Volumen 9 Capítulo 3
Carga de datos
Traducido por Tars
Corregido por DaniR
Editado por Tars
Corregido por DaniR
Editado por Tars
Los cazadores del Departamento de Vigilancia habían llegado. Eran un total de siete cazadores de alto rango. Woo Jincheol había movilizado a las mejores fuerzas de élite con las que podía contar de inmediato. Sin embargo, él sabía la verdad. Sabía que no podía ayudar al cazador Sung con este pequeño poder.
‘En el peor de los casos…’
Sería suficiente para conseguir el tiempo necesario y lograr que el cazador Sung escapase. Había llegado a la escena con esa determinación en su corazón.
“Ahí está. ¿Jefe?”
“Eso parece.”
Los integrantes del Departamento de Vigilancia de Cazadores salieron de la camioneta y entraron en el terreno de la escuela. Las expresiones de los cazadores del gremio Valentía se iluminaron cuando los vieron llegar. Habían estado esperando al lado de la puerta después de reportar el informe de la situación.
“Agentes, ¡por aquí!”
El Maestro del gremio vino corriendo y saludó a los cazadores del Departamento de vigilancia. Sin embargo, la mirada de Woo Jincheol permanecía fija en la puerta. Podía percibir un aura ominosa saliendo de ella.
“Démonos prisa.” – ordenó tras dirigir la mirada hacia sus subordinados.
“Sí, señor.”
Los cazadores del DVC se apresuraron y caminaron hasta la puerta que estaba al otro lado del patio. Pero entonces, los pasos de Jincheol se detuvieron abruptamente.
“¿Jefe?”
“¿Señor?”
Los subordinados que le seguían también dejaron de caminar. Jincheol se quitó las gafas de sol lentamente. La mano que las sostenía temblaba imperceptiblemente.
‘Esto… ¿Qué demonios es esto…?’
Había una terrible tormenta de mágica. El espacio alrededor de la puerta parecía estar distorsionado por la salvaje y brutal energía que salía de la puerta. Estaba tan sorprendido que dio un paso atrás. No sabía si era una ilusión óptica o un signo de mal augurio. A primera vista parecía que había una cortina oscura sobre la puerta. Había visto eso en alguna parte con anterioridad. Era la sombra inminente de la muerte. Todo el vello de su nuca se erizó.
Woo Jincheol lo supo de forma instintiva. Sabía que la pelea que se desarrollaba en el interior no era algo en lo que él o sus subordinados pudieran meterse. El personal de la asociación se sorprendió al ver cómo su tez se volvía cada vez más pálida.
“Jefe, ¿estás bien?”
“……”
En lugar de responder, Jincheol lanzó una pregunta.
“¿Hay…? ¿Está cerca alguno de los grandes gremios preparado para una incursión?”
Uno de sus subordinados revisó la base de datos de la Asociación.
“Sí, señor. El gremio Cazadores se está preparando para una incursión en este momento.” – respondió rápidamente.
“¿Qué pasa con sus dos cazadores de rango S?”
“Según los datos, tanto el cazador Choi Jong como la cazadora Cha Haein han programado participar en la incursión, señor.”
Choi Jong y Cha Haein. Quizá ellos podrían ser capaces de hacer algo. Woo Jincheol volvió su mirada hacia la Puerta. Ese temblor imperceptible que había comenzado en su mano se había extendido lenta, pero constantemente al resto de su cuerpo.
Glup
La saliva se deslizó por su garganta seca.
“Env… Envía una solicitud de… Cooperación de emergencia al gremio Cazadores.” – dijo Jincheol a su subordinado incapaz de frenar su temblorosa voz.
* * *
Había hecho su pregunta. Y precisamente como la estatua le había recomendado, había cambiado su pregunta de ‘¿Quién eres tú?’ a ‘¿Quién soy yo?’.
En ese breve momento, el jadeo pesado y laborioso de Jinwoo se relajó hacia su respiración rítmica habitual. El sonido de sus respiraciones era tan controlado y tranquilo que resultaría difícil creer que había estado involucrado en una feroz batalla a vida o muerte hacía tan solo un momento. Hasta el movimiento de sus hombros se había detenido por completo.
…
|
La respuesta de la estatua con forma de ángel parecía retrasarse por alguna razón, y Jinwoo presionó la daga con más fuerza contra su piel como recordatorio. La hoja se clavó en el cuello de la estatua de piedra. Si esta cosa fuera un humano, su piel se habría abierto y habría comenzado a sangrar. Como aparentemente estaba hecho de piedra, no sangraba, pero sabía que no tendría ningún problema en cortarle la cabeza de esta manera. Lo que estaba comenzando a dudar era si la estatua también lo sabía.
