Capítulo 53
Es un placer
Traducido por Laga
Corregido por DaniR
Editado por AMarauder
Corregido por DaniR
Editado por AMarauder
Reflexionando acerca de lo que me ha dicho, me quedo sentado allí, con los ojos en blanco mirando algo en la distancia. Como ha mencionado, que fuera profesor no le aporta un beneficio real, y esa es precisamente la razón por lo que lo encuentro tan sospechoso. Está muy arraigado en mí ser cauteloso con las motivaciones de la gente, lo que sea que hayan hecho. Supongo que cuando eres una figura de autoridad y poder, sospechas de todos los que te rodean, por eso no puedo entender por qué me pide que haga esto.
Manipulación Práctica del Maná es una clase para la que no tengo que prepararme especialmente, por lo que sería una tarea hasta sencilla. Y aunque no fuera fácil, me ayudaría a construir una buena posición, lo que es mucho más interesante. Dado que probablemente no voy a poder escapar de la atención de los estudiantes de todos modos, quizás pueda hacer las cosas un poco diferentes. Por supuesto, no planeo revelar mi conjunto completo de habilidades a nadie todavía, pero no veo el punto en intentar ser completamente discreto.
“¿Arthur…?”
Salgo de mis pensamientos para ver que la Directora Goodsky me mira con una expresión bastante preocupada.
“Ah, sí. A pesar de no estar seguro de lo competente que voy a ser, me gustaría intentar ser un profesor.” – digo revisando el documento que indica mis deberes y responsabilidades como profesor.
“Estoy segura que harás un excelente trabajo”
La Directora sonríe. Mirándola, le pregunto:
“¿Hay otras clases en las que el Profesor Geist enseñaba además de la mía?”
“Afortunadamente, no. Lo contratamos este año después de su retirada como aventurero. Para este semestre, el resto de profesores y yo habíamos decidido que enseñara a una sola clase, como período de prueba.”
Sacude su cabeza ante los lamentables resultados que esto había conseguido.
“Antes de que firme, tengo una última pregunta.” – declaro mientras leo el párrafo final del documento.
“Adelante.” – me insta.
“¿No resulta contradictorio que no tenga permitido herir a los estudiantes, pero que al mismo tiempo pertenezca al Comité Disciplinario?”
“Ah, buena pregunta. La regla de ‘no herir estudiantes’ se aplica dentro de las clases. De todos modos, en cada caso la situación siempre será investigada, pero el uso de cierto grado de fuerza mientras sea utilizado para la seguridad de los estudiantes, para reprimir una lucha o para reducir a un estudiante descontrolado, está permitido. Mientras sea fuera de las clases, realizando tus labores del Comité Disciplinario, confiaré en tu buen juicio.”
Tras sus palabras, asiento y firmo el documento.
“Espero grandes cosas de ti, Arthur. Y estoy segura de no ser la única.”
Me da una suave palmada en el hombro antes de invitarme a que vaya a almorzar.
* * *
Punto de vista de Goodsky:
“¡Uf! ¿Qué tiene ese chico que siempre me mantiene alerta? Negociar con él es más agotador que lidiar con las familias reales. ¿Cuál es tu opinión sobre él, Avier?”
Mi vínculo aterriza suavemente en el brazo que le extiendo; sus inteligentes ojos reflexionan sobre qué decir.
“Él es… Diferente. No veas a Arthur Leywin como un niño. Cualquiera que sea su agudeza mental o su madurez emocional, hay mucho más en él de lo que un ojo puede ver.”
Las claras palabras que vienen de mi vínculo no parecen naturales para el movimiento de su pico.
“¿Qué te hace estar tan seguro?” – pregunto mientras me recuesto en mi silla.
“Su vínculo. La verdadera forma de ese zorro blanco debe ser un dragón…”
Me levanto de mi asiento.
“¡¿Qué?! ¿Cómo es posible? ¿Cómo lo sabes?”
“Debido a que pertenecemos a la misma especie. Puede que pertenezca a una especie menor de dragones, pero los wyverns siguen siendo de la misma familia que un dragón.”
Avier vuelve a acicalarse.
“¿Estás diciendo que su vínculo es más poderoso que tú?”
No puedo evitar estar completamente desconcertada ante esto.
“No, esa niña todavía tiene que madurar. Debe haber nacido hace unos pocos años. Sin embargo, sospecho que cuando se desarrolle, no podré compararme con ella.” – afirma con naturalidad.
