ellos tenían un esqueleto que pescaba tranquilamente.