jueves, 27 de junio de 2019

TBATE Capítulo 27

Capítulo 27
Examen
Traducido por Thornapple
Corregido por DaniR
Editado por Tars

“¡Llorar no funcionará! Sylv, ¿No deberías estar ya acostumbrada al agua?” “Kyuuuuu…” – Sylvie logró escabullirse de mis manos y salió volando de la ducha, aún húmeda. “Haa…” – sacudí mi cabeza cuando terminé de lavarme. Usando nada más que una simple camiseta y unos pantalones, le di un último vistazo al cuarto donde había estado viviendo durante estos dos meses. Me puse mis guantes y el anillo, guardando el abrigo y la máscara junto con algunas otras necesidades en mi bolsa. Até la Balada del Alba y la espada corta en la parte de atrás de mi cintura, donde estaba más acostumbrado a llevar armas. “Confía en Jasmine cuando las cosas se pongan difíciles. Puede que sea la más joven, pero no dudes de su fuerza y experiencia como aventurera.” – Padre me aconsejaba mientras me daba un último y firme abrazo. “¿Por qué se van el Hermano y Sylviee? ¡No! ¡Quédate aquí!” – mi hermana se estaba dando cuenta de que no estaría en casa por un tiempo. Abrazaba mi cintura como un oso, y se negaba a soltarme. “Cariño, tu hermano volverá, ¿vale?” – Madre intentaba consolarla. “¡NONONONONONO! ¡¡Quédate!!” Mi hermana ya no me escuchaba y comenzó a gritar mientras lloraba. Me arrodillé y le di un gran abrazo. “¿Puedes proteger a Mamá y Papá mientras estoy fuera un tiempo, Ellie? Ya eres una chica grande, ¿cierto?” “UUuuu… ¡Hic…! Puedo protegerlos…” Sequé las lágrimas que corrían por su cara. “Buena chica. Tu hermano mayor se va por un tiempo, pero volveré. Me siento mucho mejor, ya que tenemos a alguien tan fuerte como mi hermanita para proteger la casa.” “¡Eng!” Sus ojos, aún llenos de lágrimas, me miraban con determinación. Tras acariciar su cabeza, les di un abrazo a Madre y a Padre. “Te echaremos de menos. No olvides mantener el anillo en tu dedo, ¿de acuerdo?” – Madre me apretaba fuertemente. “Mantente a salvo y conoce tus límites, Arthur.” – Padre me dio un último consejo. Conocer mis límites. Bajé por las escaleras delanteras hasta donde Jasmine me estaba esperando. Me despedí agitando la mano una última vez; mi hermana agitaba sus dos manos mientras se mordía los labios para no llorar. “Vamos, Jasmine.” – dije mientras me ponía la máscara y el abrigo. Ella asintió con su cabeza y nos dirigimos al salón del Gremio de Aventureros.
* * *
El salón del gremio no era lo que yo me había imaginado; un lugar lleno de matones sentados alrededor de mesas de madera que derramaban su cerveza era lo que tenía dentro de mi cabeza. En cambio, se trataba de una estructura de mármol con un intrincado diseño interior. Había mesas fabricadas en metal donde podía ver a otros aventureros que nos miraban de pasada. Todo el lugar parecía un hotel de lujo, rezumaba dignidad, y no se adaptaba a ciertos aventureros con aspecto bastante bárbaro que había aquí, pero simplemente seguí caminando. “¡Bienvenidos! ¿En qué puedo ayudarlos?” La señorita del mostrador me dio una sonrisa profesional. Antes de decir algo, vi a Jasmine deslizar algo hacia la empleada. “Me gustaría patrocinarlo para que tome un examen de rango.” – su rostro permanecía sin expresión mientras decía esto. “S... ¡Sí! Lo entiendo.” – asintió varias veces antes de devolverle lo que sea que Jasmine le había pasado. “Por favor, vengan por aquí.” – nos guio hacia la puerta trasera. *Murmullo**Murmullo* “Oye, hay alguien haciendo un examen de rango.” – oí susurros a nuestro alrededor de los aventureros que estaban sentados. Por el momento, decidí guardarme las preguntas para mí mientras seguíamos a la empleada. Al pasar por la puerta, aparecimos dentro de una pequeña habitación con dos sofás, uno frente a otro. En el otro extremo de la habitación había un escritorio que daba a la puerta con un delgado hombre sentado, con la cabeza gacha. “¿Hmm?” El hombre miró hacia arriba relevando un rostro angular. Tenía el pelo negro partido en el centro llegándole hasta sus hombros. Sus gafas eran gruesas y sin marco, dándole a sus ojos estrechos una mirada aún más aguda. La empleada a nuestro lado le hizo una profunda reverencia antes de comenzar a explicarse. “La aventurera clase A, Jasmine Flamesworth, ha pedido que