No puedo imaginar a nadie más fuerte que a Avier. El hecho de que sea mi vínculo solo se debe a que le agradé en nuestro primer encuentro, en lo más profundo del Claro de las Bestias. Por lo general hace lo que le place y no me atrevo a tratarlo como una mascota, pero el hecho de que el vínculo de Arthur sea realmente un dragón y que se comporte de manera tan obediente con él, hace que me pregunte quién es ese chico realmente.
“No hagas de él un enemigo, Cynthia. Si le tratas con confianza y respeto, se volverá el mayor aliado; pero si es traicionado, podría ser la causa de la destrucción del continente.”
Con esa advertencia, Avier sale volando. Me inclino hacia adelante en el asiento, frotando mis palpitantes sienes mientras recuerdo lo que ha sucedido hacía un par de horas.
* * *
*Boom*
“¡Directora Goodsky! ¡Solicito que expulses a un chico llamado Arthur Leywin de mi clase!”
“Profesor Geist, pareces agitado. ¿Qué ha sucedido?” – había sido tomada por sorpresa ante la repentina intrusión.
“¡El chico no tiene respeto por mí, su profesor! Por favor, no hagas caso a cualquier rumor que tal vez puedas escuchar. Estoy siendo incriminado.”
El ancho rostro del hombre estaba lleno de desesperación e ira.
*Toc* *Toc*
“Por favor, adelante.” – declaro. Al menos esta persona tiene la decencia de llamar.
“Me disculpo por la intromisión, Directora.”
La pequeña Kathyln hace una pequeña reverencia antes de caminar hacia el, ahora pálido, Profesor.
“¿Cuál es el problema, Kathyln?”
Me inclino hacia adelante, mirando a ambos.
“Esta pobre excusa de profesor necesita ser despedido.” – dice, sin expresión.
El profesor Geist toma por el brazo a Kathyln, acercándola a su cuerpo.
“¡CÓMO TE ATREVES! ¿Disculpa? ¿Yo?”
“¿Osas tocarme con tu inmunda mano?”
Su expresión no cambia, mientras que de alguna manera parece estar mirando al profesor Geist por encima del hombro.
“Profesor, sugiero que le quites inmediatamente la mano de encima, de lo contrario, cualquiera que sea el problema, no estará a tu favor.”
En este punto me levanto. Usar la fuerza para demostrar su inocencia es deplorable.
“¡Ejem…! Como decía. Por favor, no creas los rumores que podrías llegar a escuchar. Juro que todo ha sido un malentendido y que estoy siendo incriminado.”
Inmediatamente, deja ir el brazo de Kathyln antes de hablar.
“Todavía no he escuchado ningún rumor. ¿Podrías darme el gusto, Kathyln?”
“Esta escoria se ha atrevido a elegir estudiantes para sentirse bien consigo mismo. Incluso ignorando el hecho de humillar absolutamente a Feyrith, si Arthur no hubiera intervenido, yo estaría…”
Sin terminar la última frase, mira al profesor. Me giro hacia el profesor Geist, que desesperadamente niega la acusación.
“Estoy diciendo que todo ha sido un malentendido. Simplemente, quería demostrar ante la clase el nivel en el que se encuentra el Comité Disciplinario; ya sabes, para que los otros estudiantes lo sepan.”
“Si es cierto que eso es todo lo que ha ocurrido, entonces no habría razón para que vinieras a mi oficina insistiendo en expulsar a Arthur de tu clase.”
No puedo evitar un suspiro interno ante la idea de manejar este dilema.
“Tricia, por favor. Reúne información sobre el incidente de la clase del profesor Geist.”
Mi secretaria se inclina antes de salir corriendo.
“Ahora, por favor, sed pacientes mientras esto se resuelve. Haré todo lo que pueda para resolver este asunto.”
Antes de que pueda despedirlos a ambos, la princesa Kathyln se me acerca.
“Confío en que resuelva esto de forma justa, pero sepa que si no llega a ser por Arthur, no estaría manejando un caso de ética de un profesor, sino un asunto de lesiones a un estudiante, MI caso de lesiones. Le deseo un buen día, Directora.”
Se da vuelta, ignorando completamente al profesor. Geist había sido tomado por sorpresa con esa última declaración.
Recordando los testimonios que recibí, al parecer Arthur había humillado por completo al profesor Geist. Si bien la personalidad de este profesor nunca me había gustado del todo, sus habilidades eran más que suficiente para enseñar en una clase de Manipulación Básica del Maná. A pesar de ser un Aumentador con su núcleo amarillo claro, era bastante capaz. Y había sido completamente derrotado por alguien de doce años.
