Arco 9 Capítulo 67
Razones para quedarse
Traducido por Alsabov
Revisado del Japonés por Tars
Corregido por DaniR
Editado por AMarauder
Revisado del Japonés por Tars
Corregido por DaniR
Editado por AMarauder
Unas horas más tarde. Después de terminar el trabajo del día en los campos de cereales, Zirconia se reunió con Nour, el Señor de la casa Levenson, en la sala de huéspedes de la mansión. No había nadie más en la habitación. A los guardias y criados se les había ordenado permanecer fuera de la habitación. Las paredes estaban decoradas con exquisitos muebles y pinturas que no resultaban cargantes para la vista. El suelo estaba cubierto de mármol y lo habían pulido tanto que resplandecía. No tenía ni una sola mota de polvo. Zirconia observó el interior de la habitación y sonrió hacia Nour, que estaba sentado al otro lado de la mesa.
“Lamento mucho haberle interrumpido su horario, pero hay algo que necesito preguntarle.”
“Estoy agradecido por su visita. ¿Puedo saber cuál es su solicitud?” – preguntó Nour con una amable sonrisa, al igual que Zirconia.
No se mostraba nervioso a pesar de estar ante ella, y se comportaba de forma digna.
“Hay una esclava que trabaja para su casa que quiero que me venda. Una esclava llamada Marie.”
Cuando Zirconia mencionó su nombre, la mirada de Nord vaciló.
“¿Marie…?”
“Sí. Hace diez días, Kazura, un amigo del Narson se alojó en su mansión. Parece que a Kazura le gustó mucho la cena que sirvieron en esa ocasión.”
“Hace diez días… ¿Una persona que acompañaba a mi hijo Havel?”
“Sí, correcto. El Señor Kazura todavía está planeando quedarse en nuestra mansión, pero la comida hecha por nuestro cocinero no se adapta a su paladar. Dado que estuvo a cargo de preparar la cena para Kazura hace diez días, estoy pensando en usar a Marie como su cocinera personal. No importa el precio, véndame a esa chica.”
Después de que Zirconia terminara de hablar, Nour apartó la vista mientras fruncía el ceño en silencio.
“¿Hay algún inconveniente…?” – preguntó Zirconia inclinando la cabeza al ver cómo se comportaba Nour.
Al oír la pregunta, Nour levantó su rostro.
“¿No puede ser cualquier otra…?” Hay más criados que se encargan de la cocina en nuestra casa.” – dijo con una mirada dolorosa.
“No. A Kazura parece gustarle; no solo la comida, sino también la chica. Nadie puede reemplazarla.”
“……”
“¿Hay algún problema? Si lo hay, ¿me lo puede explicar?” – volvió a preguntar borrando la sonrisa de su cara.
Nour volvió a desviar la mirada y guardó silencio.
“Marie es mi hija ilegítima y me gustaría tenerla a mi lado si es posible. Le agradecería si pudiera ser por un pequeño periodo de tiempo…” – contestó con un tono de angustia.
“¿Se preocupa tanto por Marie…?” – preguntó Zirconia con una mirada severa.
“Por supuesto. Sigue siendo mi hija, aunque no haya sido reconocida.” – respondió Nour con una mirada realmente seria.
“No comprendo de que está hablando… Marie es una niña que tuvo con una esclava. Si es tan importante, ¿por qué dejó que mantuviera la condición de esclava? Si hubiera presentado una solicitud para que fuera ciudadana de Isteria en el censo anual del registro familiar, habría sido liberada de su esclavitud.”
“Si hiciera eso, Marie entraría en el árbol genealógico de los Levenson… Sería complicado admitir a la hija de una esclava en el árbol genealógico… Además, mi esposa y mis hijos no lo aceptarían, por eso no tengo más remedio que mantenerla como una esclava.”
“De ser cierto, ¿no sentirá Marie que deshonra esta casa? Además, ¿no significa que el resto de miembros de la familia la odian? Es mejor aprovechar esta oportunidad para enviarla fuera y que tenga un sustento asegurado en el futuro y que sea feliz. ¿No le parece?”
Cuando Zirconia señaló ese punto, la mirada de Nour indicaba que quería maldecir en voz alta.
