Volumen 4 Capítulo 102
Estableciendo la destrucción IV
Traducido por Zura
Corregido por Tars
Editado por Tars
Corregido por Tars
Editado por Tars
El equipo de la Luna Azul se alejó rápidamente de donde estaba luchando el grupo de Desir. Poco a poco, el sonido de la pelea disminuyó.
“¿Tuvimos éxito?” – dijo Argeria, cuando ya solo se escuchan los pasos de los miembros de su equipo. Su voz cargada de emoción hizo eco a través de la mazmorra. Luego, varias voces estuvieron de acuerdo con su comentario.
“¿Viste su cara? Era todo un espectáculo.”
“Parece que tendrán que luchar por sobrevivir.”
Era un plan sencillo. Matar a esa gran cantidad de grandes gusanos, tomaría demasiado tiempo, sin importar si era el grupo de Desir o el suyo.
El equipo de la Luna Azul usó la situación para incrementar la distancia con el equipo de Desir.
“Kelt, te ves molesto.”
“No sé si esto terminará afectándonos o no.” – respondió, mirando a Argeria.
“Piensa en esto como una escaramuza real. ¿Vas a ganar quedándote a mirar al enemigo? Piensa en el enemigo como seres virtuales de un mundo de las sombras. No hay una gran diferencia entre esos dos conceptos. Incluso si mueren aquí, no es como si fueran a morir de verdad.”
“Sin duda, pero…”
“Si eres tan suave en una simulación, algún día te matarán a ti y a tu equipo en una mazmorra real. Es tu responsabilidad pensar únicamente en el bienestar de tu gente.”
Después de compartir su consejo, Argeria se giró y aceleró el paso. Sin embargo, Kelt miró sobre su hombro algo arrepentido.
‘No puedo creer que derrotar a otros equipos de esta forma sea aceptable.’
Aunque pensó que esa situación no podía evitarse, todavía se sentía algo culpable. No los habían derrotado con sus habilidades, sino a través de un método cobarde.
‘Supongo que el fin justifica los medios.’
Al recordar las palabras de su hermano, dejó de lamentarse y se centró en el camino que tenía por delante. Poco después, atravesaron la última zona del segundo piso.
“La encontré. La salida no está lejos.”
No mucho tiempo después de que aceleraran el paso, ambos lados del pasadizo se abrieron y se reveló a una enorme caverna. Era lo suficientemente grande como para acomodar cientos de personas simultáneamente y estaba bien iluminado por unas piedras brillantes que estaban incrustadas en la pared.
“Por fin hemos llegado.”
El murmullo de Argeria resonó en la caverna. Había una puerta justo al otro lado del que se encontraban. Probablemente era la entrada al tercer piso. Una vez que lo atravesasen, serían los primeros en pasar a la siguiente etapa.
Argeria avanzó con confianza y el resto del equipo lo siguió.
Broooom
De repente, un sonido lo suficientemente fuerte como para romperles los tímpanos resonó por toda la caverna. El equipo de la Luna Azul dejó de caminar.
“Es un gran Gusano.”
Los grandes gusanos hacían un ruido muy característico cuando comían el suelo para desplazarse y, a menos que hubieran escuchado mal, era el sonido de un gran gusano moviéndose.
‘¿Será un grupo que se separó del que ataca al grupo de Desir??
Kelt sintió que eso era posible.
El número de Grandes Gusano que el equipo de la Luna Azul dirigió contra el equipo de Desir se acercaba a los cien. Era posible por alguna razón alguno los hubieran perseguido a ellos en vez de luchar contra Desir.
* ¡Crack! *
* ¡Craaack! *
El sonido que llegaba a través de las paredes era excepcionalmente fuerte. La pared de la mazmorra comenzó a agrietarse a medida que el sonido perforaba sus tímpanos.
A medida que las grietas continuaron creciendo, las piedras que iluminaban el área comenzaron a apagarse.
* ¡Craaaaash! *
Poco a poco se fue volviendo todo más oscuro y, antes de darse cuenta, estaban completamente a oscuras.
“¡Mantened la luz!”
Tras la orden de Argeria, los magos del equipo de la Luna Azul lanzaron varios hechizos de iluminación.
“[Susurro de luz]”
“[Vela rápida]
Lanzaron varios hechizos de luz y no tardó mucho tiempo antes que decenas de velas se desplegasen por toda la caverna iluminando la periferia mientras una bola de luz alumbraba el centro. Uno podría pensar que las piedras luminosas se habían encendido de nuevo, si no fuera por la gran sombra que se cernía sobre el equipo de la Luna Azul.
“¡……!”
Kelt dudó de lo que estaban viendo sus ojos. Era como ver un muro en movimiento que estaba bloqueando toda posible ruta de escape. Una caverna que podía albergar a cientos de personas al mismo tiempo, se estaba llenado al instante, haciendo que todo fuera mucho más aterrador.
“¿Un gran gusano…?” – gritó un miembro del equipo alarmado.
“No, es diferente. Eso…”
Era demasiado grande para ser considerado un Gran Gusano. No, estar ante un monstruo de ese tamaño, despertaba el miedo de la gente.
La superficie de su exoesqueleto reflejaba la luz.
El gigante aún no había salido del muro por completo, pero ya había llenado la caverna. Sus patas, que parecían docenas de cuchillos rotos y adheridos de alguna manera a su cuerpo, emitían un ruido chirriante mientras se movían sincronizados con su respiración.
En el momento en que conocieron la existencia a la que se enfrentaban, el grupo que se creía el más fuerte se sintió avergonzado.
Al mismo tiempo se pudo escuchar una notificación.
¡Ha aparecido una misión oculta!
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Debido a la gran cantidad de sangre derramada de Grandes Gusanos, la Gran Madre Gusano ha sido invocada.
La Madre de los grandes gusanos se siente amenazada por la muerte de tantos de sus hijos y ahora masacrará a todos los intrusos que encuentre.
Objetivo: Derrota a la Gran Madre Gusano para poder atravesar la mazmorra.
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