Dejo escapar un suspiro de arrepentimiento por no haber medido el nivel del núcleo del chico mientras estaba aquí. Un niño de doce años derrotando a un aventurero veterano usando solamente su maná de atributos viento y tierra, los cuales recuerdo que dijo eran sus atributos más débiles, y que también tiene un vínculo con un dragón. ¿Qué más esconde? ¿Si se lo pregunto, me lo dirá?
* * *
Punto de vista de Arthur Leywin:
“¡Art! ¡Por aquí!”
Veo a Elijah saludándome a través del comedor. Cuando me acerco, noto que está sentado junto a una niña.
“¡Esta es Charlotte! Charlotte, este es mi mejor amigo y compañero de cuarto, Arthur Leywin.”
Deja de hablar, haciéndonos un gesto para que nos demos las manos.
“Hola Arthur, he escuchado mucho de ti.”
Me envía una sonrisa coqueta mientras juguetea con su cabello.
“Mmm… Es un placer.” – respondo bruscamente antes de dirigir mi atención a Elijah. – “¿Cómo han estado tus clases?”
Mientras pregunto cómo está mi amigo, le doy de comer a Sylvie un pedazo de brócoli.
“¡Kyuu!”
‘¡Noo!’
“¡Auuuu~! ¡Tu pequeña bestia de mana es tan bonita! ¿Te importa si la acaricio?”
Charlotte se me acerca muchísimo, casi apoyándose en mi cuerpo mientras alcanza la parte superior de mi cabeza. Antes de que tenga la oportunidad de acariciar a Sylvie, que está gruñendo, agarro su muñeca.
“Disculpa, no le gusta que los extraños la toquen.”
La miro fijamente a los ojos, haciendo que se sonroje debido a lo cerca que está su rostro del mío.
“¡O-oh! ¡Lo siento!”
Retrocede, concentrándose en la comida. Elijah, aparentemente ignorante de lo que está sucediendo, responde con la boca llena de comida.
“¡Las clases han sido geniales! Me ha gustado especialmente la clase de Lanzamientos Encadenados y la de Utilización del Maná. Sin embargo, en la clase de Utilización del Maná siento que lo que enseña el profesor es exactamente lo que tú me has dicho que haga. Por cierto, ¡conocí a Charlotte en mi clase de Lanzamientos Encadenados! ¡Es realmente buena!”
“¡Ja, ja! Por favor, me haces sonrojar.”
Charlotte pone una cara tímida mientras se retuerce en su asiento.
“….”
“De cualquier modo, ¡¿cómo han ido tus clases?! ¡He escuchado que le has dado una paliza a un profesor! ¿Qué ha pasado con eso de mantener la calma?”
Me envía una sonrisa mientras apunta su tenedor acusatoriamente.
“Sí, acerca de eso… He terminado convirtiéndome en el profesor de esa clase.” – respondo tranquilamente, empujando un trozo de carne a mi boca mientras Sylvie intenta robarlo.
“¡¡PFFFFFFFFFF!!”
“¡Kya!”
Elijah escupe la comida que estaba masticando hacia nosotros, mientras instintivamente me inclino hacia atrás, tratando de salir de su rango.
“Elijah, eso es asqueroso.”
Limpio algunas partículas de comida que no he logrado evitar que lleguen a mi cara.
“Lo siento, lo siento… ¿Qué? ¿Vas a ser un profesor?”
Se limpia la boca antes de intentar limpiar el rostro de Charlotte, que rechaza la oferta.
“Mmm… He terminado remplazando al profesor que enseñaba esa clase. Así que ahora deberías llamarme ‘profesor’ Leywin.” – digo con una sonrisa a mi amigo.
“Profesor, mis narices . Pero tal vez abandone mi clase alguna vez y vaya a la tuya. Será interesante verte enseñar.” – responde.
Mientras continuamos hablando, me siento cada vez más molesto por los intentos de coqueteo de Charlotte; esto es todavía más molesto por el hecho de que Elijah no se está dando cuenta de nada.
“¡Oh, sí! Charlotte y yo vamos a ir al centro de la Academia para hacer algunas compras. ¿Quieres acompañarnos?” – pregunta despreocupadamente.
“¡Sí! Deberías acompañaros, Arthur.” – dice mientras se inclina, acercándose una vez más.