“Ah, no… Eso… Eso es cierto, pero…”
‘Ah… Ya veo.’
Nour tenía problemas para dar una respuesta, por lo que Zirconia adivinaba cuál era la situación de Marie. Solo era una especulación, pero parecía que era el collar que ataba a Havel a la casa Levenson. Hacía unos días, Zirconia había escuchado de labios de Isaac que Kazura le había pedido a Marie que subiera al carruaje con él. Aunque Isaac había dicho que Havel estaba cuidando de las necesidades de Kazura y por eso había traído a Marie para que lo acompañara, probablemente ese no era el caso.
Después de todo, cuando Kazura se dirigió a la aldea de Grisea, el problema respecto a sus preferencias culinarias no había aparecido. Si su condición ya se hubiera presentado, sería razonable que Havel hubiera decidido llevar a Marie con ellos. Sin embargo, ya que su condición no era conocida todavía, no podía encontrar una justificación para que les acompañara. Podría comprender que hubiera llevado a Marie para estar pendiente de las necesidades de Kazura o para que pudiera darle conversación, pero si lo pensaba, resultaba un poco extraño.
Entre los criados que habían llevado para su viaje, Zirconia había escogido a aquellos que habían estado al cuidado de las necesidades de Kazura cuando se quedó en la casa Estelle. Havel debería saberlo y sin embargo había decidido llevar a una sirvienta para que le atendiera personalmente y había resultado ser Marie, una chica muy joven. El único propósito para ello era que se acercara a Kazura. Además, a diferencia de los criados que le habían servido en la casa Estelle por varios días, Marie solo le había atendido durante una noche.
Zirconia no sabía lo cercana que se había vuelto Marie de Kazura, pero sabía que era amable con todos. ¿Podría haberse acercado tanto a una esclava que había conocido durante solo una noche?
Además, basado en lo que Nour acaba de decir, aparte de él, nadie en la casa Estelle tenía una buena impresión de Marie. Si eso era cierto, resultaba contradictorio que Havel hubiera escogido a Marie como criada de Kazura. Por otro lado, cuando Zirconia se acercó a Havel para hablar sobre la comida, lo primero que hizo fue recomendarla. Si la odiaba, entonces no la habría recomendado de esa manera. En cambio, si Marie se convertía en la cocinera exclusiva de Kazura, estaría bajo su cuidado y la protección de la casa Estelle. Zirconia llegó a la conclusión de que esto era lo que estaba buscando Havel.
“Bueno… Si piensas así, puedo tenerla por ahora.”
No había ninguna razón para que Zirconia siguiera los planes de Havel. Si ella insistía en comprar a Marie en este momento, la impresión que tendría la casa Levenson de la casa Estelle disminuiría innecesariamente. Aunque la situación había llegado hasta aquí por la intervención de Havel, no había cambios en su objetivo de asignarle a Marie a Kazura. Para Zirconia, mientras Marie se convirtiera en la cocinera de Kazura, estaba bien. Si Kazura decía que quería la propiedad de Marie, haría todo lo posible por comprársela a la casa Levenson, pero como no era el caso, no había ningún problema si se la prestaban por ahora.
“D… De acuerdo. Muchas gracias.”
“Sin embargo…” – continuó Zirconia. Nour se había relajado después de escuchar su respuesta. – “Ella vivirá en nuestra mansión. La posesión pertenecerá a la casa Levenson, pero si Kazura dice que la quiere, entonces espero que renuncie a su posesión.”
“Entiendo…”
Después de confirmar que Nour aceptaba a regañadientes, Zirconia se relajó y sonrió.
“Lamento pedirle algo irrazonable. Me llevaré las pertenencias personales de Marie, ¿puedo pedirle que alguien las prepare?”
“Por supuesto, por favor, espere un momento.”
Después de ponerse de pie, Nour se inclinó ante Zirconia y salió de la habitación.
* * *
Mientras tanto. Kazura e Isaac estaban hablando frente al generador en el patio de la casa Narson. El sol ya se había puesto por completo y estaba oscuro. Havel se estaba ocupando de los carromatos y carruajes, por lo que no estaba allí. Root, que había estado vigilando el generador hasta ese momento, había sido instruido por Kazura para que fuera a buscar una gran cantidad de tablones de madera y había ido al almacén de materiales.