este… Caballero, realice el examen de rango.” “¡Ah! Señorita Flamesworth. ¿Cómo estás últimamente? Me reuní con tu padre no hace mucho tiempo…” El hombre delgado se levantó de su escritorio, y caminó hacia nosotros. Me giré para mirar a Jasmine mientras ella hacía una silenciosa y cortante reverencia. Levanté una ceja cuando noté que sus puños estaban cerrados al mencionar a su padre. “¡Cof, cof…! De todos modos, ¡es un placer conocerte! Mi nombre es Kaspian Bladeheart y estoy a cargo de esta sucursal. Debes ser amigo de la señorita Flamesworth. ¿Hay algún nombre con el que pueda dirigirme a ti?” – echó una mirada estudiosa ante la figura enmascarada que tenía un pequeño gatito reptil en su cabeza. “¡Kuu!” – Sylvie respondió por mí. Durante mi época de aventurero había decidido que Sylvie adoptara su forma original, así que sus cuernos sobresalían más y sus puntas rojas eran visibles. “Por favor, llámame Note.” – esta era la identidad que usaría de ahora en adelante. La idea había surgido al mirar mi máscara. La raya azul que atravesaba la abertura de ojo izquierda me recordaba a la forma de media nota musical. Kaspian volvió a mirar rápidamente cuando se percató de la presencia de Sylvie, pero aparte de eso, no le dio mayor importancia a la pequeña bestia que tenía en mi cabeza. Ver a bestias de maná no parecía sorprenderle por su trabajo. “¡Sí! Bueno… Señor Note, procederemos con la señorita Flamesworth como su patrocinadora. ¿Sabes cómo funciona esto?” Negando con la cabeza, dejé que me lo explicara. “Un aventurero de clase B o superior tiene el poder de patrocinar a un nuevo aventurero para un examen. Dependiendo de lo bien que lo hagas, este examen te dará la oportunidad de ser colocado en un rango adecuado. El examen consistirá simplemente en una parte práctica. Ahora, a juzgar por tus armas, puedo asumir que eres un Luchador o Potenciador, ¿no?” – miró con curiosidad el palo negro atado a mi cintura junto a mi espada corta. “Sí.” “¡Bueno! Normalmente haríamos un examen rápido junto con una inspección del núcleo de maná antes del examen, pero siendo la señorita Flamesworth la que te patrocina, simplemente lo dejaremos pasar. Mary, lleva a estos dos a la sala de exámenes.” – dijo señalando a la mujer. “S... ¡Sí! Por favor, señor Note, señorita Flamesworth, por aquí.” Miré a Jasmine a través de mi máscara mientras caminábamos por un largo pasillo. ¿Es por eso que ella quería estar conmigo? ¿Qué era la casa Flamesworth? Entrecerré los ojos mientras intentaba adaptarme al cambio de brillo del pasaje oscuro. Estábamos en un coliseo luminoso, cubierto, y con el suelo sucio. Los asientos eran solo escaleras exageradas que en su mayoría estaban vacíos, a excepción de unas diez personas que estaban sentadas en lugares aleatorios. En el escenario de abajo había dos potenciadores luchando. “Por favor, síganme a sus asientos. Hay un par de examinados más hoy, así que por favor permanezcan sentados aquí hasta que el examinador diga su nombre.” – La empleada nos hizo una última reverencia antes de volver a bajar por las filas de asientos de piedra. Me incliné hacia adelante después de poner a Sylvie entre Jasmine y yo. “¡Haa!” Un hombre grande con la cabeza afeitada balanceaba su asta y estaba en desventaja, ya que el oponente al que se enfrentaba, un tipo de complexión media, pelo negro corto y una cicatriz en la mejilla, esquivaba fácilmente todos sus torpes golpes. El hombre con cicatrices parecía aburrido, ya que ni siquiera se molestaba en usar la espada que tenía en su mano derecha. “¡Toma esto!” Atreverse a anunciar su próximo ataque significaba que, o bien estaba seguro de sí mismo, o bien era un aficionado. En este caso, parecía ser lo último. El asta que tenía en lo alto sobre su cabeza repentinamente brilló de color naranja tenue cuando una oleada de calor la rodeó. El hombre con cicatrices levantó una ceja, algo sorprendido, pero por lo demás permaneció igual. “¡Golpe Infernal!” – gritó mientras balanceaba hacia abajo el arma. Del mismo modo que lo hacen los Conjuradores para enfocar su intención, muchos Potenciadores hacen algo similar, como vocalizar el nombre de su movimiento. Sin embargo, para un movimiento tan simple, parecía innecesario. Negando con la cabeza, el