Al fin.
|
Al escucharlo desde tan cerca, la voz de esa cosa sonaba aún más extraña que antes.
Has realizado la pregunta correcta.
|
Acto seguido sonrió. Aunque le habían cortado varios brazos y tenía una daga justo debajo de la barbilla, no había señales de miedo.
‘¿Su cuerpo real está en otro lugar?’
Sin embargo, la excelente percepción de Jinwoo no era capaz de sentir ninguna otra área cuando examinaba su entorno. Si su cuerpo real estaba realmente en otro lugar, entonces era incapaz de imaginar cuán increíble era la técnica que estaba empleando para ocultar la conexión de una manera tan perfecta.
La estatua continuó hablando con la sonrisa aun en su rostro.
La respuesta está en ti.
|
‘¿En mi?’
Los ojos de Jinwoo habían estado atentos por miedo a que empleara algún truco pero, tras escuchar su respuesta, se estrecharon todavía más.
Había pasado cuatro años de su vida como cazador de bajo nivel y se había enfrentado a innumerables enemigos más poderosos que él y que podían haberlo matado en cualquier instante. No había resultado sencillo para el peor de los cazadores de clase E ser capaz de sobrevivir dentro de las mazmorras durante cuatro años. Pero al final lo había conseguido porque siempre acertaba a elegir la mejor opción en la peor situación posible. Y en este instante, tenía la sensación de que estaba en uno de esos momentos.
¡Ding!
El pitido mecánico sonó bruscamente en su cabeza, acompañado por la habitual voz del Sistema. Definitivamente no era la voz de la estatua con forma de ángel: solo escuchó la voz mecánica de una mujer.
Cargar datos almacenados en la memoria.
¿Estás seguro?
S / N
|
Esta vez no solo era la voz, sino que también aparecía una pantalla con el mensaje. Le estaba preguntando que eligiera entre un ‘Sí’ o un ‘No’.
Las letras ‘S’ y ‘N’ parpadearon perezosamente frente a sus ojos, como si esperaban pacientemente una respuesta.
‘¿¡Qué demonios…!?’
No sabía qué estaba intentando hacer. La mirada de Jinwoo se apartó del mensaje y aterrizó sobre la estatua con forma de ángel. La sonrisa había desaparecido de su rostro hacía mucho tiempo.
“La decisión es tuya.” – dijo sin emoción.
A diferencia de antes, ahora su voz estaba separada del Sistema. La voz que le llegaba a sus tímpanos era una voz masculina, rígida y mecánica. Jinwoo cerró la boca con fuerza después de ver esa cara.
‘Los datos almacenados en la memoria del Sistema…’
Al igual que sucedía con varios videojuegos, parecía que el sistema poseía un archivo guardado o algo similar. Y ahora podía ver la información que contenía ese archivo.
“……”
Durante este corto período de tiempo, innumerables pensamientos pasaron por su cerebro. Por supuesto, la respuesta ya había sido decidida. Podía ser la última oportunidad de ver la verdad por sí misma. Era imposible retirarse ahora. Además, si se trataba de una trampa del Sistema, no había necesidad de pasar por un proceso tan engorroso. Después de todo, el Sistema tenía el poder para decidir cuándo dejaría de latir su corazón.
‘Si tal como dice el ángel, todo esto es una prueba… He ganado el derecho de ver esos datos.’
De repente, recordó lo que la estatua del ángel le había dicho antes de que comenzara la batalla.
«“Si logras seguir vivo después de la prueba, te lo revelaré todo. Esa… Será mi recompensa.”»
Había llegado a la conclusión de que la recompensa consistía en el derecho para ver todos esos datos.
“Sí…” – dijo abriendo lentamente la boca. La oscuridad lo envolvió de inmediato.
Ding
Justo después de oír el familiar sonido mecánico, escuchó la voz del Sistema.
Los datos guardados se han cargado de forma correcta.
|
…
|
El Monarca miró a los soldados alados antes de extender su mano como si estuviera agarrando algo.
Miedo.
Jinwoo ahora podía ver a los soldados con armadura plateada temblar de miedo y comenzar a retroceder. El silencio que ahogó sus alientos presionó contra los hombros de todos los seres que estaban bajo el cielo. Poco después, la solemne voz del Monarca hizo añicos esa calma.
“Despierta.”