“Si lo rodeas y lo fijas al techo, parecerá un pequeño cobertizo.”
“Quiero colocar una puerta para poder meter y sacar cosas, así que no puedo hacer una caja de madera que lo cubra por completo… Además, hay que mover los bidones que quedan en la habitación; también deben ser trasladados al patio y hacer otro cobertizo para cubrirlos.” – explicó Kazura mientras se giraba hacia la esquina del patio donde se encontraba el generador.
Ya estaba oscuro, pero los dos se preparaban para construir cobertizos donde almacenar materiales como los bidones. Por supuesto, aunque comenzaran a construirlos esa noche, no estaría terminado antes del amanecer. Además, ya era demasiado tarde para organizar el personal, por lo que tendrían que esperar al día siguiente y dedicarle los próximos días Sin embargo, antes de eso, necesitaban construir un pequeño cobertizo para cubrir el generador, que nunca paraba de funcionar. En este momento había varias tablas superpuestas sobre el generador para cubrirlo de los curiosos, pero aún corría el riesgo de que algún extraño pudiera observarlo por los huecos.
Cierto era que podía dejar guardias para custodiarlo, no obstante, si completaba el cobertizo nadie se molestaría en destruirlo para echar un vistazo. No obstante, necesitaba escoger personal que no se fuera a dejar llevar por la curiosidad e intentara echar un vistazo al generador, aunque escuchasen el sonido que produce.
Mientras ambos conversaban, Root volvió con una carreta cargada de tablas de madera.
“Señor Kazura, ¿esto será suficiente?”
“Sí, con eso bastará. Muchas gracias.”
Kazura asintió satisfecho ante la gran cantidad de materiales colocados en la carreta.
“Entonces, vamos a montarlo rápidamente ahora mismo. Señor Isaac, vigila por un momento, voy a traer las herramientas. Root, puedes irte a casa. Lamento haberte hecho vigilar durante tanto tiempo.”
“No, déjame ayudarte. Haré lo que sea.”
Aunque le habían dado permiso para descansar, Root enderezó su postura mientras declaraba que quería ayudar. Había estado vigilando el generador desde la mañana, por lo que debería estar cansado, pero su mirada estaba llena de entusiasmo.
“Entiendo, pero no creo que hayas cenado y debes estar cansado. También planeo pedir tu ayuda mañana temprano, así que sería mejor que te fueras a casa a descansar…”
“Le agradezco su consideración, pero todavía me encuentro bien, por favor, déjeme ayudarle.”
Los ojos de Root se humedecieron al conmoverse por la preocupación de Kazura. A su lado, Isaac estaba complacido con la actitud de Root. Por cierto, Kazura e Isaac ya habían terminado de cenar. Narson y Liese estaban ocupados, por lo que no habían podido cenar juntos y lo habían hecho por su cuenta.
‘Ah, esta persona es un pequeño Isaac. Un Isaac pequeñito.’ – pensó Kazura.
Cuando Kazura intercambió unas palabras con Root esa mañana, sintió que la atmósfera que había a su alrededor le resultaba familiar. Ahora sabía que era como Isaac. Root tenía algo más de metro sesenta de altura. Era algo más pequeño que Isaac, que medía un metro ochenta. Sin embargo, su cuerpo estaba esculpido por el entrenamiento diario como Isaac, sin ningún exceso de grasa. Sus modales eran un poco toscos, pero tenía buen sentido para la etiqueta, dando la impresión de ser un joven sincero. Solo tenía diecisiete años, pero crecería hasta convertirse en un espléndido soldado como Isaac en unos años.
“Señor Kazura, Root no es un hombre que filtra secretos. Sabe que es Greisior desde el principio, así que no habrá problema con que nos ayude.”
“Entonces… Espero contar con su apoyo. Entre los tres terminaremos más rápido.”
En el momento en que Isaac estuvo de acuerdo y Kazura aceptó su ayuda, la expresión de Root se iluminó.
“¡Gracias! ¡Me esforzaré al máximo!”
Kazura sonrió para responder a su entusiasmo y se dirigió hacia su habitación para buscar las herramientas.