hombre con cicatrices levantó su espada. *CLANG* El asta fue lanzada por el aire mientras el sorprendido examinado miraba sus manos vacías. “Tus habilidades con asta son inexistentes y tus sentidos de la batalla son pésimos… Y estoy siendo amable. Dependes demasiado de la fuerza física en comparación con el refuerzo de tu maná, lo que hace que tu ataque pierda el equilibrio. Dices que tienes 35 años, pero ahora solo estás en la etapa naranja oscuro. Normalmente pondría a alguien de tu calibre en la clase E, pero viendo que tienes afinidad con el fuego, si es que ese pequeño movimiento calentador que acabas de hacer puede ser llamado fuego, te pasaré a la clase D… Por los pelos.” Asentí de acuerdo con la evaluación del examinador con cicatrices. “¡SIGUIENTE! ¡DIANE WHITEHALL!” – gritó el hombre mientras el luchador calvo caminaba desalentado hacia las filas de asientos, recogiendo su asta a lo largo del camino. “¡Sí! ¡Ya voy!” – una chica que estaba al otro lado del estadio se apresuró a bajar de los asientos, casi tropezando por el camino. Era una chica pecosa que parecía estar bien entrada en la adolescencia. Tenía el pelo rizado y castaño, atado hacia atrás y llevaba una túnica de conjurador estándar. Tropezó con su varita, casi soltándola mientras intentaba sacarla del bolsillo de su túnica. Oí risitas alrededor de la escaza audiencia del estadio. “¡Pfft! ¡Esto será bueno!” – miré a mi izquierda, para ver a un niño riéndose y señalando a la niña en el escenario. No parecía mucho mayor que yo, lo que me sorprendió. Su atuendo era el de un noble. Tenía el pelo rubio de un largo promedio que cubría su frente y orejas, y unos ojos de un color verde opaco. Tenía que admitir que era un chico guapo, y por su comportamiento arrogante, estoy seguro de que él también lo sabía. A su lado había un bastón de madera blanca que era más alto que él. En la parte superior del bastón había una gran gema de color rubí. Volví a mirar hacia el escenario. El examinador con cicatrices se había sentado en una esquina de la arena mientras una mujer que llevaba el típico sombrero de gran tamaño utilizado por muchos conjuradores con forma de sol puntiagudo, lo reemplazaba. No me sorprendió que hubiera instructores separados para cada tipo de mago. La pálida instructora, de ojos pequeños y finos, con una túnica amarilla de conjurador que hacía juego con su sombrero, tosió para que el público se calmara. “¡Ejem! Diane Whitehall, 18 años, conjuradora de etapa naranja claro con única especialización en el agua. Comencemos.” – tiró el cuaderno hacia el examinador con cicatrices y levantó su bastón gris. Una vez que un conjurador alcanzaba la etapa naranja, casi todos elegían enfocarse en el elemento en el que eran mejores en vez de perder el tiempo tratando de ser adeptos a los cuatro elementos. La especialización única, como era su caso, significaba que solo se centraba en hechizos de agua. Para una doble especialización, o incluso más, habría una prueba estricta para ver si realmente eras un experto en ambos elementos. Instantáneamente, la examinada con pecas murmuró un hechizo y una burbuja de agua la rodeó. Lo básico de la lucha como Conjurador es establecer un hechizo defensivo. Lo hacían porque la mayoría no tenía la capacidad de reforzar su cuerpo con maná. Al menos ya tenía los fundamentos básicos. El examinador, sin embargo, no lanzó un hechizo defensivo, sino que eligió pasar a la ofensiva. “¡Tormenta de Arena!” – gritó la pálida examinadora mientras se formaba un vendaval de arena alrededor de la niña pecosa y su burbuja de agua. La arena se mezcló con el agua y un poco después se convirtió en barro. “¡Liberar!” La burbuja de barro estalló cuando la examinada canceló su hechizo. Saltando hacia atrás, murmuró otro hechizo mientras se formaba una bola de agua de presión en la punta de su varita. “¡Cañón de Agua!” – gritó mientras la bola de agua salía despedida a una gran velocidad hacia la examinadora. La examinadora me sorprendió al esquivar rápidamente la bola de agua en lugar de bloquearla con un hechizo. Pensando en el pasado, esta era la primera vez que veía una pelea entre dos conjuradores. Esta lucha sería una buena forma de ver cómo luchan los conjuradores en comparación