Existía una pequeña zona en una esquina de la Academia donde había lujosos restaurantes y cafés, junto con puestos de compras para que los ricos nobles se dieran algún capricho. Con eso, es fácil poder imaginar cómo de enorme es la Academia.
“Tengo tres clases más, ¿recuerdas? Me toca asistir a las clases de división superior después del almuerzo.”
Elijah se encoge con un gesto simple de hombros ante esto.
“Oh, sí, me había olvidado. ¡No pasa nada! Supongo que iremos Charlotte y yo solos.”
Charlotte sonríe torpemente ante la cara despreocupada de Elijah y responde:
“Ah, lo siento. Había olvidado por completo que tengo otros planes. ¡Lo siento mucho! ¡Definitivamente deberíamos ir otro día! ¡Los tres! Adiós.”
Con eso se marcha, dejando a mi amigo y a mí solos en la pequeña mesa del comedor.
“Supongo que estaba ocupada de verdad.”
Elijah parece un poco decepcionado. ¡Oh, Elijah…!
Acercándose, me pregunta con voz seria:
“Entonces, ¿qué piensas sobre Charlotte? ¡Es guapa! ¡Uff! ¿Crees que tengo una oportunidad con ella?”
¡Oh, Elijah…!
“Creo que puedes hacerlo mejor, compañero.”
Le doy una palmadita en la espalda a mi despistado amigo mientras salimos juntos del comedor. Elijah había decidido acudir a la biblioteca después de que sus planes se hubieran frustrado repentinamente, así que después de acompañarlo me dirijo a mi primera clase de división superior, Mecánicas de Lucha en Equipo I.
El ‘salón de clases’ consiste en un gran campo de césped con varios obstáculos colocados al azar, encerrado por altas paredes que tienen runas grabadas. En la cima de una de las paredes hay separada una pequeña habitación protegida por un vidrio reforzado. Asumo que esa habitación se usa como plataforma de observación para el resto de los estudiantes. Veo a algunos estudiantes que han llegado antes que yo hablando unos con otros, e inmediatamente noto algunas figuras familiares.
“¡Ah! No sabía que estabas en una clase de división superior, Arthur.”
Curtis Glayder me saluda tan pronto se da cuenta de quién soy. Grawder, el vínculo de Curtis está acostado con los ojos cerrados junto a él.
“Sí, no pensaba que tendría una clase contigo. Por favor, cuida de mí.” – digo agarrando su mano.
“¡Es bueno verte de nuevo, Arthur!” – Claire Bladeheart coloca su brazo alrededor de mi cuello mientras sonríe brillantemente. – “Tenemos que dar lo mejor para no avergonzar al Comité Disciplinario, ¿verdad?”
“Ja, ja, daré lo mejor de mí. ¿Estos son todos los que estarán en la clase?” – respondo girándome hacia Curtis. Me daba cuenta que en la clase había un número bastante reducido de estudiantes, pero había escuchado que era una de las clases más populares.
“Hmmm, debería haber unos cuantos más… Ah, ¡ahí vienen!”
Mirando hacia atrás, veo a varios estudiantes más, y no puedo evitar sonreír cansadamente.
“La princesa Tessia siempre está preciosa, ¿no?” – escucho murmurar a uno de los estudiantes.
Caminando entre el pequeño grupo de estudiantes estaba Tessia Eralith, mi amiga de la infancia, y Clive Graves, el vicepresidente el Consejo Estudiantil. Se da cuenta de mi presencia y puedo decir que está a punto de saludarme, pero nota que tengo el brazo de una mujer mayor alrededor de mi cuello, así que en cambio me lanza una mirada fulminante antes de apartar la cabeza, haciendo pucheros. Clive, ajeno del motivo de su enfado, me arroja directamente una mirada asesina mientras sus entrecerrados ojos se vuelven aún más agudos.
“¡Buenas tardes, princesa Tessia!”
Sin molestarse en quitar su brazo alrededor de mi cuello, Claire sonríe y saluda a Tess.
“Un placer.” – responde con una expresión feroz.
Después de pasar junto a nosotros, Claire se acerca en secreto hasta una pulgada de mi oído y me sacude un golpecito.
“Mmm… Me pregunto si es que hoy está de mal humor.”
¡Se debe a tu presencia!
Retiro su brazo de mi cuello y me giro para ver a alguien más detrás del grupo. Tan pronto como reconozco quién es, mi rostro comienza a arder de ira mientras aprieto mis puños, que se tornan de un color blanco. Es Lucas Wykes.