con los potenciadores. “¡ESTALLA!” – gritó la adolescente pecosa mientras balanceaba su varita hacia abajo. *BOOM* El noble muchacho que extrañamente me recordaba a Feyfey del reino de los elfos se inclinó hacia adelante, observando intensamente la pelea. Me di cuenta que estaba un poco sorprendido por las habilidades de la chica torpe. Me giré hacia Jasmine. “No es mala.” – murmuró para mí. El estadio había quedado cubierto por una pequeña nube de polvo que cubría la vista del instructor. El polvo pronto se despejó, revelando que no había nadie. De repente, la examinadora apareció desde el suelo detrás de Diane y su bastón golpeó ligeramente la parte superior de la cabeza de la examinada. “¡EEK!” – Diane saltó hacia adelante sorprendida. “Debo decir… Que tu control es bastante decente, señorita Whitehall. Estuviste un poco confiada en tu último hechizo, sin preparar ninguna medida defensiva, pero en general, la eficiencia en el control del maná y la velocidad de lanzamiento fue buena. ¡Clase C!” Diane dio un suspiro de alivio. Ser una aventurera de Clase C a su edad era una hazaña de la que podía estar orgullosa. “¡Siguiente! ¡Elijah Knight!” – anunció la examinadora conjuradora. “Aquí.” Un par de filas a mi derecha, un niño que parecía aún más joven que el joven noble rubio, se puso de pie. Parecía un muchacho muy serio, con el pelo de color negro azabache y un corte corto que cubría hasta la mitad su frente. Tenía una expresión seria debajo de sus gafas enmarcadas, que lo hacía parecer más maduro de lo que era su edad. Vestía una camisa de manga larga de color beige y pantalones negros, no llevaba ningún tipo de arma. Esperaba que fuera un Potenciador, pero el hecho de que el examinador no cambiara de puesto significaba lo contrario. De repente, un empleado corrió hacia la examinadora y le susurró algo inaudible al oído. Los delgados ojos del rostro pálido de la examinadora se abrieron de par en par antes de que recuperara rápidamente la compostura. “Elijah Knight, 10 años… Ejem. Me acaban de notificar de su estado especial. A partir de ahora, eres un aventurero de clase B.” ¿Clase B a su edad y ni siquiera necesitaba hacerse la prueba? Pude ver miradas de incredulidad en la cara de todos. Incluso la cara del examinador potenciador estaba sorprendida. El chico serio simplemente se inclinó y volvió a sentarse. “¡Siguiente! ¡Lucas Wykes!” – continuó. “¡Hmph! ¡Supongo que finalmente es mi turno!” Saltó de donde estaba sentado y bajó lentamente al escenario. El examinador miró hacia sus notas, pero esta vez, su voz sonó evidentemente sorprendida. “Lucas Wykes, 11 años. ¡Conjurador…! ¡En la etapa amarillo oscuro! Especialización única en el fuego.” ¿Qué? ¿Ya está en la etapa amarillo oscuro? ¿Cómo es eso posible? “¡A su servicio!” – Lucas hizo una exagerada reverencia. “Sí, co-comencemos.” – tartamudeó la examinadora. Con una cara seria, Lucas saltó al instante mientras murmuraba un hechizo. “¡Levántate, Guardián de la Llama!” Una columna de fuego se disparó delante de él, disminuyendo hasta revelar a un humanoide de dos metros de altura hecho de llamas. Pude oír débilmente el silbido asombrado del examinador potenciador con cicatrices. El guardia llamas corrió hacia la examinadora mientras oí a Lucas lanzar otro hechizo. Así que tenía otra habilidad para respaldar su ego. La examinadora conjuradora levantó una ceja sorprendida mientras murmuraba un hechizo. “¡Tumba de Tierra!” *Boom* Un cubo sólido atrapó instantáneamente al guardián de llamas en su camino. Buen plan. El guardia de llamas desaparecería naturalmente una vez que utilizara la cantidad limitada de oxígeno dentro de la tumba. Lucas sonrió, sin embargo, mientras gritaba. “¡Es demasiado tarde! ¡Brasa de Fuego Fatuo !” La piedra de rubí incrustada en su bastón resplandeció con un naranja deslumbrante cuando una chispa brotó en el aire. La chispa explotó como un castillo de fuegos artificiales, separándose en docenas de pequeños fuegos fatuos flotantes de fuego. Los fuegos fatuos se mantenían flotando alrededor del escenario, rodeando a ambos. “El chico es bueno.” – oí a Jasmine dando un raro asentimiento con la cabeza en aprobación. Ahora la cara de la examinadora se volvió seria. Estaba un poco confundido en cuanto a para qué eran esas brasas flotantes, pero mi pregunta fue respondida pronto. “¡Expulsión!” Levantó el bastón por encima de su cabeza mientras aún caminaba hacia atrás. De repente, las docenas de fuegos fatuos de fuego brillaron y luego dispararon rayos de fuego a la examinadora. “¡Campo de Pedazos de Piedra!” La examinadora señaló al suelo con su bastón. El área a su alrededor resplandeció con un amarillo brillante antes de que varios pedazos de tierra se levantaran del suelo. Las rocas se movieron en formación para bloquear los láseres de llama. Pero no solo bloqueaba los láseres, sino que los redirigía hacia Lucas. “¡Liberar!” – gritó Lucas mientras palidecía. Los fuegos fatuos del aire desaparecieron, pero las llamas que habían sido disparadas todavía se dirigían hacia su dirección. Señalando su enorme bastón hacia los múltiples senderos de llamas que se dirigían hacia él, gritó: “¡Torbellino de Fuego!” Un ciclón de fuego lo suficientemente grande como para rodearlo apareció en el suelo. Los rastros de llamas giraron alrededor del pequeño tornado de fuego, fusionándose con él. “Perforar.” – murmuró la examinadora suavemente. Los fragmentos de rocas que habían redirigido las llamas ahora disparaban hacia el tornado de fuego en el que se encontraba Lucas. Los grandes fragmentos de roca atravesaron el tornado de fuego y lo disiparon, deteniéndose justo antes de aplastar a Lucas como una pasta delgada. El noble rubio calló de rodillas derrotado, sudando por el cansancio de usar tanto maná. Las rocas alrededor de Lucas se desmoronaron y cayeron cuando la examinadora liberó su hechizo. “Tu control y creatividad en las combinaciones de hechizos son magníficos. Tienes un gran futuro, señor. Wykes. Tu control sobre el consumo de maná necesita un poco más de control, pero espero ver de lo que serás capaz. ¡Creo que puedo aprobarte como Clase B sin dudarlo!” – anunció, dándole una sonrisa. “¡Hala!” “¡Otro pequeño monstruo!” “¡Gah! ¡Quiero irme a casa!” “¿Qué pasa con la multitud de hoy?” Escuché algunos de los miembros de la audiencia que ya habían tomado el examen murmurar excitadamente entre sus compañeros. “¡Esto es lo más normal!” – Lucas se levantó del suelo, desempolvándose la túnica mientras intentaba mantener una cara de póquer, pero era bastante evidente que estaba emocionado. Volvió a su asiento antes de que la examinadora, que ni siquiera estaba cansada, cambiara de lugar con el examinador potenciador. El hombre con cicatrices se levantó, estirando su cuerpo. Lo vi chocar los cinco con la otra examinadora y mirar sus notas. “¡Siguiente examinado, Note! ¡Por favor, baja!” – gritó. Jasmine me puso una mano en el hombro. “Buena suerte.” Asentí con la cabeza y caminé hacia abajo, dejando a Sylvie con Jasmine. “Parece que estás aquí para ser probado bajo condiciones especiales, ya que no hay información escrita sobre ti. ¡Bueno! Veamos de qué estás hecho.” Me miró con curiosidad, tratando de penetrar a través de la abertura del ojo de mi máscara para ver quién era yo. Justo cuando estaba a punto de desenvainar su espada, una voz lo interrumpió. “Yo seré el que ponga a prueba a este examinado en particular, George.” Girando mi cabeza, vi al hombre delgado y de anteojos llamado Kaspian caminar hacia nosotros desde el pasillo por el que había entrado. “S... ¿Señor? ¿Examinará personalmente a este participante? Me disculpo si esto suena presuntuoso, pero ¿hay necesidad de que una clase AA se rebaje para examinarlo?” El examinador con cicatrices estaba visiblemente desconcertado por el hecho de que Kaspian sería el que me pondría a prueba. ¡Una clase AA! La diferencia en los niveles aumentaba a medida que el rango era más alto. Ser un aventurero de clase AA significaba que tenías la fuerza de diez aventureros de clase A, y eso solo era una estimación aproximada. Kaspian debía ser uno de los pináculos de fuerza entre los humanos. El propio Abuelo sería considerado clase AA solo después de entrar en la segunda forma de su bestia. “La mujer que te patrocina tiene profundos lazos conmigo, así que me siento obligado a ponerlo a prueba personalmente.” – sonrió mientras su mano derecha se dirigía hacia un delgado estoque que llevaba en su cintura. – “Comencemos.”